Capítulo 132
flashbacks estarán en cursiva!!!!!!!
LUCY
Dejo mis manos sobre mi regazo mientras observo al asiento del conductor. Desvío la vista cuando Harry me mira a través del espejo retrovisor. No debería sentirme tan avergonzada. Quizás no lo estoy tanto pero me siento apenada. También estoy un poco angustiada. Es como un peso en mis hombros. Supongo que debí saber que estos serían como los efectos secundarios pero pensar en eso es como si estuviese asumiendo que estoy superando algún límite. No estoy triste y desesperada por no tener contacto con mi mamá. No lo estoy. Estoy bien.
"¿Lucy?" Escucho la voz de Marcel y me estremezco. Había olvidado que está a mi lado.
"¿Qué?" Pregunto mordiéndome el labio inferior.
"Esto es un silencio súper incómodo y ¿por qué estás conmigo en el asiento trasero? A mí me sentaban en el asiento trasero como un castigo, ¿estás castigada o algo así?" Marcel suprime una sonrisa. "Estar castigada suena como pervertido, no sé por qué pensé eso...¡Maldición! Olviden lo que he dicho," Marcel suelta las palabras rápidamente, suena avergonzado de sí mismo y debería estarlo.
Harry suelta un sonido demostrando su molestia por tener que escuchar a Marcel. Yo me quedo callada. El silencio incómodo y las escases de comunicación entre Harry y yo revela la verdad. De pronto los ojos de Marcel vuelan a Harry y luego a mí. Creo que él ha entendido.
"Espera, ¿qué? ¿Están enfadados?"
Su cara es de pura confusión...¿cómo no lo notó antes?
"Genial, puedes adivinar todos los resultados de esos estúpidos y complejos ejercicios de matemáticas pero no podías adivinar esto," Harry gruñe.
"Yo no adivino, yo y Lucy sabemos esas cosas como sumar y restar y tú no—"
Suelto un pequeño chillido cuando el Jeep frena bruscamente. Harry se gira a nosotros y su mirada esmeralda es amenazadora.
"Sé que Marcel más un puño es igual a ojo morado, ¿qué tal eso?" Escupe enfadado.
"Sabes que le diré a tu mamá."
"Harry...ya basta," murmuro sin saber que más decir. Intercambiamos miradas y la decepción cruza los rostros de ambos.
Harry se queda callado. Regresa a su asiento y el coche se mueve segundos después. Marcel hace una mueca.
"Sólo te embriagaste, ¿cuál es el problema?"
"No le gustó," yo murmuro.
"¿Y qué? No es tu padre para darte órdenes."
"El problema es que lo hice dos veces," susurro de vuelta. Echo una mirada al frente y Harry no nos está mirando. "Y le mentí y además me metí en problemas."
"¿2 veces? Yo estuve presente en una vez...¿quién fue el otro?"
"Adam."
"Escuché eso, gracias por recordarlo, Lucy," Harry espeta desde el asiento del conductor.
Lanzo un suspiro pesado y cansado. "Eso fue bastante psicópata, yo estaba susurrando."
"Todo estaba muy callado, no pude evitar escuchar, ¿ya?"
Me cruzo de brazos y miro por la ventana para tratar de desconectarme. El resto del viaje es corto, llegamos a una calle oscura y hay un par de coches aparcados. También hay unos chicos punks entrando por una gran y metálica puerta negra y dos rubias conversando con un muchacho.
Me salgo del coche y cierro la puerta. Tiro mi cabello hacia atrás cuando el viento me desordena la melena y cuando despejo mi visión los hermosos ojos de Harry Styles están sobre mí. Él está al otro lado del coche y está luciendo increíblemente guapo esta noche. Me encanta su mandíbula perfecta, sus ojos tan intensos, su cabello desordenado y suave. Me encanta que sea tan alto, que tenga sus brazos trabajados y esos tatuajes que pintan su piel hasta que se acaben sus días. Uff, no debería en esta ocasión pero me revoluciona las hormonas. No me he dado ni cuenta pero mi corazón está latiendo fuerte. Escucho una risa sofocada.
"¿Qué, Marcel?" Styles desvía su mirada de mí y observa a su primo con irritación.
