Capitulo 74

-¡Espero que lo disfruten, gracias por leer!

[Lucy]

 

“He horneado galletas y un pastel y compré tu leche favorita Lucy y las manzanas que querías,” mamá dice mientras revisa su bolso.

“Gracias mamá,” sonrío y corro a la isla de la cocina para observar las galletas. “¡Mamá están increíbles!” Estallé emocionada.

Mis dedos agarran una de las galletas, tienen formas y colores y diseños y no sabía que Lily podría hacer todo esto.

“¿Cuándo aprendiste a hacer esto?”

“Es un secreto. La próxima semana tendrás que hacerte unos exámenes de sangre quiero saber cómo está tu anemia,” mamá se echa al hombro su bolso y besa mi frente. “Estaré de vuelta en la madrugada, cuídate.”

“Están deliciosas,” la sonrisa creció en mi rostro y cubro mi boca llena de galletas.

“Cuídate Eric, diviértanse pero no demasiado ¿sí?” Mamá nos entrega una sonrisa y yo me ruborizo pero yo me escondo con la galleta.

“Seguro Lily,” Eric responde desde el marco de la puerta.

Mamá se marcha de la cocina y segundos después escuchamos la puerta de al frente.

Por un momento soy una explosión de felicidad. Me apresuro a buscar la leche y me sirvo un poco en el vaso. Estos pequeños detalles me hacen muy feliz y me alegro que mi madre lo haya hecho. Ni puedo recordar la última vez que horneó galletas y pastel.

Tomo asiento y mis piernas se mueven hacia adelante atrás y me estoy sintiendo como una niña pequeña.

“Tú mamá te trata como una niña pequeña ¿no lo crees?” Eric habla mientras toma asiento al lado mío.

“Soy la única chica,” extiendo una galleta a Eric y él se niega. “Te estás perdiendo la diversión.”

“¿Tú mamá remodeló la cocina?”

“Sí, es bastante obvio. Ella quería hacerlo hace un tiempo y finalmente tuvo la oportunidad y, bueno, nueva cocina.”

“¿Y qué es lo que ella hace?”

“Ella es doctora pensé que lo había dicho.”

“¿Y ella quiere que tú estudies medicina como ella?”

“¿Por qué dices eso?”

“Conocí a alguien que sus padres eran doctores y bueno él tuvo que hacer lo mismo...fue más como una obligación.”

“No lo sé, no hemos hablado de eso.”

Mike quería que Madison estudiara medicina pero ella falló en sus exámenes y decidió trabajar este año y el próximo empezará sus estudios. Sólo digamos él no estaba nada contento por la decisión que tomó su hija.

“¿Sabes lo qué quieres?”

“Aún no ¿qué hay de ti?”

“Tampoco yo,” él suspira. “Resulta frustrante, este año pasará volando y tenemos que tomar decisiones.”

“Lo sé, lo malo es que el tiempo no espera por nadie.”

“Pienso lo mismo,” Eric agarra una galleta y le da un mordisco. “Esto está muy bueno.”

“Te lo dije.”

“No me digas que estas galletas tienen un secreto que ha pasado de generación en generación y que tú eres la próxima que debe aprender todo sobre estas deliciosas galletas.”

“Sería genial pero no, familia equivocada.”

Agarramos el plato de galletas y nos dirigimos a la sala. Me siento en el sofá y Eric se acuesta descansando su cabeza en mi regazo. Le doy un beso en la frente y ambos compartimos miradas incomodas, nunca nos besamos en la frente, para ser honesta  apenas nos besamos y sí, somos raros.

Vemos la televisión. Mis dedos juegan con su cabello, luego trazan el camino de su mandíbula y por su cuello hasta su clavícula.

“Tu amiga Cassie no es muy agradable,” Eric habla y yo alejo mi dedo de él.

“Ella es sólo complicada.”

“Todas las chicas son complicadas,” él rueda sus ojos en molestia y yo ignoro eso.

“Eso no es cierto, ¿acaso yo soy complicada?” Alzo mis cejas esperando una respuesta.

