El sonido de las voces estudiantiles inundaban el lugar, haciendo que el que quisiese hablar tenga que gritar hasta por la más simple frase.

-¿Lo has oído? -habló una chica de tez morena-. han ingresado a Knuckles al equipo de Rugby ¡Es genial!

-Seguro que nos llevamos otra humillación. El equipo nunca ha sido bueno en este deporte ¿Por qué crees que requerían otros dos jugadores, a mitad de año? -respondió la chica al lado.

-Oh vamos. Ten algo de confianza en tu equipo. Aunque, también oí que ingresó un corredor suplente.

-Ah, también lo oí. ¿No es el sujeto que entrenaba como loco el otro día? -preguntó curiosa.

-Ese mismo -respondió con alegria- no creo que pueda servir placando, pero dicen que corre... uff.

-Tendré que seguir tu consejo -rodaba los ojos con una sonrisa- tener fé.

Sin fin de personas se encontraban esperando para espectar el partido, siendo tanto del instituto local como visitante.

El partido comenzó, todos estaban al tanto de lo que pasaba. Unos gritaban para animar a su propio equipo, otros abucheban ante el placaje demasiado bruto de ciertos jugadores, y otros pues, solo tenían los ojos en las animadoras.

Todos disfrutaban del momento, siendo la excepción Sonic, quien moría de aburrimiento sentado en la banca, esperando y casi deseando que alguno de su equipo sea lesionado para poder entrar.

Aunque ese no era el motivo para que haya querido entrar al equipo de Rugby. Claro que en alguna oportunidad podría correr que era lo que más le gustaba, pero era por Amy que había deseado tan tercamente entrar, pues según lo que dijo Rouge: "Las animadoras solo se juntan con deportistas" y si esa era la condición, el lo haría para poder recuperarla. 

-A Amy se le da muy bien-comenta Silver admirando el baile de las chicas.

-ejem. ¿Puedes prestar atención a lo que estamos batiendo?-cuestiona Blaze abriendo su libreta de apuntes-esto es muy importante. Agg, nos deberíamos haber quedado en la biblioteca, con este escándalo es imposible.

-Pero yo debo estar aquí para vigilar que Sonic no se mate-Dice Tails.-En fin, como iba diciendo, he descubierto un par de detalles sobre el transporte de las esmeraldas caos.

-¿Y bien?-cuestiona la chica con curiosidad.

-Debemos volver justo el mismo número de personas que llegamos, de lo contrario cobraría una gran sobra de poder y el agujero que crearía podría hacer que chocaran ambas dimensiones.

-wow-suspira el albino con preocupación.

-y eso no es lo peor-continua el rubio-Las esmeraldas, al no estar en su dimensión original, están perdiendo sus poderes, igual que nosotros, solo que muy lentamente.

-Tendremos que darnos prisa en hacerles recordar a los demás.—piensa al adolescente-¿Quien queda?

-Eggman, Cream, Rouge, Knukles y...Shadow...-Murmura al ver al azabache frente al grupo de animadoras hablando con una de ellas.

La chica era rubia, de piel pálida y de unos intensos ojos azules. Esta sonreía alegremente y miraba al chico con ternura.

-¿Quién es ella?

-Oh, ella está en mi clase de matemáticas,-explica Blaze-creo que se llama Lucy.

-¿No creeis que se parece a alguien?

-¿A qué te refirió, Tails?

-A María Robotnick. Es totalmente igual.

-Puede que intente llenar ese gran vacío que tiene en su interior con esa simple humana.-Propone la chica-Esto puede resultar un problema...

Mientras tanto, Sonic miraba a Amy, animando y haciendo todo tipo de acrobacias las cuales realizaba no perfectamente, pero bien.

Se dio cuenta que esta lo miraba ocasionalmente, volviendo a sus acrobacias nerviosa.

Sonic comenzó a ver con esmero el cuerpo de Amy, inspeccionando la vista sin perderse detalle alguno. Agradeció que los trajes fueran escasos para apreciar aquel cuerpo, ese pequeño y delgado cuerpo que no poseía grandes atributos, pero que para él, se le hacía tierno e incluso sexy.

«¿Pero qué estoy pensando?» Sep preguntó a sí mismo al mismo tiempo que su rostro se enrojecia.

-Hedgehog, Alan quedó fuera y ahora te toca. -le dijo con cierta preocupación.

-Ya, pero...¿Qué se supone que tengo que hacer? 

-¿Qué acaso no sabes de que va el Rugby? -cuestionó con cierta molestia.

-En mi defensa, no sabia ni que era un teléfono móvil.

-Tú solo corre hasta la línea, sin pasar el balón hacia adelante, y si es que lo necesitas pásalo hacia un lado o atrás ¿Entendiste? -refunfuñó.

-Ya, por atrás y no adelante. Suena mal pero lo haré. -dijo burlón para salir corriendo y entrar al campo.

Toda la atención se posó en él, pues aparte de su entrada como toda una estrella de rock, el traje que usaba le quedaba ridículamente grande.

-¿Qué hace este idiota aquí? -preguntó Knuckles, burlón según su tono.

-Este idiota te va a salvar el trasero, Knux -respondió Sonic sonriente, denotando bastante confianza en su hablar.

Se posicionó igual que lo hacían sus compañeros, fingiendo saber lo que hacía.

El juego volvió a comenzar y tan pronto lo hizo, a Sonic se le pasó el balón y el corrió tan rápido como ese cuerpo se lo permitía.

Knuckles empalidecio cuando Sonic comenzó a correr, quedándose en su sitio y sin importarle la realidad.

-Sonic... -alcanzó a decir para que de inmediato un silbato sonará y que todos se pongan a celebrar, pues Sonic había anotado el punto ganador.

-¿Qué rayos? -se cuestionó a sí mismo- ¿Por qué traigo puesto este traje de payaso? 

Observó su alrededor y se espanto más ya que no estaba en su isla. Pero logró ver algunos rostros familiares y una de ellos, que no paraba de mirarle.

Sonic luego de aquel punto ganador, quiso ir a hablar con Amy, pero estando a solo metros de ella, una multitud se le aproximó.

-¡Hurra por Sonic!

-¡El mejor!

-¡Eres un orgullo para esta institución, hijo!

Trató de alcanzar a Amy pero la perdió de vista cuando más personas se le acercaban, le aplaudían y alagaban.

Y aquí tenemos un capítulo más escrito por JulieTomato y editado por mí. Espero que les esté gustando.