Última Ronda: Parte 2

En la enfermería, Rudra no paraba de derramar lágrimas mientras truenos y terremotos ocurrían a consecuencia de su estado mental, su mejor amigo Shiva estaba muerto.

"A todos nos ha dolido la noticia, tranquilo, desahógate" Dijo Parvati a Rudra, el cual no paraba de culparse, pues quizá si hubiera ayudado más en la batalla, Shiva no estaría muerto.

Su rostro triste se tornó de repente en ira y odio, hablando con furia. "Si los dioses ganamos y logro vivir para recuperarme de mis heridas, arrasaré el infierno y exterminaré a todos los demonios" Esas palabras desprendían tanto odio que incluso algunos de sus amigos sintieron escalofríos, iba completamente en serio.

"C-Cálmate, necesitas descansar" Habló Tonatiuh mientras intentaba que la ira y el resentimiento no se apoderen de Rudra, pero era inútil, pues su rostro continuaba desprendiendo odio a tal puntos que grandes cantidades de corrientes eléctricas comenzaron a aparecer en la sala, obligando a los presentes a retroceder para evitar ser electrocutados.

Mientras tanto, en otra habitación de la enfermería, el rey mono despertaba con bastante confusión, todavía procesando dónde se encontraba, pues estaba en mitad de la batalla contra aquel demonio cuando acabó cediendo al cansancio.

Sun Wukong giró su cabeza lentamente, parecía que, ante la gran cantidad de habitaciones que se estaban ocupando, estaba compartiendo cuarto con otra persona, siendo Hela la que estaba presente en la cama con la mitad de su cuerpo ausente y una mano ausente.

"Está así desde que se enteró de que no sólo no iban a resucitar a su padre Loki, sino que Thor también ha muerto" Una voz resonó en la habitación, haciendo que Sun Wukong se levante de la cama, delante suyo estaba una especie de criatura quimera hecha de comida, estaba claro de quién se trata.

"¿Todavía sigues con ese aspecto, Zao Shen?" Preguntó Sun Wukong con algo de diversión en su rostro, el dios chino asintió con la cabeza.

"Sí, pero eso ahora no es lo importante, pues te interesará saber que he intentado hablar con los dioses infinitos más de tres veces desde que terminé mi ronda" Esas palabras incluso provocaron que Hela también preste atención. Sun Wukong cambió su rostro y se quedó expectante, esperando más información por parte del dios chino.

"Pero no he podido llegar a ningún acuerdo, maldita sea, parece que odian a todos los panteones, pues, aunque seamos divinidades, nos dejamos llevar y cometemos los mismo pecados horribles que los humanos" Esas palabras tenían más peso viniendo de Zao Shen, pues él fue un humano anteriormente.

"Entonces no hay forma de que ambos bandos sobrevivan..." Habló Sun Wukong con un suspiro profundo, Zao Shen miró hacia otro lado, no queriendo aceptar que había fracasado, pero, en realidad, era así, de hecho, la única razón por la que incluso quisieron mandar un ángel mensajero para hablar fue porque antes era humano, si hubiera sido una divinidad normal ni siquiera se hubieran molestado en querer hablar.

"¡Son unos malditos! ¡Ojalá Surt acabe con todos ellos!" Gritó de repente Hela, provocando que ambas deidades chinas la miren con sorpresa.

"Tranquila, recuerda que te pueden escuchar" Trató de ayudar Zao Shen, pero Hela contestó con agresividad, obviamente sin importarle las consecuencias.

"¡¿Crees que no lo sé?! ¡Sois unos mentirosos de mierda!" Comenzó a desahogarse la diosa de la muerte del panteón nórdico, haciendo que los otros dos en la habitación queden en shock ante el valor de decir esas cosas directamente a los dioses infinitos.

"¿Cómo de poderoso es Surt exactamente?" Preguntó Sun Wukong con mera curiosidad, Hela se rió un poco, estaba destrozada por dentro, eso era obvio.

"Antes de ser encerrado en lo más profundo del infierno ya era extremadamente poderoso, pero, viéndolo desde la pantalla, ahora es la forma de destrucción definitiva, no tengo idea de cómo ha conseguido ese poder, pero, si gana, sería capaz de rivalizar e incluso ganar a los ángeles de los dioses infinitos" Esas palabras provocaron miradas de confusión y sorpresa en los dos dioses chinos, los cuales también estaban sorprendidos en que los propios dioses infinitos no hayan aparecido para silenciarla por saber este tipo de cosas.