"No puedo creer lo que veo y ustedes decían que se amaban."
"¡Espera! ¿Se lo dijiste, Lucy?" Harry espeta molesto.
"¿Qué? ¡No! ¿Cómo sabías eso?"
"Ahm, eh, Mandy me contó por casualidad."
"¿Amaban? ¿Pasado? ¿Qué diablos, Lucy?"
"¡Oh Dios, Harry! ¡No he dicho eso!" Inquiero con el rostro rojo. Elevo un poco la voz y veo la sorpresa y al parecer cierta satisfacción en el rostro de mi irritado novio. "Además ¿por qué estás tan molesto con eso?"
"¡Porque es nuestro secreto!" Brama enfadado.
Harry da media vuelta y hace su camino a la entrada del tétrico recinto. Mi rostro pierde color por su reciente declaración y mis pies se mueven para guiarme hacia él.
"E-Espera, ¿nuestro secreto? ¿Acaso te avergüenza que la gente se entere que tú—?"
"¿Qué? Claro que no, Lucy," sacude la cabeza indignado. "¡Amo mi novia, amo a Lucinda Fray!" Me estremezco cuando grita mirando el cielo estrellado.
Luego de su inesperado pero hermoso gesto ambos nos miramos y nuestras miradas pierden frialdad. Los dos sonreímos al mismo tiempo, no es una sonrisa abierta pero tiene calidez. Me gusta el hecho de que lo hayamos hecho al mismo tiempo.
Harry acorta la distancia y apoya su frente sobre la mía. No me muevo y aprovecho para respirar su adictivo aroma. Exquisito, como siempre.
"Te amo, Lucy pero me haces enfadar tanto..."
"Yo también pero—"
"¡Hey, vamos!" Nos separamos cuando escuchamos el grito de Marcel. "¡Estamos aquí por las luchas, para apostar dinero, por cervezas y por las pe-perras!" Chilla mi mejor amigo. El guardia de seguridad lo mira de reojo y ahoga una risa.
Harry me hace un ademan para que lo siga y yo obedezco su orden. El guardia y Harry tienen un pequeño intercambio de palabras cuando el guardia lo acusa de estar ebrio por estar gritando en el medio de la noche. Al final Harry lograr convencerlo y los tres ingresamos al recinto.
El lugar está iluminado parcialmente, la música de rock and roll está fuerte y me irritan los oídos. Hay mucho humo de cigarro, olores extraños, muchas voces y risas masculinas. Hay hombres de todas las edades, todos sudorosos y escandalosos. Por las barbas de Merlín, este lugar es una locura. Hay un montón de leones, lobos y todo tipo de predadores y yo soy como la oveja, la hormiga pequeña.
Un hombre choca conmigo y mi cuerpo choca con el de Harry. Mi novio se da la vuelta y empuja al hombre.
"Cuidado, idiota," se queja molesto y yo poso mi mano sobre la de él. No está de buen humor, no quiero arriesgarme.
"Apuesto 30 dólares a que se pelea con alguien esta noche," Marcel dice emocionado caminando a mi lado.
"Basta, Marcel."
"¿Vamos por unas cervezas, primo Harry?"
"Está bien," responde de mala gana y yo le doy un suave apretón.
Marcel decide pagar la primera ronda. Está de muy buen humor y muy emocionado, sólo lo veo de esa manera cuando ha ganado el ajedrez o cuando jugamos videojuegos. Supongo que sus gustos han cambiado, lo único que quiere es puro ver luchas y ganar dinero. Espero que la noche resulte para él.
Recibimos las cervezas y Harry y Marcel se beben las suyas enseguida. Estoy tímida y no sé si coger la mía. Los primos apuestan quien se la bebe primero y por supuesto que Harry gana. Marcel le entrega dos billetes y yo estoy por coger mi cerveza pero Harry me la arrebata. Lanzo un suspiro pesado.
"¿Crees que voy a emborracharme?" Frunzo el ceño.
"Definitivamente," él también frunce el ceño.
"¿Puedes hacer una lista, Harry?"
Él eleva una ceja al escuchar mi tono desafiante. "¿Estás de broma?"
"Nop."
