Escena XVII: La tortura hacia Ornedo a causa de la actitud controladora de Cobrutno

Fecha: 10 de marzo del 2020 (Noche)

Lugar: El cuarto de Cobrutno−La casa de Cobrutno Rutkio

Personajes:

· Ornedo Lurena Binte

· Cobrutno Rutkio

· Moxto Furto

· Artio Jutio

· Lundro Kilo

· Jiko Humo

(Descripción del lugar: El cuarto de Cobrutno es un lugar amplio que contienen los siguientes aspectos. En el lado izquierdo del escenario, se puede observar una cama con cubrecama de color azul y una sábana celeste. Sobre la cama, hay un cuchillo filoso de tamaño grande y una correa larga de color negro. En el lado derecho del escenario, nos podemos percatar que hay un escritorio de color marrón. Sobre el escritorio, se encuentra una computadora de color blanco y un rollo de vendas blancas.)

(Se abre el telón) (Ingresan Ornedo Lurena Binte, Cobrutno Rutkio, Moxto Furto, Jiko Humo, Artio Jutio y Lundro Kilo caminando al escenario por el pasillo izquierdo) (Todos los personajes comienzan a hablar) 

Cobrutno Rutkio: (malvado a Ornedo) ¡Ahora sí conocerás toda mi ira! ¡Te voy a esclavizar hasta que tu cuerpo no pueda moverse más! ¡Tu sangre saldrá de tu cuerpo para que aprendas que nunca debes fallarme a mí! El que me falla no solo corre el riesgo de sufrir un castigo, sino de enfrentarse a la muerte.

Ornedo Lurena Binte: (enojado a Cobrutno) ¿Crees que tu intención de controlarme a tu antojo es justo para mí? ¡Desprecio que intentes castigarme por solo un error mío! ¡No merezco estar tan herido por los golpes que me darás sobre la espalda! ¡Ojalá ningún otro chico como yo tenga la mala de suerte para conocerte a ti! 

(Moxto se sorprende de los mensajes amenazantes de Cobrutno Rutkio y Ornedo Lurena Binte)

Moxto Furto: (sorprendido a Ornedo) Ornedo, no sabías que estabas tan disgustado con Cobrutno. Asimismo, solo eres una provocación para que todos nos molestemos contigo. Ningún chico vulgar como tú nos había faltado el respeto. Eres simplemente un chico idiota que no sabe defenderse bien. 

Artio Jutio: (altanero a Ornedo) Si sigues con esa actitud grosera, nosotros pensaremos en echarte de la pandilla cuánto antes. Por lo tanto, debes controlar tu carácter impulsivo, porque nadie lo tiene que soportar. ¡Malcriado! ¡Solo nos das problemas en este grupo!

Lundro Kilo: (honesto a Ornedo) Definitivamente, no te importa el bienestar de tu grupo, porque no mides el daño de tus palabras hacia Cobrutno. Con razón escapaste de tu casa, porque nadie te podía soportar por más tiempo. Ni siquiera tengo ganas de hablar contigo, Ornedo.

Jiko Humo: (sincero a Ornedo) Ornedo, recuerda que eres un inútil en nuestra pandilla, ya que te muestras como un niño indefenso que todos deben calmar su berrinche. Si así eres aquí, no quiero imaginar cómo te comportabas antes de formar parte de este grupo.

(Cobrutno agarra la correa negra y golpea la espalda de Ornedo)

(Ornedo cae al piso por el golpe que recibió y se muestra adolorido)

Cobrutno Rutkio: (malvado a Ornedo) ¡Aprende a obedecerme! ¡Carajo! ¡Yo soy el que está encima de ti! ¡Me harta que usted tenga tanta rebeldía! ¡Se nota que nunca tiene modales para seguir las órdenes que yo te impongo!

Ornedo Lurena Binte: (enojado a Cobrutno) ¡Detesto tu intento por controlar mi vida! ¡Ojalá alguien se dé cuenta de la mierda de persona que eres realmente! ¡Nadie merece soportar tus castigos!

(Cobrutno golpea con la correa negra sobre la espalda de Ornedo tres veces)

(Cobrutno coge la correa negra y amara las manos de Ornedo con esa correa)

(Ornedo se halla esposado por la correa negra y empieza a gritar de dolor) 

Murlobo Jolun: (grosero a Moxto) No estoy justificando a Ornedo, porque tiene parte de la culpa en que Cobrutno se encuentre enojado. Además, recuerdo que nadie respeta las normas de la pandilla. ¿Enserio crees que Ornedo es el único que comete errores?

Moxto Furto: (sorprendido a Murlobo) Murlobo, conmigo no tienes que sacar tu ira, porque yo no estoy ocasionando ninguna molestia. Asimismo, tú eres tan grosero para seguir causando problemas en este momento.