“Especialmente tú.”

“¡¿Qué?!”

Estoy tan confundida, pensé que era una chica fácil de comprender.

“Sí, eres misteriosa, guardas muchos secretos y aún no has sido capaz de contar todo sobre ti, siempre hay una restricción.”

 “No creo que sea misteriosa. Además no es una obligación contar todo, creo que todos tenemos derechos a tener nuestros secretos.”

“Supongo. Ahora de vuelta a Cassie, yo creo que está celosa,” Eric se sienta y nos quedamos frente a frente.

“¿Celosa?” No comprendo.

“Sí, ha estado demasiado tiempo soltera y quizás eso la está afectando. Quizás está celosa de nosotros.”

“¿Nosotros? No somos una pareja y apenas nos tomamos de la mano o algo así.”

“¿No somos pareja? Me siento rechazo,” él pretende estar ofendido apoyando una mano sobre su pecho dramáticamente.

“Tú dijiste que no eras mi novio y honestamente no importa Eric,” me encojo de hombros.

“Concuerdo contigo, sin etiquetas porque me enferma,” él asiente. “De todas maneras yo creo firmemente que ella está celosa de nosotros, de nuestra amistad y quizás no nos quiere juntos y esa es su manera de expresar su molestia.  Ha estado mucho tiempo sola tal vez está desesperada.”

“Basta, eso no es cierto, Cassie jamás haría eso. ¿Por qué tenemos que seguir hablando sobre esto?” Espeto enfadada y Eric sonríe. Estoy molesta con él.

“Buena respuesta. No te gustó lo que estaba hablando y defendiste a tu amiga y expresaste tu opinión. Muy bien ardillita.”

“Espera ¿qué? ¿Me estás probando?”

“Sí, más o menos,” Eric se encoge de hombros. “Quería saber cuán lejos me ibas a dejar con mis palabras y en verdad no me agrada Cassie.”

Suspiro y froto mis manos contra mi rostro. Esto es frustrante, el hecho de que sea mi amigo y no le agrade a mi mejor amiga lo hace todo más complicado.

“Una prueba, me siento como un animal.”

“Eres una ardilla bebé,” sus dedos pinchan mi mejilla y yo abofeteo su mano lejos de mí. “Eso es lo más agresivo que veremos de ti Lucy. Um y Cassie definidamente está celosa de nosotros y ella sólo quiere a alguien como yo.”

“¡Deja de hablar de ella, es mi amiga!” Gruño.

Mis manos empujan su pecho pero me agarra de las muñecas y me jala hacia su cuerpo, prácticamente me obliga a acostarme encima de él.

“No sabía que eras presumido,” ruedo los ojos e ignoro la presión de mi pecho contra el suyo.

“Sólo estaba diciendo la verdad,” suelta mis muñecas y yo apoyo mis manos en sus hombros.

La cabeza de Eric está apoyada contra el brazo interior del sofá, nuestros rostros están cercas, sus manos descansan sobre su nuca y para resumir él está en una posición relajada.

“Frotar narices es tonto ardillita.”

Mis mejillas son carmesí por sus palabras, pensé que rozar narices era tierno.

“¿Ardillita es mi nuevo apodo?” Él asiente sosteniendo una sonrisa. “Es ofensivo Eric.”

“Es porque comes como una ardilla.”

“Tienes suerte que yo no sea muy buena eligiendo apodos,” resoplé.

“Lo que sea ardillita,” él susurra antes de presionar sus labios contra los míos.

No dura mucho porque suelto una risita y arruino el beso.

“Tenemos sabor a galletas.”

Eric sacude su cabeza con una sonrisa y me besa otra vez.

+

“Voy a buscar trabajo, ¿crees que esto está bien?”

Estoy más que paralizada porque Madison me está hablando y aún más cuando extiende hacia mí su currículo.  

“¿Por qué me estás preguntando?”

“Porque tú eres inteligente y sólo quiero saber si mi currículo luce inteligente,” se encoge de hombros.