"Iré a dar una vuelta, vuelvo enseguida," Marcel se despide y veo que tiene una botella de cerveza en la mano. ¿Se ha comprado otra?
HARRY
"Bien, ¿quieres una lista?" Repito mientras en mi mente enumero todo lo que quiero decirle. Lucinda asiente lentamente, parece nerviosa. "Empecemos por tu inesperada llegada."
Cortaba los vegetales tranquilamente mientras Sherlock permanecía dentro de un cuenco. No debería tenerlo allí pero es una manera de controlarlo. Lucinda no está y el hámster es mi única compañía. Detesto este lugar sin ella, todo es increíblemente vacío, aburrido, monótono. Supongo que así me siento sin Lucinda.
Ladeo la cabeza cuando mi celular empieza a vibrar, me están llamando desde la recepción del edificio.
"¿Hola?"
"Harry, hay una chica preguntando por ti."
"¿Una chica?" Hago una mueca. "No estoy esperando a nadie...¿cómo sabes que es para mí?"
"Porque dijo que estaba buscando un chico con tatuajes y ojos verdes."
"Cualquier persona podría caer en esa descripción, no soy yo, adiós."
Cuelgo y dejo el celular a un lado. ¿Una chica? No estoy esperando a nadie a excepción de Lucy pero ella puede entrar libremente.
Tiro los vegetales al sartén y los dejo cocinarse. Hago una mueca cuando escucho mi celular por segunda vez y no es una llamada de Lucy. Creo que es el guardia de seguridad otra vez.
"¿Qué?"
"Harry, estoy seguro que es para ti. La chica no deja de repetir ojos verdes y tatuajes. Creo que está borracha."
"No es para—"
"¡Chico de ojos verdes, tiene unos preciosos ojos verdes!" Escucho la voz femenina en el fondo y casi se me cae el celular.
"Bajo enseguida," aviso antes de colgar.
Apago la cocina y corro a la habitación. Dejo a Sherlock en su jaula y me coloco como puedo los pantalones y cojo las llaves. Me meto al ascensor y me doy cuenta de que me he olvidado los zapatos y sólo estoy de calcetines.
Llego al primer piso y salgo a la recepción. Casi se me cae la mandíbula cuando mis ojos se encuentran con una Lucy que está escondida detrás de un muchacho. Su coleta está desordenada, no lleva sus lentes, sus mejillas están ruborizadas y sus ojos asustados. Estoy seguro que está asustada porque la he pillado. Me percato que tiene una mancha de suciedad en su mandíbula. ¡¿Por qué diablos está de esa manera?! Estoy muy enfadado, pensé que estaba estudiando y sin embargo llega de esta manera.
"¿Qué diablos, Lucy?" Espeto enseguida.
"Tranquilo, ella está bien," el muchacho que está junto a ella levanta las manos y trata de sonar relajado pero sé que está nervioso. Lo conozco, él está en su estúpido grupo de física. Él también luce raro, creo que está borracho.
"Que te den, no te he dicho que hables."
"¡No le hables así a Leonard, monstruo!" Lucy chilla detrás de él y saca su lengua hacia mí. Ruedo los ojos. "Bang, bang," dice mientras finge dispararme con una pistola que ha formado con sus manos.
"Tú, niña, arriba," señalo con el índice. "Ahora, Lucinda."
"Lucinda...eso suena aterrador," Fray le habla a su amigo antes de tragar saliva. Sus ojos se desvían de Leonard y se encuentran con los míos. "Tengo una pistola y no estoy dispuesta a entregarme por voluntad propia, ¿me llevaras...encadenada o-o algo así?"
"¿De qué estás hablando?" Pregunto irritado. Le he dado una orden y no tengo paciencia para esto. "Ven, vamos."
Camino hacia ella pero Lucinda sale corriendo hacia la salida del edificio. No puedo creer que se esté escapando. La sigo rápidamente. Ahora que puedo verla de cuerpo completo me percato que lleva los zapatos en las manos. Fray empuja la puerta y sale hacia la lluvia. Se resbala con el piso mojado y se cae al suelo. Sus zapatos se escaparon de sus manos durante la caída y aterrizan sobre su cabeza. Lucinda da un respingo cuando recibe el golpe de su zapato.
