ACTO II (Diecinueveava Escena)
Escena XIX: La tristeza de Rutela, la ignorancia de Lila y la angustia de Roturo
Fecha: 11 de marzo del 2020 (Día)
Lugar: El cuarto de Lila − El hogar de la familia Lurena Binte
Personajes:
· Rutela Binte
· Lila Lurena Binte
· Roturo Lurena Binte
(Descripción del lugar: El cuarto de Lila es un lugar espacioso que posee las siguientes características. En el lado izquierdo, se puede apreciar una cama compuesta de un colchón blanco, un edredón gris, una sábana blanca y dos almohadas blancas. Al costado de la cama, se puede observar una ventana que ilumina la habitación. En el lado derecho, se observa un escritorio que contiene una computadora moderna de color negro y, al costado, un estante donde se almacenan cuadernos, blogs, cartulinas, libros, etc. Además, debajo del estante hay un lienzo que revela una flor negra pintada.)
(Se abre el telón) (Ingresa Lila Lurena Binte mientras lleva audífonos en sus oídos caminando al escenario por el pasillo izquierdo) (Lila enciende la computadora que se encuentra en su escritorio mientras se dirige al público)
Lila Lurena Binte: (estresada al público) Estoy preocupada, porque en menos de doce días voy a regresar al ciclo virtual de la universidad. Mis padres no están seguros si me llegará el internet, ya que a veces se apaga de forma repentina. Lo único que me tiene calmada es que Ornedo no va a regresar a casa nunca más.
(Ingresa Rutela Binte mientras lleva dos blusas, cuatro calzones y dos pantalones en su mano izquierda caminando al escenario por el pasillo derecho)
Rutela Binte: (calmada a Lila) Hija, aquí traigo tu ropa. No olvides guardarla o utilizarla en los días que siguen. No podremos comprarte ropa, ya que todos los locales se encuentran cerrados temporalmente por las medidas radicales del gobierno.
Lila Lurena Binte: (estresada a Rutela) ¿Y podré ver a mis amistades alguna vez para no sentirme sola? Si Ornedo siguiera aquí, seguro me molestaría mucho con él. Me extraña que no haya regresado todavía, ya que creo que retornaría de inmediato.
Rutela Binte: (calmada a Lila) Lila, ¿Cómo andan tus amigos en sus casas? Espero que ninguno de ellos tenga coronavirus. Todos los días están transmitiendo varias noticias sobre las medidas del gobierno sobre el toque de queda, sana distancia y el cierre de varios locales.
Lila Lurena Binte: (estresada a Rutela) Madre, veo que nunca me dejas que visite a mis amigos. Tal vez Ornedo podría ir a recogerlos, porque yo soy una chica tan perfecta que no necesito ofrecer mi ayuda a los demás. Además, quiero que me compres una mascarilla blanca más, porque la que tengo se encuentra sucia y malgastada.
Rutela Binte: (calmada a Lila) ¡Entiende que no puedo comprarte ninguna ropa nueva por la pandemia! Tu padre ya no tiene mucho dinero, porque sus jefes están despidiendo a muchos trabajadores. Yo me encuentro laborando desde esta casa y tú solo andas quejándote de todo.
(Rutela les entrega la ropa a las manos de Lila) (Lila recibe la ropa y la pone en su cama)
Lila Lurena Binte: (estresada a Rutela) Madre, Ornedo parece que deseas seguir viviendo afuera, aunque quizás tenga hambre después de vagar por todas las calles de este distrito. Si pudiera retroceder el tiempo, haría que el coronavirus nunca existiera.
Rutela Binte: (calmada a Lila) ¿Por qué nunca puedes llevarte bien con tu hermano? ¿Te lastimó o te insultó de una forma horrible? Reconozco que eres más decente que Ornedo, pero tus quejas muchas veces son un poco repetitivas. Más te vale sacar buenas notas en este ciclo como los anteriores.
Lila Lurena Binte: (estresada a Rutela) ¿Perdón? Solo quiero un par de blusas nuevas, una mascarilla blanca y cinco calzones más para la semana. Podrías admitir que yo no tengo defectos como el imbécil de Ornedo. Yo tendré un futuro asegurado, pero también dependerá de ti.
