30 cAPITULOS ESTOY LLORANDO. 60 mil lecturas muchas gracias.

la foto al lado, no, no, no me toquen, morí, lurry, bYE.

próxima actualización: viernes o sábado.

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.                     ««LUCY»»

"Estoy preocupada Marcel."

"No exageres Lucy," Marcel resopló," todo está bien."

"No lo sé pero tengo este mal presentimiento de que algo malo va a suceder." 

"Claro que no," Marcel dijo antes de tomarse todo el líquido de su vaso. 

También estoy asustada por él, este es el cuarto trago que toma. Es demasiado alcohol para ser su primera vez, él tiene que detenerse.

"¡Ashton, otra ronda!" Marcel casi gritó.

"¿Podrías dejar de beber?," Le dije a Marcel pero él me ignoró.

Suspiré en derrota y aparté mi mirada de Marcel. 

Hay una idea está persiguiendo mi mente desde que Harry se fue. Tal vez podría seguir el mismo camino que él siguió. No lo sé, sólo para asegurarme que este bien, supongo. 
Sé que no es una buena idea, no creo que ese pelirrojo y Taylor sean personas de confiar, tampoco creo que Harry lo sea pero al menos yo lo conozco y creo saber lo que él es capaz de hacer. 

"Vuelvo enseguida Marcel," dije antes de marcharme. 

Camino en la misma dirección que Harry caminó, mi cuerpo choca con algunas personas a medida que avanzo. Creo que siguió derecho o parece que dobló, pero ¿cómo voy a saber donde está la oficina de Taylor? Tal vez tenga algún cartel o algo por el estilo. Pero cuando llegue allá ¿qué voy a hacer? ¿Permanecer afuera y tratar de escuchar?

Me estremezco cuando siento una mano sobre mi cintura, me doy la vuelta de inmediato alarmada. 

"Hola Lucy," Una muchacho rubio me sonríe. 

Estuve a punto de gritar pero algo en sus ojos azules me hizo sentir segura. Lo he visto en algún lugar, lo sé…creo que es un amigo de Harry... 

"¿No me recuerdas? Soy Niall," Él sonríe y estira el brazo hacia mí. Bajo la vista y observo un tatuaje de taco en su brazo.  ¡Ahora lo recuerdo! Lo conocí en la tienda de tatuaje, ese día yo salí con Adam y abofeteé a Harry. Oh, hace un tiempo ya.  

“¿Cómo estás?” Sonreí.

“¿A dónde ibas?” Él cuestionó  ignorando mi pregunta.

“Ahm, esta-estaba…estaba dando una vuelta, nunca he venido aquí.” Mentí.

Debo admitir que me siento impresionada con esta nueva habilidad que he adquirido, nunca suelo mentir porque no tengo razones para hacerlo pero últimamente he mentido bastante y eso no es bueno.

“¿Enserio?” Niall levanta una ceja.

“Sólo tie-tienes que mirarme,” dije señalándome a mí misma.

Niall me observa de los pies a cabeza y mis mejillas se encienden rápidamente. Creo que esa mirada no era necesaria.

“Yo no veo el problema,” Él dice encogiéndose de hombros.

“Creo que eres demasiado bueno para verlo,” dije, “debo irme,” Avisé antes de empezar a caminar.

“¿A dónde vas?” Niall preguntó siguiéndome. Yo no respondí y traté de esquivar algunas personas que estaban bailando. “No vas a encontrar a Harry,” Escuché a Niall. Me detuve de inmediato y me giré hacia él. ¿Cómo lo supo?

“Yo no est-estaba buscando a Harry…”

“Si claro,” Niall sonrió. “Ven a sentarte con nosotros,” Él ofreció. Ni siquiera tuve tiempo para aceptar porque él ya me estaba arrastrando.  

 “Cla-claro,” Susurré pero no creo que él me haya escuchado.

“Hey chicos,” Niall dijo alegremente, “tenemos una invitada,” Niall me señaló. Llevé una de mis manos a mi cabello, empecé a hacer una pequeña trenza con mis dedos temblorosos.  A veces suelo hacer eso cuando estoy nerviosa.

La mesa está siendo ocupada por tres chicos y dos chicas, las cuales supongo no son sus novias. 