"¡Mierda!" Ella suelta un quejido de dolor.
"¡Lucy!" Gruño enfadado.
Abro la puerta del edificio y el viento y la lluvia me azotan de una vez. Ella me observa asustada con todo el cabello mojado. El pánico surca sus facciones pero de pronto Lucinda se deja caer suavemente en el suelo y finge estar desmayada. Me agacho frente a ella y la cojo de los hombros. Sus mejillas tienen un color más suave pero sus labios están pálidos.
"No estás desmayada, vamos, levántate. Estás toda mojada y te vas a congelar," le pido sacudiendo sus hombros.
"No, déjame morir, me duele la cabeza."
"Levántate, Lucinda."
"Harry, oh, Harry...," murmura con los ojos cerrados. Diminutas gotas de mi cabello caen sobre su pálido rostro y caminan por sus pecas. "Harry, estoy embarazada."
"¡¿Qué?!" Casi grito y siento que me han cortado las bolas.
Lucinda abre los ojos y observa mi expresión atormentada y puramente de pánico. La seriedad de su rostro dura apenas un segundo y luego se ríe. Mi puto corazón vuelve a latir y mis bolas regresan a su lugar.
"Eso no ha sido gracioso, vamos, levántate."
"Shh, shh, estoy desmayada," Lucinda murmura con los ojos cerrados. Pongo los ojos en blanco. "Soy como...cenicienta o como...blanca nieves. Oh, tal vez alguien pueda despertarme con...un beso," dice antes de empezar a reír.
Escucho el sonido de una bocina y unas voces gritando el nombre de Lucy. Levanto la cabeza y aparcado frente al edificio hay un coche. No veo a Marcel pero logro identificar a otro chico del grupo de física y Emily está en el asiento trasero observando la escena atentamente. La rubia frunce el ceño y niega con la cabeza. No me podría importar menos su reacción.
"¿¡Está viva o tenemos que llevarla al hospital!?" Grita un chico desde el coche.
Lucinda se sienta abruptamente y nuestras frentes chocan. El dolor es instantáneo y es una punzada terrible que nos deja a los dos quejándonos del dolor.
"¡Sí, estoy viva!" Responde Lucinda al cabo de unos segundos y con sus manos sobre su frente.
"¡Eso debió doler, nos vemos mañana! ¡Vamos Leonard!" Chilla el muchacho desde el coche y vuelve a tocar la bocina.
"Um, ¿Harry?"
Me doy la vuelta para encontrarme con Leonard, el muchacho me entrega los lentes de Lucinda y su mochila. Agradezco de mala gana y el chico hace su camino rápidamente hacia el coche.
"¡Adiós Leonard!" Lucinda se despide y le guiña un ojo.
Toda la sangre se marcha de mi puto rostro. "¿Qué diablos, Lucy?"
"¿Qué? Yo...Yo no he hecho nada."
Ruedo los ojos y me trago mis celos. Observo el coche de su amigo y Emily, con el rostro hecho una furia, hace un gesto grosero antes del que coche arranque y se aleje de nosotros.
Devuelvo mi vista hacia Lucinda y ella también me está mirando. Echa unos mechones mojados tras la oreja y sus dedos tiemblan. Está oscuro, corre un horrible viento y ambos estamos mojados y temblando por el frío. Tenemos que irnos.
"Levántate."
Ayudo a Lucinda a incorporarse y ella agarra sus zapatos sin mirarme. Entramos al edificio y el guardia de seguridad nos observa atentamente. Está serio pero no tanto. Espero que nos regañe pero luego de unos segundos baja la vista hacia el televisor. Apresuro el paso porque estamos mojando la entrada. Escucho la risita de Lucy.
"¿Qué?"
"Tú me hiciste sentir brillante y nueva," ella canta pero se detiene por su propia carcajada. Lucinda se suelta de mi mano, corre al ascensor y presiona el botón. "¡Como una virgen, acariciada por primera vez!" Ella sonríe y entra al ascensor. "Debí haber cantado esa canción cuando tú me arrebataste mi virginidad, Harry."
