#2 - El ladrón y el policía

Sus manos temblaban al llegar a su hogar, ocultando dentro de su bolso ese paquete tan ilegal (Para ella) que creía que en cualquier momento su madre le pediría que abra su maleta para encontrarse con "eso" dentro. Intento caminar lo mas normal posible, pero una vez que faltan unos pocos escalones para llegar a la planta alta, salió corriendo a su habitación y se encerró ahí, trabando la puerta. 

Con cautela, como si fuese el arma mas peligrosa del mundo, abrio su bolso sacando ese paquete de adentro. Abrio la caja encontrandose con un traje azul, acompañado de todos los complementos que completaban el conjunto. 

Una sonrisa se pinto en su rostro y sintio como su excitacion comenzaba a hacer algunos estragos en su cuerpo. De solo pensar que esa noche Inuyasha seria sometido a ella, era algo que llenaba cada celula de su ser de emocion. 

Estaba mas que claro que amaba que ese hanyou demuestre su naturaleza salvaje con ella, pero tambien era su fantasia dominarlo y que, rogando, le pidiera que le entregara todo de ella. 

De un salto se levanto de su cama para preparar un pequeño bolso. Esa noche, a pedido de ella, pasarian en un hotel de amor del cual hacia una semana habia reservado la habitacion. Solo faltaba que Inuyasha hiciera acto de presencia y, por intuicion, sabia que no tardaria demasiado en aparecer. 

Entro a la ducha con alegria (Y algo de excitacion) y se dio una ducha rapida. 

Esa noche Inuyasha No Taisho, seria sometido bajo el poder policial. 

***

Al abrir la puerta se sorprendieron de lo lindo que se veia todo. Un ventanal enorme adornaba el centro de la habitación, y frente a este, una cama igual de gigante. El techo y una pared estaban cubiertos de espejos, lo que permitía una mejor visión de todo lo que estaba por ocurrir.

La azabache, sin perder tiempo, se encerro en el baño, pidiendole al hanyou que la espere.

Con sus manos temblorosas se coloco ese conjunto y al verse al espejo se sintio sexy. Dejaba piel expuesta, marcaba sus curvas y le daba un aire a travesura que le encantaba. Ademas la cremallera que llevaba por la parte de adelante, la habia bajado hasta la altura de su abdomen, dejando sus pechos apenas cubiertos*

Si esto no enloquecia a su novio, nada lo haria.

Esos dias previos se habia encargado de que Inuyasha supiera que era un policia y que función cumplia, asi que ahora podrian llevar a cabo su juego como ella lo deseaba.

Con confianza abrio la puerta, dejandose ver y el peliplata no pudo hacer mas que abrir la boca al verla alli, enfundada en un traje muy pequeño y ajustado, que dejaba sus largas piernas y sus pechos al descubierto. Su miembro era el mas feliz al verla, porque se encontraba firme y saludando.

- Queda bajo arresto, sr. Inuyasha. Todo lo que diga podra y sera usado en su contra, asi que mantengase callado - Comenzo con el juego, mientras caminaba hacia él con pasos lentos y sensuales, sintiendose poderosa por la mirada de admiración que ese joven le daba - Tendré que catearlo para comprobar que no tenga nada que pueda comprometer la seguridad de alguien. De pie.

El hanyou asi lo hizo. Ver esta nueva etapa de Kaghome lo ponia duro como roca. Era sexy, amenazante, demandante y por Kami, como le gustaba que fuese asi. Ahora comprendia porque esos días le habia comentado lo de la policia de su epoca, y algo llamado "juego de rol" para parejas. En ese momento no lo comprendia, ni siquiera le veia sentido, pero ahora todo quedaba claro y entendia por demas de bien los demas.

La azabache comenzo a pasar sus manos por el cuerpo de él, desde sus hombros, pasando por su espalda, moviendose hacia su vientre donde palpo algo. Metio su mano en el bolsillo del peliplata, sacando un paquetito de caramelos mentolados.

