Itachi asintió viendo con duda al pequeño, era su momento -es verdad, traje una película ¿quieres verla? nunca hemos visto una- Naruto lo vio con sorpresa, sonrió divertido -estrenemos la televisión, haré palomitas, pon la película mientras tanto- el Uchiha sonrió al verlo moverse con velocidad mientras un clon recogía y lavaba platos- sabes, es extraño -se levantó prendiendo el televisor -¿Qué es extraño?- Itachi puso la película, tenía dudas como siempre cuando se trataba de Naruto- ¿por qué te ves exactamente como cuando te conocí? es como si aún tuvieras diecisiete años- Naruto mordió su mejilla ¿cómo decirle que el tiempo se había detenido en su cuerpo? su matriz se había desarrollado en un inicio con los experimentos a los que fue sometido, era infantil, la forzaron de algún modo, después con ayuda de Kurama terminó por concluir el embarazo, por otro lado, siempre trataba de decir verdades a medias en broma a Itachi, tal vez quería en el fondo que lo conociera un poco más, que lo descubriera- tal vez viaje en el tiempo veinte años atrás y detuve el correr del tiempo en este bello rostro hasta que alcance mi tiempo-

Itachi levantó sus onix viendo que a pesar de escucharse como una broma, su mirada era seria, lo había notado en algunos otros momentos, hacía bromas extrañas, como cuando conoció a su hermano, pudo ver emoción en su rostro y un cariño enorme en sus ojos “nos volvemos a ver Sasuke” “Itachi, tienes facha de criminal rango s, un porte que da terror” “tu padre hubiera llevado a tu clan a la destrucción, gracias a kami estás con él” “tener una bestia en mi interior me da años de hambre” reía, pero su sonrisa no llegaba a sus ojos, era como si dijera verdades a medias, sin contar sus palabras el día que lo salvó en el risco “aquí conocí a Minato-san, a mi cuñada, ahora son mi familia, ahora tengo algunos amigos a pesar del poco tiempo que he estado en esta konoha”, lo recordaba perfectamente, dijo “esta konoha”, lo vio sentarse a su lado con las palomitas.

-Es así ¿no es verdad?- Naruto se puso incómodo, masticó lentamente -aquel día en el risco, dijiste “esta Konoha”- el rubio abrió sus azules nervioso, lo habían descubierto, no era más una broma, sabía que desde el inicio sospechaba de él, pero vamos, creer que alguien viajaba en el tiempo era algo descabellado, maldito genio pensaba, levantó su mano y cubrió la boca del Uchiha- este secreto me costó tres años de mi vida con Danzo. Itachi, no puedes decir nada a nadie, es un secreto rango s, así me entregó Sarutobi, le contó mi origen a Danzo- Itachi abrió sus onix bastante, veía miedo en sus azules, quitó su mano suavemente de sus labios, lo observó con seriedad- sabes que nunca diría nada, sólo quiero la verdad, sigues viéndome como a un niño pequeño cuando ya no lo soy, soy un hombre-

Naruto abrió sus azules ligeramente, se dejó caer en el respaldo del sofá con cansancio tratando de analizar si hablar -supongo entre tú y yo, no debería existir secreto después de tantos años de amistad -sonrió con cariño. Itachi sonrió recargándose a su lado con confianza, sintió la cabeza del rubio caer en su hombro, su delicioso aroma a vainilla llegó a él, lo respiró lentamente disfrutando cada segundo- has crecido bastante, ahora me siento enano a tu lado- el Uchiha sonrió- eres de bolsillo -Naruto rio con diversión, suspiró quedito más tranquilo, observó el televisor apagado un segundo -no mentí cuando dije que viaje en el tiempo veinte años- Itachi abrió sus onix confirmando sus sospechas- soy Menma-chan en un futuro- el azabache giró su mirada con sorpresa, ahora entendía el increíble parecido entre ambos que el Hokage ni siquiera intentaba tapar, al final ¿quién pensaría que ocurría una historia así?

-Sasuke teme era mi compañero de equipo, mi amigo, era un idiota arrogante, mi rival, pero así lo quería- Itachi sonrió ligero- fui huérfano, no mentí en ello- el Uchiha apretó el ceño con duda- ¿recuerdas el día que me recuperaron? ¿El nacimiento de Menma?- asintió el Uchiha- ese día un sujeto con máscara liberó a kyubi, el zorro destruyó media aldea, papá lo logró contener y sellar, en consecuencia mis padres murieron-

Itachi bajó sus onix viendo la mirada triste en el rubio- papá me usó como vasija de kyubi, yo soy el jinchuriki del kyubi- el azabache cruzó su brazo por su espalda y lo atrajo a él en un abrazo. Naruto sonrió al no sentirse rechazado, al contrario, se sentía bien ser mimado de esa forma -tuve una infancia de mierda, la aldea me rechazaba, Sarutobi me quitó mi herencia y legado, aún no entiendo el porqué lo permitieron, el consejo seguramente estaba tras de ello- Itachi ahora entendía su coraje contra el anciano -me hizo creer que era mi jiji cuando era un hijo de puta, crecí sintiendo que no valía nada, así que me obsesioné con la idea de ser Hokage y recibir aceptación, su reconocimiento, me esforzaba bastante por lograrlo, mi sensei era Kakashi Hatake- Itachi sonrió divertido -¿por eso lo llamas así? ahora entiendo -Naruto sonrió con diversión -estaba el día que llegué a este mundo, gracias a kami algunos saben quién soy, era difícil para mí integrarme al inicio -guardó silencio Itachi -¿tu sensei si fue Jiraiya?- Naruto sonrió con emoción, asintió -supongo era mi padrino y presionó para que así fuera, me llevó con él tres años en un viaje, me ayudaba a controlar un poco el chakra de kyubi, necesitaba hacerme fuerte, existía una organización criminal formada por delincuentes rango s llamada Akatsuki- guardó silencio Naruto un segundo al recordar al otro Itachi y ese hermoso beso que había recibido, se sonrojó bastante al darse cuenta que el Itachi a su lado ya no era un niño y estaba confianzudamente abrazado a él, no había caído en cuenta, tenía años sin recordar al otro Itachi, mordió sus labios con ansiedad -buscaban a los jinchurikis -Itachi escuchaba, pero se había dado cuenta del sonrojo y cambió de actitud a uno tímido, su mano se movió suavemente sobre su brazo en una caricia lenta, el sonrojo aumentó, sonrió contento.

