Capitulo 76
[Harry]
"Joder, lo-lo siento," tartamudeo en un susurro. "Lo siento tanto Lucy."
“Harry no-no llores,” escucho su voz débil y mis manos se aferran más a ella.
Pero es demasiado tarde, estoy llorando como un jodido bebé por Lucy.
Los dedos de Lucy acarician suavemente por mis no bien formado rizos y yo entierro mi nariz aún más en su cabello mojado. ¿Por qué su cabello tiene que oler tan jodidamente bien? Creo que voy a llorar aún más.
“Lo siento,” repito una vez más.
Desearía poder decir las palabras y en verdad obtener un perdón pero es prácticamente imposible.
Ahora que lo pienso ni siquiera puedo recordar la última vez que lloré y posiblemente fue por mi perro que murió hace unos 9 años atrás. Definitivamente nunca lloro porque llorar es mostrar debilidad. Me siento tan avergonzado y expuesto y detesto esto. No quiero que ella sienta pena de mí, no necesito la lastima o compasión y menos de Lucy.
Sus brazos alrededor mío es un alivio pero al mismo tiempo me está volviendo loco. Es un alivio porque es Lucy pero me desesperan porque están muy delgados para mí gusto. ¿Qué rayos le sucede a ella? Aparte ¿acaso su jodido novio Eric no le dice nada al respecto? Ese hijo de puta.
Sollozo como un bebé en su hombro y las palmas de mis manos se deslizan de su espalda hasta sus costillas y Lucy suelta un pequeño quejido. Me alejé enseguida y ella bajó la vista. Sé que algo va mal.
“¿Qué sucedió?”
“Nada,” se abraza a sí misma y no se atreve a mirarme.
“¿Te duele?” Traté de tocar sus costillas pero Lucy gateó lejos de mí. “Lucy,” le advierto mientras gateo hacia ella. Su espalda choca contra la pared y su zapato se posa sobre mi hombro para detener que me acerque más.
“Estoy bien,” murmuró.
Soltó un quejido porque le dolían las costillas, debe tener algún hematoma y yo necesito verlo. No veo el problema porque yo ya la he visto sin camiseta aunque haya sido como una vez en todos esos meses.
“Déjame—“
“No,” ella murmuró firmemente.
Por unos segundos nos quedamos así, mis ojos recorren de su tobillo y a través de su pierna y subo a su rostro. Sus mejillas pintadas de rosados y sus labios entreabiertos pero lo que capta mi atención es la pequeña herida en el extremo de su labio inferior. Cierto, tengo cosas que hacer.
“Ve a la sala y yo buscaré algún botiquín o algo que ayude con tus heridas,” explico antes de levantarme.
Limpio mis lagrimas con el dorso de mi mano y me dirijo al baño. Busco en el pequeño mueble y hay alcohol, un par de curitas y algodón. Hago mi camino hacia la sala y ella está sentada en el sofá.
“Sólo tengo esto, espero que sean suficiente.”
Lucy estira su mano hacia mí y yo frunzo el ceño. “Puedo ayudar también.”
Yo quiero hacerlo porque ella me ayudó varias veces cuando estaba ebrio y esa porquería.
“Vamos,” dice firmemente y estoy increíblemente sorprendido porque no ha tartamudeado ni vacilado una sola vez.
Derramo alcohol en el pedazo de algodón y se lo entrego. Lucy se concentra en sus manos y lo desliza alrededor de sus palmas. Frunce un par de veces y quizás es por la quemazón del alcohol contra su piel raspadas.
Aunque sus ojos aún estén rojos ella se ve determinada, más madura y menos vacilante. Necesito escuchar su tartamudeo, solía no soportarlo al principio pero aprendí a quererlo y adorarlo.
“¿Qué?” Ella pregunta y no me he dado cuenta que la he estado mirando todo este tiempo.
Sacudí la cabeza y deslicé el algodón por su tobillo herido. Rasguños no tan profundos pero lo suficientemente para sangrar. Una vez que terminé con el tobillo agarro otro algodón y subo a su frente. Me arrodillo apoyando una mano sobre su frente y la otra en el sofá.
“Necesitas comer algo,” murmuré sin mirarla.
“No, estoy bien.”
Fruncí el ceño, debe estar bromeando. De pronto me surgen deseos de gritarle y preguntar por qué está tan delgada y que no me gusta la manera en que está. Estaba mejor antes, más carne en su cuerpo.