(Rutela se comienza a alterar por las palabras de Lila) (Rutela se empieza a enojar)
Rutela Binte: (enojada a Lila) Escucha lo que te diré, jovencita. Valora lo que tienes y deja de ser tan quejona como lo eres. Es cierto que eres menos malcriada a comparación de Ornedo, pero me estás empezando a sacar de quicio. Ni siquiera tu hermano Ornedo reclamaba tanto como tú.
Lila Lurena Binte: (estresada a Rutela) ¿Enserio? ¿Sabes cuál es la razón para molestarlo? No quería que te enfocaras en sus virtudes y te olvidarás de mí. Debo reconocer que lo molesto, pero lo hago para hacerle sufrir a él cuando yo me siento la sombra de sus logros.
(Rutela Binte reflexiona sobre las veces en las que reprendió a Ornedo y empieza a llorar)
Rutela Binte: (llorando a Lila) Lila, ahora cuando me acuerdo de todas las veces en la que hice enfadara tu hermano puedo ver que yo no tenía toda la razón de lo que decía. Tu hermano es creativo, original, perseverante y sobretodo noble. Jamás podrás adquirir su habilidad para escribir, porque no eres mejor que él.
Lila Lurena Binte: (estresada a Rutela) Deja de mentirme. Nadie de aquí soportaba sus berrinches innecesarios y tú lo querías echar de casa. Ahora se ha ido y dudo que vuelva si es que desea seguir habitando dentro de nuestra familia. Lo odio tanto y no lo extraño ni un poquito.
Rutela Binte: (llorando a Lila) Hija, tú solo lo quieres denigrar, porque no eres capaz de admitir tus defectos. Perdón si no lo dije antes, pero da vergüenza que una persona tan grosera como tú insulta a otra sin darse cuenta de ella misma. Te agendaré una cita psicológica de forma virtual.
(Música familiar) (Ingresa Roturo Lurena caminando al escenario por el pasillo izquierdo) (Roturo Lurena empieza a conversar con otros personajes)
Roturo Lurena: (tranquilo a Lila) Jovencita, ¿Funciona su computadora o todavía no recibe el internet de forma adecuada? He visto en la televisión que están regalando computadoras o aparatos tecnológicos, pero no veo que sea de tu universidad. La mayoría de esas universidades son estatales y no privadas por lo que me parece sospechoso.
Lila Lurena Binte: (estresada a Roturo) Padre, mi madre me está regañando como si yo fuera una niña malcriada con todas las personas. ¿Le podrías decir que me deje de ser una señora tan desagradable conmigo? Me molesta mucho sus palabras regañonas, porque no le hice nada a ella.
Rutela Binte: (llorando a Roturo) Roturo, no creas ni consientas tanto a Lila, porque se va a acostumbrar a obtener reconocimiento de las demás personas como si ella tuviera toda la razón en todo lo que menciona. Sin duda, Lila requiere alguna cita psicológica urgentemente.
Roturo Lurena: (tranquilo a Rutela) Rute, nuestra hija aprenderá por ella misma a respetarte. Si no lo hace, entonces yo no tengo ningún problema en castigarla. Ornedo tampoco era tan obediente, pero Lila no es una chica perfecta en ningún sentido.
Lila Lurena Binte: (estresada a Rutela) ¿Por qué siempre estabas de mi lado cuando acusabas a Ornedo de todos los berrinches que hacía enfrente de ti? No reconozco a la mujer que siempre me daba la razón cuando yo peleaba con mi hermano.
Rutela Binte: (llorando a Lila) Hija, yo solo lo hacía, porque creía equivocadamente que por ser una chica eras más inocente que Ornedo, pero no es cierto. Tú también tienes la culpa de que tu hermano se largara a la calle.
Roturo Lurena: (tranquilo a Rutela) Rute, piensa en lo que estás diciendo, ya que si hubiéramos hablado con Ornedo sobre la relación que tenemos con él. Probablemente, ella sabrá que no tiene ningún permiso para comportarse mal.
Lila Lurena Binte: (estresada a Roturo) Veo que también estás del lado de mi madre. Ambos no los quiero observar frente a mis ojos, porque los desprecio igual que a Ornedo. Me iré a otra parte para que no me fastidien.
(Lila Lurena Binte se retira caminando del escenario por el pasillo derecho)
(Roturo Lurena y Rutela Binte se abrazan)
(Roturo Lurena y Rutela Binte se retiran caminando del escenario por el pasillo izquierdo)
(Cierre del telón) (Fin de la escena XIX)
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