Suavemente cubro su boca con mi mano y le envío una mirada al guardia de seguridad. Él me observa por unos segundos y veo los rastros de una sonrisa. Maldito idiota.
Yo aprieto el botón de nuestro piso y las puertas del ascensor se cierran.
"El guardia escuchó todo y por cierto la palabra arrebatar suena salvaje y como en contra de tu voluntad, Lucinda."
"Tal vez lo fue," ella murmura y yo saco mi mano de su boca. Elevo una ceja y trato de no demostrar tanto mi irritación.
"Amablemente te recuerdo de que tú querías y que lo disfrutaste."
"Oh, sí. Harry, ah, oh, Harry, más...más fuerte," Lucinda gime y vuelvo a cubrir su boca. Ella se ríe y lamentablemente está liberando un fuerte olor a alcohol.
"Estás borracha," sacudo la cabeza en desaprobación.
"Oh, Harry, sí," Fray gime contra mi mano y luego se ríe cuando se percata de mi enfadada expresión. Trato de disimularlo pero en el fondo me quiero reír. Lucinda normal jamás haría esto.
Las puertas del ascensor se abren y yo jalo de Lucinda para que salgamos.
*
"Sabes que el portero le dijo a mi padre, tuvimos suerte de que no quisiera echarnos del apartamento."
"Lo lamento, ¿sí?" Ella responde avergonzada.
"Bien, después me enteré que habías visto a Adam—"
"Invadiste mi privacidad, yo no reviso tu celular."
"Trataba de llegar al fondo del asunto ya que no me decías nada, supuestamente fuiste a estudiar y volviste borracha. ¿Qué mierda quieres que piense?" Acuso cruzándome de brazos. Sé que lo de revisar su teléfono estuvo mal pero no lo admitiré.
"Pudiste haberme presionado, no lo sé, pero yo respeto tu privacidad. Además rompiste la puerta del baño, eso estuvo muy mal."
"Estaba preocupado por ti."
"Simplemente me estaba duchando, has...has exagerado.
"¿Podemos volver a lo importante? Discutimos y empezaste a lanzar cosas."
"Estaba borracha, enfadada, confundida y con nauseas y tú estabas gritando súper fuerte, Harry," ella sacude la cabeza con los ojos perdidos y luego se cubre el rostro. Me asusto, no quiero que llore. "No sé, fue un...un mecanismo de defensa...jamás me ha ocurrido antes."
Lanzo un suspiro pesado y apoyo la mano en la barbilla.
"Bien, luego de la discusión asustamos a los vecinos, Henry el estúpido guardia tuvo que venir para revisar que todo estaba bien y luego vomitaste en la alfombra mientras Henry estaba ahí."
Lucinda se cubre el rostro una vez más y lanza un grito ahogado. "Oh Dios, me quiero morir."
"Henry cree que somos una pareja perturbada, disfuncional, peligrosa, con problemas de alcohol y rebeldes sin causa. Me preguntó por ti. No sé por qué pero creo que él piensa que hay violencia en nuestra relación."
El rostro de Lucy está rojo, se muerde el labio inferior mientras apoya una mano sobre la frente.
"Que horrible. Horneemos un pastel para Henry, eso podría ayudar. Haremos el mejor pastel del mundo, las tortas hacen a la gente feliz y yo me puedo vestir de la manera más ñoña e inocente posible y puedo hablar sobre cosas inteligentes y sobre tus logros y Henry—"
"¿Qué logros?" Espeto con amargura. Lucinda retrocede un paso debido a mi tono tan duro y grosero. Maldición, no quiero lastimarla más pero no estoy de humor. "Perdón por eso."
"Sé que mi-mi idea es estúpida pero...pero podríamos tratar."
"No es estúpida y podemos hacerlo. Yo también me vestiré ñoño así daremos una buena impresión a Henry."
Fray sonríe a medias. Se ha encogido de hombros debido a su típica pero encantadora timidez. Mi vista vaga por su cuerpo y para mí ella luce adorable, una camisa, un cárdigan amarillo, vaqueros y unos zapatos planos negros. Su cabello está atado en una coleta sencilla y un poco desordenada, creo que se ha aplicado algo en las pestañas y un poco de labial rosado pálido. Tan sencilla y tan Lucinda. Literalmente mi postura se relaja y ya quiero ceder y olvidar toda esta mierda.
