La noche en que te conocí (Thomas)
➖➖➖➖➖➖➖➖➖➖➖
Reproducir la canción cuando aparezca el 🎶
➖➖➖➖➖➖➖➖➖➖➖
-¡Thomas! ¿Qué te ocurre hoy? Estás muy distraído.- gritó mi entrenadora Ava.
-L-lo siento.- me disculpe acercándome a ella.
-Intenta otra vez. De cero.
Se reprodujo la música una vez más.
Me deslicé y al momento de hacer un salto di mi cara al suelo y ya no aguante más.
-¡A donde vas!- gritaba mi entrenadora pero sólo la ignore. Tome mi bolsa deportiva y deshaciéndome de los patines salí de ese lugar. Pero al momento sentí que me detenían.
-Hey, Thomas ¿todavía sigues mal?- preguntó Noah.
-No es fácil, ¿sabes?
-Lo sé pero no te puedes estar desquitando así como así y yéndote cada que te de la gana.- me reprimió.
-Sólo...- sentí que lágrimas amenazaban en salir.- Sólo déjame esta vez.- mi voz a penas se escuchó por ser ahogada en un sollozo.
Noah suspiro soltando mi mano.
-Pasa hoy a mi casa. Yo hablaré con Ava.
-S-sí, gracias Noah.
-Para eso están los amigos~
Asentí y me fui del lugar con la cabeza gacha evitando que cualquiera me viera llorando.
¿Mi departamento siempre se vio tan amplió y vacío?
Ya no había rastro de aquel hombre que aseguró amarme pero a su primera oportunidad me abandono.
Camine por el pasillo para adentrarme a mi habitación. Todo estaba oscuro pues no quería encender las luces y el día casi estaba por terminar.
Miré la cómoda que estaba cerca de la cama matrimonial que solía compartir con él. Sobre aquel mueble se adornaban las fotografías enmarcadas de nuestros mejores momentos.
-Debería deshacerme de esto.- murmuré pero en vez de eso tome entre mis manos mi foto favorita. En ella, Alek y yo, estábamos abrazados en frente del Big Ben.
Ese día fue cuando Alek me pidió que viviéramos juntos. Ese día fui tan feliz...
Pero ahora...
Puse boca abajo esa fotografía junto con las otras.
Me dirigí a mi cama recostándome en ella. Otra foto. Esta era una que nos tomaron en nuestro primer año juntos como pareja. La puse boca abajo también.
Cerré mis ojos dispuesto a dormir pues me encontraba cansado e irritado por llorar hace unos momentos.
Había olvidado por completo lo que Noah me había pedido.
Un golpeteo insistente a la puerta me hizo despertar.
-¿Quién es?- me dije a mí mismo.
Me acerqué a la entrada abriendo la puerta donde apareció Noah con una expresión de insuficiencia.
-Te dije que fueras a mi casa.- dijo molesto adentrándose a mi departamento y sentándose en el sofá.
-Lo había olvidado. Me quede dormido hace unos momentos.- respondí recargado en la pared de la entrada.
-¿Momentos? ¡Si ya van a ser las Díez de la noche, Thomas!
-¿Eso qué importa?- replique molesto yendo a la cocina.
-Importa porque tenemos que ir a un lugar.- contestó siguiéndome.
-¿Qué lugar?- pregunté girándome para verlo cara a cara.
-Esos lugares que solíamos visitar cuando éramos libres.- hizo mucho énfasis en la última palabra.
-No, gracias.
-Thomas- poso sus manos sobre mis hombros.- Será divertido y lo más seguro es que te puedes llevar una gran sorpresa.
-¿Y cómo podrías saberlo?- respondí con una curiosidad sarcástica.
-Sabes que suelo tener muy buenas corazonadas.
-Sigue siendo NO.
-Entonces le diré a nuestra entrenadora Ava que la verdadera razón por la cual ya no te esfuerzas en el patinaje es porque perdiste el interés y piensas que es ridículo.
-¡Eso no es cierto!
-¿Eso es un...?
Suspiré derrotado. Lo aparte de mi camino y fui a mi armario a buscar ropa decente ya que seguía con el deportivo.
-Toma una ducha también.- dijo Noah desde la cocina.