 “¿Trabajaste en todos estos lugares?”

Debo levantar un poco la cabeza si quiero mirar a Madison, está usando unos tacones de color negro y una camiseta del mismo color y con flecos y unos jeans que hacen la lucir súper delgada. Y por supuesto ella está maquillada a la perfección y su cabello luce brillante como es de costumbre. Wow, mi hermanastra siempre ha sido muy hermosa.

“En la mayoría pero tuve que mentir un poco, realmente necesito trabajar,” ella arrebata la hoja de mis manos. “¿Entonces está bien?”

“Sí, conseguirás un trabajo estoy segura,” sonrío y me ajusto los lentes. “Ahm Madison ¿puedo hacerte una pregunta?” Le digo cuando abre la puerta.

“Rápido.”

“¿Cómo haces que tu cabello sea tan brillante?”

“No sé, creo que es genético, pero tu cabello no está tan mal yo le aplicaría huevos o aguacate o aceite de oliva.”

No estaba esperando así sino una respuesta más corta y grosera o simplemente su silencio pero en verdad me respondió. Tengo miedo.

“Ahm, gracias.”

“Y por favor haznos un favor a todos y ponte lentes de contacto,” rueda sus ojos y cierra la puerta.

De ninguna manera, jamás haría eso.  Amo mis gafas y los lentes de contacto son peligrosos, requieren mucho tiempo de higiene y cuidado y aparte no sería capaz de aplicármelos porque me pone muy nerviosa. Estoy segura que terminaría en el hospital y perdería un ojo de lo torpe que soy.

Ahora que estoy sola en casa decido limpiar lo mejor que puedo, mamá siempre está ocupada o cansada así que ayuda de mi parte sería bueno.

Lo más extraño es que me divierto, mato el tiempo limpiando, escucho músico y me como unas galletas. Me tomó un par de horas limpiar todo pero cuando termino me lanzo en el sofá y cierro los ojos.

 No estaba esperando a nadie así que no tengo idea quién está tocando el timbre de la puerta en este exacto momento.

“¿Gemma?”

“Hola Lucy,” sonríe a medias y yo estoy confundida. “Sé que es raro ¿puedo entrar?”

Su rostro no muestra rastros de emociones, su piel está muy blanca y hay grandes ojeras que la hacen lucir muy cansada.

“Ahm, sí, claro. ¿Dónde está Charlie?”

“Está con mi madre,” Gemma responde tranquilamente y toma asiento en mi sofá. “Espero no molestarte.”

“Para nada no te preocupes, ¿quieres agua o té o café? Tengo leche si te gusta.”

“Agua.”

Regreso con el vaso de agua y ella me agradece en un susurro.

“¿Y cómo estás Lucy?”

“Estoy bien pero tú no te ves bien.”

“Siento que fui mala contigo—“

“¿Qué? ¿Por qué?”

“Quiero decir, tú me contaste lo que sucedió y golpeé a Harry y luego desaparecí.”

“Gemma no importa y ¿golpeaste a Harry?”

“No hablamos más, no hemos hablado en meses.”

Eso me hace sentir muy mal, sabía que no debería haber contado lo que sucedió. No quería provocar esto entre hermanos. Harry ya es bastante solitario y yo sabía que su hermana significa mucho para él y por mi culpa ellos no hablan más.

“Oh Dios, lo siento, lo siento mucho Gemma no era—“

“Está bien Lucy, enserio. De alguna u otra manera yo me hubiera enterado, la verdad siempre sale a flote. Harry merecía lo que le hice.”

Trago saliva y espero a que prosiga.

“Harry y sus amigos están en problemas, ellos siempre lo han estado,” Gemma habla con la vista sobre sus botas. “Hicieron cosas que estuvieron muy mal y siempre hay un precio que pagar. Yo también hice cosas que estuvieron mal y también pago el precio.”

“¿Gemma de qué hablas? ¿Qué está sucediendo?”