“Hola, siéntate aquí,” Uno de los chicos me dijo y palmeó un asiento al lado de él.

Asentí y me senté a su lado. Al frente mío estaban otros dos chicos más un moreno de cabello bien arreglado y un chico de ojos azules. Las chicas que los acompañan ni siquiera me miran, ambas están sentadas en el regazo de un respectivo muchacho. Una rubia está sentada junto al moreno y la otra rubia está con el muchacho de ojos claros.

“Um, hola, “Dijeron los dos al mismo tiempo sin sonreír.

“Ho-hola,” Fue lo único que dije.

“Él es Zayn, Louis y Liam,” Niall dijo antes de sentarse.

Liam es el muchacho que está sentada al lado mío. El muchacho de ojos azules es Louis y el chico de cabello negro y arreglado es Zayn. Muevo mi vista su brazo y casi todo está adornado de tatuajes. Él tiene mucho más de los que Harry tiene.

Había olvidado sus nombres pero no era necesario presentarse porque los conozco, toda la secundaria los conoce.

 “Así que ¿tú eres Lucy?” Liam preguntó. Él sostiene una sonrisa amigable. Su cabello es castaño y también sus ojos. Nunca lo había visto de cerca y jamás había hablado con él,  se ve amable, al igual que Niall.

“Sí, ¿có-cómo lo sabes?” pregunté e inmediatamente quise golpearme en la frente por la tonta pregunta que hice.

“Harry nos ha hablado de ti,” Él respondió.

“¡¿Podemos hacer un brindis por Lucy?!” Louis gritó elevando un vaso.  Me gusta su acento y su voz, suenan más amigables que él mismo.

“¿Por qué?” Pregunté confundida apretándome suavemente la trenza que hice hace unos segundos atrás.  Me siento más nerviosa.

“¿Por qué no?” Zayn replicó con una sonrisa en sus labios.

“Amo el dinero, amo a Lucy,” Louis sonrió.

¿Por qué dice eso? No entiendo.

“¿Está ebrio?” Susurré mirando a Niall. El rubio mira a Louis con el ceño fruncido, como si algo le estuviese molestando ¿pero qué?

“Él es así,” Niall susurra rodando los ojos.

“Yo no haré ese brindis,” Liam gruñó.

“¡Pues yo sí!” Louis replicó enfadado. “¡Por el dinero y por Lucy!” Louis chocó su vaso con el de Zayn.  Ambos sonrieron alegremente antes de beber de sus vasos.

Louis y Zayn sacan un cigarro y lo encienden. Niall y Liam siguen sus movimientos y también enciende un cigarro. Nuestra mesa inmediatamente se ve cubierta por una nube gris de humo.

Ellos conversan animadamente mientras escucho y respiro este humo tan tóxico. Me cubro la boca para toser y Louis me mira.

“Pero que poco caballero soy,” Louis dice con una sonrisa, “¿Quieres un cigarro?” Louis extiende la cajetilla hacia mí.

“No fu-fumo,” Digo antes de toser. Esto es tan tóxico, ¿cómo pueden fumar?

“Vamos al baño,” Dijo la chica rubia levantándose del regazo de Zayn. La otra muchacha también se levanta y ambas se marchan.

“Así que Lucy cuéntanos,” Zayn dijo apoyando sus codos en la mesa,” ¿tú hermana está soltera? Madison es bastante sexy,”  Zayn dice antes de exhalar el humo.

“En verdad, no lo sé. ” Me encogí de hombros. “Madison tiene demasiados novios.”

“¿Puedo dormir con ella?” Louis sonrió, “Ella es muy sexy pero tienes las tetas un poco pequeñas, como dos limones, debo admitir,” Zayn se ríe y ambos chocan las manos.

Esto es horrible, ¿así es como hablan de las chicas? ¿Harry hablará así también? Claro que sí, él es chico, así son ellos.

“Su trasero no está nada mal, de todas maneras yo la haría gritar—“

“Creo que es suficiente,” Niall se quejó interrumpiendo a Zayn.

Me limpié la frente con la manga de mi chaqueta, estoy empezando a sudar, el calor está aumentando y empiezo a sentirme sofocada. O al menos yo, ellos lucen normal.

