Escena III: El enojo de Rutela y la salida de Ornedo hacia su casa

Fecha: 8 de marzo del 2020 (Noche)

Lugar: La cocina – El departamento de la familia Lurena Binte

Personajes:

· Ornedo Lurena Binte

· Rutela Binte

· Lila Lurena Binte

(Descripción del lugar: La cocina es un espacio amplio que tiene las siguientes características. En el lado izquierdo, se encuentran tres estantes que contienen tres cajones blancos. Al lado de los estantes, se halla un refrigerador blanco y un par de bandejas encima de él. En el lado derecho, nos podemos percatar de un lavamanos, cuatro platos sucios, una esponja naranja y cuatro tenedores mojados. El lugar se encuentra iluminado con un foco de luz blanca)

(Se abre el telón) (Ingresan Rutela Binte con dos soles en su bolsillo izquierdo y Lila Lurena Binte por el pasillo izquierdo hacia el escenario) (Ellas empiezan a conversar entre ellas)

Rutela Binte: (estresada a Lila) Hija, tu hermano tiene toda la culpa de que yo tenga ganas de echarlo a la calle. Sin embargo, no puedo hacerlo, porque al estar expuesto al exterior podría contraer el coronavirus. Además, es mi hijo y lo sigo amando, aunque me estrese demasiado con él.

Lila Lurena Binte: (grosera a Rutela) ¿Y por qué no lo haces de una vez? Mejor echa a Ornedo de esta casa. Solo está generando problemas en estos últimos días. Ni siquiera me da ganas de saludarlo cuando me levanto de la cama para iniciar mi día. Ornedo es un imbécil que no tiene ningún talento en especial, porque tiene una vida mediocre.

(Rutela empieza a pensar en el comentario de Lila) (Música dramática)

Rutela Binte: (pensativa a Lila) ¿Y si Ornedo se marchara de la casa? ¿Acaso no es una mala idea? ¿Se quitaría todos mis problemas o me arrepentiría para siempre? Estas preguntas son difíciles de contestar para mí.

Lila Lurena Binte: (grosera a Rutela) Rutela, no aguanto la molestia que genera Ornedo en mi vida. Me molesta cada día y debería ser empático conmigo, aunque yo soy perfecta y no cometo errores como él. Desespera la ira de mi hermano y no lo soporto más.

(Rutela piensa en las virtudes de su hija y se muestra ante Lila de manera complaciente y alegre)

Rutela Binte: (complaciente a Lila) Lila, siempre has sido la más madura entre tu hermano y tú. Eres la única de toda la familia que no me estresa, porque desde pequeña eres mejor que Ornedo en varios aspectos. Si tuviera que echar a alguno de mis hijos, sería a tu hermano.

Lila Lurena Binte: (grosera a Rutela) Me alegro escuchar eso, madre. Mi padre seguro ha intentado razonar con él antes, pero es una lástima que Ornedo no lo pueda escuchar ni hacerle caso en lo que mi padre le dice. Desprecio tanto a mi hermano que sería capaz de echarlo para la calle.

(Rutela piensa en el estrés que le genera Ornedo y se muestra sincera ante Lila de manera pensativa)

Rutela Binte: (pensativa a Lila) Lila, es cierto lo que me dices. Sin embargo, tal vez solo deba intentar hablar con Ornedo para solucionar sus problemas de ira. Sé que no te llevas bien con tu hermano, pero intenta ignorarlo cada vez que él te hable.

Lila Lurena Binte: (grosera a Rutela) Entiendo, madre. Tú sabes que nunca me comporto mal y jamás sería capaz de equivocarme. En el mes pasado, he ingresado a la universidad y sé que estás muy orgullosa de mí.

Rutela Binte: (pensativa a Lila) Obviamente, hija. Ornedo ni siquiera pudo aprobar el examen de admisión, porque es un tonto y mediocre. Si él no va a la universidad, yo le obligaré a trabajar como ambulante en la calle.

(Música ruda) (Ingresa Ornedo Lurena Binte llevando una mascarilla blanca en su mano derecha) (Ornedo Lurena Binte se acerca hacia los demás personajes) (Rutela se comienza a estresar)

Ornedo Lurena Binte: (triste hacia Rutela) Madre, ¿Podemos hablar sobre lo que pasó antes? Me siento con ganas de que entiendas mi molestia en esta casa. Yo quiero que cambie esta situación de una vez por todas, pero no me haces caso de ninguna forma.

Rutela Binte: (estresada a Ornedo) Ornedo, tu molestia no es asunto mío. Ya eres lo suficientemente grande para arreglar tus errores. Si estuviera más estresada, te mandaría a vender dulces, porque no estás en la universidad. Me decepciona que seas un joven tan imbécil.

Ornedo Lurena Binte: (triste hacia Rutela) Madre, seguro Lila te convenció de que yo era el único culpable. Siempre esa chica me quiere hacer quedar mal. Después no te sorprendas si me llego a rebelar en contra de ti. Yo quiero ser libre, pero tú no dejas que tome mi libertad propia.

