ღ12

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Yoongi sonrió cuando Jimin se pegó más a su cuerpo, si es que era realmente posible el mantenerse más cerca de él.

Había logrado llevarlo al baño con algo de dificultad y no es que el menor pesara mucho, pero debía admitir que su condición física era lamentable en esos momentos, por lo que llevar el peso de alguien que se encontraba balanceándose en sus brazos era un poco complicado.

― ¿Por qué no puedo sentir tu olor? ―preguntó el menor mientras pegaba su nariz al cuello del mayor, inhalando con fuerza para intentar detectar algo, pero nada.

―Porque mi alfa no quiere salir, además, estoy usando supresores―dijo mientras se agachaba con cuidado, para poder encender el grifo de la bañera, para que Jimin pudiera bañarse y así reducir un poco los síntomas del celo.

― ¿Por qué mi alfa no quiere salir? ―preguntó con un puchero en sus labios, sintiendo cómo su omega lo volvía muy sentimental y bobo, no logrando controlar ese sentimentalismo que invadía su cuerpo.

"Porque mi alfa se siente humillado por años de maltratos y se niega a aparecer"

Pensó para sí mismo, pero claramente no lo diría, no quería que el menor se pudiera a llorar en esos momentos. Porque en su estado, era claro que el menor no podría controlar las lágrimas.

―Sabes que no aparece desde hace meses, pero ahora no hablemos de eso, porque debes bañarte―se acercó al mueble del baño, en donde se encontraba un gran espejo y varios cajones por debajo, en donde se encontraban las cosas de limpieza personal del menor― ¿Cuáles son tus sales favoritas?

El menor miró el cajón abierto sin separarse ni un poco del mayor, señalándole un envase de vidrio que tenía polvitos dorados.

El mayor intentó agacharse nuevamente para tomarlos, pero definitivamente no podía hacerlo sin tirar al menor. Se sintió por un momento como los omegas embarazados cuando se agachan.

―Jiminie, necesito arreglar las cosas para el baño, por lo que debes soltarme un momento―habló con una sonrisa dulce, recibiendo un puchero por parte del menor.

Jamás pensó el verlo de esa forma, como un niño pequeño que no quería dejar de lado a su persona de confianza.

Sabía que en muchas ocasiones el omega podía verse nublado por sus instintos de omega, en especial cuando el lobo de este presentaba bastantes irregularidades con su celo, como era el caso de ambos, por lo que comprendía de cierta forma al menor.

―Por favor, así podremos descansar más rápido―acarició ligeramente las caderas de menor, para que pudiera ceder y dejarlo sobre el mueble por un momento.

―Bien.

El mayor sonrió y dejó un beso en la mejilla del menor, colocándolo sobre el mueble para poder arreglar las cosas. Tomó las sales que el menor le había indicado y leyó en la etiqueta de la misma, según lo que leía, esas ayudaban a que el olor no fuera tan escandaloso durante el celo y los síntomas fueran menores también. Por lo que colocó una considerable cantidad en la tina.

Sabía que, al ser el omega rey, no podía andar por todo el pueblo o el castillo con su olor en el punto clave, ya que eso podría incomodar a otros omegas o incitar a otros alfas y no era correcto. Además, eso ayudaba de cierta forma a la seguridad de este.

Cerró el grifo cuando el agua llegó al punto adecuado, girándose sobre su lugar para poder ver el menor. Cerró los ojos con sorpresa y sintió sus mejillas sonrojarse cuando vio que el menor se había quitado la ropa mientras lo esperaba, quedando completamente desnudo sobre el mostrados.

―Jiminie, por favor―pidió mientras soltaba una risa nerviosa, intentando que su estado no fuera tan obvio para el otro. ―Sé que tienes mucho calor, te entiendo, pero por favor avísame antes de desnudarte ¿Sí?

El menor hizo un puchero avergonzado, alcanzando su bata de baño para poder cubrirse, sintiéndose ligeramente mal por el rechazo. Y es que eso es lo que Jimin odiaba de su celo en la normalidad, el que se pusiera tan llorón y sensible. Además, ese había sido un comentario lógico, pero su lobo ya quería soltarse a llorar.

Y es que el cabrón jamás aparecía, pero cuando lo hacía, era para joder todo.

Yoongi suspiró ante la notable incomodidad del menor, ni siquiera teniendo que abrir los ojos para notar que sus palabras habían calado duro en el lobo del otro.

―No me malentiendas, bonito. No hay nada malo en tu cuerpo, solamente me tomaste por sorpresa―Jimin sintió cómo su rostro se sonrojaba totalmente cuando escuchó ese apodo, apretando el nudo que había hecho en su bata―La última vez que te vi desnudo tenías cinco años y realmente no recuerdo cómo era tu cuerpo en ese entonces.