Le doy un rápido vistazo a las pecas que decoran sus pómulos y nariz y mis dedos accidentalmente se deslizan por su clavícula. Su piel helada y probablemente con un olor a lluvia. Encontré valentía y beso su mejilla antes de levantarme. Por un momento pensé que me daría una cachetada y no importa realmente porque lo merezco pero nada sucede, Lucy ni siquiera mueve un solo musculo.
“Volveré enseguida,” le informé antes de salir por la puerta.
Salgo del edificio y aún llueve, maldito calentamiento global. No sé si habrá algún pequeño local cerca pero luego de caminar unas calles finalmente encuentro una tienda de comestibles. Honestamente no sé lo que a Lucy le gustaría comer así que decido por cereales, leche, té y barras de chocolate. Glucosa, glucosa, es lo único que pienso.
Cuando regreso ella está cubierta con una manta y me pregunto de donde lo sacó. Sacudo mi cabeza y mi cabello mojado libera gotas de agua, me deshago de mis zapatos y mis calcetines están mojados así que me los quito. Voy a la cocina y preparo todo. Regreso con dos cuencos con cereales y leche y dejo las barras de chocolate sobre el sofá.
“Si quieres té avísame,” le digo mientras le entrego su cuenco.
“Encontré esto,” ella murmura y a su lado hay otra manta.
“Gracias,” digo avergonzado y cubro mi cuerpo con el material.
Lucy se queda sentada en el sofá y yo permanezco en el suelo. Comemos con el sonido de la lluvia de fondo.
“¿Este es el apartamento de tu padre?”
“Sí, ha pasado un tiempo desde la última vez que lo arrendó.”
“¿Tienes un nuevo tatuaje?” Ella pregunta mirando mi brazo. Bien, mierda, ¿cómo lo notó? Está escondido entre los otros. “¿Por qué un corazón?” Se inclina un poco y sus dedos tocan la tinta negra. Es un corazón negro y pequeño.
“La culpa de Zayn,” rodé los ojos. “Una noche de verano, estábamos jugando y estaba de equipo con él y él empezó apostar cosas y una de esas fue este maldito tatuaje, él también lo tiene.”
Me dio un corto asentimiento antes de meter la cuchara en su boca. Agarro una de esos curitas y lo pego en su tobillo desnudo. Mis dedos agarran su barbilla y examino el pequeño hematoma en su mandíbula. Rompe mi corazón pero debo recordarme que podría ser peor. Trato de no pensar demasiado o volveré a la habitación a destrozar todo otra vez. Mi padre va a matarme.
“¿Por qué no te colocas tus lentes?” Sacudo la mano en lo alto y Lucy alza una ceja. “Um, ¿puedes verme?”
“Sí, puedo verte pero tengo que forzar más la vista,” ella responde y saca del bolsito café sus lentes. Suspiro en alivio porque con sus lentes es como la manera en que la recuerdo y quiero que se quede así.
Mi celular suena en mi bolsillo y decido apagarlo sin ver quién me está llamando. No creo que sea importante, nada es realmente importante excepto Lucy.
Recuerdo que me está ocultando algo así que dejo el cuenco de cereales a un lado y junté las manos. ¿Cómo lo digo?
“Quítate la camiseta Lucy.”
¿Qué diablos va mal conmigo? Urg, yo sólo—eh, apesto, esa fue definitivamente la peor manera de decirlo.
“¿Qué?” Se ruborizó y sus manos se aferraron a la manta.
Trago el bulto en mi garganta y pienso en lo que estoy a punto de decir.
“Te dolió cuando te toqué, sólo-sólo quiero verlo.”
“Estoy—“
“¡No, no lo estás!” Grité e inmediatamente me arrepiento.
Lucinda deja su cuenco en el suelo y se quita la manta. ¿Qué? ¿Acaso se va a quitar la camiseta? Siento mis mejillas ridículamente ruborizarse. Yo no estaba hablando enserio o quizás sí pero la cuestión es que no estoy listo.
Estaba teniendo estúpidos pensamientos cuando en verdad Lucy abraza sus piernas mientras sus ojos se tornan llorosos. Oh no.
“Debo hablar sobre lo que pasó."
Oh no, no por favor, no estoy listo...probablemente explote otra vez.
"Ellos-ellos hicieron cosas horribles,” habla lento.
Mis puños se aprietan y trato de mantener la compostura.
“Lo siento Lucy, lo lamento tanto.”