Rutela Binte: (estresada a Ornedo) Ornedo, tu lenguaje agresivo molesta a mis oídos. Deja de hablar y escúchame muy bien. Veo que estás malgastando tu tiempo enojándote. Por lo tanto, desde mañana vas a trabajar de ambulante o con tu tío en el Callao. No me dejas otra opción.

Lila Lurena Binte: (grosera a Ornedo) Cuándo vas a entender que yo siempre tengo la razón en todas las peleas que tenemos. Yo nunca soy mala contigo, pero tú sí lo eres. Solamente te comportas como un pobrecito de mierda y eso solo me da lástima.

(Risa burlona de Lila) (Lila Lurena Binte se retira del escenario por el pasillo derecho del escenario) (Ornedo Lurena Binte y Rutela Binte continúan hablando)

Ornedo Lurena Binte: (triste hacia Rutela) Ya no quiero que controles mi vida, madre. Cuando empiezas a molestarte, siento que tomas elecciones que yo no quiero tomar. Quizás la universidad no sea lo mío, pero hay otras maneras de que yo me forje un futuro.

Rutela Binte: (estresada a Ornedo) Los exámenes de admisión también serán virtuales y espero que los aproveches, porque si no yo te mandaré a vender caramelos en la calle te guste o no. Así que mejor cierra el hocico y ponte a estudiar. ¡Carajo!

Ornedo Lurena Binte: (triste hacia Rutela) Está bien, madre. Me esforzaré en todo lo que pueda, aunque también deseo tener tiempo de escribir poemas. Mis escritos son los únicos que comprenden mis sentimientos. Ni siquiera mi padre es capaz de entender mi malestar emocional. Estoy harto de ser controlado por ustedes y deseo obtener mi libertad a cualquier precio.

Rutela Binte: (estresada a Ornedo) ¿Perdón? ¿Acaso estás priorizando tu dudosa escritura con tu obligación como joven pre universitario? Olvídate de tus poemas, porque no los avanzarás mientras estudies en esta casa. Deja de comentar estupideces y mejor cómprame un sobre de café de dos soles. No te olvides de ponerte la mascarilla por favor.

(Rutela Binte saca los dos soles de su bolsillo y se los entrega a Ornedo) (Ornedo se pone la mascarilla que llevaba en la mano derecha)

Ornedo Lurena Binte: (triste hacia Rutela) Madre, yo te amaba hasta que comenzaste a someter mi propia libertad para tu propio beneficio. Extraño a mi hermana cuando era pequeña, porque no era grosera y realmente me quería. Ahora me tratas como un pordiosero y eso me duele.

Rutela Binte: (estresada a Ornedo) Ornedo, Lila solo busca que seas una persona perfecta igual que ella. Cuántas veces tengo que repetirte para que comprendas tu terrible actitud en tu día a día. Parece que ni siquiera me escuchas o simplemente ignoras lo que te digo.

Ornedo Lurena Binte: (triste hacia Rutela) Madre, esta pandemia me ha hecho sentir mal, porque no puedo salir a las calles como antes. Mis amistades ya no me hablan y me irrita permanecer dentro de esta casa. Además, tus comentarios controladores me abruman demasiado que no tengo ganas de hablar contigo.

Rutela Binte: (estresada a Ornedo) Ornedo, es hora de que vayas a la tienda del señor Lunjo para que me consigas un sobre de café lo más pronto posible. Recuerda que el toque de queda es a las seis de la tarde. Después de esa hora, las tiendas estarán cerradas y tendrás que volver a la casa.

Ornedo Lurena Binte: (triste hacia Rutela) Madre, me incomoda tu actitud hacia mí. No entiendo cuál es la necesidad de poner el toque de queda a las seis. Es demasiado temprano para un joven como yo. Los encargados del toque deben ampliar la hora, porque es una hora exagerada para restringir el acceso a las calles.

Rutela Binte: (estresada a Ornedo) ¿Sabes qué? Vete a la tienda antes de que te jale las orejas con mucha fuerza para que se te quite lo estúpido. Si tus tías estuvieran aquí, seguro que te mandarían a limpiar tu cuarto que no lo tienes tan ordenado.

Ornedo Lurena Binte: (triste hacia Rutela) Deja de provocar mi ira, madre. Solo te pido que no incites mi molestia tan rápido. Tu postura controladora no la puedo aguantar más y por eso quiero hablar contigo para frenar esta situación.

Rutela Binte: (estresada a Ornedo) No entiendo nada de lo que me estás diciendo. Tal vez nunca puedas ser normal como Lila, pero controla tu ira, porque es lo único que genera problemas en esta casa. Me harta tu presencia ante mis ojos, Ornedo. Mejor tráeme ese sobre de café de la tienda.

(Ornedo gruñe de ira y se retira caminando con su mascarilla puesta y los dos soles por el pasillo izquierdo) (Rutela se retira caminando del escenario por el pasillo derecho del escenario)

(Cierre del telón) (Fin de la escena III)