- ¿Que tenemos aqui? - Se paro frente a él, mostrandole esa paquete que ella misma se habia encargado de colocarselo alli - ¿Esto es suyo?

- Te juro que no se de donde salio - Kaghome lo miro fijamente y, señalandolo con su dedo, lo amenazo.

- Hableme con propiedad y trateme con el respeto que merece la autoridad - Inuyasha jadeo por lo bajo al escucharla. Habia descubierto cuanto amaba que Kaghome lo tratara asi.

- Disculpe, señorita oficial. No se de donde salio eso.

- Entonces esto sera decomisado - Lo dejo a un lado, sobre la cama y volvio a colocar sus manos sobre su cuerpo, siguiendo con el cateo. Se arrodillo a sus pies, mirandolo a los ojos y comenzo a subir sus manos por su piernas con mucha lentitud. Inuyasha sentía que en cualquier momento explotaria en sus pantalones. No podia estar mas sexy, maldita sea.

Sus manos siguieron subiendo hasta llegar a su pelvis. La azabache sonrio y con una lentitud casi diabólica, acerco sus dedos hacia la polla del peliplata que siseaba por lo bajo, apretando sus dientes.

- Oficial - Gimio al sentir como tocaba su miembro con mucha suavidad. Por favor, necesitaba que se lo agarre con fuerza.

- ¿Que tiene aqui? - Sin recato alguno tomo su pene con su mano, apretandolo con algo de fuerzas e Inuyasha gimio por lo bajo, apretando sus dientes - No puedo distinguir que es - Fingio mientras pajeaba de arriba abajo su miembro con mucha suavidad. Estaba disfrutando de ver a su novio con su rostro colorado de todas las sensaciones que estaba recibiendo.

- Maldicion - Jadeo, apretando sus garras contra la palma de sus manos. Esa niña lo estaba volviendo loco por completo.

- Tendre que quitarle la ropa para verlo mejor - Y asi lo hizo. Con la misma lentitud, le quito los pantalones, dejando ver su miembro duro y parado que la saludaba. Kaghome gimio por lo bajo, apretando sus piernas para que la humedad que sentia no comenzara a gotear - No logro distinguir que es. Tendre que probarlo - Sin darle tiempo a él para analizar sus palabras, lamio su pene escuchando un rugido de su parte. Poco a poco fue engullendo esa vara de carne hasta llegar, con mucho esfuerzo, hasta casi la base de la misma. Como amaba el sabor que tenia.

Inuyasha no podía pensar con claridad al tenerla alli arrodillada, chupándosela, asi que guiandose por su instinto, tomo su cabeza con sus manos y comenzo a follar su boca con algo mas de rapidez. La azabache gimio alto al sentir eso amaba que lo hiciera y se dejo llevar por unos minutos, pero si queria seguir con su juego, tenia que detenerlo alli.

Con suavidad tomo las manos de él y las alejo de su cabeza, al igual que alejo su boca de su pene. Tenia que aprovechar la poca cordura que le quedaba, si no mandaria todo al carajo, se pondria en cuatro sobre la cama y le rogaria a ese hanyou que la tomase con salvaje, como le gustaba a ambos.

- No puede atacar a una autoridad de esa manera, sr. Inuyasha - La azabache se paro, mientras tomaba algo del cinturón de su traje - Tendre que arrestarlo - Le mostro una esposas de metal al aludido, mientras sonreia con soberbia. Esa era la parte del juego que mas deseaba - Recuestese sobre la cama y extienda sus manos sobre su cabeza.

Inuyasha sonrio al saber que era lo que su niña deseaba asi que sin chistar lo hizo. Se recosto, estiro sus manos y pudo sentir el acero frio sobre su muñeca. Escucho como la cadena chocaba contra el caño de la cabecera de la cama, y luego como ese aro apresaba su otra extremidad.

- Soy inocente, oficial - Jadeo el peliplata, moviendo un poco esas esposas. Que facil seria romperlas, pero la verdad que ese juego le agradaba por demas.