Después de que ambos dioses chinos suspiren, pusieron su atención a la pantalla que retransmitía en vivo la última ronda.

En la arena, Surt observaba la determinación de su rival con frustración, todos sus intentos por hacerlo caer en ira y furia descontrolada habían fracasado, tendría que callar y luchar durante, al menos, los siguientes minutos, de todos modos, ese imbécil había perdido ya una mano, ¿Qué tan difícil puede ser acabar el trabajo?

Después de tener esos pensamientos, Surt alzó su espada de fuego e intentó calcinar a Jesucristo con ella, éste, ahora sin su cruz para usar como escudo, tendría que tener buenos reflejos y agilidad para esquivar esos intentos, logrando apartarse a tiempo en esta primera estocada.

"¡Ánimo! ¡Te apoyamos!" Comenzaron a gritar todos los humanos con tanto ímpetu que Heimdall no podía comentar bien las jugadas, era obvio la fé que tenían prácticamente todos los humanos presentes en su última esperanza por su supervivencia. Mientras que los dioses se veían, raramente callados, expectantes, algunos todavía no superaban la muerte de Zeus, Thor y Shiva, las razones eran varias.

Ante lo callado que se encontraba Surt, Jesucristo dedujo que había logrado demostrar al gigante de fuego que tratar de provocarlo es totalmente inútil, ahora tendría que trazar algún plan clave con un objetivo principal, que Surt se desprenda de su espada, y tenía una manera, extremadamente arriesgada, pero podrías funcionar.

Mientras pensaba en esto, tuvo que volver a saltar ágilmente para evitar ser convertido en cenizas, lo bueno de esto es que parecía que Surt era alguien de movimientos lentos y, hasta cierto punto, destacaba su confianza, pues no parecía estar luchando con todas sus fuerzas.

Después de este esquive, rápidamente corrió hasta situarse en una esquina de la arena, llamando la atención de Surt, el cual, demostrando que no es un completo idiota, con su mano libre lanzó fuego hacia un lado mientras con la otra usaba su espada, reduciendo las direcciones en las que sería posible esquivarlo, y aunque logró esquivarlo, Surt cada vez lo estaba acorralando más, o eso pensaba el gigante de fuego.

Llegaron a un punto en que Surt finalmente lo acorraló después de que Jesucristo literalmente corriera de una esquina a otra de la arena, pero el representante de la humanidad había hecho esto a propósito, necesitaba pasar por todas las esquinas para preparar una de sus mejores técnicas aprendidas una vez resucitó.

"Ya debe de estar todo preparado" Susurró Jesucristo, notando a Surt sonreír, pues pensaba que había ganado y que su rival no tenía escapatoria, de hecho, todo el mundo parecía creer eso.

"¡Surt parece haber logrado dejar sin escapatoria a Jesucristo! ¿Será esto el Jaque Mate de no sólo esta ronda sino del torneo en general?"

"¿Dónde quedó tu determinación de antes?" Después de estos minutos en silencio, Surt decidió regodearse antes de terminar el trabajo, creyendo que no había nada que él pudiera hacer, pues él ya estaba preparando su espada mientras grandes barreras de fuego tapaban sus posibles rutas de escape.

"¡Llegó el momento!" Gritó Jesucristo mientras, inesperadamente para todo el mundo, una copa con un líquido rojo y un trozo de pan aparecían, estando el alimento flotando sobre la copa con el líquido carmesí.

"¡El cuerpo y la sangre de cristo! ¡Crucifixión final!"

Gritó Jesucristo al mismo tiempo que comenzaban a brillar las distintas esquinas de la arena, allí, el representante de la humanidad había soltado clavos por el suelo, pero no cualquier tipo de clavos, sino los que le pusieron a él al crucificarlo.

Surt no perdió el tiempo y le dió completamente igual las palabras de Jesucristo, tratando de acabar con él, pero una fuerza gigantesca empujó el cuerpo de Surt hacia atrás, sorprendiendo a éste.

"¿Qué? ¿Qué es esto?" Exclamó Surt mientras esa fuerza lo continuaba empujando, todos quedaron con la boca abierta cuando una cruz hecha de un material desconocido apareció al mismo tiempo que los clavos desaparecieron, siendo una especie de invocación de un solo uso que su padre le dijo que debía de usar cuando no le quede otra opción.

"¡¿Qu-Qué está sucediendo?! ¡¿Qué es esa cruz celestial?!"

