(Estoy más emocionada por juntarlos que me nace escribir más seguido y espontáneo, además tener tiempo libre esta semana ayuda. En fin, el cap no está revisado así que perdonen los errores.)

Tsukishima no es tonto, quizás en algún momento fue testarudo y obtuso para aceptar estar en una relación con Tetsuro, a decir verdad todo en su relación fue construida con paciencia del pelinegro. Fue un gran apoyo para aceptar y abrazar su amor por los deportes y aceptar sin miedos que le gustan los hombres, aunque ahora suene algo sencillo no lo fue y solo la brillante confianza de Tetsuro logró que todo fuese más fácil. Aún así, nunca fue un tonto para saber que Tetsuro se escondía detrás de esa fachada que transpiraba confianza, no ignoraba que su novio escondía sus propios miedos y deseos para él mismo.

Tsukishima también estuvo ahí para él, su mayor paso fue pedirle a Tetsuro que se mudaran juntos sin importarle lo que sus padres pensaron, tampoco tuvo miedo al compartir anillos de pareja tal como Tetsuro deseaba pero no se atrevía a pedir por miedo al rechazo. Su vida como novios era valiosa para Tsukishima y todo iba muy bien… hasta que apareció Bouncing Ball.

No quiere decir que todo fue en picada porque no fue así, cuando el proyecto de Bouncing Ball propuesto por Kenma e impulsado por Tetsuro fue una noticia que lo hizo feliz por su novio, en algún punto se volvió el motivo por el que su relación comenzó a enfriarse. Es ridículo decir lo apegado que Tsukishima se volvió a Tetsuro pero de alguna manera las prioridades de su novio habían cambiado y el rubio estaba bien con eso mientras pudiera pasar tiempo con su novio. Sus estudios en la universidad iban finalizando y Tetsuro lo apoyó mientras él terminaba la suya y trabajaba al mismo tiempo, la vida de alguna manera se puso en medio para que ellos casi no se vieran más que para llegar a casa a dormir.

Tsukishima se sentía algo apartado y quizás fue un mocoso dramático pero incluso los mensajes de Tetsuro dejaron de llegar y eso le preocupaba pensando que quizás su novio había visto algo más impresionante en su ahora nuevo trabajo y que Tsukishima no era lo suficientemente bueno para él con su nueva realidad. Bouncing Ball había comenzado a despegar de manera inesperada posicionándose en el juego, tanto que muchos comenzaron a hablar de la empresa de un joven muchacho. Y eso era bueno, Tsukishima lo felicitaba porque estaba genuinamente orgulloso del trabajo de Kozume y Tetsuro.

“No luces feliz” la suave voz de su compañero lo hace apartar la mirada del anillo en su mano, plateado brillando contra la luz del museo.

“Siempre luzco así” Tsukishima ofrece una sonrisa amarga “O al menos eso recuerdo que me dijiste cuando me conociste”

“Uhm…” el cabello negro aparece en su campo de visión, acercándose a mirar el cuadro frente a ellos “Es cierto, pero en ese entonces estabas contrariado. En cambio ahora te ves triste”

“Tienes talento para leer a la gente, ¿no?”

Tsukishima ahora mira la pintura frente a ellos, algo en ella le da tranquilidad.

“A veces” responde el pelinegro encogiendose de hombros “Pero creo que esta vez solo estoy apuntando a lo obvio” los ojos verdosos ahora lo miran escudriñando su expresión “¿Es sobre el traslado?”

Tsukishima hace una mueca sin realmente querer admitirlo, pero Akaashi ha visto lo mucho que le costó aceptar el trabajo sabiendo que era una grandiosa oportunidad como paleontólogo.  Ante la pregunta el rubio asiente después de largos segundos de pensar la respuesta.

“Estoy emocionado por ser tomado en cuenta para este traslado, soy apenas un novato” la voz de Tsukishima apenas es audible, pero el silencio del museo y la cercanía de ambos les permite escucharse entre ellos “Pero…”

“¿Es tu pareja?” Akaashi vuelve a fijar la mirada en la pintura “¿No va acompañarte?”

“Él no quiere hablar de eso, aún” Tsukishima regresa su mirada al anillo en su mano, y siente un nudo en la garganta “Pero sé que no aceptará y… probablemente ese sea el fin de todo”

Akaashi se queda unos segundos en silencio todavía admirando la pintura antes de hablar: “Sabes, en el invierno las ramas de los árboles parecen que van a quebrarse por la cantidad de nieve que cargan, pero lo único que sucede es que en algún momento esa nieve se derrite o cae por si misma” Tsukishima observa la tranquilidad en el rostro de Akaashi quien toma un tiempo antes de continuar “Esas ramas continúan intactas hasta llegar la primavera que no está tan lejos del invierno, pero mientras tanto tu pensaste que definitivamente no iba a soportar la carga de esa nieve y que se quebraría en algún momento” Akaashi se vuelve para mirar a Tsukishima ahora con empatía “Puede que esa nieve que llevas cargada en tu corazón pueda derretirse con el tiempo, nada se acabará por ello y tu seguirás adelante tal como las ramas en el invierno. Si sabes cuál será el resultado de lo que sucederá no extiendas más ese peso en ti, llama y busca la primavera ” la mano de Akaashi ahora se posa sobre el hombre del rubio “Si necesitas a alguien con quien hablar, ya sabes que puedes contar conmigo”