“¿Quién te crees que eres Niall James Horan?" Louis se rió. "Te comportas como el caballero sólo porque ella está aquí.” 

“¿Pero qué mierda?  Están hablando de su hermana,”

“Oh por favor, tú siempre hablas de Madison,” Louis gruñó. “A él le gusta las chicas rubias al igual que Harry.”

“tal vez deberías teñirte el cabello Lucy, ¿no crees?” Zayn sonrió.

"Voy al baño," dije levantándome de asiento. No puedo quedarme aquí. Ellos están como atacándome o algo así y yo no hice nada.

No espero a que respondan, simplemente muevo mi silla y me marcho. Siento una mano agarrar mi brazo y me giro para encontrarme con Niall. ¿Otra vez?

“Lo lamento Lucy, ellos son unos idiotas.” Niall se encoge de hombros.

“No me importa, de-debo ir al baño,” dije y me solté de su agarre.

No voy al baño, necesito salir de aquí. Vuelvo a toser y me limpio el sudor de la frente. Aquí hace mucho calor.

“¿A dónde crees que vas?” Escucho la voz del guardia cuando salgo rápidamente por la puerta.

“Sólo ne-necesito aire,” respondí pero no sé si él me escuchó.

Cruzo la calle y apoyo mi espalda contra un coche mientras trato de recomponer mi respiración.  No sé que me sucedió pero siento como si el aire no ingresara a mis pulmones. Vuelvo a toser y trato de relajarme. Cerré los ojos y me concentré en respirar.

Lentamente el aire empieza a ingresar en mis pulmones y la desesperación se esfuma de mi cuerpo. Abrí los ojos y miré hacia el cielo. Oscuro y bañado en estrellas. Aquí afuera todo está más tranquilo, más solitario y más oscuro.  Mi única compañía es el guardia de la puerta.

Salté cuando sentí el golpe de una puerta, como si se abriese violentamente. Escucho varios pasos y luego algo duro se golpea contra el suelo. El sonido no proviene de muy lejos, ¿qué está sucediendo?

Guiada por mi curiosidad yo empiezo a caminar entre los coches, avanzo por la calle y me detengo al percatarme que el sonido proviene de un pequeño callejón cerrado. Este callejón está al lado del bar, supongo que hay gente saliendo por la puerta trasera. 

Miro al guardia y él está distraído con su celular. Me agacho y gateo hasta que puedo asomar mi rostro hacia el callejón.

Como dicen la curiosidad mató al gato. En el pequeño callejón hay un grupo de cinco personas, hombres altos y vestidos con prendas oscuras. Esas cincos personas están formadas en un círculo y en el suelo hay un muchacho.  Mi corazón se detiene, a pesar de que esté oscuro yo puedo divisar una mata de rulos. ¿Es Harry?

“Sólo golpéalo,” Escucho una voz masculina y siento escalofríos. Es Taylor, Taylor acaba de decir eso.

Siguiendo su orden uno de los hombres lanza una patada directamente al estomago del muchacho. Él suelta un quejido y maldice. Su ronca voz irrumpe en mis oídos y no hay duda que es Harry quién está en el suelo. Dios mío, ¿por qué?

“Tu turno Cameron,” Taylor dice y un hombre pelirrojo golpea a Harry.  Lo miro de manera más detenida y ahogo un grito al percatarme que es el pelirrojo que me siguió la otra vez. Hace una hora atrás él se llevó a Harry y ahora lo está golpeando. Dios mío. ¿Él trabaja para Taylor? ¿Qué está sucediendo?

Harry trata de levantarse pero Taylor apoya su pie en la cabeza de Harry y lo empuja. Me estremezco al mirar la escena, quiero ayudarlo pero tal vez podría causarle más problemas.

Taylor se agacha y mira a Harry que tiene la cabeza apoyada contra el suelo. “No te atrevas a tratar de darme ordenes,” Taylor gruñe. “Teníamos un acuerdo y tienes que cumplirlo,” Taylor agarra el cabello de Harry y lo jala para que el muchacho lo mire directamente a los ojos.  “¿me escuchaste?”