Tenía razón. Hoy entrenamos y había sudado.
¿Por qué siempre temiendo accediendo a sus peticiones?
Porque muy en el fondo sabes que siempre aciertan sus corazonadas.
Caminábamos por las calles del centro en una fría noche donde el viento atravesaba nuestras ropas.
Íbamos al lugar que siempre solíamos visitar los dos juntos cuando buscábamos ratos de diversión.
Llegamos. Oculto y discreto por fuera pero por dentro cualquier cosa podía suceder.
-Nos separaremos, ya sabes.
Asentí pues eso parecía la rutina de siempre: llegábamos juntos y buscábamos a alguna persona que cumpliera las expectativas de la noche y si por si acaso nos topábamos con alguien "peligroso" uno de los dos iba a socorrer al otro.
Noah creyó que Alek era uno de esos pero no le había hecho caso.
-¿Thomas?- me llamo mi amigo devolviéndome al presente.
-¿Mmh?
-Vamos.
🎶
Entramos al bar y todo el ruido se desató haciéndome recordar todas mis noches aquí.
-Me voy por allá. Te veo luego.- dijo Noah yéndose sin esperar una respuesta de mi parte.
Camine entre la gente que bailaba para poder llegar a la barra. No tenía ni idea de que hacer pues venía sin un plan (o sin ganas de llevarme a alguien está noche)
-Pero miren quién está aquí. Thomas Foster.
-Pensé que ya me habías olvidado.- dije a Luca el hombre de la barra.
-Tú y tu amigo son inolvidables. ¿Te sirvo lo de siempre?
-Esta vez paso. No pienso quedarme mucho tiempo.
-Con que es así.
Me senté en la silla y Luca comenzó a atender a las personas que le pedía. Regresó conmigo otra vez.
-¿Qué pasó con Alek? La noche que se conocieron ya no volvieron a aparecer.
Sentí una dolorosa punzada en el momento en que Alek fue mencionado.
-Dame una cerveza.- pedí.
-Lo supuse.- susurró Luca yendo por lo que le pedí.
Me giré y vi cómo la gente bailaba extasiada por la música y bebidas. Era un ambiente algo tranquilo y moderado a comparación de lo que se vive en un antro.
Eche un vistazo a la entrada como si estuviera calculando los pasos que me tomarían llegar de este punto a ese. Al instante mi vista se posó en un chico que estaba mirando a todos lados y moviendo sus manos muy nerviosamente.
Interesante.
Me dirigí con cautela a ese chico evitando que se diera cuenta. Exitosamente estaba muy cerca y me detuve al instante en que un sujeto llego con él. Mi mente dio a la conclusión de que sería su amigo o, en el peor de los casos, su pareja. Preferí irme resignado pero al ver las reacciones del chico ante el otro sujeto me decían que tenía que quedarme.
Me acerqué más a ellos dos. El hombre tomó de la mano al chico insinuando que fueran a bailar pero él seguía rechazándolo y girando la cabeza como si pidiera ayuda.
Estaba cerca pero casi no podía escuchar lo que decían así que tenía que estructurar sus diálogos.
-Estoy bien. Gracias.
-Noté que has estado solo desde hace un rato. ¿Tú pareja te abandonó? Vamos a pasar un rato juntos.
El sujeto se aproximó más al chico y él hizo una cara de asco haciéndose más para atrás.
Es mi momento de actuar.
-Ohh cariño. Te he estado buscando desde hace rato.- dije acercándome.
El chico me miró confundido sin comprender pero tras lanzarle un rápido guiño me siguió el juego.
-Me perdí. Ya sabes que es mi primera noche aquí.
-¿Él es tu novio?- preguntó el sujeto viéndome por encima del hombro.- ¿Seguro que no intentabas buscarte algo mejor?- se estaba burlando.
-Te traje tu bebida.- dije ignorándolo.- vamos a la barra.- extendí mi mano y el chico se veía muy agradecido.
-Gr-gracias, car-cariño.- dijo tomando mi mano tratando de zafarse del agarre del otro sujeto.
-Tsk! Qué aburrido.- soltó con brusquedad la mano del chico y se fue sin más.
Caminamos hasta la barra y Luca me miró arqueando una ceja.
