Ji Yong y yo estábamos en una banca cerca del departamento de Seung por si acaso algo ocurría.

-Debo imaginar que esa mujer es Jimin.- dije distraído viendo el suelo.

-Sí.- contestó Ji Yong serio.

Nos quedamos sin decir nada más. Mi pierna se movía inquieta y la de Ji Yong también. No sabíamos que estaba pasando adentro y el hermano menor parecía imaginarse lo peor.

-Eso no me lo esperaba.- susurró Ji Yong viendo hacia la dirección del departamento.

Me giré para ver de que se trataba y vi a la madrastra de Seung caminando hacia nosotros con la cabeza en alto como si se sintiera orgullosa de algo.

Una sensación de molestia llego a mi en cuento la vi.

-Ji Yong.- llamó la mujer una vez estuvo enfrente de nosotros.

-¿Qué ocurre?- respondió levantándose y poniéndose entre los dos como si quisiera ¿protegerme?

-Estaré en casa, ya sabes.- se asomó por el hombro del chico para después posar un ojo en mi. No lo despegó en ningún momento.

-Claro, estaré allá en unos días.- dijo Ji Yong levantando poco más sus hombros bloqueando la vista de Jimin.

Ella se fue sin decir más. El hermano de Seung soltó un fuerte suspiro y se giró para verme.

-Lo siento, creo que fue instinto.

-No... No te preocupes.- respondí confundido y sonriendo.

-Ve con mi hermano. Estoy seguro que te necesita mucho en estos momentos - Comenzó a dar unos pasos contrario a la dirección de Seung y luego se giró de nuevo.- Avísame cuando él esté mejor.

Lo despedí con la mano, me di la vuelta y corriendo fui a donde mi novio estaba.

Cuando llegué me lo encontré durmiendo en el sofá. Sonreí ligeramente y me acerqué a él para tratar de despertarlo.

-Seung.- lo llamé pero sólo se escucho un ligero quejido. Me encogí de hombros y me acomodé a su lado apoyado en su hombro y mi mano en su pecho.

-Te amo.- susurré en su oído y me entregué a la calidez de su cuerpo para dar paso al sueño.

-Phichit...- Escuche una voz que me llamaba.- Phiiiichiiiit.- otra vez.

Me removí un poco pero no quería despertar.

-Cariño, despierta.- sentí un pequeño beso en mi frente que por fin me hizo despertar para encontrarme con un Seung sonriente.

-¿Mhm? ¿Qué ocurre?- pregunté incorporándome mientras me tallaba un ojo.

-Nada, sólo quería despertarte.- dijo riendo un poco.

-Ah... ¿Bueno?- respondí confuso pero divertido ya que Seung se veía particularmente muy alegre.

-¿Te has preguntado el cómo llegamos a ser una pareja?- preguntó sentándose en la orilla del sofá.

-¿Por qué eso de repente?- dije sorprendido.

-No lo sé... Es que tú y yo somos muy diferentes - se acomodó en el sofá tomándome de las caderas haciendo que me colocara sobre él.- Tú eres tan divertido, alegre y muy activo, y por otro lado estoy yo siendo todo lo contrario a ti - dijo algo nostálgico para mí parecer.- Tengo el temor de que te aburrirás del como soy por no poder seguir tu ritmo en muchas ocaciones.

Empecé a reírme y Seung me miró confundido sin ver la gracia.

Pero para mí sí la había:

-Cariño, ¡cómo puedes decir tales cosas! - lo besé rápido en los labios.- Nunca podría aburrirme de la persona que amo con todo mi corazón.

-Pero...

-Nada de peros - dije negando con la cabeza.- Nuestras personalidades nos hacen ser quienes somos, ¿no?

-S-sí.

-¿Quién me ama por cómo soy?

-Yo, yo te amo.- me sostuvo con más fuerza.

-Y yo te amo a ti. Eso nunca cambiará.

-Phichit...- dijo sonriendo con un par de lagrimas asomándose en sus ojos. Reposó su frente en mi hombro y a media voz habló.- Me haces sumamente feliz con cada palabra que dices.

Lo abracé con fuerza y él hacía lo mismo.

Nos mantuvimos así por mucho tiempo ignorando todo lo externo.

Yo estaba muy seguro de esas palabras ya que no cabía duda que nunca había sentido nada de esto en toda mi vida. Ni mujeres ni ningún otro hombre me hizo comprender una palabra tan compleja cómo es el amor.

Seung-Gil es especial de pies a cabeza y quiero seguir amando cada virtud y defecto como he hecho hasta ahora.

Quiero tenerlo siempre a mi lado mientras vivimos grandes aventuras por muy simples que sean pero muy mágicas cuando está él conmigo.

-Parece que no te das cuenta que estás pensando en voz alta.- dijo Seung riendo.

-¿Q-qué?

-Quisiera que me dijeras todo ese tipo cosas estando consiente.- me miró a los ojos los cuales se veían muy risueños.

-No puedo ser cursi tan abiertamente.

-Pero sólo estoy yo.- dijo haciendo un ligero puchero.

-¡Qué lindo!- exclamé abrazándolo besándolo en los labios y abrazándolo con fuerza.

-Eso lo debería decir yo.- dijo entre nuestros labios.

-Ya cállate.

Nos fundimos en un gran beso apasionado donde sólo pedíamos más.

Nuestros cuerpos se juntaban cada vez más exigiendo menos ropa y más el roce de nuestras pieles.

Prenda por prenda terminamos contemplando nuestros cuerpos desnudos para después hacer el amor en el sofá una y otra vez y terminar terriblemente agotados.

Dormimos por el silencio generado mediante la ausencia de nuestras palabras que eran innecesarias en estos momentos.

Estaba muy seguro que nunca había sentido tanta comodidad con alguien.

Él amor, cariño y protección eran de las cosas que me aportaba Seung en nuestra vida juntos.

Pero esta estadía es temporal. Tengo que regresar a Tailandia dentro de un mes donde Yuuri me esperaría para ir directo a Rusia.

Ahora soy yo él que se va.

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Phichit no vive con Seung todavía xd

Fui a un restaurante de comida japonés y miren nada más que platillo servían:

Me sorprendió (porque a parte de lo obvio) aquí por donde vivo en cada restaurante de comida japonesa sólo venden sushi, curry o teriyaki y pues ver que podía probar el Katsu don quede impactada~ más no lo hice xd

Gracias por leer, comentar, votar y sus buenos deseo uwu~<3