El público quedó en silencio de pura sorpresa mientras Surt luchaba para resistirse, pero al final acabó con su espalda contra la cruz que no pareció fundirse al hacer contacto con su cuerpo, por lo que está hecho de material angelical.

En unos segundos, las manos de Surt quedaron pegadas en los extremos de la cruz, haciendo que al gigante de fuego se le caiga su espada.

Jesucristo, con una mirada serena, le dió un sorbo a la copa y también tragó un poco del pan en su interior, esto provocó que el cuerpo de Surt comience a retorcerse, la cruz, con un brillo, parece que le estaba proporcionando dolor en el interior de su cuerpo. Por cada sorbo, su propia sangre se vuelve nociva y dañaba sus órganos ígneos y cada trozo de pan tragado retorcía y dañaba sus músculos y huesos, así hasta que el enemigo muere, esta es la técnica más dañina de Jesucristo.

"¡La batalla ha cambiado drásticamente, ahora parece que Jesucristo está por dar el golpe final a la ronda y al torneo!"

"Jesucristo continuaba consumiendo la bebida y el pan, aumentando el dolor de Surt, el cual cada vez estaba más asustado ante la idea de morir.

"¡No moriré!" Gritó Surt mientras su cuerpo comenzaba a brillar, ese brillo era raro, pues parecía que en su cuerpo en llamas había una especie de polvo implantado en su piel ígnea.

Ese brillo pasó a convertirse en un resplandor rojo que cegó a todo el mundo, incluyendo a Jesucristo.

Cuando el resplandor se desvaneció, todos observaron que Surt rompió la cruz angelical al mismo tiempo que Jesucristo notaba que la copa que sostenía se rompía en mil pedazos y el pan comenzaba a desarrollar moho, la técnica más dañina del representante de la humanidad había sido interrumpida y había fallado estrepitosamente.

"¡Surt se ha logrado liberar milagrosamente! Aunque parece bastante herido"

"¿Tenías ese polvo por toda tu piel?" Preguntó Jesucristo, Surt estaba arrodillado, vomitando su sangre que derretía el suelo bajo él, realmente estaba herido, miró su espada ígnea y se dió cuenta que la gema incrustada en el mango estaba vacía, había agotado toda su reserva de polvo cósmico.

"Se supone que sería mi arma secreta para acabar con los dioses infinitos, maldito... ¡Ahora todo el polvo cósmico que he estado recolectando durante este tiempo se ha ido a la mierda!" Gritó Surt con furia mientras recordaba todo lo que vivió para llegar a este momento, y quién le informó de todo.

(Flashback, Abismo más profundo del infierno, hace muchos milenios)

El gigante de fuego despertó encadenado en un lugar desconocido, parecía el fondo de un pozo, pero estaba mucho más oscuro a excepción de una llama inférnica en el centro de la sala, fue entonces que recordó lo que le sucedió, había sido vencido por los dioses nórdicos y, ante su imposibilidad de asesinarlo, parece que lo han confinado y encerrado aquí.

"¡Hijos de perra! ¡Libérame ahora mismo,maldito viejo tuerto!" Gritó, sabiendo que, aunque Thor fue el más clave en su derrota, estas cadenas parecían ser cosa de Odín.

"No te esfuerces, nadie puede escuchar lo que dices" Dijo una voz que llamó la atención al gigante de fuego, era una especie de arcángel, con alas negras en su espalda, cuernos de cabra en su cabeza, cabello grisáceo y piel de color rojo, demostrando así su naturaleza demoníaca, éste estaba totalmente desnudo, sentado con la cabeza agachada, siento imposible ver su rostro con claridad.

"¡¿Y tú quién eres?!" Gritó Surt con furia, el demonio contestó con la voz muerta.

"Soy Belial, y me temo decirte que este será tu nuevo hogar, tus amigos nórdicos te arrastraron aquí, en el fondo más oscuro del infierno" Explicó Belial, dejando con ira a Surt, Belial continuó hablando.

"Debes ser alguien bastante especial para que los nórdicos arriesguen sus vidas en traerte aquí y encadenarte, ¿Acaso eres una entidad apocalíptica o algo así?" El tono de voz de Belial era totalmente plano, sin rastro de emoción, de hecho, incluso confundió a Surt esa falta de emoción, pero decidió ignorarlo y centrarse en intentar escapar.