El omega asintió con una risita, ya que su padre no había dejado que ellos se vieran desnudos nunca, siempre siendo receloso y cuidadoso con aquello. En especial cuando tuvieron que presentarse como alfa y omega a los doce años.

Bastante jóvenes, pero siendo de calibre para su clase.

― ¿Entonces puedo quitarme la bata ya? ―preguntó con una gran sonrisa, ya que realmente se estaba muriendo de calor.

―S-Sí puedes, igualmente debes hacerlo para entrar a la tina, ya está lista.

Jimin sonrió y se quitó la bata de golpe, dejándola caer al suelo mientras bajaba del mueble. Yoongi evitó mirar debajo de su cuerpo, observando los ojos del menor para no avergonzarse.

―Bien, ahora entra a la tina con cuidado y te esperaré en la habitación―dijo con una sonrisa mientras le tendía la mano para ayudarlo a entrar, pero el menor se abrazó a él nuevamente, haciendo que las mejillas del alfa se calentaran aún más― ¿Qué sucede?

― ¿No te vas a bañar conmigo? ―preguntó con una sonrisa de costado, viendo al alfa con ojos redondos y brillantes.

El olor de Jimin comenzaba a marear ligeramente al mayor, sintiendo algo moverse dentro de sí, pero no logrando nada en realidad. No al menos en ese momento.

―No Jiminie, es momento de que te bañes para poder descansar ¿Sí? Entre más rápido mejor―Jimin hizo una mueca con sus labios y se agachó sobre la bañera para poder tomar algo de agua en sus manos.

Yoongi carraspeó ante la posición en la que el menor se había colocado, viendo al techo para intentar ignorar.

De pronto, un golpe de agua en su rostro hizo que se asustara y chillara por un momento, viendo al menor con los ojos bien abiertos, quien le había tirado el agua encima.

― ¡¿Por qué hiciste eso?! ―preguntó mientras reía con indignación, viendo con total sorpresa al menor, quien se mantenía con las manos en el rostro y una sonrisa pícara.

― ¡Es para que te calles y entres conmigo! ―Jimin tomó la camiseta del mayor por los costados y comenzó a levantarla, haciendo que el mayor entrara en un pequeño pánico.

―No, no, no ¡Que no, te dije! ―chilló, para finalmente soltar un estruendoso grito en medio de las negaciones mientras se alejaba de golpe del menor.

Su tono fue más brusco de lo que realmente quería que fuera, por lo que Jimin se separó de golpe y lo miró con algo de temor. Su estado no era el mejor y el grito estridente que escuchó de parte del contrario lo hizo asustarse.

―Lo lamento, puedes salir―dijo Jimin con voz seria, el estado que su omega imponía sobre él se había quedado en el olvido por un momento―Sal.

Yoongi suspiró mientras intentaba tomar la mano del menor, siendo rechazado.

―De verdad, voy a bañarme solo―Jimin recogió rápidamente la bata del suelo y se la colocó a prisas, empujando al alfa para que saliera de una vez del baño.

Yoongi tragó duro cuando fue empujado hasta la habitación y la puerta cerrada en sus espaldas, pensando en que había metido la pata sin quererlo realmente.

No se sentía listo, para nada preparado como para que el menor viera su cuerpo. No le gustaba, no se sentía cómodo con él, por lo que le taba mucha vergüenza el que el menor lo viera.

El grito había sido totalmente involuntario, un efecto automático a su miedo por ser revelado realmente, su inseguridad mostrándose en su mayor esplendor.

Se sentó en la cama con ambas manos sobre su rostro, restregándolas para poder darse un merecido dolor por algunos momentos. Aprovechando el momento en el que el menor se encontraba bañándose, buscó entre los cajones la pijama de seda, para poder dejárselo cerca y a su disposición.

Pensó que el baño del menor sería rápido, pero en realidad tardó bastante en salir y tuvo que esperar bastante a poder disculparse por su grito.

Aunque ese pequeño tiempo también lo estaba ayudando un poco, sabía que Jimin jamás se burlaría de él y jamás haría de menos sus inseguridades. Pero era algo bastante difícil de manejar en realidad, el decirle a la persona que más ama que piensa que su cuerpo es una de las cosas más horrorosas que alguien podría ver.

No era fácil, no era algo que le dejara tranquilo.

Cuando la puerta se abrió, pudo ver a Jimin con la mirada gacha, saliendo del baño con la bata apretada mientras hacía todo con la vista en el suelo. Yoongi se levantó de la cama para poder darle permiso y que se cambiara.