Tsukishima traga con dificultad mirando a Akaashi retirándose, dejándolo ahora solo con sus pensamientos. Hablar con él siempre era relajante porque de alguna manera el rubio lograba ver todo desde una perspectiva diferente, aún así su pecho duele con la idea de querer acortar el proceso que Tetsuro y él estaban alargado.

Ninguno de los dos lo estaba pasando bien, y lo sabía por la forma en que ambos ignoraban el elefante de la habitación, fingiendo que ambos no llevaban ojeras, pretendiendo un ambiente cálido.

Con un suspiro Tsukishima decide que hablará directamente con su novio.

[…]

La celebración por la victoria del partido se pospone debido a que todos están de acuerdo en que deberían descansar el cuerpo debido a que muchos sufrieron de golpes en la cancha y aunque afortunadamente eran solo moretones. Levantarse la mañana siguiente al partido para tomar el avión de regreso a casa fue difícil, Shouyo a pesar de ser un chico mañanero apenas pudo despegarse de las sábanas cuando Kiyoomi lo sacudió para levantarlo.

“Vamos, no quiero el asiento junto al baño” gruñe Kiyoomi viendo a Shouyo correr de un lado a otro arreglándose lo mejor que puede mientras guarda todo en su maleta devuelta.

Shouyo guarda todo tan rápido como puede, Kiyoomi por su lado juzga el lamentable desorden que hay en su lado de la habitación y la forma en que no se tomó el tiempo para colocar sus cosas correctamente en la maleta.

“¡Listo!” dice con una sonrisa ignorando el reproche en la mirada de Kiyoomi.

“Vamos, antes de que te obligue a arreglar toda la habitación”

Ambos salen de la habitación compartida y se encuentran en el vestíbulo con la mayoría del equipo, Atsumu se encuentra en la recepción hablando con la chica del mostrador, quien por su postura parece interesada en lo que sea que Atsumu esté diciendo. Bokuto por otro lado parece estar jugando algo en su teléfono mientras se queja de la dificultad del juego, y los demás están sentados con rostros adormilados.

“Quiero patear a ese idiota” murmura Kiyoomi debajo de su mascarilla, mirando en dirección a Atsumu quien ahora se ríe con la señorita “Es tan irritante, nunca respetará sus relaciones”

“Oye, esa chica también tiene el cabello ondulado” señala Shouyo lo suficientemente audible para que Atsumu se gire a verlo “Ay, no”

“Oh, viene para acá” dice Kiyoomi sonando algo divertido “¿Qué comentario dirá esta vez?” se pregunta el pelinegro así mismo.

“Shouyo” llama Atsumu llegando a ellos, mirando entre ellos “¿Dijiste algo sobre la apariencia de esa chica?”

“Uhm… ¿no?” duda ofreciendo una sonrisa incómoda.

“Oye, no entiendo porque insistes en…”

“Sabes, Shouyo tiene razón” interrumpe Kiyoomi bajándose el cubre bocas, Shouyo lo observa sorprendido de escuchar eso de Kiyoomi, nunca le da la razón en nada “No le había dado tanta importancia, pero si, esas chicas tienen un patrón. ¿A quien estás tratando de reemplazar con ellas?”

Atsumu mira boquiabierto a Kiyoomi quien solo alza la ceja casi burlándose de él, Shouyo mira entre ellos y casi puede ver la tensión formándose entre esos dos. Cuando quiere intentar escapar disimuladamente, Atsumu comienza a sonrojarse lo cual impresiona al pelinaranja.

“¡Estás tan jodidamente equivocado!” responde escandalizado, cruzándose de brazos una acción que Shouyo podría tomar como escudándose de la mirada burlona de Kiyoomi “Quizás tengo un tipo, me gustan las chicas de cabello negro nada más. Deja de mirar tanto en ello, ¿o acaso estás implicando algo más?”

Kiyoomi resopla y vuelve a colocarse el cubre bocas: “Estoy implicando que eres un idiota” dice el pelinegro retirándose al mostrador.

Atsumu no duda en seguirlo y lo persigue hasta mostrador dejando al mortificado Shouyo en atrás quien suelta el aire contenido. No entendía como era que de alguna manera esos dos liberaran tanta energía que ahogaba a los presentes, y lo peor era que de alguna manera no dejan de irritarse y perseguirse. Shouyo no puede entenderlos.