-¿Qué les sirvo?- hizo la misma pregunta que siempre hacia cada vez que yo llevaba a alguien a la barra haciendo como si no me conociera.
-¿Quieres algo?
-N-no bebo, gracias.
Aguante mi risa.
-¿Entonces qué haces en un bar?
El chico giró su cabeza obviamente molesto y me arrepentí de mis palabras.
-Esta bien. Luca, danos agua. Sé que tienes.- el hombre de la barra me miró sorprendido por haberlo llamado por su nombre.
-Claro, Thomas.- respondió con una enorme sonrisa.
-¿Tho-Thomas?- preguntó el chico.
-¿Mmh? Ah sí. Thomas Foster.- extendí mi mano para un saludo.- ¿Tú eres?
-Ji Yong Lee.
-¿Ji Yong?
Ante la extrañeza del nombre me puse a analizar más al chico para deducir su procedencia: Tenía la piel muy clara, cabello negro, ondulado y semi largo. Era algo delgado y alto pero me llegaba como a la barbilla. Sus ojos lo dejaron claro.
-¿De dónde eres?- no podía dejar de ver sus ojos rasgados.
-Corea del Sur.
-Eso lo explica.- dije para mí mismo.
-¿Qué cosa?
-n-nada. Hablaba conmigo mismo.
Ji Yong asintió y se puso a ver a la gente que bailaba.
-Sus aguas.- dijo Luca burlándose para después irse.
-¿Qué te trae a este lugar, Ji Yong?- pregunté por simple curiosidad.
-Viaje de negocios.
-Me refiero a este lugar.- hice énfasis ante la palabra "este".- No tomas, Te la pasas en una esquina retraído y rechazas a los que se te acercan. Sabes que aquí no se puede entrar si no estás dispuesto a acceder, ¿o no?
-Y-yo... Yo no sé qué hago aquí...- se veía como comenzaba a sonrojarse y en ese momento me di cuenta que él es verdaderamente lindo.
-¿Bailas?- extendí mi mano y Ji Yong la miró dudando pero segundos después la tomo.- Es mejor cuando te lo piden a cuando te lo exigen.
-Tienes razón.- respondió con una pequeña risa.
Él es lindo.
Llegamos al centro de la pista donde todos estaban aglomerados. La música era rítmica pero algo lenta más no puse mucha atención. Todos mis sentidos estaban fijos en Ji Yong.
Él se acercó temeroso a mí y yo a él. Puse una pierna entre las suyas y él una entre las mías. Comenzamos a mover las caderas juntándonos más. Rozando nuestros pechos y dejándonos llevar.
La música seguía sin parar y también nosotros.
Personas se iban y otras llegaban pero nosotros seguíamos bailando.
Cambiamos nuestras pose más de una vez pero la última fue la que me hizo enloquecer: Ji Yong se giró para darme la espalda y juntando mucho sus caderas a mi pelvis comenzó un baile similar a la danza del oriente.
-Hey...- dije tratando de sonar tranquilo pero más pareció que exhale un gemido.
Él hizo caso omiso y se junto más alzando su brazo y colocándolo sobre mi cuello.
Su cuerpo se sentía tan bien.
Ji Yong se giró deteniendo su baile terminando de rodear mi cuello son sus brazos. Aproximó sus labios a mi cuello y comenzó a besarme apasionadamente.
-Me haces creer que quieres algo más.- dije apartándolo para encontrarme con una mirada seria y llena de determinación.
No dijimos nada más. Lo tomé de la mano llevándolo fuera del lugar.
Estábamos a pie de un hotel donde nos adentramos rápido. Ji Yong no se oponía ni decía nada. Sólo me seguía.
Me dieron la llave de una habitación ubicada en el tercer piso. Tomamos el ascensor para poder llegar rápido.
-Tho-Thomas...- me llamo Ji Yong casi jadeante tal vez por la actividad física de hace unos momentos.
-¿Sí?- me giré a para verlo y me di cuenta que no estaba cansado sino excitado.
El ascensor se detuvo y casi corriendo fuimos a la habitación.
Tenía una sonrisa en mi rostro pues me encontraba muy acelerado y emocionado. Tenía un choque adrenalina que hace mucho no sentía.