- Eso lo decidire yo, sr. - La azabache se tomo unos minutos para apreciar esa imagen. Inuyasha se encontraba apresado en la cama, con esa sonrisa soberbia que tanto amaba pintada en su rostro y casi desnudo por completo. Se arrodillo a su lado y desato su casaca, dejando todo su vientre al descubierto. Ahora si podia apreciarlo por completo y, por Kami, como le gustaba - Es hora de su cena - Tomando uno de las pastillas mentoladas que habia comprado, se la coloco en la boca al hanyou - ¿Le gusta?

- La verdad que no demasiado - Y era verdad. Ese sabor no era su preferido, y menos con sus papilas gustativas que eran muy sensibles.

- Entonces tendre que darte alguna otra cosa - Una sonrisa gatuna se pinto en su rostro, mientras se quitaba sus zapatos. Se subio a la cama, parandose con sus piernas a cada lado de su cuerpo. Sin dejar de mirarlo, comenzo a quitarse su ropa interior, para dejarla en el suelo. Inuyasha gruño al ver su vagina roja y húmeda por la excitación que estaba sintiendo. Lamio sus labios inconscientemente sabiendo lo que se avecinaba - ¿Quieres?

- Si. Quiero - Jadeo, sintiendo con su lengua picaba de solo pensar en saborear esa parte tan secreta.

- Esta vez te complacere - Y con cuidado se arrodillo sobre el rostro de Inuyasha, dejando su vagina abierta para que él pudiera saborear de su jugo. Con una lentitud diabólica el peliplata lamio sus rosados labios, logrando que una corriente atravesase a la azabache de pies a cabeza al sentir como el frio de la lengua de él contrastaba con el calor de su vagina. Una sensación que jamas habia sentido, pero que deseaba volver a hacer. Ella comenzo a mover sus caderas dando lugar a toques y lamidas que eran de su agrado.

Inuyasha, desquiciado de placer, comenzo a morder con suavidad su clítoris y ella tuvo que prenderse del espaldar de la cama para no dejar caer todo su peso sobre él. Sus gemidos se convirtieron en gritos, mientras sus caderas cobraban más velocidad.

Haciendo alarde de su técnica, el hanyou comenzo a penetrar su orificio con su lengua, mientras utilizaba su nariz para frotar su clítoris. Kaghome sintió que en cualquier momento iba a desfallecer de placer. Su orgasmo se encontraba en la puerta, podia sentirlo.

- Muerdeme - Jadeo en una orden que el peliplata acato al instante. Con un poco mas de fuerza que antes, mordio su clitoris una, dos, tres veces y como si de un rayo se tratase, el orgasmo llego al cuerpo de la azabache que grito con fuerzas y se sento sobre el pecho de él, porque sus piernas fallaron.

Su respiración estaba acelerada y sentia todo su cuerpo temblar mientras los estragos de placer aun la recorrian. Inuyasha la miraba con soberbia, mientras terminaba de degustar el dulce sabor de si vagina. Lo amaba, como amaba todo lo que ella le daba.

- Deliciosa cena, oficial - Susurro, sintiendo como su miembro palpitaba por atención.

- Creo que ahora yo me servire de cenar - Dandole la espalda, se arrodillo sobre su pecho, dejando su rostro sobre el miembro de él. Podia contar cada una de las venas de su polla y se le hacia agua la boca al verla tan dura - Provecho - Murmuro y comenzo a lamerla, escuchando un gruñido animal por parte de su novio, lo que la excito aun mas.

Como amaba su sabor y su textura algo venosa. Y que este tan dura, casi a punto de explotar, solo lograba que su deseo de que acabase en su boca, aumentara. Y sabia que no hacía falta mucho mas para ello.

Mientras la chupaba, se ayudaba con sus manos, pajeandolo o acariciando su prepucio solo para escuchar como sus bufidos aumentaban. Parecía un animal salvaje muy enojado, y eso le encantaba.