“Nadie nunca—quiero decir, nunca había un visto un hombre golpear a una mujer.”
Sus palabras están llenas de tristeza y pronto su tristeza se convierte en la mía. El sentimiento se bombea por mis venas y alcanza mi corazón. Claro que esto es chocante para ella y debe estar traumatizada. Por un momento olvidé que Lucy tiene la vida perfecta, sus padres son jodidos doctores, tiene buenas notas, es buena alumna y buena hija, nunca había tenido un novio lo cual significa que nunca había sufrido por amor excepto por mí. Ella no se mata a sí misma con drogas o alcohol y además tiene pocos amigos y todos ellos son leales…ella no sabe lo que es una traición o mentiras o cualquier cosa relacionada con eso. Esto jamás sucedería en su mundo y todo esto pasó por mi culpa porque yo la envolví conmigo.
“Él-él le pegó a una de las chicas que trabajaba ahí, fue horrible.”
“Ellas escogieron eso Lucy,” murmuré y ella frunció el ceño.
“¿Por qué?”
“Algunas chicas le gusta eso, viven por eso, prostitución y desnudarse para hombres y otras no tienen otra posibilidad.”
“Eso es horrible.”
“Eso es la vida real.”
Ella me mira a través de las lágrimas antes de frotar sus ojos con la manga de su chaqueta.
“¿Solías ir a ese lugar?”
“Sí, pero hace mucho tiempo.”
“¿Ibas a ver a esas mujeres desnudarse Harry?” Le doy un corto asentimiento y bajo la cabeza. Dos años atrás quizás no me avergonzaría de eso pero ahora lo estoy. “¿Sabías que las golpeaban?”
“No hasta que lo vi.”
“¿Por qué ellos me secuestraron?” Lucy traga saliva de manera audible y yo abrazo piernas y apoyo mi barbilla en su rodilla igual que ella. “¿Por qué a mí? ¿Y por qué dijo que la próxima vez sería Gemma? Esto es-es espantoso Harry,” solloza en silencio y quiero abrazarla pero sería inapropiado.
“Creo que sé porque,” miro hacia otro lado porque ver a Lucy sollozar literalmente me está matando. “Ellos deben haberme visto contigo cuando estábamos juntos, jamás se acercarían a mis amigos y tú y Gemma son todo lo que tengo.”
“Tú no hablas más con tu hermana,” ella murmuró. “Y nosotros jamás estuvimos juntos, dudo que-que yo sea todo lo que tú tengas Harry,” confiesa amargamente y sus palabras me tomaron de sorpresa. No me percaté que dije que ella es todo lo que tengo y que más encima usé la palabra en presente.
Estoy sin palabras. Trago saliva y agarro el cuenco de cereal.
“Tienes razón, es pasado...¿Cómo supiste que no hablo más con Gemma?”
“Hablé con ella,” respondió sin más y luego sólo hay silencio, tortuoso y eterno silencio.
Se frota la nariz con la manga de su chaqueta y luego agarra una barra de chocolate.
“Tienes una novia,” Lucy murmura y yo alzo una ceja. Me enfurezco, este tema es completamente irrelevante. "Una novia de verdad..."
“Y tú tienes uno,” replico con mandíbula apretada.
“Él es mi amigo—“
“¿Tu amigo?” Suelto una risa amargada y tengo tantos deseos de golpear a Eric. “¿Qué estás haciendo con ese idiota?”
“No-no es tu problema.”
“¿Por qué contestas así? ¿Qué está haciendo Eric contigo?”
“Él no ha hecho nada, en cambio tú sí.”
Oh Dios mío, eso fue como una puñalada y Lucy está torciendo el cuchillo. Maldito Eric, claro que él está detrás de todo esto, posiblemente llenando a Lucy con pensamientos más amargados y malvados con respecto a mí y arruinando la poca reputación que me queda frente a ella.
“Nunca hablas de esta manera.”
“No puedo ser estúpida para siempre Harry.”
Ella no es estúpida, Lucy jamás podría ser estúpida.
“Jamás podrías ser estúpida,” murmuré mientras mi cuchara revuelve lo poco de cereal que queda.
“Así fue cómo me llamaste—“
“¡Pero no lo eres!” Exploté irritado, irritado por todo lo que ha sucedido y por el hecho de que Eric está con ella. "¡No lo eres!" Repito y quiero convencerla.