Harry le escupe a Taylor. Oh no Harry, ¿qué acabas de hacer? Taylor suelta el cabello de Harry y yo aparto la mirada cuando él le propina un fuerte puñetazo en la mandíbula. El sonido quiebra dentro de mis oídos y puedo sentir el dolor por el cual Harry debe estar pasando.

“Maldito idiota,” Taylor gruñe. “Terminen con él muchachos,” Él sentencia y lo único que puedo escuchar después son patadas y golpes. Me cubro los oídos y ahogo un sollozo, me estremezco con cada golpe, con cada gemido de dolor de Harry. Esto es horrible, Taylor es una persona muy cruel ¿por qué está haciendo esto?

“No estoy aquí, esto no está sucediendo, no estoy aquí, esto no está sucediendo,” susurré una y otra vez. Suelo decir esto cuando suceden cosas horribles o cuando ya no puedo aguantarlo más.

Creo que finalmente dejaron de golpearlo porque no puedo escuchar a Harry. Escucho unas risas y luego los pasos se alejan, se esfuman.  Abro los ojos y vuelvo a mirar al callejón. Harry está acostado en el suelo, él no se está moviendo.

 Lo único que se me viene a la mente es correr, correr hacia él. Me levanté rápidamente y con pasos torpes me acerqué a Harry.

“Harry, ¿estás bien?” Sollocé agachándome a su lado. Ahora puedo ver todo lo que le han hecho, hay una herida en su frente, su ojo está un poco morado y su labio está sangrando. Debo admitir que su rostro sigue perfecto a pesar de los golpes que recibió.

Él suelta un pequeño quejido y abre los ojos lentamente. “¿Lu-Lucy?” Él respira.  

“Oh dios mío,” Dije antes de abrazarlo.  Harry suelta un alarido de dolor y yo me alejo rápidamente. “Perdón, perdón.”

“Est-está bien, ¿por qué est-estás llorando?”

“Harry dios mío, fue horrible,” Yo dije antes de limpiarme unas lágrimas. “Quería ayudarte pero no podía y—“

“No importa, lo bue-bueno es que estás aquí.” Él dijo débilmente y mi corazón se derritió.

“Tenemos que sacarte de aquí.” Hablé y él asintió.

Ayudé a Harry a incorporarse lentamente, él gimió llevándose una mano al estomago.

“¿Pu-puedes caminar?” Pregunté tratando de resistir su peso. Él asintió y se cubrió la boca para toser. Al retirar su mano observé horrorizada que esta estaba pintada de un fuerte color rojo. Sangre.  “Deberíamos ir a un hospital.”

“No, no,” Él negó suavemente. “Es-estoy bien.”

“Pero Harry—“

“Esto ha su-sucedido antes y estoy bien Lucy,” Él afirmó. “Vá-vámonos a mi casa.”

“Está bien,” Suspiré. “¿Dónde está tu coche?” Harry me señaló un coche negro que estaba al cruzar la calle. Gracias a dios no estaba tan lejos.

Empezamos a caminar lentamente y nos detenemos frente al coche.

“Yo con-conduciré,” Él dice.

“¿Estás loco? Claro que no,” Dije extiendo mi mano hacia él. “Dame las llaves, yo lo haré.”

“Cui-cuida de mi bebé,” Él dijo antes de entregarme las llaves.  Sé que soné segura de mis palabras y ni siquiera tartamudeé pero la verdad es que no sé manejar muy bien. He visto a Mike conducir y él me ha enseñado un par de veces supongo que puedo hacerlo.

Ayudé a Harry a sentarse al asiento del copiloto. No puedo creer que me vaya de aquí de esta manera, yo sólo quería que fuera una noche tranquila. Nadie sabe como está Harry, todos están absortos de su actual situación. Todos están adentro divirtiéndose, Cassie, Ryan, Liam, Niall, Marcel…¡Dios mío Marcel! No puedo marcharme sin él.

“Harry, espérame aquí.”

“¿A dónde vas?” Él preguntó agarrándome mi brazo.

“Iré a buscar a Marcel.”

“¿A ese idiota?” Harry se quejó. “¿Por qué?”

“Es tu primo Harry,” Fruncí el ceño, “y está solo allá adentro.” Harry asintió mientras se limpió la boca con su brazo. Aún está sangrando y bastante en mi opinión. “Vuelvo enseguida.” avisé antes de cerrar la puerta.