-Durante mi tiempo con Danzo, eliminé a un sujeto en Amegakure, Ero-jiji dice que su organización era Akatsuki, buscaban la paz, tal vez algo lo torció en el camino y esa organización nació para el mal, por lo menos sé que ya no existe ese enemigo, por otro lado, el sujeto que atacó a mis padres en ese futuro, también los atacó el día del nacimiento de Menma en este tiempo, intentó liberar a kyubi- Itachi abrió sus ojos bastante -Danzo me había ordenado hacerme con el zorro, cuando estaba por salir, me aparecí y absorbí el chakra de kyubi, sometí al sujeto, era un obstáculo para mis órdenes, cuando lo hice papá lo selló y de pasó me selló a mí -rio quedito- ese día volví a ustedes y sin darme cuenta el futuro había cambiado y había sacado del camino a otro enemigo-

Naruto sintió sus caricias, su corazón latía con fuerza, estaba algo nervioso al hacerse consciente de Itachi, tragó pesado, trató de sacudir sus pensamientos y recuerdos, pero lo estaban traicionando- ¿cómo llegaste a este pasado?- Naruto suspiró agradeciendo con el cambio de ambiente -teníamos una misión en Rouran, seguíamos a un sujeto que pretendía activar la línea de fuego, lo consiguió, era bastante idiota e impulsivo en ese tiempo, me lancé sobre él sin importar nada, ni siquiera reparé en qué se había activado la línea de fuego y bueno, lo demás es historia, el punto es, no hay manera de regresar y a decir verdad, este futuro me gusta más, mi gente amada está a mi lado y algunos de ellos ya tienen seis años- sonrió con diversión, Itachi sonrió divertido.

-¿Tu y yo éramos amigos?- Naruto sonrió, no le diría su triste futuro, para él así lo fueron, asintió con una suave sonrisa, tampoco le diría del beso, era vergonzoso, levantó su rostro con una sonrisa amable, abrió sus azules al verlo tan cerca de él haciéndose aún más consciente de la realidad. Itachi ya era un hombre, tragó pesado al ver que lo veía con intensidad, giró su rostro tímido, tomó el control de la televisión con sus manos temblorosas, prendió la tele. Itachi se dio cuenta de cada movimiento y expresión, si algo sabía era observar y darse cuenta de los detalles, sonrió contento, no soltó a su rubio, su mano subía y bajaba por su delgado brazo sintiendo su suave piel, para Naruto era agradable, ni siquiera le pasó por la cabeza la idea de soltarse y alejarse.

Veían una película en silencio, Itachi analizaba con cuidado todo lo que le había dicho Naruto, recordó algo, aquella vez que Genma lo besó, su rubio comentó que gracias a kami no era su primer beso, sus onix se oscurecieron -hace tiempo dijiste que Genma no era tu primer beso -Naruto abrió sus azules de golpe nervioso, tragó pesado, tomó un poco de palomitas y las metió en su boca para disimular -¿fue otouto quién te besó?- el rubio giró en shock por su conclusión viendo los onix del chico a su lado, abrió sus azules bastante. Itachi estaba nervioso hasta que lo vio comenzar a reír con diversión -¿bromeas? teme y yo sólo nos entendíamos a golpes ¿de qué hablas?- recordó aquellas dos veces que se besó con teme por accidente, negó con diversión, no valían para él como un beso real, fueron accidentes, el único besó que tenía valor para él fue el del chico a su lado- Itachi soltó el aire que no sabía que retenía, lo hizo disimuladamente- no te diré quién fue, ese secreto me lo llevaré a la tumba-

El Uchiha apretó el ceño, infló su mejilla- dijiste que no había secretos entre nosotros- Naruto sonrió con diversión, nuevamente recordó el beso que robó su alma, se sonrojó bastante, Itachi apretó el ceño celoso- ¿así que tengo rival?- el Namikaze levantó su rostro con duda ante el susurro, ¿escuchó bien?, no, tal vez imaginó, se veía normal Itachi comiendo palomitas, masticó lentamente tratando de descifrar, lo mejor era dejar el tema atrás, suspiró quedito observando la película, reían con diversión mientras veían las escenas. Al final de la película el silencio cubría el lugar, levantó su mirada observando a Itachi dormir recargando su cabeza en la suya, sonrió quedito, se levantó suavemente y lo acostó en el sofá, colocó una manta sobre su cuerpo, por un momento su mirada recayó en sus facciones, era hermoso, había crecido bastante, literalmente a pesar de tener diecisiete años, le sacaba una cabeza, en poco tiempo sería más de una cabeza completa, era demasiado varonil y con una espalda ancha, fuerte, ya no era el pequeño que conoció cuando llegó al pasado, negó con diversión, se agachó besando su mejilla con cariño -descansa- susurró, apagó las luces y fue a su habitación a dormir. Itachi abrió sus onix, necesitaba hacer que lo viera como un hombre, suspiró con cansancio, el rubio era demasiado distraído en ese aspecto.