06. Tiempo de Akari Yukimura
Llevaba casi un año actuando y disimulando el dolor que los tentáculos le causaban.
Al mismo tiempo una duda comenzaba a crecer en su interior. ¿Qué había pasado exactamente esa noche? ¿Realmente había matado a su hermana? Después de convivir tanto tiempo con Koro-sensei no creía que fuese capaz de hacerlo.
Sin embargo, aunque quisiera detenerse y buscar otra manera junto a sus compañeros, aunque quisiera dejar de actuar y confesarse a Nagisa, los tentáculos siempre se interponían.
Poco antes de la obra fue cuando se dio cuenta: no quedaba tiempo. Los tentáculos luchaban por obtener el control y poco a poco iban ganando terreno. Un solo pensamiento se hacía cada vez más presente en su mente: "matarlo... debo matarlo".
Guiada por los tentáculos preparo una trampa en el trastero contiguo a la escuela similar a la del Shinigami. Según sus estudios esa fue la mejor de todas las presentadas en el año. Lo único que le hacía falta era una excusa para llevarlo ahí.
Miro a su alrededor, cajas, basura y... los materiales usados en la obra. Se concentró en una caja que contenía pequeñas bolitas de diferentes tonos de azul. Las habían utilizado para una escena en casa de Julieta. Sonrió. Tenía una idea.
***
—Vaya, realmente hiciste un lío aquí —comentó Nagisa mientras veía el suelo del trastero completamente lleno de bolitas azules.
—Sí, estaba ordenando las cosas pero mi mano se resbalo —aclaró Kayano. Era mentira, los había tirado a propósito para tener una excusa y llevar a Koro-sensei. Al principio pensaba pedirle ayuda a él directamente, pero creyó que sería sospechoso, entonces pensó en Nagisa, si estaban solos le entraría curiosidad por saber que harían e iría por su cuenta.
No se equivocó. Minutos después de comenzar a limpiar el desorden, el pulpo se ofreció para ayudar. Recogía las bolitas y las metía en cubetas. Nagisa y Kayano usaban escobas y recogedores.
Las cosas que iban encontrando les traían recuerdos. El viaje escolar, el festival deportivo, el festival cultural, todos los exámenes, los intentos de asesinato y, más recientemente, la obra.
—Por cierto, felicidades a los dos —comenzó Koro-sensei pausando lo que hacía —. Actuaron muy bien como Romeo y Julieta, ¡La batalla final estuvo genial! Sus habilidades han crecido bastante desde que nos conocimos —los alago con su típica sonrisa.
No tiene idea de cuánto...
—¡Ah! Kayano-san, ¿puedes decirme otra vez el nombre que le diste al gato? Siento que me recuerda a algo pero no estoy seguro de que... —preguntó Nagisa mientras barría. Kayano les daba la espalda.
—¿Kayano-san adoptó un gato? Me encantaría verlo, ¿cuál es su nombre? —coreó Koro-sensei
El silencio se adueñó del cuarto tras la pregunta. Poco a poco Kayano se giró hacia ellos. Con una sonrisa y con un tono de voz dulce pero amenazador pronunció un nombre.
—Aguri
—¡¿A-aguri?!
Antes de que Koro-sensei o Nagisa pudiesen reaccionar largos tentáculos verdes salieron de la nuca de Kayano y destruyeron algo debajo del pulpo. Este cayó a un profundo agujero con fondo de balines anti-sensei.
—Te quiero, Koro-sensei... Ahora muere.
Los tentáculos de Kayano golpeaban a los del profesor cuando intentaba sostenerse y regresar a la superficie. Los ataques de Kayano eran rápidos y precisos, tuvo todo un año para estudiar a su profesor. En un último intento Koro-sensei se sostuvo de las paredes mientras preparaba uno de sus rayos de energía. Pensando que el rayo se dirigía a ella, Kayano se protegió con sus tentáculos, lo que le dio la oportunidad a Koro-sensei para crear una salida.
Fuera, la clase E estaba reunida, preguntándose qué era lo que sucedía. La respuesta no tardó en llegar. Kayano salió y se armó el revuelo. Nadie podía creer lo que veía. La dulce y simpática Kayano tenía una fría expresión en el rostro mientras se presentaba como la hermana menor de Yukimura Aguri, la antigua profesora de la clase E y llamaba asesino a Koro-sensei. Por supuesto eso no era tan sorprendente como ver los tentáculos que salían de su nuca retorcerse a su alrededor.
Después de un último aviso y sin responder las preguntas de sus compañeros se marchó, dejando un velo de confusión tras de sí.
***
—La hermana menor de Yukimura-sensei, Akari
"Por eso me resultaba familiar el nombre" pensaba Nagisa.
Se encontraban todos en el salón de clase luego de mirar una de las actuaciones de Mase Haruna, el nombre artístico de Kayano.
Apenas podían dar crédito a la realidad. Itona les dijo que si ella realmente había llevado esos tentáculos durante todo ese tiempo, debió haber sufrido un dolor terrible y que era casi imposible que no mostrara el dolor en su rostro.
Durante un año los engañó para poder llevar a cabo su venganza. Sin embargo, seguía siendo su compañera, así lo había dejado claro Koro-sensei cuando le preguntaron sobre su pasado y prometió que les contaría todo una vez que Kayano no estuviera en peligro. Sin otra opción, todos accedieron.
Tendrían que esperar un poco para la reunión concretada por ella, eso les daba suficiente tiempo para pensar, pero no para llegar a cualquier conclusión.
El más afectado de todos era Nagisa. Su mejor amigo, el chico que estaba enamorado de ella, pero ¿la persona de la persona de la que se había enamorado era verdadera? ¿Era todo parte de una muy elaborada mentira? Se negaba a creer que todo lo que vivieron juntos no significó nada para ella. Pero tendría que esperar por las respuestas que tanto quería.
***
Dolía. Dolía hasta el punto de llegar a ser casi insoportable. Pero si se trataba de matar al asesino de su hermana entonces no le importaba.
Aunque había una pequeña y débil voz que se seguía preguntando si estaba haciendo lo correcto. Pero era demasiado débil. Los tentáculos la ahogaban de a poco.
—Así que viniste, terminemos con esto —dijo cuándo Koro-sensei y los demás llegaron.
Algunos de sus compañeros, incluyendo a Nagisa, intentaron hacerla entrar en razón, siendo conscientes del peligro en el que se encontraba. Eso sólo logró hacerla enfadar aún más y, sin importarle nada encendió sus tentáculos encerrándolos a ella y Koro-sensei en un círculo de fuego.
Comenzó el ataque sin darle tregua a Koro-sensei. Sus tentáculos se movían a una velocidad impresionante.
Sin embargo, todos eran conscientes de la realidad. Si seguía así moriría, lo dijo Itona, los tentáculos absorberían su fuerza vital. Viendo cómo iban las cosas no le quedaba mucho tiempo. Debían hacer algo, pero nadie sabía que.
Lo único que les quedaba era esperar a queKoro-sensei tuviese una idea para detenerla.
*****
Sólo les dejo esta imagen que me dio mucha risa xD
Si no entienden lo que dice, lo traduzco:
Nagisa: Estoy llamando a los bomberos!
Kayano: Oh, no te preocupes. No les haré ningún daño a ustedes chicos.
N: No, es sólo que... Luces caliente
Que carajos estás haciendo Nagisa!!!
No se, sólo eso.
InfiniteTrigger_uw
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