Al menos estaría en unas horas en casa descansando antes de la fiesta del empresario intolerante.

[…]

TENDENCIAS EN JAPÓN.

1.BOUNCING BALL

2.KOZUME

3.JAPÓN

4.NINJA SHOUYO

5.ONE PIECE

Cuando Kuroo abrió su cuenta de Twitter no esperaba ver a Kenma nuevamente en tendencias principales cuando no hace unas horas había bajado y pensó que de alguna manera se librarían de escribir un comunicado aclarando la confusión de la entrevista. Sin embargo, el universo no iba a permitirles eso, aparentemente su amigo había estado husmeando sus redes sociales cuando le dijo claramente que no lo hiciera.

“@losrulosdeKiyoomi:
EL CEO DE BOUNCING BALL HA DADO ME GUSTA AL RECIENTE POST DE LA SELECCIÓN DE JAPÓN, ¿LA LINEA NUEVA ES UNA COLABORACIÓN CON ELLOS? ESTOY GRITANDO EN MIL IDIOMAS”

“@bokutoGoat79289:
Solo es un like lol no creo que Bouncing Ball pueda ser de la talla de nuestros jugadores. Kozume cree que podrá ganarlos con likes lmao”

“@kenmameow:
Es raro que Kozume haga apariciones en Internet, solo publica cosas que parecen generadas por la IA. Pero le perdono eso por ser tan guapo”

“@mandarina009712:

Es obvio que Ninja Shouyo es muy famoso, quizás solo vio la noticia y como Kozume es conocedor del ámbito deportivo seguramente quiso mostrar su apoyo ante nuestro representante estrella”

“@gojorevivemañana88:

¿Qué pasó con Kozume? Estaba durmiendo”

“@maikoltrufa9092:

Seguramente Ninja Shouyo logró que el CEO de Bouncing Ball se fijara en la selección, todos digan GRACIAS”

“@shangjong:

Alejen al homofóbico de Kozume de la selección”

“@SoyKageyamaOficial:

Dejen los chismes sin fundamentos sobre Bouncing Ball, hablen del lamentable desempeño del equipo Tailandes contra Hinata”

Kuroo suspira negándose a leer más posts después de ver una cuenta verificada interactuando en las tendencias, al menos esto desviaba un poco la atención de la entrevista a al expectativa de la futura colaboración que aún no sabe si va a suceder. Sabe que esto dependerá mucho de la forma en la que el equipo reciba a Bouncing Ball, esperaba que la entrevista no influyera en la futura decisión o propuesta que vayan a hacerle a los jugadores, y más importante al rostro de la línea.

“Oye, Kuroo no encuentro mi teléfono” el culpable aparece en escena y Kuroo solamente levanta su otra mano con el teléfono de Kenma que escondió cuando éste se fue al baño “Dámelo”

“Confiscado hasta nuevo aviso, tengo que arreglar el desastre que ocasionaste con un like”

Kuroo había llegado temprano a la casa de Kenma y lo había despertado a fuerzas, mientras el teñido gruñía sobre planear el asesinato de Kuroo, el pelinegro se dispuso a escribir el comunicado. Luego de encontrar el siguiente problema Kuroo decidió confiscarle el teléfono.

“¿De qué hablas?” pregunta Kenma confundido sentándose en el otro extremo del sofá.

“Ayer te dije explicitamente que no entraras a ninguna red social más que a ese tinder que tienes…”

“No es Tinder”

“… Y no me hiciste caso, acabas de hacer que la gente comience a conjeturar nuestra nuevo lanzamiento en donde no se había revelado nada sobre quienes iban a ser invitados para mantener el factor sorpresa” El tono irritado de Kuroo hace callar a Kenma que luce ahora culpable “Ayer, le diste un me gusta a una publicación justamente del equipo que queremos convencer de ser parte nuestra, ahora quizás se sientan presionados o probablemente no quieran asistir”

“Oye, lo siento…” murmura Kenma ahora acariciando sus propios dedos, un hábito que hacía cuando se sentía agobiado.

“Sé que no fue tu intención…” Kuroo acaricia sus sienes dejando de lado los teléfonos “Pero, estoy muy liado con todo para que esto suceda justo ahora”

“Lo siento” repite Kenma sonando más pequeño de lo que Kuroo esperaba.

“No, perdón, estoy algo abrumado con todo el trabajo y…” Kuroo niega desganado “Tengo que centrarme, sé que esto puede funcionar a nuestro favor”

“Dime y ayudaré en lo que pueda” ofrece Kenma “Y puedes quedarte mi teléfono hasta la fiesta”

Kuroo suelta una risa cansada pero al menos fue sincera: “No te preocupes, te lo devolveré cuando se hayan calmado las aguas. Pero mientras tanto confiscado”

Kenma asiente sin problemas, esperaba que Hinata pudiera entender su ausencia aunque no haya avisado.

Faltan 2 días para la fiesta.