Pero no contaba con que el hanyou, teniendo cerca nuevamente su coño, comenzara a lamerlo y morderlo, sorprendiendola. Sus gemidos comenzaron a escapar de su garganta nuevamente, e Inuyasha sintio que esas vibraciones lo harian acabar.

Y asi fue. No hizo falta mas que una leve caricia en sus testículos, y que Kaghome gimiera con su polla en la boca, para que acabase con fuerza.

La azabache se sorprendio con el primer chorro, pero recibio todo en su boca, tragándoselo. El hanyou continuaba lamiendo su sexo, y ella se quedo alli unos segundos mas, notando como el miembro de su novio volvia a endurecerse.

Sentia su cuerpo caliente y necesitado. Las lamidas que le regalaba ese hombre la enloquecian, pero necesitaba sentirlo dentro suyo, así que se movio de ese lugar, para volver a girarse y colocarse sobre su miembro.

- Te necesito aqui - Susurro, mientras sus dedos ingresaban en su vagina, bajo la atenta y salvaje mirada del hanyou que a duras pena lograba controlarse para no romper esas cadenas y tomarla a la fuerza - Asi que tomare lo que me corresponde - Se arrodillo y tomando la polla de él con su mano, comenzo a meterla en su orificio con lentitud. Ambos gimieron al sentir esa union y Kaghome comenzo a moverse con lentitud, haciendo círculos con sus caderas mientras arañaba el pecho de él, sin dejar de mirarlo - Inu... - Gimio con calor, sintiendo como su cuerpo estaba casa vez mas pesado. Su excitación era demasiada. Necesitaba desahogarse.

Una nueva idea se le vino a la mente y detuvo sus movimientos, recibiendo una queja por parte del peliplata. Se movió de alli y le dio la espalda a su novio. Se coloco a los pies de la cama, apoyando sus codos sobre el colchón y parando su cola para que el hanyou viera todo su sexo, húmedo y caliente.

- Si logras romper esas esposas, soy toda tuya - Murmuro e Inuyasha sonrio. No hizo falta mas que un segundo para el ruido del metal romperse se escuchara, y la azabache sintiera el cuerpo de él sobre el suyo, adentrandose de un solo envión en su vagina - ¡Inuyasha! - Grito y al instante gimio profundo.

- Eres una perra - Susurro contra su oido, mientras golpeaba su utero, salia por completo y volvia a entrar con rabia. Una y otra vez. Kaghome se retorcia bajo sus manos y eso lo enloquecia aun mas al hanyou, que comenzo a aumentar su velocidad salvajemente, como le gustaba.

- Mas, Inu. Mas - Y sus deseos eran ordenes. Sus embestidas enloquecieron, al mismo tiempo que clavaba sus garras en la cadera de ella.

No hizo falta mucho mas para que la azabache sienta como su cuerpo se tensaba y un potente orgasmo la atravesaba. Cuando sus paredes comenzaron a apretar su pene, Inuyasha siguio el mismo camino, rugiendo al acabar.

Ambos cayeron sobre la cama, exhautos e intentando recuperar su aliento. Inuyasha se acerco a ella, besando sus labios con amor y hambre. Era tan bella, tan perfecta.

- ¿Te gusto todo esto, cariño? - Pregunto con suavidad la azabache, mientras se acostaba sobre su pecho.

- Es lo mejor que vivi en mi vida, cachorra - Beso su frente, pero al instante se movió, dejandola presa entre su cuerpo y la cama - Pero la próxima, deseo ser yo el que te ate a ti - Y sonrio, con esa sonrisa que le prometia horas y horas de placer y sexo... Mucho sexo.

***
Traje de policia:


***

Aqui la segunda historia!
Disculpen si tardo un poco en subirlas, pero estoy escribiendo todo desde mi celu porque mi compu se volvio a romper 🤦🏼‍♀️

Asi que hago lo que puedo para que todos los días tengan su historia.

Los amo!!!

Lin! ❤️

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top