Todos esos fuertes estímulos alrededor de nosotros se apagan para mí cuando Lucinda se acerca y me abraza. Yo le correspondo enseguida y su cuerpo se siente pequeño y débil. Mi rostro se pierde en su cabello y le planto un beso en la oreja.
"Sigo enfadado," digo tranquilamente.
"¿Por qué?" Pregunta con voz temblorosa. Sus brazos me aprietan un poco.
"Porque mentiste."
Ella se separa un poco de mí y me detesto a mí mismo por verla tan angustiada.
"¡Corten!" Escuchamos la irritante voz de Louis y de pronto tenemos que alejarnos porque él sitúa su brazo entre nosotros dos. "¿Cómo estás hijo de perra?"
"¡Te hemos estado llamando todo este tiempo!" Liam se queja.
Todos mis amigos están aquí más Angelina. La rubia se acerca a Lucinda, le besa la mejilla y comienza a hablarle. Al principio Fray está un poco confundida pero luego me parece que empieza a sentirse más cómoda. Quiero saber que se están diciendo pero Zayn me coge del codo.
"Es hora de hacer cosas de chicos."
"¡¿Qué?! ¡No!"
"¡Vamos!" Liam me coge del otro codo y tratan de arrastrarme. "¡Muévete!"
Lucinda se da cuenta en el estado que estoy y me sonríe a medias.
"Está bien, vete, yo estaré bien."
"Yo conozco este lugar, estaremos bien, además estamos esperando a tu primo, él nos protegerá," Angelina me asegura sosteniendo su mejor sonrisa.
"¡Él ni siquiera puede matar una mosca!" Me quejo.
"No estaremos lejos. Necesitamos un momento de amigos ¿o ya nos has olvidado?" Pregunta un Louis muy enfadado. ¿Cuál es su maldito problema?
"No te preocupes, voy a estar bien," Lucinda contesta mientras que con la manga de su cárdigan limpia sus lentes. Pongo mala cara, detesto alejarme de ella.
"La dependencia que sufren ustedes dos es una enfermedad," Louis se queja de brazos cruzados. "Sin ofender."
"Cállate hijo de perra," suelto molesto. Me deshago del agarre de mis amigos y le digo que puedo caminar solo. "Estaré cerca, ¿sí?"
"Bueno," Lucinda articula en silencio y se da la vuelta para seguir a Angelina.
"¿A dónde la llevan?"
"Angelina trajo a sus amigas," Liam sonríe. "Todas unas mamacitas."
"Literalmente quiero enterrar mi cabeza entre sus pechos."
"Tú y tus fetiches extraños, Zayn," Niall comenta con una risita.
"¿Fetiche extraño? Es totalmente normal, ¿quién más lo ha hecho?" Pregunta Malik mirándonos y todos levantamos las manos a excepción de Niall.
"¡Bueno! ¡Tenemos nuestra primera misión de la noche! ¡Niall debe enterrar su rostro en las tetas de alguien!" Louis chilla y empieza a mirar a nuestro alrededor en la búsqueda de una posible víctima.
"Voy a buscar más cervezas, las vamos a necesitar," Zayn dice antes de perderse entre la multitud.
"¿Dónde está tu feo y gordo hámster?"
"Está con Gemma y está normal. La otra vez jugué que Sherlock era un vampiro y luego fingí que era un murciélago y—Esta pregunta es extraña pero...¿Pueden vomitar los hámster?"
"Yo supongo que sí. Deberiamos decirle a Lucy y te quitará la custodia," Liam se ríe y le da un codazo a Louis para que se ría con él.
"Eso no fue gracioso," Tomlinson pone los ojos en blanco.
"¿Por qué estás de mal humor?"
"Porque Eleanor terminó con él y Louis la extraña," Zayn contesta apareciendo de la nada. Me entrega una botella y le agradezco.
"¡No, no me hace falta!" Tomlinson se cruza de brazos. "Fue divertido y se acabó. Lo que sea, de todas maneras tenía las tetas pequeñas. No extraño su súper estilo para vestir o su tierna nariz o su acento tan sexy o sus chistes, nada de eso."
