Mayo 2.

Hacía demasiado calor, estaba sudando mucho y ya me había bañado dos veces en menos de tres horas. Estaba sentada mirando cosas de bebés en mi computador, ya estaba de vacaciones debido al embarazo, él cuál acabaría más pronto de lo que imaginábamos, ya que tenía nueve meses de embarazo.

Harry estaba cocinando, se le había ocurrido preparar un caldo que según él era nutritivo y rico, y lo era, pero con este calor no me apetecía. Aún así el se emocionaba cocinando, así que me lo comería. También estaba preparando algo en el horno, pero no sabía qué, dijo que era sorpresa.

Ryan dio una patada y reí.

-¿Estás hambriento?-Le hablé-Papá está preparando la comida.

-¿Está despierto? -Preguntó Harry desde la cocina.

-¡Acaba de patear!

Harry llegó corriendo y puso una mano en mi vientre. Pero al parecer Ryan ya no quiso patear.

-Nunca patea cuando estoy yo, a mi se me hace que no le caigo bien-Dijo él.

-Tonterías, simplemente no... ¡Ahí pateo!

-¡Lo sentí! -Gritó Harry emocionado- Ya era hora chiquitín, en nueve meses nunca quisiste mostrarme tus patadas ninja.

Ryan pateo fuerte haciéndome soltar un gemido de dolor.

-Oye pequeño, con más cuidado.

-Deja que patee todo lo que quiera-Dijo Harry emocionado por sentirlo.

-Como no te está pateando a ti ¿verdad?

Harry se iba a levantar para regresar a la cocina, cuando solté un grito de dolor y se giró asustado.

-¿Qué pasó?

-Sentí... un dolor muy fuerte... creo que, dios mío, creo que es hora.

Harry abrió los ojos más de lo normal y salió corriendo hacia la habitación mientras yo me seguía quejando.

-Voy a preparar una maleta pequeña para ti, después vuelvo por cosas para el bebé-Dijo.

Media hora más tarde habíamos llegado al hospital mientras seguía teniendo contracciones. Me hicieron ponerme una bata mientras Harry esperaba fuera.

***

Había sido una falsa alarma.

El bebé estaba bien, todo estaba bien, me dijeron que las contracciones podrían presentarse cuando se estaba próximo de dar a luz.

Pero Ryan aún no se volteba por compelto para poder nacer, así que me dieron máximo dos semanas más para la fecha en que podría nacer.

Harry estaba indignado porque pensó que saldría de ese hospital con nuestro bebé en las manos. Pero seguía dentro de mi.

-Debería estar aquí, no ahí-Dijo señalando mi estómago.

-Debería de traerlos la cigüeña de verdad y no sufrir todo esto-Me encogi de hombros.

-Voy a hablar con ese niño cuando nazca.

-No creo que te entienda-Reí.

-Pues hablaré con él hasta que lo haga-Dijo.

Íbamos camino a casa cuando vimos que un camión de bomberos y una patrulla pasaron a toda velocidad en el carril de al lado.

Harry se quejó diciendo que ni los policías respetaban el límite de velocidad.

-Tal vez tienen una emergencia ¿no lo pensaste?-Le respondí yo.

Hicimos una parada en el supermercado para que yo pudiera hacer pipi, porque aunque estuvieramos cerca de casa, ya no aguantaba.

Compré algunas golosinas mientras Harry me esperaba impaciente en el coche.

Al regresar entré y reí al ver su cara de aburrimiento.

-Ten, amargado-Le dije con humor entregandole una barra de su chocolate preferido.

Seguimos camino a casa y llegamos cinco minutos después.

Al llegar se me bajó la sangre a los pies al ver que afuera de nuestra casa habían dos patrullas y dos camiones de bomberos.

-Dios mio-Dije asustada-¿Qué ocurrió?

Harry sacudió la cabeza y se encogió de hombros con preocupación.

Aparcó y se bajó del coche sin ayudarme a mi. Vi como fue directo a la patrulla. Rodé los ojos y bajé como pude del auto, luego me acerqué para escuchar lo que el policía le decía.

-Al parecer el incendio se originó en la cocina-Escuché y miré a Harry enojada.

Él había dejado todo encendido mientras él me apuraba para que fueramos al hospital. Me giré para ver la casa y me dieron ganas de llorar.

No se veía completamente quemada, lo único que estaba completamente quemado era la cocina.

Él policía se fue y Harry se acercó.

-Se quemó el pastel que estaba haciéndote-Dijo con una pizca de humor.

Lo miré enojada de nuevo.

-Esto no es gracioso.

-Lo siento.

Íbamos a tener que resolver esto pronto si queríamos tener una casa normal. Aún seguía viendo a los bomberos apagar el fuego.

***

Nota: siento la tardanza, pero he aquí al fin!

¿Qué les pareció el despiste de Harry?

Besos!
-K.