Artio Jutio: (altanero a Ornedo) Ornedo, recuerda que tú eres el culpable de todo. Nadie debe aguantar tu malhumor respeto a las órdenes de Cobrutno, porque ninguno de nosotros le desobedeceríamos de esa manera a nuestro líder. Ojalá tu cuerpo se encuentre dañado por ser un chico malcriado.

Lundro Kilo: (honesto a Ornedo) ¡Maldito chico vulgar! ¡Ahora ya no tienes escape para enfrentarte al castigo de Cobrutno! ¡Prepárate para sentir el dolor y el arrepentimiento! ¡Espero que Cobrutno te haga mucho daño para no vuelvas a ser un maleducado!  

Jiko Humo: (sincero a Ornedo) Eres un mongol al faltarle el respeto al líder. Si sigues así, ninguno de nosotros te elegirá como el nuevo jefe del grupo criminal. Cobrutno es un mejor criminal que tú, porque él posee una inteligencia incomparable junto a ti.

Murlobo Jolun: (grosero a Lundro) Es cierto que Ornedo merece ser reprendido, pero tú tampoco eres el mejor de la pandilla para reclamarle sus errores. La responsabilidad de Ornedo al insultar a Cobrutno no debe ser asunto tuyo, Lundro.

(Ornedo sigue en el piso y Cobrutno coge el cuchillo)

(Cobrutno acuchilla la piel de Ornedo)

(Ornedo grita de dolor y Cobrutno sigue hiriendo la espalda y los codos de Ornedo con el cuchillo)

Ornedo Lurena Binte: (adolorido a Cobrutno) ¡Eres un monstruo! ¡Déjame en paz! ¡La próxima vez que me hagas daño no tendré compasión para dispararte! ¡No me dejas otra opción que pensar en herirte para que te arrepientas por lo que me hiciste! 

 Cobrutno Rutkio: (malvado a Ornedo) ¡Ahora te ordeno que me digas cuál era el nombre de la víctima que tú asesinaste! ¡Dímelo ahora o seguiré acuchillándote hasta que me reveles la identidad de esa persona! 

Ornedo Lurena Binte: (adolorido a Cobrutno) Su nombre era Gurto. Solía trabajar en la tienda que intenté robar junto a Murlobo, porque era el dueño del local. Al final, no llevamos ningún artículo de valor, ya que la policía podría encontrarnos o descubrirnos en el instante.

Cobrutno Rutkio: (malvado a Ornedo) ¿Por qué tienes que ser tan idiota para no llevarte el dinero de ese local? ¿Acaso no piensas como un verdadero criminal? ¡Hubieras robado el dinero y te hubieras largado de allí!

Ornedo Lurena Binte: (adolorido a Cobrutno) Podré ser un ladrón despiadado, pero no pondré en peligro mi libertad si la policía me descubre. Es irónico pensar que tú ahora estás sometiendo mi autonomía al amarrarme con esta correa negra.

Cobrutno Rutkio: (malvado a Ornedo) Ni siquiera me interesa si eres libre de mí, Ornedo. Solo recuerda que tus problemas no son ninguna preocupación para nadie ni siquiera para ti mismo. Si sigues fallando en los robos, yo te echaré de la pandilla.

Ornedo Lurena Binte: (adolorido a Cobrutno) No debes ni puedes controlar mis decisiones, Cobrutno. Si vine a esta pandilla es para sobrevivir en la calle y no confrontarme con personas tan dominantes como tú.

(Cobrutno Rutkio coge las manos amarradas con la correa negra de Ornedo y las empieza a apretar)

(Cobrutno Rutkio acuchilla la piel de Ornedo con el cuchillo cinco veces)

(Ornedo grita de dolor y comienza a sangrar)

Ornedo Lurena Binte: (adolorido y arrepentido a Cobrutno) Perdón por insultarte, Cobrutno. Además, prometo que nunca voy a fallarte, aunque sea lo último que haga. Solo dime que debo hacer para no decepcionarte.

(Ornedo se arrastra por el piso y llega al escritorio) (Ornedo coge el rollo de vendas)

 (Murlobo camina hacia Ornedo y le pone una venda en la espalda adolorida de Ornedo)

Cobrutno Rutkio: (malvado a Ornedo) Fue un placer, Ornedo. Definitivamente, todavía te falta mucho tiempo para que seas un buen criminal. Sin embargo, podrías empezar por no hacerme enojar a causa de tus tonterías.

(Lundro Kilo, Jiko Humo, Cobrutno Rutkio y Artio Jutio se retiran caminando por el pasillo derecho)

(Ornedo intenta levantarse y Murlobo lo ayuda a pararse) (Música trágica)

(Ornedo Lurena Binte y Murlobo Jolun se retiran caminando del escenario por el pasillo izquierdo)

(Cierre del telón) (Fin de la escena XVII)