“Terminé con Taylor hace unos meses atrás pero me ha estado atormentando.  Tenía razones suficiente para terminar la relación y pensé que iba a dejarme en paz pero hace unas semanas atrás llegó a mi casa y-y,” ella empezó a llorar y supongo que ya sé cuál es el final de la historia.

Lo primero que hago es abrazarla y la hermana mayor de Harry esconde su cabeza en mi hombro.

“Necesitas decirle a alguien Gemma.”

“Acabo de hacerlo, te lo estoy contando a ti,” ella dice y se separa de mí.

“Pero-pero no puedo hacer nada al respecto, necesitas decirle a Harry.”

“Estoy segura que ambos terminarían muertos. No puedo hacerlo Harry está trabajando para él y—“

“No importa, tú eres su hermana.”

“No es tan fácil como crees,” ella sacude su cabeza. “Cometí un error, varios errores. Pensé que él podía cambiar, pensé que él era bueno pero Taylor es una persona muy enferma.”

“Gemma lo lamento tanto, necesitas alejarte de él.”

“No me ha visitado otra vez, lo amenacé con un cuchillo así que espero que él entienda mi mensaje.”

“Gemma tienes que tener cuidado,” agarro su mano y ella se limpia las lagrimas. “¿Qué hay sobre Charlie?”

“No toca a Charlie, no sería capaz y al menos hay algo de humanidad en él,” bebe un poco de agua porque su voz es rasposa. “Soy tan estúpida, ya no lo hago más pero antes aún resguardaba sentimientos por él y fui tan estúpida.”

“Puede suceder, no te sientas culpable, al menos ya lo has olvidado.”

“Siempre pensé que las chicas que son golpeadas por sus novios son tan estúpidas pero ahora creo que puedo entenderlas sólo un poco.  Sólo sucedió dos veces pero no puedo imaginarme esa gente que es golpeada todos los días,” se estremece mientras habla y mi mano se apoya en su espalda.

“Pero tú no eres una de esas personas, eres fuerte,” murmuro y espero que mis palabras le den ánimo y apoyo.

“No sé cómo pero lo soy,” bebe el resto del agua y se queda mirando al vaso. “El amor es raro. ¿Aún te gusta mi hermano?”

Mis ojos se abren de la sorpresa por su pregunta. Me ha pillado con la guardia baja. Mis sentimientos están apagados y no he hablado con Harry en tanto tiempo. Honestamente quiero creer que no lo sé pero la respuesta está dentro de mí y es algo que no puedo negar.

“Preferiría no responder.”

“No te juzgaría si lo hicieras, el amor es raro y a veces…a veces el corazón tienes razones que simplemente no podemos entender,” suspira pesadamente.

“Sí, creo.”

“Odio a Taylor, lo detesto con toda mi alma,” su mandíbula se tensa. “Y también odio mi hermano por tener la razón. Sólo no le creí porque Taylor no era así antes pero estaba ciega.”

Su voz es débil y creo que iré a buscar pañuelos si empieza a llorar otra vez.

“Estaba pensando en irme con Charlie o tratar de vivir con mi madre o empezar a hacer boxeo.”

“Todas tus opciones son buenas.”

“Me gustaría irme pero no tengo tanto dinero, tendría que trabajar más tiempo. Creo que empezaré a boxear, es una buena manera de auto-defenderse ¿no es así?” Yo asiento. “Podríamos hacerlo juntas. Sé que suena raro y que no hemos hablado mucho y lo siento pero te considero mi amiga.”

Me siento tan mal por Gemma y todo lo que le ha sucedido.  Ella es una buena persona y Charlie es adorable.  Quiero protegerlos, me gustaría hacerlo.  No puedo dejarla sola, no le habla a Harry y es por mi culpa.

“Tú también eres como una amiga para mí,” aprieto su mano suavemente y ella sonríe.

“Genial, gracias,” me responde tímidamente mientras mete uno de sus mechones lila tras la oreja.

Necesita relajarse y aclarar su mente, alejarse del dolor por un rato y disfrutar.