Trato de calmar la ira que se expande por mi cuerpo. Deslizo los dedos por mi cabello y luego agarro otro curita y se lo pego en la pequeña herida de su frente. Mis manos quedan vacías una vez que terminé y mi piel pica por golpear algo. Cálmate Harry, calma.
“Deberías llamar a tu madre…ya sabes para avisarle que estás bien.”
“Mi madre no me ha llamado Harry, no tengo llamadas de nadie,” contestó cansada.
“¿Te sientes mejor? ¿Quieres té?” Pregunté.
Desesperadamente quiero cambiar de tema, no quiero que ella me ataque más, ya le mostré mi lado débil llorando por ella y por toda la porquería que sucedió hoy. Perdí toda mi cordura por ella y nunca pensé que tendría pensamientos así pero quiero matar a Bob. Sé que soy una persona llena de odio e ira por la humanidad pero nunca se había cruzado por mi mente el pensamiento de matar. Sí, ahora que me doy cuenta yo mataría por ella, yo golpearía a cualquier persona por Lucy. Quizás siempre lo supe pero lamentablemente necesitábamos pasar por esto para sacar a flote este pensamiento.
“Estoy bien,” responde y suelta un gran suspiro. “Quiero irme a casa.”
¿Qué?
“¿Qué?”
“Sí, has hecho suficiente y lo aprecio enserio.”
“Pero-pero no puedes irte,” dejé escapar y mi mente está tratando de encontrar alguna excusa.
“Estoy cansada y simplemente quiero olvidar este día.”
“Puedes dormir aquí,” señalé y ella alzó una ceja.
“No quiero Harry, estoy bien.”
“¿¡Podrías parar de decir eso!?” Exploté otra vez porque sé que está mintiendo. “Eso es mentira Lucy.”
“¡¿Entonces qué quieres que diga?!” Salté cuando ella gritó. “¡No estoy bien y lo sabes pero no quiero admitirlo frente a ti porque no te lo mereces!”
Porque no te lo mereces.
Porque no te lo mereces.
Me siento estúpido y realmente herido. Está torciendo el cuchillo otra vez y más fuerte.
“No grites otra vez,” murmuré.
“¿Qué?”
“No lo hagas, jamás lo haces.”
Me dio un corto asentimiento y se levantó del sofá. Mis ojos siguen todos sus movimientos, Lucy recoge sus zapatos, se sienta en el suelo y empieza a colocárselos. Está actuando con una determinación que jamás había visto antes pero sé que en el fondo está asustada y confundida.
Luego de colocarse los zapatos Lucinda se queda mirando sus piernas y de pronto empieza a llorar. Oh Dios mío, yo sólo—¿Qué?
Arrojo la manta y en dos segundos estoy frente a ella, me arrodillo y Lucinda evita mi mirada.
“¿Puedo, um, puedo abrazarte?” Creo que es lo mejor que puedo hacer en este momento.
Ella sacude su cabeza en un no pero yo lo hago de todas formas. Jalo su cuerpo hacia mí y envuelvo mis brazos a su alrededor. Lucha un poco contra mi agarre pero luego de unos segundos se da por vencida.
“No llores,” susurro. Supongo que está así por todo lo que sucedió, es difícil para ella y también lo es para mí. “Por favor no llores Lucy,” murmuro en su oído. Si sigue llorando probablemente yo también lo haga.
“Fue horrible, espantoso Harry,” las palabras salieron de su boca y sus lágrimas empapan mi camisa.
"Lo siento tanto pequeña Lucy, lo lamento," le responde y mi voz es jodidamente débil y probablemente llore.
Mis dedos tiran su cabello hacia atrás para despejar su rostro, le quito los lentes y mis labios besan sus pómulos para limpiar sus saladas lágrimas.
“¡No hagas eso!” Me empuja y empieza a llorar más fuerte. ¿Qué hice? “¡No vuelvas a hacer eso otra vez y no actúes conmigo de esa manera!” Me grita y yo me siento pequeño.
“Lucy—“
“¡No olvides que te odio, te odio porque me usaste como un juguete!”
¿Cómo llegamos a eso? Yo sólo estaba tratando de ser amable.
Mis manos jalan su cuerpo en un abrazo y sus puños golpean mi pecho pero luego de unos eternos segundos ella se da por vencida otra vez. Me siento inútil y estúpido ¿cómo pude olvidar eso? Ella me detesta y probablemente siempre lo hará.
“Necesito irme a casa, necesito mantenerme lejos de ti,” escucho su débil voz.
