-Me hubiera gustado saber antes, saber que había una posibilidad.

-Perdón.

-Nunca te lo pregunté porque no quería ofenderte...

-¿Así qué pasó por tu mente?

-Un sin fin de veces- murmura.

-Me hubieras dicho algo.

-Estabas con él y eras feliz y yo no iba a intervenir.

-Te quiero- le doy un corto abrazo.

-Yo también- por su altura me da un beso en lo alto de mi cabeza.

-Cuando estuvimos juntos nunca hablamos de tener hijos, tú nunca mencionaste el tema. Y bueno a tu edad y sin hijos pensé que no querías.

-¿Me acabas de llamar viejo?

-Un poco- bromeé, soltó una risita.

-Bueno, tampoco es que hubiéramos estado juntos mucho tiempo, no tenías mucho de haberte separado de él y no iba yo a llegar un día y decir Leah, tengamos un hijo...

Amo lo relajado que él se toma las cosas.

-Hay que hacer esa prueba- deshace el abrazo, pero me toma de las mejillas y me da un beso en la frente. -Si Amelie es mi hija afrontaré mis responsabilidades y si no nuestra amistad seguirá como siempre.

-Eres increíble ¿lo sabes verdad?

Sonríe antes de darme otro beso en la frente y volverme abrazar.

Harry

El guardaespaldas de Leah camina frente a mí, saluda al señor de seguridad, que me mira con el ceño fruncido se que debo disculparme por haber sido grosero con él. Owen presiona el botón del ascensor y no tarda en abrir las puertas se asegura que entre antes de introducir el código asegurado que no vea.

-Gracias por lo que hiciste por mi hijo- la vez pasada que estuve aquí no tuve la oportunidad de agradecerle.

-Solo hacía mi trabajo- respondió serio y sin mirarme.

No me da tiempo de decir algo más pues las puertas del ascensor se abren. Pero hago una nota para decirle a Leah que le haré un agradecimiento monetario.

El guardaespaldas me deja en pleno recibidor mientras él atraviesa la sala de estar hasta la puerta de la terraza, pero no la abre esperando el momento indicado. Leah está ahí abrazado a alguien que no logró identificar al momento hasta que él se aleja.

Jared.

Después de un rato Leah y él se percataron de la presencia del guardaespaldas, que le informa a Leah de mi llegada pues desvía la mirada y me mira.

No sé exactamente qué hago aquí, Leah ayer por la noche me envió un mensaje pidiendo que viniera que había algo que decirme.

Y él que encuentre a Jared aquí es extraño ¿Habrá regresado con él? Es muy pronto para que eso pase.

Harry eso a ti no te debe importar, me dice una vocecita.

Leah junto a Jared y su guardaespaldas vienen hacia la sala, el guardaespaldas se va y Jared está muy cerca de ella.

-Hola- dice ella.

-Harry- me saluda Jared.

-¿Que hago aquí?- suelto de mala gana, sin responder al saludo.

-Espero en la cocina- le dice Jared.

-No-  rápidamente Leah lo detiene. -Hay que hablar Harry, quieres sentarte- ofrece mientras ella se sienta Jared también lo hace muy cerca de ella.

¿Qué demonios hace él aquí?

-Con él aquí- digo confuso a lo que Leah solo afirma con la cabeza.

-Tengo que decirte algo muy importante que caye por cuatro años y que puede cambiar muchas cosas...siente- me insiste.

-No entiendo, dime lo qué sea que tengas que decirme- no me muevo y me quedo parado.

Leah suelta un suspiro mira a Jared se acomoda en su lugar enderezando más la espalda saca un poco más el pecho sonríe un poco pero parece más una sonrisa nerviosa y no negaré que se ve increíble como el día que nos reunimos con nuestros abogados y que si su intención fue demostrarme qué dejarla fue un error confieso que lo logró en ese momento pero ahora verla tan recuperada junto a Jared, junto a otro tan rápido me hace pensar que todo lo que lloro y me dijo en su momento fue mentira y solo estaba dolida por el momento.

-Quizá Amelie no sea tu hija- dice sin rastro de remordimiento.

-Qué...- doy un par de pasos al sofá más cerca.

-No fui del todo sincera en su momento obvio estuve con jared y bueno...

No escucho nada más de lo que Leah dice en este momento todo me da vueltas recuerdo lo que me dijo mi mamá cuando le dije que Leah estaba embarazada y que lo íbamos a intentar, mierda ¿Cómo no va a ser mi hija?

-Tenemos que hacer una prueba de paternidad...- escucho entre susurros de todo lo que viene a mi mente de recuerdos con Amelie

-Esa niña es mi hija...- murmuró

-No lo sabemos- dice muy tranquila.

-¿Por qué me mentiste? ¿Por qué hasta ahora lo dices? ¿por que?- gritó

-No puedes gritar en una casa que no es tuya - la defiende Jared.

-Tú cállate esa facha de novio protector no te va...

-Yo...

-Déjalo- lo interrumpe Leah. -Haremos hoy la prueba...