Entramos a la habitación y como si fuera un golpe me di cuenta de lo que estábamos haciendo.
-Ji Yong... Tú...
Me interrumpió con un beso. Sus labios temblaban nerviosos pero parecía que quería continuar.
Tomé el control de la situación.
Lleve mi mano a su nuca acercando más sus labios a los míos intensificando el beso. Deseaba más de él. Abrí mi boca para dejar salir mi lengua y acariciar sus labios. Él dio un respingo pero accedió uniendo nuestras lenguas.
-Mmh...
Ji Yong gemía como si no estuviera acostumbrado a esta intensidad en los besos.
Nos separamos y pude ver su rostro sonrojado y su respiración agitada.
Cada vez más lindo...
Tomé sus manos y lo guíe a la cama.
-Ji Yong.- llame teniéndolo frente a mi.
-¿S-Sí?
-¿Es tu primera vez?
No respondió al instante y sólo esquivó mi mirada avergonzado. Suspiré y él pareció estremecerse.
-E-entenderé si es que tú... Tú no...
Solté una pequeña risa y lo besé en los labios. Durante el beso lo recosté en la cama.
Deje sus labios para bajar a su cuello. Hice un rastro de pequeños besos.
-Haré que tú primera vez sea memorable.- susurré en su oído provocando que se estremeciera.
Me resulto curiosa la ropa que llevaba puesta: Un suéter con rombos de colores fríos, una camisa color azul celeste de botones abajo del mismo que asomaba su cuello y un pantalón color caqui.
Parecía un estudiante o un bibliotecario.
Lo más seguro es que corríamos con la misma edad así que no había problema.
Baje mis manos al final de su suéter para poder quitárselo. La camisa tenía botones pequeños que los hacía difícil de desabotonar.
-Arrancalos.- susurró Ji Yong viendo hacia arriba. Lo mire confundido pero no parecía dudar con esa petición así que lo hice; tome la camisa por parte del cuello y de un jalón todos los botones salieron volando.
No voy a negar que eso se sintió bien dándome la sensación de que tenía el control.
Su torso desnudo era de una tonalidad más clara que su rostro dando a entender que nunca lo descubría.
Veía como su espalda arqueada resaltaba el como su pecho se elevaba y regresaba por su respiración desesperada.
Aproxime mis labios a sus pezones acariciándolos y él dejó salir un exhalación de sorpresa. Saqué mi lengua y de forma circular rozaba la punta de su pezon izquierdo y con mi mano iba al derecho pellizcándolo ligeramente.
-Mmhg...
Ji Yong se movía mucho en especial sus caderas rozándose con mi miembro provocando una erección que poco a poco se hacía conocer.
Deje su pecho y, mientras bajaba dejando una fila de besos, con mis manos desabrochaba su pantalón.
-¿Q-qué haces?- preguntó sorprendido al sentir mi mano en su entrepierna por encima del bóxer. De arriba a abajo acariciaba su bulto sintiendo cómo se hacía cada vez más duro.
Baje por completo esas prendas que me impedían hacer contacto con su piel. Lleve mis labios más abajo y con mi mano derecha tome su pene y comencé a masturbarlo. Ji Yong gemía de una forma muy hermosa logrando que me excitara.
Saqué mi lengua y empecé lamer la punta de su miembro sin detener mi mano. Esta combinación de movimientos hacían que Ji Yong se moviera más y jadeara.
Metí su pene a mi boca succionándolo junto con la masturbación de mi mano. Se comenzaba a sentir algo salado producto de su fluido pre-seminal. Cuando empezaba a gemir con fuerza me di cuenta que su limite se acercaba y ahí detuve todo provocando que Ji Yong me miraba confuso.
-Todavía no.
Desabroche mi pantalón quitándomelo dejando el bóxer puesto. Me deshice de mi camisa dejándola caer al suelo y Ji Yong no paraba de ver mi cuerpo.
-¿Te gusto?- pregunté burlón por su nada disimulada observación. Él esquivo mi mirada avergonzado.- Tranquilo.- dije acercándome a su oído.- Tú también me gustas.
Me incorporé tomando sus piernas y colocándolas por encima de mis hombros. Él se dejaba llevar por todo lo que hacía.
Lleve dos dedos a mi boca lamiéndolos por completo.
