Narra Lena

La policía entra en la habitación y sujetan a Josh quitándole el arma y uno de los policías llamó a la ambulancia.

Pero yo me levanté y dando pasos torpes corrí hasta Mateo cayendo a su lado justo en el momento en el que él cae de espaldas al suelo y tosiendo cada vez más sangre...

- No, Mateo... por favor no - Dije llorando.

Él hacía muecas de dolor y se sujetaba el estómago donde le había disparado Josh.

- Lena, estaré bien... - Dice.

- Si lo estarás... no me puedes dejar así... - Dije sollozando y sujetando su camisa.

- Jamás lo haría... - Dice levantando su mano y apoyándola en mi mejilla.

Ahora me importaba muy poco el que me marchara con sangre al hacer aquello, yo solo me concentraba en él... y en que estaría bien...

Él comenzó a cerrar los ojos y su mano cayó.

- ¿Mateo? - Lo moví levemente nada - Mateo despierta... - Dije en un hilo de voz casi roto - Mateo... -

Agarré su mano con las mías y la besé mientras sollozaba.

- Señorita... debe soltarlo - Unos policías me agarran de los brazos y me jalan para apartarme.

- Pero... No, yo quiero estar con él - Dije resistiéndome pero no tenía fuerzas para eso, por lo que ellos me levantan aún así.

- Lena... - Mi madre me abraza y los de la ambulancia se llevaron a Mateo. Yo abracé a mamá y ella me acaricia la cabeza - Estará bien... ya lo verás... -

- Mamá... él está... - Dije entre sollozos.

- No digas eso cariño... estará bien... no pienses en eso -

Mamá besa mi frente y me hace apoyar mi cabeza en su hombro, yo me aferré a ella con miedo.

- Disculpen... pero necesitamos que vengan con nosotros - Un policía se nos acerca. Mi mamá asiente sin más.

Mamá me abraza y besa la cabeza una vez más antes de y separarnos, me dice que me cambie y así lo hice, luego salimos de la casa en donde estaban todos, vi a Josh y me aguanté las ganas de golpearlo, mamá me hace voltear a otro lado para que dejara de verlo y nos subimos a uno de los autos de los policías y este arrancó.

Veo a la ambulancia pasar rápidamente a un lado nuestro y se adelanta con urgencia para llegar al hospital. Otra lágrima resbala por mi mejilla al ver la ambulancia, cerré los ojos y suspiré.

***

***

- Y eso pasó... - Dije, la psicóloga termina de anotar lo que sea que estuviera anotando y me mira con compasión.

- Bueno... ahora puedes estar más tranquila, ese desgraciado no va a volver a cruzar por sus vidas nunca más - Dice, yo asentí.

- ¿Puedo irme ya? - Pregunté, estar aquí me agobiaba.

Ella asiente y yo me fui, al salir vi a mis amigas y mi madre quienes al verme salir corrieron hasta mi.

- Lena, Mateo despertó - Dijo mi madre, y yo sentí que mi mundo se detenía por un corto segundo antes de que todas fuéramos al hospital y para llegar más rápido nos llevó un policía.

Fuimos a su habitación y yo pude divisar a su familia, todos angustiados claramente, hasta Luka.

La madre al vernos llegar parece... molestarse...

- ¿Qué haces tú aquí? ¿No te bastó con meter a mi hijo en tus problemas? ¡¿A caso quieres que lo maten?! -

Agaché la cabeza y apreté mis manos las cuales comenzaron a temblar.

- Yo lo... - Mamá apoya su mano en mi hombro y niega con la cabeza y para mi sorpresa Luka da un paso al frente.

- No culpes a la muñeca por las decisiones de tu hijo, yo si fui testigo de como Mateo no la dejaba en paz para meterse él mismo en sus problemas, y créeme... hasta a mi me irritaba... No entiendo como ella lo soportó - Luka se cruza de brazos - Y que falta de empatía tienes vieja, me recordaste el porqué te odio, gracias -

Selena se acerca a mi y me sonríe como puede.

- No hagas caso a lo que diga mi madre... Mateo no estaba en la obligación de ayudarte pero aún así lo hizo... así que no es tu culpa, no te disculpes - Dice antes de abrazarme.

Yo le devolví el abrazo agradeciéndole por las palabras, pero en ese momento un doctor sale de la habitación de Mateo llamando toda nuestra atención.

- ¿Como está mi hijo? - Pregunta la señora Keller.

- Su hijo está bien, pudimos remover la bala sin inconvenientes - Menciona.

Yo solté un suspiro de alivio y me dejé caer al suelo de rodillas, Selena me sigue agarrándose igual de aliviada y sonriendo me mira.

- ¿Lo ves? Mi hermano está bien... -

Sonreí un poco y asentí.

- Me pidió que dejara pasar a la señorita Lena Moore - Dijo de repente y todos me miran, yo me levanté con ayuda de Selena.

- Soy yo - Dije. Él se hace a un lado para darme espacio para entrar, miré de reojo a la madre de Mateo antes de entrar al habitación y cerrar la puerta tras de mi.

Y ahí lo veo, sentado en la camilla conectado a esas máquinas...

- Hola... - Dije llamándo su atención, él me mira y sonríe.

- Hola - Dijo.

Yo suspiré profundamente antes de acercarme a su lado.

- ¿Cómo te sientes? - Pregunté jugando con mis dedos tras mi espalda.

- Bien, no me duele nada por la anestesia... ¿Y tú... ? ¿Cómo estás? - Preguntó.

- Ahora mejor... -

Él me sonríe aún más y levanta su mano hasta mi mejilla y yo me acerqué a él para besarlo levemente.