Jalo a Lucy aún más hacia mí y su cuerpo descansa sobre mi regazo. Entierro mi nariz en su cabello y cierro los ojos. Sorpresivamente los dedos de Lucy acarician mi brazo, desliza su toque por mis tatuajes. Es acogedor.
“Necesito irme a casa,” repite las palabras pero no se mueve.
Una de mis manos descansa en su caja torácica y ella suelta un quejido. Olvidé que le duele y que todo esto es culpa de estos hijos de perra.
Cierro mis ojos más fuerte y olisqueo su cabello una vez más como un psicópata y luego empiezo a apartarla lentamente.
“Te llevaré a casa,” le dije y ella asintió. Lucy se baja de mi regazo y yo me coloco los calcetines y zapatos.
Debo admitir que pese a que Lucy tuvo sus recaídas ella actuó como una chica fuerte, estuvo más sólida de lo que yo esperaba. En verdad pensé que está noche ella pasaría acurrucada contra mí llorando sin parar pero fui yo el que me acurruqué en ella y lloré como un bebé.
Nuestra ropa no está empapada pero aún sigue húmeda. Le entrego a Lucy la manta y ella se envuelve en el material sin decir ni una sola palabra. Agarro su bolso y la sigo hacia la salida. Debo organizar todo este desastre después.
Corremos hacia mi coche y mi mano agarra el brazo de Lucy cuando estuvo a punto de caerse debido al suelo mojado. Me mira unos segundos a través de sus gafas y murmura un “gracias”. Luego de eso nos metemos al coche enseguida. La lluvia finalmente se está dando por vencida.
El viaje a su casa es tranquilo y ninguno de los dos está dispuesto a hablar, al menos no ella pero a mí sí me gustaría hacerlo pero soy demasiado estúpido.
Mis nudillos se tornan blancos por lo fuerte que estoy apretando el volante en este momento. Me duelen aún más cuando su casa ya está a la vista. Todo está calmado como todo vecindario de gente adinerada.
“Voy a protegerte Lucy,” dejé las palabras escapar tan pronto nos detenemos frente a su casa.
“¿Enserio?” Su voz es triste pero sus mejillas se tiñen de rosado.
“Lo haré,” le aseguro. No dejaré que nadie más se acerque a ella, lo que pasó hoy fue un horrible accidente, un espantoso error. No dejaré que ella pagué por lo que yo hice en el pasado.
Se desabrocha el cinturón y sube la cremallera de su chaqueta. Toma una gran bocanada de aire y sus ojos vuelven a mí.
“¿Me veo normal?”
Su rostro luce perfecto como si nada hubiera sucedido, su piel ya no está tan pálida y desde donde estoy yo su pequeño hematoma no está a la vista y sólo tiene un parche en su frente por donde nace su cabello. Ojeras también adornan su rostro y sus labios no tienen color pero aún así se ve bien, más que bien.
“Te ves bien Lucy.”
Asiente con labios apretados en una fina línea.
“¿Podemos…podemos denunciarlos?”
“Por desgracia no, pero yo me encargaré de eso.”
Asiente otra vez y suelta un pesado suspiro. Juega con sus dedos y sé que está pensando en lo que va a decir a continuación.
“Sé que lo que hicieron fue horrible,” habla y su voz se quiebra.
“Los haré pagar por lo que hicieron.”
“Pero no hagas nada de lo que luego te arrepientas Harry.”
Le doy un corto asentimiento mientras en mi cabeza tengo mil y un ideas de lo que me gustaría hacerle a ese cobarde Bob.
“Gracias por hoy, tú me cuidaste cuando pudiste no hacerlo—“
“Claro que lo haría Lucy,” la interrumpo frunciendo el ceño. “Y lo haría otra vez si fuera necesario,” le confieso y mis palabras hacen eco dentro del coche.
Sus ojos otra vez amenazan con traicionarla. Lucy estira su mano hacia mí como si fuera a tocar mi mejilla. Espero y espero...pero nunca sucede, su brazo se queda allí suspendido en el aire y después ella lo deja caer.
“Adiós Harry.”
Cerró la puerta y corrió hacia la entrada y se metió en su casa sin dar una mirada hacia atrás.
Golpeo el volante una vez más sintiéndome absolutamente frustrado, estúpido e inútil y luego conduzco hacia mi casa. Enciendo mi teléfono y tengo 2 llamadas perdidas de Niall y 20 de Emily. Psicópata, luego de lanzar la jaula de Sherlock…es un no para mí.
