seguimos con el maratón, disfrútenlo.

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—h-hyung... ¿pu-puede decir algo? —digo cuando tiene más de tres minutos sin hablar, ni moverse, solo acariciando mi labio en silencio y su respiración acelerándose al compás de la mía— s-si le molesta la idea, entiendo, u-usted no es un objeto sexual y no tenía porque habérselo dicho de esa man-

—cállate, chim. —y sin más termina juntando nuestros labios— no me importa ser usado por ti, jimin, tienes algo que me vuelve loco y no me deja pensar claramente.

—y-yo...

—haz silencio, cariño. —dice yoongi, acercando su rostro nuevamente— chim, y-yo necesito que estés seguro de esto. Anoche no bromeaba cuando decía que me gustabas, puede que haya estado borracho y fui impulsivo pero era totalmente sincero.

—h-hyung, si no hace algo ahora mismo empezaré a arrepentirme y saldré por esa puerta y haré como si esto no fuera pasado nunca.

—bi-bien, pero también me encuentro nervioso.

—podemos dejarlo para otro día. —subo mis manos a su pecho y cuando voy a empujarlo sus labios presiona los míos y yo gimo, cuando su lengua caliente invade mi cavidad bucal.

—quiero que estés seguro de querer hacer esto, jimin.

—estoy seguro, hyung.

—bien. —vuelve a besarme y mi estómago comienza a hormiguear cuando sus manos se meten dentro de mi camisa. Sus manos frías acaricia mi piel caliente y yo gimo. sus besos bajan a mi cuello, yo gimo y acaricio su cabello y le doy más acceso a mi cuello.

Las manos de mi hyung sube a por mí estómago y frotan mis pezones, yo jadeo mientras un corriente atraviesa mi cuerpo y siento mi sangre hervir en mis venas.

—chim, eres tan receptivo. Tus pezones sensibles. —dice yoongi risueño. Saca sus manos y quita mi camisa, agarra el bordillo de mi mono y suspira mirándome— veamos donde más eres sensible. 

Tenemos nueva portada y fue hecha por la diosa de -vvante