Capítulo 3
Mansión Wayne
14 de junio. 2007
12:00 am
Esa madrugada Nina se había puesto a acomodar su equipaje, ya se había dado una ducha y puesto el pijama, ya eran las tres de la madrugada cuando escuchó que alguien tocaba a la puerta:
-¿Quién es?-dijo sujetando su palillo para el cabello firmemente en su mano izquierda-
-Soy yo, Dick-contestaron del otro lado-
-Adelante Dick-dije ya más tranquila-
-¿Estás bien hermana?-preguntó entrando, tenía lagrimas cayendo por sus mejillas-
-Yo sí pero tú no, ¿qué te sucede hermanito?-pregunté intrigada levantándome-
-Nada...es solo...-dijo sollozando-
-¿Solo?-lo invité a continuar-
-Solo que no quiero que te vayas... No quiero que...me dejes solito...-dijo finalmente, llorando de nuevo-
-¡Dick! Oh... Dicky... ¿Quieres que te haga compañía? ¿Quieres dormir aquí conmigo?-ofrecí acercándome-
-Sí...-asintió frenéticamente- Y yo... también tuve una pesadilla... en la que tú morías igual que mis papás-dijo llorando cada vez más descontrolado- ¡No quiero perderte!-exclamó llorando a lágrima viva-
-Dicky... no me vas a perder... y jamás volverás a estar solito-dije abrazándolo para consolarlo y darle fuerza a mis palabras- Aunque yo no esté cerca siempre puedes contar con Bruce y Alfred, ellos te van a cuidar con tanto amor como el que siempre me han dado a mi ¿de acuerdo?-pregunté obligándolo a mirarme a los ojos-
-De acuerdo-dijo asintiendo secamente-
-¿Quieres dormir conmigo?-pregunté mirándolo a los ojos-
-Sí...-dijo simplemente-
-Ven vamos...
09:00 am
-Nina... levántate...-dijo alguien desde el interior de la habitación-
-Dick... levántate tú también...-repitió la voz-
-Ya voy...-dijo adormilada la pelirroja-
-Cinco minutos más...-continuó el joven azabache-
-Vamos... arriba los dos que se hace tarde...-dijo quitándoles la cobija de encima a los dos "hermanos"- Nina, te comprometiste a ir hoy al campamento...-insistió la voz-
-Mmm... es verdad...-dijo medio levantándose- Dick arriba, es hora de levantarse vamos...-añadió sacudiendo a su "hermano" por el hombro-
-Está bien... pero no quiero que te vayas...-insistió su "hermano"-
-Tengo que...
Durante la mañana el ambiente fue algo tenso, hasta que llegó el momento de partir, Nina se había duchado y ese día llevaba el cabello pelirrojo recogido como de costumbre y vestía con una camisa de tirantes amarilla, guantes de malla sin dedos, uno fucsia en la izquierda y uno negro en la derecha; una chaqueta de cowgirl sobre la camisa, unos jeans verde militar y unas botas negras que le llegaban a media pantorrilla; llevaba puesto además al collar que le había regalado Loki el día anterior. Bruce iba elegante, no trajeado como siempre sino más bien casual con una camisa de vestir azul clara y sobre esta una chaqueta café, unos jeans negros y zapatos de vestir de Prada; definitivamente Bruce Wayne era alguien que se veía bien con lo que se pusiese.
Él decidió conducir, puso el equipaje en el maletero de un deportivo negro.
-Bruce... yo...-intentó decir pero las palabras no salían de la boca de la pelirroja-
-Tranquila, tenemos tiempo...-dijo él captando la mirada de la niña-
-Gracias...-dijo ella volviendo al interior de la Mansión-
-¡NINA!-gritó Dick sorprendido al ver que su hermana aún no se había ido-
-Dick, mi pequeño petirrojo, no podría irme sin despedirme de ti-dicho esto beso la cabeza del pelinegro-
-No te vayas...-dijo él intentando no llorar-
-Tengo que irme, pero sólo será por el verano, volveré a casa...-dijo Nina intentando reconfortar a su hermano-
-¿Puedo ir contigo? Aunque sea a la entrada del campamento...-quiso saber Dick-
-No lo sé, le puedes preguntar a Bruce mientras yo voy a hablar con Alfred.
-Está bien...
A la chica la había tomado unos minutos encontrar al mayordomo en la cocina intentando contener inefectivamente algunas lágrimas y no por picar cebollas precisamente.
-Alfred... por favor no estés triste, regresaré al final del verano-dijo ella abrazando al viejo mayordomo-
-La voy a extrañar mucho señorita Nina...-dijo llorando- Prometo que la esperaré con su ratatouille caliente para que la deguste.
-Gracias Alfred, eres el mejor; un día de éstos voy a pedirte que me enseñes a prepararla.
Nina ya estaba de vuelta en el auto deportivo, dónde Bruce la esperaba para poder partir rumbo a Long Island Sound-Nueva York.