"Maldición, suena igual a Harry," Liam y Niall dicen al mismo tiempo y luego sueltan unas carcajadas.
Pongo mala cara. "¡Yo no sueno así! ¿De dónde diablos han sacado eso?"
"Has puesto una cara de cachorro indefenso cuando te íbamos a alejar de Lucy. La dependencia en una relación es enfermizo, deberías saberlo, es muy malo, puede terminar fatal."
"¿Cómo qué, Zayn?"
"Obsesión supongo, que se yo."
"No estoy obsesionado pero me siento muy protector cuando estamos juntos."
"Lo cual es 24 horas ya que viven juntos. ¿Cuándo volverá a su casa?"
"No lo sé, no ha tenido mucho contacto con su madre."
"¿Y qué piensas al respecto?"
"Espero que su relación siga mala, ella puede quedarse conmigo, no me molesta."
"¿Y si rompen la vas a echar a la calle?"
"No le haría eso."
"Ah, vamos, estás acostumbrado a echar a las chicas a las calles tal y como las chicas están acostumbradas a echarte a ti a la calle."
"Viejo cuento, déjalo ir Louis."
Tomlinson levanta los brazos en señal de inocencia. "Como los tiempos cambian, tú y Lucy juntos a punto de casarse—"
"No vamos a casarnos."
"Entonces...Lucy a punto de quedar embarazada—"
"Tampoco va a suceder eso."
"¿En serio? Pero tú tienes una obsesión no-sana con los bebes," Liam dice con una sonrisa.
"Son preciosos y gorditos y te miran con ojos enormes, es imposible no amarlos. Ya silencio, es mi secreto oscuro, no lo divulguen," comento mientras le doy un codazo a Payne.
"Cambiando de tema, hm, Harry ¿tú y Lucy estaban discutiendo o algo así? Estaban serios," Niall comenta antes de beberse su cerveza.
"¡Sí! ¿Por qué?" Louis se acerca a mí y finge que su botella es un micrófono.
"Ella ha estado...bebiendo," una mueca aparece en mi boca. "Se ha emborrachado dos veces y supuestamente iba a estudiar."
"¿Y con quién?"
"Fue con sus amigos del grupo de física y con el estúpido de Adam," yo comento de mala gana. Louis ahoga una risita y yo le doy un fuerte codazo en las costillas. "Mintió, no me lo dijo y por eso estoy enfadado. Además nos peleamos y fue horrible y Henry el guardia fue al apartamento. Creo que piensa que somos una pareja perturbada y que hay violencia cuando en verdad no somos así."
"Buena historia, ¿dónde están las palomitas de maíz?" Louis sonríe y yo vuelvo a golpearlo.
"Creo que haremos un pastel para convencer a Henry de que nos comportaremos y de que somos una pareja normal."
"Harry, ¿no te has preguntado por qué está actuando así? No es normal de ella," Horan me dice y veo preocupación en su rostro.
"¿Podemos colocar marihuana al pastel?" Zayn pregunta con una sonríe y Louis choca su puño con él.
Iba a decir que lo olvidaran pero Louis habla primero:
"Este es el momento en el cual la abuelita Styles dice: Olvídenlo, chicas," Louis dice imitando mi voz y mi acento.
Pongo los ojos en blanco y saco mi celular del bolsillo. "Creo que iré a ver a Lucinda."
"¿Qué? ¿Por qué?"
"Sólo quiero saber si está bien y si está cómoda, Angelina no es su tipo."
"Debes apresurarte para ver la lucha y luego vamos a ver las carreras," Zayn comenta y me entrega otra botella. "Para Lucy."
Asiento con la cabeza y me alejo de mis amigos. Mientras me deslizo por la multitud observo al improvisado cuadrilátero que han creado para las luchas que suceden acá.
Me dirijo al lugar donde vi a Lucinda por última vez pero no hay señales de ella. Camino más allá de la barra y empiezo a beber la cerveza que me ha regalado Malik porque no quiero que ella consuma alcohol. Sé que no soy quién para darle ordenes pero no quiero verla con alcohol, el problema central que tenemos es debido a eso y debido a que no puede controlarse y se comporta mal.