(Así pasaron muchos años, Surt no paraba de intentar destruir las cadenas que lo ataban al fondo del infierno mientras Belial se mantenía en silencio, parecía que eso estaba haciendo antes de la llegada del gigante de fuego, pero finalmente se rindió, había intentado de todas la maneras una forma de escape, pero ninguna había funcionado, estaba cansado, y fue entonces que, totalmente aburrido, decidió entablar conversación con Belial)

"¿Y qué haces tú aquí? No pareces encadenado" Preguntó Surt, haciendo que Belial respondiera sin levantar la mirada.

"Estoy aquí por voluntad propia" Esa respuesta provocó otro enojo más en el gigante de fuego.

"¿¡Por qué querrías estar en este agujero por voluntad propia!?" Preguntó Surt, provocando ningún tipo de reacción en Belial, pero contestó.

"Porque este lugar es el único en todo el universo donde los dioses infinitos no pueden acceder" Esas palabras dejaron en completo silencio a Surt, sabía quiénes eran los denominados *dioses infinitos* y su absurdo poder capaz de manipular el universo mismo si así lo desean, ¿De verdad no su omnipotencia no es capaz de llegar al pozo más profundo del infierno?

"¿Te quieren matar?" Preguntó Surt con cierta diversión en su voz, ¿Qué puede decir? Es un completo sádico, Belial contestó con neutralidad.

"Sé cosas que no se deberían de saber, por ello, si salgo de este lugar, los dioses infinitos no dudarán en silenciarme" Explicó el demonio con una extraña y diminuta sonrisa, seguramente le gustaba entablar una conversación después de haber estado solo durante a saber cuanto tiempo.

"Entonces sí que estás jodido, ¿Cómo has logrado obtener esa clase de información?" Surt era alguien curioso también, sobre todo ahora que no tenía a nadie más con quién entablar una conversación.

Belial, finalmente levantó la cabeza por primera vez desde que lo conoció, tenía el rostro completamente desfigurado, le faltaba la piel, dejando su mandíbula expuesta y sus globos oculares sin párpados, algo simplemente grotesco que provocaría vómitos a cualquiera que lo viera, pero para Surt no fue el caso, había visto peores.

"No me interesa revelar información prohibida, únicamente diré que yo trabajaba para los dioses infinitos como un ángel, me revelé junto a otros de mis compañeros, pero yo fui el único superviviente, aunque no salí ileso" Explicó brevemente Belial, interesando bastante a Surt, francamente, toda historia relacionada con violencia era de su agrado.

El gigante de fuego rió de repente, recibiendo una mirada fija de Belial, que no comprendía la razón de su diversión.

"Tienes valor para revelarte contra los seres más poderosos de la existencia y vivir para contarlo. ¡Me agradas!" Admitió Surt mientras continuaba riendo sin parar, haciendo que la mandíbula de Belial logre curvarse hacia arriba, pareciendo otra especie de sonrisa.

(Tras este momento, Surt y Belial parecieron mantener algún tipo extraño de amistad, no les quedaba de otra, de todos modos, pues eran la única compañía del otro. Ocasionalmente bajaban demonios en busca de conocimiento, pero Belial solo los compartía con aquel que realmente lo mereciera, los que no lo considere, eran derretidos lentamente como si se tratasen de una vela con solo su mirada, agradando a Surt el estar usando métodos tan sádicos. Cada vez que Belial decidía compartir sus conocimientos siempre advertía que no se hacía responsable si recibía una visita desagradable de los dioses infinitos, incluso advirtiendo a Surt que se tape los oídos para no tener dicha información riesgosa, pero todo cambió un día, muchos años después)

Era una rutina habitual en ambos residentes del pozo más profundo del infierno, completo silencio hasta que Surt, eventualmente, empezaba una conversación y Belial le contestaba, más el ángel caído nunca empezaba a hablar por sí mismo, irritando al gigante de fuego varias veces, pero eso cambió cuando ambos observaron una especie de polvo descender hasta su posición.

"¿Qué es eso?" Preguntó Surt con extrañeza, pero ese sentimiento cambió cuando Belial se levantó abruptamente, gritando como un demente.

"¡Polvo Cósmico! ¡Atrapa todo el que puedas y espárcelo por todo tu cuerpo!" Surt hizo caso a la órden de Belial, el solo hecho de verlo levantarse y gritar de esa manera le era motivo suficiente.

Surt, dentro de su reducida movilidad por las cadenas en su cuerpo, logró atrapar bastante polvo y comenzó a esparcirlo por su cuerpo ígneo. Al principio no sintió absolutamente nada, pero tras unos segundos, un gran brillo comenzó a hacerse presente, sintiendo Surt una sensación de poder nunca antes experimentado extenderse por todo su cuerpo.