“Haré la cena, podrías traer a Charlie si quieres. Mis padres estarán de vuelta más tarde. Sólo si quieres claro.”

“Eso sería grandioso, gracias. Iré por Charlie ahora y compraré en el camino algo para el postre.”

“Está bien.”

Busco unos pañuelitos y se los entrego.

“Eres  una persona excelente, gracias por escucharme,” sonríe y se ve mejor a pesar de sus ojos rojos y su maquillaje corrido. “Puedes contar conmigo cuando quieras Lucy.”

“Tú también.”

Gemma habla con su madre y cuando cuelga el teléfono se gira hacia mí.

“Me gustaría que estuvieras con mi hermano, juro que si tengo la oportunidad mataré la perra de Emily,” Gemma bromea.

Me ruborizo por su elección de palabras sobre yo y Harry.

“¿La odias?”

“Emily es una persona muy cínica y odiosa, habla mucho de sí misma, te contaré más detalles sobre ella cuando regrese con Charlie.”

Si dijera que no estoy emocionada por saber más de Emily sería una mentira...¿es eso malo?

“Tú eres muy buena pero definitivamente eres la única persona que apruebo para mí estúpido hermano. Te veré en unos minutos Lucy.”

Y con eso Gemma se marcha y de alguna manera yo desearía ser la única persona para Harry.

+

Hoy es un sábado de perezosos. Mamá y Mike no están en casa y Madison está trabajando.  Estoy sola una vez más. Eric me llamó y yo mentí para rechazar su oferta, no es nada personal pero quiero verlo hoy.

Marcel y yo vamos a jugar ajedrez está semana así que voy a la librería para ver si logro encontrar algún libro relacionado al ajedrez. 

El clima está agradable hoy así que decidí usar unos shorts, creo que es la primera vez que salgo con este tipo de prenda.

La cena con Gemma estuvo bien, Charlie es tan adorable y es súper juguetón.  Me divertí con ambos y espero poder verlos pronto.  Quiero ayudar a Gemma y ser una distracción para ella. Espero que Taylor desaparezca, no hay una sola fibra en mi cuerpo que no sienta odio por él. Nunca he tenido pensamientos así pero él merece la muerte, ningún hombre en esta tierra debería maltratar a una mujer, jamás. Pensé contarle a Harry al respecto pero su mal temperamento jugaría en su contra y estoy segura que Taylor sería igual y esto terminaría en las peores circunstancias, quiero decir, con ellos matándose entre sí.

Saludo a Carl tan pronto entro a mi librería favorita. Charlamos por unos 10 minutos y luego me pierdo entre los pasillos en busca del libro de ajedrez. Pensé que sería imposible hasta que lo encontré, es un libro sobre técnicas, cómo jugar y datos interesantes sobre el ajedrez. Es pequeño y no tiene demasiadas páginas.

Luego de que compré el libro decido regresar a casa.  Quiero caminar y hoy tomé una ruta diferente al usual. Mis pasos me guían a través de calle y de pronto estoy caminando por un parque. He pasado por aquí algunas veces, hay verde por todos lados. Casi todas las bancas están vacías y desde donde estoy caminando puedo ver las calles y los pocos autos que transitan por esta.

Un chico pasó junto a mí a toda velocidad en su bicicleta y a la distancia camina un hombre con chaqueta negra. 

Reviso el libro que he comprado y leo la primera página. Mi cuerpo es empujado cuando mi hombro colisiona con el de alguien más.

“Lo siento,” le digo a la persona con la cual me tropecé.

“Sí, yo también,” responde y su voz es fría al igual que la expresión de su rostro.

Es el hombre de chaqueta negra es joven y de ojos negros y se ve normal excepto por el hecho de que sostiene una navaja en su mano.

Mi rostro pierde el color y dejé de respirar. Oh Dios mío, espero que esto sólo sea un robo.

Un pesado brazo rodea mis hombros y un pésimo olor a axila infecta mis sentidos.

“Si gritas, te mataré,” sisea la voz masculina al lado mío. No, no.