Ωn Wayne
14 de junio. 2007
12:00 am
Esa madrugada Nina se había puesto a acomodar su equipaje, ya se había dado una ducha y puesto el pijama, ya eran las tres de la madrugada cuando escuchó que alguien tocaba a la puerta:
-¿Quién es?-dijo sujetando su palillo para el cabello firmemente en su mano izquierda-
-Soy yo, Dick-contestaron del otro lado-
-Adelante Dick-dije ya más tranquila-
-¿Estás bien hermana?-preguntó entrando, tenía lagrimas cayendo por sus mejillas-
-Yo sí pero tú no, ¿qué te sucede hermanito?-pregunté intrigada levantándome-
-Nada...es solo...-dijo sollozando-
-¿Solo?-lo invité a continuar-
-Solo que no quiero que te vayas... No quiero que...me dejes solito...-dijo finalmente, llorando de nuevo-
-¡Dick! Oh... Dicky... ¿Quieres que te haga compañía? ¿Quieres dormir aquí conmigo?-ofrecí acercándome-
-Sí...-asintió frenéticamente- Y yo... también tuve una pesadilla... en la que tú morías igual que mis papás-dijo llorando cada vez más descontrolado- ¡No quiero perderte!-exclamó llorando a lágrima viva-
-Dicky... no me vas a perder... y jamás volverás a estar solito-dije abrazándolo para consolarlo y darle fuerza a mis palabras- Aunque yo no esté cerca siempre puedes contar con Bruce y Alfred, ellos te van a cuidar con tanto amor como el que siempre me han dado a mi ¿de acuerdo?-pregunté obligándolo a mirarme a los ojos-
-De acuerdo-dijo asintiendo secamente-
-¿Quieres dormir conmigo?-pregunté mirándolo a los ojos-
-Sí...-dijo simplemente-
-Ven vamos...
09:00 am
-Nina... levántate...-dijo alguien desde el interior de la habitación-
-Dick... levántate tú también...-repitió la voz-
-Ya voy...-dijo adormilada la pelirroja-
-Cinco minutos más...-continuó el joven azabache-
-Vamos... arriba los dos que se hace tarde...-dijo quitándoles la cobija de encima a los dos "hermanos"- Nina, te comprometiste a ir hoy al campamento...-insistió la voz-
-Mmm... es verdad...-dijo medio levantándose- Dick arriba, es hora de levantarse vamos...-añadió sacudiendo a su "hermano" por el hombro-
-Está bien... pero no quiero que te vayas...-insistió su "hermano"-
-Tengo que...
Durante la mañana el ambiente fue algo tenso, hasta que llegó el momento de partir, Nina se había duchado y ese día llevaba el cabello pelirrojo recogido como de costumbre y vestía con una camisa de tirantes amarilla, guantes de malla sin dedos, uno fucsia en la izquierda y uno negro en la derecha; una chaqueta de cowgirl sobre la camisa, unos jeans verde militar y unas botas negras que le llegaban a media pantorrilla; llevaba puesto además al collar que le había regalado Loki el día anterior. Bruce iba elegante, no trajeado como siempre sino más bien casual con una camisa de vestir azul clara y sobre esta una chaqueta café, unos jeans negros y zapatos de vestir de Prada; definitivamente Bruce Wayne era alguien que se veía bien con lo que se pusiese.
Él decidió conducir, puso el equipaje en el maletero de un deportivo negro.
-Bruce... yo...-intentó decir pero las palabras no salían de la boca de la pelirroja-
-Tranquila, tenemos tiempo...-dijo él captando la mirada de la niña-
-Gracias...-dijo ella volviendo al interior de la Mansión-
-¡NINA!-gritó Dick sorprendido al ver que su hermana aún no se había ido-
-Dick, mi pequeño petirrojo, no podría irme sin despedirme de ti-dicho esto beso la cabeza del pelinegro-
-No te vayas...-dijo él intentando no llorar-
-Tengo que irme, pero sólo será por el verano, volveré a casa...-dijo Nina intentando reconfortar a su hermano-
-¿Puedo ir contigo? Aunque sea a la entrada del campamento...-quiso saber Dick-
-No lo sé, le puedes preguntar a Bruce mientras yo voy a hablar con Alfred.
-Está bien...
A la chica la había tomado unos minutos encontrar al mayordomo en la cocina intentando contener inefectivamente algunas lágrimas y no por picar cebollas precisamente.
-Alfred... por favor no estés triste, regresaré al final del verano-dijo ella abrazando al viejo mayordomo-
-La voy a extrañar mucho señorita Nina...-dijo llorando- Prometo que la esperaré con su ratatouille caliente para que la deguste.
-Gracias Alfred, eres el mejor; un día de éstos voy a pedirte que me enseñes a prepararla.
Nina ya estaba de vuelta en el auto deportivo, dónde Bruce la esperaba para poder partir rumbo a Long Island Sound-Nueva York.
Ω
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