Capítulo 16

- ¿Por qué no vas a molestar a la chica que lo beso? Ella tal vez si sea algo para él - Respondí ya irritada, estos chicos molestan bastante.

- Porque esa chica no es nada para él ¿Quién apartaría a alguien que le gusta? Y no le vi contento cuando ella lo besó - Dice.

- Hm... - Fruncí los labios.

¿Mateo apartó a Camila? Bueno, sea el caso o no, eso no es mi problema.

Comencé a retroceder para irme ya pero él me seguía.

- Me encantaría quedarme a hablar contigo, de verdad, pero tengo cosas más importante que hacer - Dije dándome vuelta, sentí su mano en mi hombro de nuevo y su agarre era fuerte.

- Ah no linda, no te irás - Unos chicos, que eran de su equipo, aparecieron - Mateo siempre me quita lo que quiero... es mi turno de devolverle el favor -

- ¿Y tú cómo sabes que soy alguien que Mateo aprecia? ¿Qué no ves que si fuera alguien para él correría hasta él y lo abrasaría o él vendría hasta mi? - Pregunté intentando soltarme de su agarre pero él lo hacía más fuerte.

- Lo sé por la forma en la que te dedicó la anotación, él nunca dedicó anotaciones a nadie y... estoy seguro que él siente algo por ti y tú por él... - Respondió seguro.

- Te equivocas, yo no no siento nada por Mateo y él no siente nada por mi - Dije firme - Así que ¡Ya suéltame! - Exigí.

- Aún no linda -

- ¡Que me sueltes! - Forcejeé para salir pero él me sujeto los brazos haciendo que mis muletas se caigan y termine casi colgada de él.

- Oye imbécil - Dejé de forcejear e Ian sonríe.

Ian hace que me apoye contra él y me rodea por la cintura para evitar que me vaya o caiga. Todos nos damos la vuelta para mirar hacia un grupo de chicos, el equipo de fútbol de mi instituto. Mateo estaba al frente de todos.

- Mateo, suerte te encuentro - Este me lanza como a un juguete hacia atrás donde sus gorilas me sujetan.

- Mierda - Me quejé e intenté salirme, pero me era imposible.

- Ian, mejor suéltala ya y... - Dice Mike.

- Tu no te metas - Dice Ian.

Mateo nos mira pero de forma seria, mira a Ian y aprieta los puños.

- Tú no metas a quienes no pintan en nuestros problemas, Ian... así que suéltala - Dice Mateo cruzándose de brazos.

Jamás lo había visto así... de serio... sentí un escalofríos recorrer mi cuerpo y me sentí erizar a la vez.

- Yo creo que no, es mi momento de quitarte algo a ti... - Dice Ian y comienza a reír, mira a sus gorilas y sonríe.

- ¡Ya déjenme en paz imbéciles! - Dije intentando golpearlos, Ian camina hasta mi y me agarra de la mandíbula para levantar mi mirada.

- Qué chica ¿Te gustan las difíciles, Mateo? -

Mateo avanza unos pasos, yo intenté morder la mano de Ian para que deje mi rostro y él la saca rápidamente antes de que pueda agarrarlo.

- Muerde, está chica es peligrosa... creo que me gusta - Menciona sonriendo.

Como quisiera tener los dos pies en perfecto estado, así le daría una patada en las pelotas a sus gorilas para que me suelten.

- Ian, te lo repetiré una última vez, suéltala - Dice Mateo acercándose más. Ian se acerca a él también y ambos quedan frente a frente.

- Y si no ¿Qué? -

- Pasa esto - Lo siguiente fue que Mateo le da un gran golpe en el rostro a Ian tirándolo al suelo.

Los gorilas que no me sujetaban se le acercaron y se pusieron frente a Ian para defenderlo, Mateo se aparta unos pasos sonriendo victorioso.

- Wau, necesitas que unos gorilas te defiendan ahora, eh... - Dije burlándome.

Ian me fulmina con la mirada, se levanta con su nariz rota y camina hasta mi. Mateo intenta llegar pero los gorilas de Ian lo detienen e igual al equipo de Mateo.

- Mejor te callas, maldita perra -

Apreté los dientes y los puños.

- Tú no mandas sobre mi, imbécil. Además de eso eres un debilucho y cobarde que no puede defenderse solo y necesita tocar un punto débil a alguien para vengarse... solo eso me das a saber de ti, pero también eres tan idiota por creer que yo sería el pinto débil de Mateo - Mencioné.

- Si tú no eres ningún punto débil... ¿Por que él está aquí... tratando de defenderte? - Preguntó.

- Porque... - Me quede callada al no tener argumentos.

Mateo no era ni mi amigo... ¿Por qué está aquí entonces?

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top