Siento una punta afilada presionando suavemente contra mis costillas y me muerdo el labio inferior para evitar gritar. El pánico se dispara por mis venas y el hombre me sonríe como si nada sucediera.

Mis ojos se vuelven al joven hombre de chaqueta  frente a mí y la navaja ya no está.

“Tienes que venir con nosotros dulzura,” él mueve sus manos en un gesto de ‘las damas primeros’.

MI cuerpo no puede moverse, mis manos aprietan el libro contra mi pecho y mis ojos escanean rápidamente alrededor para encontrar a alguien que pueda ayudarme pero no hay nadie a la vista. ¡¿Dónde está la gente?!

“Camina,” él hombre al lado mío gruñe y su fuerte mano me empujan.

Mis músculos se despiertan y mis piernas empiezan a moverse. Desearía correr pero los dos hombres están a ambos costados míos así que no hay posibilidad.

Mi respiración se agita y sé que las lágrimas están cerca. Quiero hacer preguntas pero mi boca no es capaz de reaccionar. ¿Qué está sucediendo? ¿Van a matarme? ¿Son violadores?

Apenas caminamos unos pasos hasta que llegamos a la calle. Pocos autos aparecen y hay tan poca gente y todos están en su propio mundo.

Mis ojos piden auxilio pero la gente está lejos y nadie parece notar mi mirada de pánico.  ¿Cómo nadie puede verme? ¿Cómo puede ser que lo que me está sucediendo sea completamente invisible a los ojos de los demás?

Doy un paso adelante y una mano grande aprieta mi brazo sin piedad y suelto un quejido de dolor.

“Actúa normal, si gritas te mato cariño,” repite su amenaza al lado mío y abre la puerta del coche. “No creo que te gustaría que te cortara la garganta ¿no es así?” Su voz es dulce pero sus palabras son peligrosas.

Sollozos se escapan de mi boca una vez que entro al coche. Un hombre a mi lado derecho y el otro al izquierdo.  Todos visten de negro y las ventanas del coche son de vidrio polarizado.

“La tenemos,” dice el conductor por teléfono.

Me gustaría gritar pero el hombre a mi lado derecho tiene la navaja en su mano y listo para atacar si yo no hago lo que él me pidió. El conductor enciende el motor y el auto avanza. Mi cuerpo tiembla y jamás había sentido tanto miedo en mi vida. Es un miedo que paraliza tus huesos, tus músculos y tiene tu corazón latiendo tan fuerte al punto que crees que va a explotar.

Trago el bulto de mi garganta y a pesar del llanto y el miedo trato de hablar.

“¿A dónde va-vamos? ¿Ustedes va-van a—?”

“La niña necesita callarse,” interrumpe uno de los dos. Me muerdo el labio inferior y más lágrimas fluyen por mi rostro. Estoy pensando en lo peor.

“Está bien,” contesta el hombre de la derecha.

Pensé que me pondrían alguna cinta adhesiva pero en vez de eso su puño colisiona contra mi mandíbula. Pierdo mis lentes y mi cuerpo se cae sobre el regazo del hombre que está a la izquierda. Escucho un zumbido en mis oídos y no puedo mover la mandíbula, la piel de mi rostro se siente adormecida y adolorida. Los sonidos de fondo empiezan a desaparecer, mis ojos pierden la fuerza y estoy muy mareada por el puñetazo. Creo que no soy capaz de mover la boca hasta que un gemido de dolor se escapa de mis labios. Me gustaría patearlos pero mis músculos están paralizados por el profundo y palpitante dolor que estoy sintiendo.

“Eso fue horrible, apestas, deberías haberla noqueado con eso. Yo lo haré.”

Sus nudillos colisionan con mi mandíbula otra vez, mucho más fuerte y rápido y está vez caigo y todo se vuelve oscuro de inmediato.

-Sólo quiero decir que la parte de Gemma fue innecesaria pero necesaria al mismo tiempo????

-No sé cómo sentirme al respecto del cap pero hola, esto es lo que hay ( ͡° ͜ʖ ͡°)

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top