Cruce la calle y empecé a caminar hacia el bar.  Antes de que pudiera entrar el guardia me detuvo.

“¿Harry está bien?”

¿Qué? ¿Cómo él lo supo?

“S-sí. ¿Por qué no lo ayudó?”

“Posiblemente me hubieran golpeado a mí también, ¿no lo crees? Hubiera sido peor.” El guardia respondió y se movió para que yo pudiese entrar.

Caminé entre la multitud y me dirigí directamente hacia el bar, espero que Marcel siga ahí. Veo a Ashton pero no hay señales de mi amigo. Le pregunté a Ashton si había visto a Marcel y él me señaló a la esquina de la barra. Marcel está durmiendo con la cabeza apoyada encima de su brazo y en una de sus manos tiene un vaso.  Dios mío. Que noche más distorsionada, esto es horrible.

“Marcel, Marcel, despierta,” dije sacudiéndolo suavemente.

Él abre los ojos lentamente y me mira aturdido. “¿Lucy? No me siento muy bien.” Él gimió apoyando una mano sobre su cabeza. Oh no.

“Vamos Marcel, tenemos que irnos," hablé jalándolo del brazo. 

Empezamos a caminar hacia la salida del bar. Yo miro a mí alrededor tratando de encontrar a Cassie pero no hay señales de ella. No puedo creer que me ella me haya abandonado, ni siquiera se preocupo por mí o por Marcel. Ella no es la misma desde que está con Matt.

“Quiero irme a casa,” Marcel se quejó cuando salimos del bar. “¿Nos iremos caminando?” Yo negué con la cabeza y nos detuvimos frente al coche de Harry.

“En-entra.” Marcel asintió e ingresó al coche al igual que yo. Harry está con su cabeza apoyada contra el respaldo del asiento, los ojos cerrados y respirando débilmente. Está pálido, luce como muerto. “¿Ha-harry?” Susurré asustada.

“Estoy bien…” Él susurró.

“¿Primo qué te sucedió?” Marcel chilló desde el asiento trasero.

“Larga historia,” respondí y encendí el motor.

“¡¿Tú vas a conducir?!” Marcel preguntó aterrorizado.

“Cierra la maldita boca Marcel,” Harry gruñó.

Empecé a conducir lentamente, tengo miedo de chocar.

“¿Por qué vas tan lento?” Harry preguntó.

“No soy muy buena en esto,” admití.

“No vayas tan rápido, estoy mareado.” Marcel gimió desde el asiento trasero. Dios mío, es como un niño pequeño.

“Marcel, tienes suerte que no pueda golpearte.” Harry dijo entre dientes.

Marcel permaneció callado, supongo que está tratando de aguantarse las ganas de vomitar. Harry también se quedó callado tratando de calmar su propio dolor. Conduje un poco más rápido y a veces frenaba al equivocarme de pedal. Marcel se quejaba pero Harry sólo esbozaba una mueca de dolor.

“Fi-finalmente,” Marcel dijo abriendo la puerta del coche rápidamente. Él se baja del coche y vomita.

Qué bueno que haya esperado hasta llegar acá, gracias a dios que no vomito en el coche de Harry sino él estaría muy enfadado.

Me bajé del coche y me acerqué a él. “¿Estás bien?” Le pregunté a Marcel cuando terminó de vomitar.

“El alcohol es bu-bueno pero vomitar es malo,” Marcel gime antes de quitarse los lentes.

“Vamos, te dejaré en casa.”

Caminamos hasta la puerta, decidí entrar para llevarlo a su habitación porque Marcel no se ve muy bien. Su casa estaba a oscuras, supongo que todos están durmiendo. Subimos las escaleras en silencio, al entrar a su habitación Marcel se saca su suéter y luego se dispone a desabotonarse su pantalón. Desvío la mirada rápidamente, no quiero ver a mi amigo desvestirse.

“Ya me voy Marcel, estarás bien ¿cierto?” Pregunto sin mirarlo.

“Sí, gra-gracias,” Él dijo y escuché la cama crujir. “buenas noches.”

“Buenas noches Marcel,” Apagué la luz de su habitación y caminé hacia la salida.