Estaciono mi coche frente a mi casa y desde acá puedo escuchar a mis amigos, básicamente gritan y se ríe muy alto.
Marco un número y espero pacientemente.
“¿Qué mierda?” Habla de voz tan pronto contestó.
“Um, hola Marcel, necesito hablar contigo,” dije educadamente porque no sé cómo hablar con Marcel.
“¿Qué? ¡Pues yo no!” Él me responde con su voz insoportable y yo ruedo los ojos.
“Es sobre Lucy—“
“¡Déjala en paz o te acusaré a tú mamá!” Él suelta un chillido en la línea y siento que mi paciencia se derrite en segundos.
“¿¡Puedes escuchar lo qué tengo que decir idiota!?” Le grito y se calla. Oh Dios, gracias. “Necesito que cuides de ella—“
“¡Pues eso es lo que hago, soy su mejor amigo!”
“No creo que lo estés haciendo bien realmente,” gruño.
“¿Por qué me estás diciendo todo esto? ¡Ha pasado meses!”
“No es tu maldito problema Marcel. Ahora cállate y escúchame, necesito que cuides de ella y principalmente de Eric.”
“¿Qué? ¿Qué tiene ese chico? Él se ve bueno.”
“¿Estás bromeando cierto? Es un jodido idiota y necesito que la vigiles y que trates de sacar información a él.”
“¿Por qué? A Lucy parece gustarle.”
Estuve a punto de lanzar mi celular y arrancar el volante del coche.
“Pensé que estabas enamorado de ella, ¿no harías lo que sea por Lucy?”
“¡Hey, no hables de mis sentimientos! Además yo jamás le gustaría, estoy en la zona de amigos para siempre,” suspiró en la línea y en verdad siento lástima por él pero tampoco creo que Marcel sería adecuado para Lucy.
“¿Por qué no estás tartamudeando?” Pregunto confundido.
“¡Mi proyecto social me ha ayudado bastante!” Contesta y desde acá puedo sentir su estúpida felicidad. Juro que ese proyecto social está desde que yo conocí a Lucy.
“Lo que sea. Mantén un ojo en Eric y trata de sacar información de él, cada vez que se siente amenazado él será cortante y frío es tan típico de él.”
“Bien, lo haré pero por Lucy.”
“Esa es la idea idiota. Una cosa más trata de que ella no pase tanto tiempo con Eric, él es tóxico.”
“Pero ellos tienen como una relación y—“
“Me importa una mierda, sólo hazlo ¿sí?” Resoplo y agarro mis llaves. “Demuestra que eres un Styles.”
“¿Qué diablos? No vengas con el apellido de la familia esto no es una película.”
“¡Sólo hazlo! Adiós.”
Cuelgo la llamada y me dirijo a la casa. Realmente no quiero estar aquí pero no tengo otro lugar a donde ir. Sinceramente quiero desaparecer por un par de meses o años.
Mis nudillos tienen hematomas azules y recordar la pelea y todo lo que sucedió provoca olas de ira en mí. Empecé a respirar porque si no lo hago voy a destrozar todo en la casa. Juro que este ha sido el peor día de mi existencia por lo que sucedió pero sólo fue bueno por el hecho de que vi a Lucy y ella me gritó que me odiaba pero fue bueno.
Mi celular vuelve a sonar y más vale que no sea Marcel.
“¿Qué?” No tengo ánimos para ser educado.
“¡¿Dónde mierda has estado?!” Emily ladró al otro lado de la línea. “¡Te cortaré en pedazos Styles!”
Ah mierda, de vuelta al maldito mundo real.
Importante.
-El capitulo igual me dio pea, están perdidos, lastimados, rotos, tristes, confundidos y hay muchas palabras sin decir y su relación me afecta mucho.
-También quiero agradecer a todas, ow ha llegado a 1 m. de lecturas y es súper emocionante y estoy muy feliz. Jamás pensé que esto sucedería así que estoy bien conmocionada. Sé que no es la mejor historia y jamás lo será y que ha sido acusada tantas veces de cliché pero aquí estoy yo y ustedes y todo esto sólo se debe a cada una de las personas que se dan el tiempo por leer esto así que muchas gracias. Espero que les haya gustado el capitulo y prometo que vendrá más drama, misterio, amor, traición y diversión y mucho más así que espero que se queden hasta el final. Saludos a todas xox
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