Hace mucho que no tomaba a una persona.
En mi relación con Alek me dejaba tomar.
Mis dedos estaban mojados y los baje hasta su entrada. Mire a Ji Yong que apretaba la sabana con sus manos y eso que todavía no empezaba.
No es momento de pensar en el pasado.
Metí un dedo lentamente.
-¡Ahh!- exclamó Ji Yong viendo hacia abajo pero sin poder apreciar el como el segundo dedo entraba.- Se-se siente extraño.- dijo removiéndose incomodo.
-Tienes que relajarte.- dije moviendo mis dedos de forma circular.
Ji Yong jadeaba con fuerza y seguía sin acostumbrarse. Se sentía muy tenso.
Lleve mis dedos más profundo y ahí fue que él me dio un lindo gemido como respuesta.
Encontré su punto.
Podía sentir que su entrada pedía más y él como se relajaba.
Saqué mis dedos y tome mi miembro para rozar la punta en él. Gruñí ante el contacto y poco a poco lo fui introduciendo. Ji Yong no lo esperaba y eso hizo que a mitad del camino se volviera muy estrecho otra vez.
-Relájate.- susurré pero él no parecía querer hacerlo. Me acerqué a sus labios y comencé a besarlo tiernamente para poder distraerlo. Pareció funcionar pues comencé a entrar con mayor facilidad provocando que los dos gimiéramos entre nuestros labios.
Ya estaba completamente adentro y sólo tenía que esperar a que él se acostumbrara. Me dio su indicación moviendo su cadera un poco hacia mi.
Lentamente lleve mi miembro hacia atrás para volver a introducirlo.
-Tho-Thomas... Ahhh~
Me movía lento y con cuidado pues era importante no lastimarlo y darle como resultado una mala experiencia.
Tenía mucho auto control en esos momentos pero todo eso se fue justo en el momento en que escuche sus palabras susurradas en mi oído:
-Más rápido.
Mi ritmo se aceleró junto con mis movimientos logrando llegar más lejos.
Su interior lo podía sentir perfectamente y el como me permitía acceder ahora sin problemas.
Los dos gemíamos en el oído del otro provocando más sensaciones.
-Thomas... Más Fu-fuerte...
Oh dios.
Me incorporé tomando sus caderas con fuerza y así poder penetrar a Ji Yong hasta el fondo.
Ahora sus gemidos eran casi gritados. La cama daba ligeros golpes con la pared al ritmo de mis embestidas en el interior de Ji Yong, que si bien alguien estaba del otro lado nos escucharía muy claramente.
Un ligero hormigueo llamó a mi vientre indicando mi límite y también sus gemidos más dulces lo decían.
Lo penetre más rápido y fuerte un par de veces más haciendo que él se viniera encima de su pecho. Yo tenía que seguir pero no podía hacerlo dentro de él.
Salí de su interior justo cerca de mi climax y Ji Yong me miró boquiabierto. Me comencé a masturbar para terminar pero me sorprendí al ver que el chico se incorporaba y acercándose a mi miembro se lo metía a la boca.
Me sorprendí pero no lo evité.
Comenzó a moverse de adelante hacia atrás hasta donde su boca le permitía. Lo hizo un par de veces y por fin me vine. Él tuvo mi semen en su boca por unos momentos pero después lo trago.
Ahora yo estaba boquiabierto.
-Me pareció justo.- fue lo único que dijo.
Lo tome de las manos alzándolo hasta la altura de mi rostro para besarlo. Él parecía cansado y somnoliento así que le costo corresponder mi beso.
-Duerme.- murmuré y Ji Yong asintió.
Se acomodó a un lado de la cama como si quisiera que me acostara a su lado. No era algo que yo hiciera pero me enternecí ante lo que hizo que supuse sería buena idea dormir esta vez.
-Buenas noches, Thomas.
-Buenas noches, Ji Yong.
Nos quedamos dormidos en posición de cucharita como si fuéramos una pareja.
Un ruido me despertó de golpe. A veces maldecía tener el sueño tan ligero pero en momentos como este me sentía bendecido.
-¿A dónde vas?- pregunté al ver como Ji Yong se trataba de vestir con rapidez. Su expresión de susto me dio a entender que no quería que me diera cuenta.