―Jimin, de verdad lamento el haberte gritado. No era mi intención, en verdad que no―dijo con tono realmente arrepentido, notando que el menor lo estaba escuchando, pero a la vez no quería seguir con la conversación.

―No te preocupes, fui agobiante, es entendible.

Fueron las únicas palabras de Jimin, quien comenzó a colocarse el pijama sin mirar atrás.

Yoongi juntó sus manos sobre su cuerpo, mordiéndose el labio para intentar pensar en algo que fuera comprensible, pero que no denotara la vergüenza que tenía sobre sus inseguridades.

―Yo...

―Está bien, hyung. No te preocupes, sé que esto puede ser mucho para ti y te comprendo, no debes darme explicaciones para nada―el menor le miró con una pequeña sonrisa, pero en definitiva aquella no llegaba a sus ojos, siendo bastante falsa en su opinión.

Terminó de colocarse el pijama y se acomodó en la cama, dejando el espacio para Yoongi.

―Apaga las luces, por favor.

Yoongi se mantuvo en su lugar, viendo al menor acomodarse de espaldas a él.

Suspiró y miró nuevamente su torso, sobre la tela de su camiseta. Apretó los ojos mientras tomaba ambos lados de la camiseta, elevándola para poder quitársela y dejarla caer al suelo.

―No quería bañarme contigo porque no quería que me vieras sin ropa―dijo con voz suave, siendo lo suficientemente comprensible para el menor.

Jimin abrió los ojos confundido, estirando su cuerpo hasta Yoongi, en donde pudo verlo atentamente.

En ese momento pudo darse cuenta realmente de lo que Yoongi tenía sobre él, en su cuerpo, en toda su piel. Se acomodó lentamente sobre la cama mientras veía el torso del alfa, reparando cada una de las heridas que tenía en su torso. Algunas más grandes, otras más pequeñas, pero definitivamente su cuerpo estaba marcado en totalidad.

―Me da asco, vergüenza y miedo el mostrar esto―señaló su cuerpo, incluso tomando la manta que envolvía su hombro y quitándola de golpe, mostrando así la herida más profunda, enseñándosela al menor. ―Mi cuerpo es feo, todas estas cicatrices son feas y no quiero que las veas, no quiero que tengas ese pensamiento sobre mi físico. No me gusta que me vean con pena, que me vean como que si yo fuera un niño en peligro. Mi alfa no aparece desde hace años, no meses, años.

Las palabras del mayor estaban acompañadas por lágrimas, apretando sus brazos en torno a su cuerpo.

―Mi alfa fue humillado por tantos años, que ahora no aparece por el daño que le han hecho. Intento que las cosas sean normales, hacerme ver que no he quedado afectado por lo sucedido, pero las marcas son físicas y emocionales y no sé cómo sobrellevarlas o solucionarlas―confesó con voz tensa, viendo a Jimin bajarse de la cama.

―Yo no quería gritarte, sé que te encuentras bastante sensible por tu celo, pero realmente no podía evitar el gritar de esa forma.

Jimin negó rápidamente y se acercó al mayor para poder darle un abrazo, dándole completamente igual el apegarse a las heridas, no le daban asco en absoluto ni tenía repudio hacia ellas. Yoongi soltó las lágrimas que se habían acumulado en su cuerpo mientras aceptaba el abrazo del menor, apegando su rostro a su cuello mientras dejaba salir todo.

―Existe una solución para todo aquello que te preocupa, pero no podrás encontrarlo solo, ni tampoco podrás encontrarlo solamente en mí. Buscaremos la forma en la que liberes todo aquello que necesitas.

Después de abrazarse por unos segundos más, Jimin limpió las lágrimas del mayor con una sonrisa, y dejó un beso en sus mejillas húmedas. Tiró de su brazo para que ambos se acomodaran sobre la cama.

Yoongi iba a tomar su camiseta del suelo para colocársela nuevamente, pero Jimin no se lo permitió.

―Puedes bañarte cuando terminemos nuestra siesta y sé que te gusta dormir sin camiseta.

El menor se acomodó sobre el pecho del mayor y cayeron dormidos en pocos segundos. Antes de poder caer dormido completamente, Yoongi sintió a su lobo removerse una vez más en su interior, haciendo que una sonrisa se extendiera en su rostro y pudiera dormir plácidamente.

Estaba dispuesto a hacer lo que fuera necesario para recuperarse a sí mismo, no dejaría que su pasado afectara en su futuro.

¡Nos leemos prontooooo!

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