– ¿Estás seguro? – Pregunto de nuevo el heterocromatico al peli verde pues tampoco quería obligarlo a hacer algo sin su consentimiento.

Midoriya asintió nervioso y siguiendo al mayor entraron a una sala del hospital, justo donde estaba la madre de Todoroki.

La mujer volteó y sonrió inmediatamente al ver a su hijo con su acompañante.

– Así que es el... – Dijo la albina y Midoriya nervioso se inclinó en forma de saludo.

– ¡Mu-mucho gusto, soy Midoriya Izuku! – Todoroki bufó por la rigidez de su amigo y desvió la mirada.

Sólo esperaba que su madre se creyera todo y no pudiera más visitas con su "novio".

Pasaron la tarde hablando de cosas de la escuela ya que era lo único en lo que al parecer tenían en común Midoriya y Todoroki, el heterocromatico se sintió tranquilo al ver la fluidez con la que hablaban así que no le importó dejar a su amigo con su madre por un momento en lo que salía por bebidas de una máquina expendedora.

Rei noto cuando su hijo salió y rápidamente miro con seriedad al peli verde quien solo trago nervioso.

– Tú no eres su novio... Lo sé porque él me ha hablado de ti anteriormente y no de una manera romántica. – La albina vio como el joven comenzaba a sudar y ponerse aún más nervioso que al principio, sonrió al ver como aquel chico trataba de cubrir a su hijo. – Aunque eres un buen amigo, así que dime ¿Qué le paso a mi hijo? Él me había dicho que se le había declarado a un chico.

Midoriya miro la puerta esperando a que su compañero entrase pero eso no paso así que suspiro, tampoco quería mentirle a la mamá de su amigo.

– Bueno... si soy su amigo y si se le declaro a un chico pero se podría decir que era parte del efecto de un quirk. – Rasco nervioso su cabeza y se sintió mal al ver como la albina borraba la sonrisa de su rostro. – Pe-Pero a pesar de eso creo que crearon un lazo entre ellos... Una relación muy rara... aquel chico es difícil de conquistar.

La madre suspiro y negó resignada.

– Si Shoto se enamora quiero que sea por su cuenta y no por los efectos de un quirk, gracias por tu sinceridad. – Le dedico una calmada sonrisa que el peli verde también respondió.

Siguieron charlando hasta que llego el heterocromatico con varias bebidas las cuales repartió, se quedaron hasta la hora de queda, Midoriya se adelantó a la salida dejando a ambos familiares solos.

– ¿Dijo la verdad? – Pregunto Todoroki después de un rato en silencio y la albina contesto con una sonrisa y asintiendo, Shoto suspiro. – Madre, yo lo siento... no quería que te decepcionaras, te veías tan feliz cuando mencione que me había declarado a alguien

– Bueno ya basta de palabras. – Interrumpió calmadamente. – Al menos sabes que tienes mi apoyo con todo, no importa quién sea... siempre y cuando te haga feliz. –Beso la frente de su hijo y este le sonrió agradecido.

– La vez pasada tenía el labio partido porque el chico al que me le declare estallo. – Soltó Shoto con una sonrisa pues casi literalmente Bakugo había estallado y le dio gracia el recordar aquello.

– Ya veo... Entonces te rechazo. – Bromeo la albina al ver a su hijo tan melancólico de repente y Shoto se estremeció. – ¡Solo bromeo! – Se rió por un rato y despeino a su hijo. –Ya es hora de que te vayas, tu amigo te espera.

Todoroki se despidió y alcanzo al peli verde en la entrada del hospital en donde este lo recibió con una sonrisa y mostrándole un mensaje.

– Habrá una fiesta en la piscina. – Anuncio el de pecas.

– Supongo que quieres que vaya – Y el menor asintió. – ¿Quiénes irán?

– Varios salones incluyendo el nuestro. – Todoroki noto como el peli verde se emocionaba, sabía que esperaría a ver a alguien especial.

– Supongo que será divertido... – Recordó vagamente que Kirishima se encargaría de llevar una bomba humana a la fiesta y sonrió para sí, sería algo entretenido de ver.

Tal vez podrían terminar su extraña conversación o al menos la carrera que dejaron pendiente la última vez, cualquiera de las dos le parecía interesante y extrañamente esperaba ver al rubio en aquella fiesta.