"¡Esta sensación es genial!" Gritó Surt mientras comenzaba a tirar de las cadenas, comenzando a romperlas un poco, pero, en cuanto las rompió, como si se tratase de algo ya calculado, el doble de cadenas lo apresaron nuevamente, inmovilizando su cuerpo. Pero al gigante de fuego no le importaba, pues el sentimiento de poder que sentía era de otro mundo.

"¿¡Qué es este polvo exactamente!?" Exclamó Surt, totalmente vitalizado de nuevo, Belial negó con la cabeza en respuesta.

"Información peligrosa" Respondió simplemente, haciendo que Surt no aguante más y cometa una decisión que cambiaría su destino para siempre.

"Estoy listo, dime la información prohibida, me importa una mierda las futuras represalias" Declaró Surt, sorprendiendo a Belial, quién volvió a tomar su posición sedente de antes y se mantuvo en silencio durante varios minutos.

"¿Estás seguro?" Fue lo único que salió de su boca luego de ese tiempo de espera, recibiendo una respuesta más ansiosa y, por ende, más agresiva de Surt.

"¡Tú suelta la información! ¡Lo que me ocurra es problema mío!" Exclamó, provocando un suspiro de Belial antes de comenzar.

"Ese polvo que te has esparcido por el cuerpo, son los restos de un alma destruida" Esa información hizo que Surt diera una mirada de interés, estando en silencio para que Belial continuara.

"Ocurre cuando un alma, ya sea mortal o divina, es destruida a raíz de diversos factores, desintegrándose completamente todo lo que solía ser ese ser y pasar a convertirse en una parte más del cosmos, volver a los brazos de los dioses infinitos como parte del universo" Cada palabra que salía de la boca de Belial interesaba más a Surt, continuando en silencio.

"Aún así, se cree que los dioses infinitos son capaces de rehacer la muerte permanente y definitiva, pues la esencia de lo que eras ahora forma parte de su mismo ser, el cosmos, pero nunca se ha llegado a probar" Esas afirmaciones hicieron que Surt no se contenga y pregunte una duda.

"¿Entonces por qué ha llegado polvo cósmico aquí abajo?" Esa pregunta hizo que Belial suspirara, parecía angustiado al mismo tiempo que relata todo esto.

"Hay algunas ocasiones en las que, cuando un alma demasiado oscura se convierte en polvo cósmico, los dioses infinitos no la aceptan como parte de ellos nuevamente, dejándola al aire, donde es atraída por el aura de muerte y desesperación del infierno, llegando aquí abajo. Este polvo es la única debilidad conocida de las armas de los ángeles al servicio de los dioses infinitos, lo sé bien porque yo formé parte de ese escuadrón de sirvientes" Surt asintió, recordando esa historia sobre cómo, en consecuencia, perdió la piel de su rostro.

"No se sabe con certeza qué tan fuerte se puede ser con el polvo corriendo por tus venas y por tu cuerpo, pero, una cosa es segura, cuanto más polvo cósmico reunas, más poderoso serás y representarás una amenaza mayor para los dioses infinitos" Terminó de hablar finalmente Belial, dejando a Surt pensativo durante unos minutos, hasta que, después de ese tiempo de reflexión, una sonrisa sádica y despiadada se apoderó de su rostro.

"Reuniré cuanto más polvo posible y asesinaré a los dioses infinitos, una vez ellos muertos, ¡Nadie podrá sobrevivir!" Esos gritos de sadismo provocó desconcierto en Belial, era un demente, quiere exterminar a seres incorpóreos que forman el universo, pero, aún así, decidió quedarse en silencio.

"¡Cumpliré el propósito de mi existencia! Solo necesito paciencia" Habló Surt mientras reía dementemente, haciendo que Belial suspire, pasivo y expectante de cómo terminará esto.

                                                              (Fin del Flashback)


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Bueno, hasta aquí el capítulo, espero que os haya gustado, me gustaría saber vuestra opinión en los comentarios ahora que estamos en los capítulos finales. 

La pelea se está desarrollando de forma muy igualada, y ya está contestada la duda sobre el polvo cósmico, o al menos superficialmente. 

Todavía quedan cuestiones pendientes, como el desenlace de Göll con Nut, por lo que permanezcan ansiosos por el final. 

Ahora, sin nada más que decir, adiós. 

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