-Cómo puedes estar así de tranquila? Me engañaste y...

-No tienes derecho a reprocharme nada- me encara. -Tú me engañaste dos veces, dos recalca...

-Son cosas diferentes- me defiendo.

Hace una risa sarcástica.

-Es solo una prueba para saber la verdad para que tu abogada no quiera quitarme a mi hija...

-Nuestra- gruñó.

-No lo sabemos realmente Harry- se mete Jared.

-Tú cállate por favor...

-El doctor del laboratorio vendrá en un rato para tomar las muestras, todo es muy privado los resultados serán rápidos...-

Leah habla tan tranquila no puedo creer que esté ahí que me hace odiarla.

-Créeme que seguramente no me odias más de lo que yo te odio- dice interrumpiendo mis pensamientos.

-No puedo creer tu nivel de cinismos...

-Harry no hablemos de cinismo que tú ganas porque es claro que cuando fui a Los Ángeles a verte durante el rodaje de la película ya llevabas tiempo acostándote con esa mujer y no trates de negarlo. Y luego me dijiste un sin fin de te amo ¿A eso que le llamas? Acaso solo lo dijiste para mantenerme tranquila y para acostarte conmigo. ¿Quién es más cínico?

Un mensaje en su teléfono la hace desviar la mirada.

-Ya viene el médico- anuncia. -Iré por Amelie...

Se levanta del sofá y se va con rumbo a las escaleras, me quedó mirando al hombre frente a mi.

-Estoy igual de sorprendido- dice.

-Ella me dijo que no se había acostado contigo.

-Una mujer no tiene porque decir o rendir cuentas sobre su sexualidad...

Fui un maldito niño ingenuo.

-Papá- el gritó de Amelie, mi hija roba toda mi atención.

-Mi princesa- la cobijo entre mis brazos cuando llega a mi.

-Te amo...- me dice.

-Mi amor saluda a Jared- le dice su mamá.

-Hola Jared- lo mira pero no hace nada por querer separarse de mí y eso me complace porque sé que ella me ama a mi.

Claro aunque no quita el hecho de que si no es mi hija me dolerá como me duele en este momento.

-¿Puedo darte un abrazo, nena?- le pregunta.

Ella afirma con la cabeza y se baja de mi regazo no quiero dejarla ir pero la mirada de Leah me dice que lo haga.

Veo como se abrazan y todo dentro de mi se revuelve. Si es hija de ella es obvio que me perderé toda su vida de ahora en adelante. De una niña que vi nacer, dar sus primeros pasos y decir su primera palabra.

Es solo una posibilidad, Harry. Me dice la vocecita en mi cabeza.

No se que le dice Jared que la hace reír y ella en secreto le dice algo a lo que él afirma.

-Claro que te voy a llevar- le dice.

Estoy tan absorto en esa escena que no me doy cuenta que los abogados de Leah llegan con un médico.

-Tengo el acuerdos de confidencialidad- le dice a Leah uno de ellos.

-Gracias- le sonríe. Y mira al médico. -Gracias por venir y me encantaría que hablara antes con mi abogado.

-Por supuesto señora, firmó un sin fin de esos- comenta divertido.

Él y uno de los abogados de Leah se van hacia la terraza.

Pero no me importa más cuando Amelie regresa a mis brazos.

-¿Te vas a quedar?- me pregunta mi hija.

-No princesa- le respondo y ella nace una mueca.

-¿Cuándo te vas a quedar?

-Pronto.

-Está bien papá-  me da un beso en la mejilla.

El doctor y el abogado regresan.

-Buenas tardes- saludó el doctor. -Son el doctor Jones me encargaré de hacer la prueba, será vía saliva para no incomodar a la pequeña- le sonríe a Amelie.

Comienza a sacar sus instrumentos del maletín que carga. Comenzó con Jared, siguió conmigo y al final Amelie.

-Los resultados estarán mañana a primera hora- nos dice. -Me retiró.

Se va acompañado del guardaespaldas de Leah.

-Mi amor ven- llama a Amelie.

La niña abandona mis brazos y va a donde está su mamá.

-Debes irte tú también- dice mirándome.

-Quiero estar con mi hija un momento.

-No puedes ver a los niños hasta el dictamen- me dice uno de sus abogados. -Si viste a Ethan fue un caso especial y bueno ahorita también lo es...

Me levantó de donde me encuentro sentado.

-Nos vemos en el juicio- sueno  serio y un intimidante.

Por qué no voy a dejar que esto pase como si nada.

-¿Puedo despedirme de mi hija o mi eso me es permitido?

-Dile adiós a papá- le dice Leah a la niña.

-Quiero ir con él- dice.

-Otro día cariño-

-¿Cuándo?

-Pronto, lo prometo- Leah le da un beso en la mejilla.

-Okay mami- ella también le da un beso a su mamá.

-¿El sí se puede quedar?- miro a Jared.

-El es un amigo que está de visita. Adiós Harry.

-Nos vemos en el juicio- repite mis palabras y tono el abogado de Leah.

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