Sabía que te gustaría la tranquilidad que da la oscuridad, hace mucho tiempo que todo es oscuro. Sé que recuerdas como es el mundo, lleno de sufrimiento, ambición y crueldad. Sin dudas es mejor estar aquí.

¿Dónde estás?

Solo te puedo decir que estas en todos lados y a la vez en ninguno. Ese lugar donde no ningún rayo de luz que puede arruinar la tranquilidad que generara esperanza en este abismo sin fin.

Esperamos mucho tu llegada.

Continuamente te preguntaras que son los sonidos a tu alrededor, todos son muy confusos y lamentables, solo podrás escuchar penas y sollozos.

¿Quiénes son?

Personas que no lograron encontrar este lugar. Nadie sabe de donde proviene, ni cuánto tiempo ha pasado desde que se empezó a escuchar, llegaras a pensar que es irritante como las palabras que traía el viento pedían perdón por algo que ya no tenía solución, en ocasiones puede ser que tengas miedo. No te preocupes, ellos nunca lograran entrar aquí, él te protegerá.

¿De quién hablo?

Del hombre que está debajo del árbol, ¿lo puedes ver?, está saludándote.

Te recomiendo ir, no le gusta esperar.

Debajo de este árbol encontraras la paz que siempre quisiste.

No te avergüences por quien eres o lo que has hecho, todo aquí es irrelevante, tu nombre, tus logros, toda tu vida entera no vale nada.

Eres libre de ser tal y como quieres.

La oscuridad lamentablemente es muy temida por las personas que no quieren que te enteres de que aquí podrás empezar desde cero.

El sol ya no te sofocaría.

El mundo ya no te lastimaría.

Lo único que tienes que hacer es sentarte debajo de ese árbol, justo como lo hizo el.

¿Quién es él?

Él es todo y a la vez es nada, es igual a ti. Si en su vida hizo cosas buenas o malas ahora ya no importa.

Debes ir a su lado, no hay otra manera de sentir paz, ya deberías saberlo.

Tarde o temprano te sentaras debajo de ese árbol.

Es imposible evitarlo.