Entré en el coche y respiré por un momento. Tantas cosas han sucedido, nunca pensé que la noche terminaría así. Me giré hacia Harry y él aún permanece con los ojos cerrados y la respiración tranquila.  Supongo que está dormido.

Gracias a mi buena memoria no tuve problemas para llegar a su casa. Me estacioné y observé la casa. Las luces apagadas, supongo que sus amigos aún no han llegado.

Reviso mi celular, son las 2 am, supongo que aún es temprano para que ellos regresen. Tengo un mensaje de Cassie pero decido no revisarlo. Esperaba alguna llamada perdida de mi madre pero me engañé, desde nuestra discusión ella ni me habla, supongo que ya no le importo.

Me bajé del coche y lo rodeé para abrir la puerta del copiloto.

“Harry,” Susurré sacudiendo suavemente su hombro. Él abrió sus ojos pesadamente y una mueca de dolor se dibujó en sus labios. “Vamos, estamos en tu casa.” Él asintió y yo lo ayudé a bajarse.

Harry apoyó una de sus manos sobre mi cintura mientras caminábamos hacia su casa. Me mordí el labio sintiendo el nerviosismo correr por mis venas. Abrí la puerta de su casa y subimos las escaleras con sumo cuidado.

Encendí la luz de su habitación y Harry se acostó en su cama. Creo que mi trabajo ya está hecho, debo irme aunque no sé como lo haré.

“Deberías limpiarte, aún sangras un poco,” dije apoyada contra la puerta y en respuesta Harry asintió sin mirarme. Supongo que quiere que me marche, debe estar cansado y adolorido. “Está bien, adiós Harry,” Susurré antes de darme vuelta.

“¿Qué? ¡No, espera!”, Salté cuando el casi grito.

“¿Qué sucede?” Pregunté al girarme hacia él. Harry se sentó en la cama y sus ojos esmeraldas se encontraron con los míos.

“Quédate…quédate conmigo,”  Él dijo y mi corazón se derritió.  ¿Él realmente quiere que me quede?

“Está bien,” asentí tímidamente.

“¿Pue-puedes acostarte conmigo?” Él preguntó palmeando un lugar al lado de su cama. Tragué saliva ante su petición.  No sé si sea lo correcto pero sé que en el fondo yo quiero hacerlo.

Asentí en silencio y caminé a su lado. Harry se recostó y yo lo imité acostándome a su lado. Él posó una mano sobre mi cintura y me jaló lentamente a su lado. Esta vez no me quejé y no me resistí sólo disfruté esta cercanía con él.  Harry mueve su cabeza y sus labios descansan sobre mi frente. Estoy temblando en mi interior, jamás he estado así con un chico.

Nuestro silencio se vio interrumpido por el rugido de mi estomago. Ups.  

“¿Tienes hambre?” Él preguntó y pude sentir su sonrisa contra mi piel. Tragué saliva y asentí.

“Sólo 5 minutos más,” Él susurró en mi oído y yo me estremecí. “después podemos bajar para comer algo.”

“y después deberías limpiarte,” susurré arrugando mi nariz al percibir lo que creo que es el olor de la sangre.

“Está bien,”  Él asintió con un suspiro. “¿Lucy?” Harry pregunta y yo siento su mano acariciar mi brazo.

“¿S-sí?” Logré decir.

“Gracias por quedarte conmigo,” Él murmura.

“Está bien, entiendo por qué quieres que me quede. No puedo irme sola  estas horas de la madrugada.”

La mano de Harry sube hasta mi barbilla y él gentilmente me mueve para observarlo. Nuestros rostros están apenas a unos centímetros de distancia. A pesar de sus heridas y la sangre yo aún me siento atraída por este muchacho, ¿es eso posible? Supongo que sí.

“No es esa la razón,” Él susurra y me mira dubitativo. “Yo quiero que tu quedes.” Sus palabras son música para mi oído. No puedo creer que él haya dicho eso. Siento un calor golpear mis mejillas, muerdo mi labio inferior y sólo asiento.

“Está bien…” Fue lo único que logré decir. El nerviosismo me está desgarrando.

“No Lucy, tú no entiendes…” Él suspira. “Yo…yo te necesito.”