-Y-yo... Amm...- miraba a todas partes como si quisiera que una buena excusa surgiera de la nada.
-Ven.- dije con severidad sin darle más opciones.
Se acercó a paso lento y estando lo suficiente cerca lo tome del brazo haciendo que cayera sobre la cama. Me coloqué sobre él apresando sus manos.
-¿Pensabas en "experimentar" y luego irte? ¿Me utilizaste?
Desvío mi mirada y sin decir nada. Eso respondió mis preguntas.
-Vete.- dije enojado liberándolo de mi agarre.
¿Por qué estaba enojado?
No era algo que yo no hubiera hecho antes pero al experimentar al abandono una vez no me quede con ganas de más.
-¿Qué esperas?- pregunté irritado al ver que él seguía en la cama.
-Y-yo... Yo no sé...
Nos quedamos en silencio y al parecer para Ji Yong ya no tenía sentido irse así que sólo se sentó en la cama abrazando sus rodillas.
-¿Qué hacías ayer en ese bar?- pregunté ya que era una pregunta que me estuvo persiguiendo un rato.
-Estaba... Porque yo no... No estaba seguro sobre mi.
-¿Seguro sobre ti? ¿A qué te refieres?
-No sabía si debía confiar en que siempre me sentí atraído por los hombres.
La forma en que pronunció aquellas palabras me dieron a entrenar que era la primera vez que decía eso en voz alta.
-¿Entonces fuiste a un bar gay para saber si podías conseguir algo como lo que pasó anoche y aclarara tus dudas?
Ji Yong se sonrojó y asintió ligeramente.
-Eso fue muy inmaduro.- sentencie molesto.
-¿Q-qué?- preguntó confuso y con un deje de molestia.
-¿Recuerdas el sujeto que te estuvo molestando anoche? Si yo no hubiera llegado quién sabe en qué lugar estarías ahora y ni si quiera si fue algo seguro. Te hubieras llevado una mala experiencia y quedado con la confusión el resto de tu vida sintiéndote miserable.- más parecía que lo estaba regañando pero no importaba si eso lo hacía entrar en razón.
-¿Cómo sabes que ya aclare mis dudas?
Ahora yo estaba ligeramente sonrojado pues si por sentado que lo que pasó anoche le gustó.
-¿C-cómo te sientes?- pregunté.
-Un poco adolorido pero bien.
Silencio otra vez. Me levante de la cama para buscar mi ropa. Me vestí poco a poco faltándome la camisa cuando sentí que los brazos de Ji Yong me rodearon el vientre.
-Lo siento. No quise irme pero creí que tú no querías verme.
¿Por qué creería eso?
-Pensaba quedarme pero cuando desperté tu murmurabas un nombre, "Alek", creo. Y me sentí muy mal. Tenía que irme ya que ese nombre parece significar mucho para ti.- su voz se oía dolida o decepcionada.
Me giré y me incliné para estar a la altura de su rostro que, en efecto, se veía triste.
-Ese nombre ya no es importante para mí. Ahora quiero que otro nombre lo sea.
En sus ojos se vio un brillo de esperanza pero que trato de ocultar.
-¿Qué dices, Ji Yong? ¿Lo intentamos?
Ahora no se molestó en ocultar sus expresiones. Con una enorme sonrisa se aferró a mi cuello.
-¡Sí!- exclamó emocionado.
Nos abrazamos sonriendo dando inicio a nuestra sorpresiva relación.
Una muy bonita relación.
=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•
Me demore más de lo planeado xd
Uno fue por lo largo del capítulo y la otra porque estaba ocupada.
En las votaciones ganó Thomas y quede satisfecha con el capítulo.
Ya conocen un poco más a este personaje y tal vez hayan más de ellos dos en el futuro ^^
Dibujo pintado de Thomas:
He de mencionar que vinculé mi cuenta de Facebook con Wattpad si por si acaso se quieren poner en contacto conmigo, tengan dudas o por lo que sea me pueden mandar mensaje por ambas plataformas (paso más tiempo en Wattpad).
Esto será cronológico: Un tiempo estará vinculado y otro no.
Gracias por su paciencia, por comentar, votar y leer! Hacen que mis días sean gratos uwu<3
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top