Me salgo de mis cavilaciones cuando diviso a una de las amigas de Angelinas. Le pregunto por Lucinda y ella me indica que está en la parte amateur. Me preocupo, en la parte amateur están los luchadores más violentos, esos son simplemente los que les gusta luchar por la sangre, el dolor y el placer de ejercer poder sobre una persona. Me apresuro a la zona y está lleno de hombres, apenas veo mujeres. Me pongo nervioso, más le vale que nadie se atreva a tocar a Lucinda.
Ingreso a la multitud que se ha formado alrededor del cuadrilátero. Entre todos los hombres, los cuerpos sudorosos y las ropas oscuras diviso a una muchacha con un cárdigan amarillo y de cabello chocolate largo y atado en una desordenada coleta. Como si se sintiera observada Lucinda vuelve su rostro y nuestras miradas se encuentran. Me sonríe nerviosamente y la morena que está a su lado susurra algo en su oído. Me acerco rápidamente a ellas y la morena me saluda, es otra amiga de Angelina.
"Hola Harry," Lucinda traga saliva luego de hablar y desvía su vista.
"¿Qué sucede?"
"¡¿Qué sucede?!" Grita la morena eufórica y saca una botella que estaba escondida en su espalda. "¡Tequila, eso sucede!"
Frunzo el ceño y Lucinda retrocede. "¿Has estado bebiendo?"
"Ah, eh—Bueno, un poquito..."
"¿¡Un poquito!?" Chilla la morena. "¡Debiste haberla visto, se bebió la mitad de esta botella!" Comenta con risa.
"Tenemos que irnos, adiós Tatiana."
Jalo a Lucinda mientras se queja y Tatiana nos observa con preocupación. Llevo a Lucinda a una esquina a pesar de sus quejas.
"¿No puedo dejarte sola ni un solo segundo? ¿Qué va mal contigo? ¿Desde cuándo bebes tanto?"
Ahora que puedo verla con más detalle me percato que está muy pálida. Suelto un suspiro de cansancio y exasperación.
"¿Quieres vomitar?"
"No."
"¿Qué le ha pasado a tu rímel? Se te ha corrido un poco, ¿has estado llorando?"
"¿Qué? ¡No!" Se queja y frota sus ojos con las manos.
"Está bien, sólo decía. Mira, quiero que me escuches bien, quiero que te detengas. Es suficiente, Lucinda."
"¿Qué hay de malo? Fue un poco."
"¿De dónde han sacado esa botella?"
"Me gané una botella de champagne jugando póker."
"¿En qué momento has jugado póker?"
"Hace unos 20 minutos y gané, puedo ir a buscarla a la barra."
"Olvídalo, no lo harás. Es malo, no es para ti."
"¿Y tú si puedes?" Interroga elevando una ceja. "¡No es justo!"
Maldigo bajando la cabeza y me percato que hay una mancha de sangre en su cárdigan.
"¿Qué mierda sucedió? ¿Qué has hecho?" Pregunto preocupado señalando su abrigo.
Un poco de color se asoma en sus mejillas y levanta su mano para enseñarme su dedo. Observo la fea herida que se ha hecho.
"Me corté mientras cortaba unos limones."
"¿Dónde estabas?"
"Con las amigas de Angelina y ellas me pidieron que lo hicieran y me corté," finaliza la frase con una mueca.
Cojo su dedo lastimado y le doy un besito. "¿Mejor?"
Lucinda sonríe avergonzada y oculta su rostro con la otra mano.
"¿Qué sucede, cariño?"
La muchacha de cabello oscuro retira su mano del rostro y tengo que cogerla de la cintura cuando se tambalea hacia atrás.
"Equilibrio, Lucy."
"¿Qué es eso?" Suelta una tonta risa. "Oh Dios, estoy pasando por muchos sentimientos y sensaciones y deseos en este momento," comenta mirándome directamente a los ojos.
"¿A qué te refieres?" Pregunto tratando de sonar tranquilo pero en el interior soy una mezcla de enfado y preocupación.
Lucinda niega con la cabeza y su boca es tapada por su mano. No quiero hacerlo pero suelto una pequeña carcajada. Me parece adorable y atractiva aún en este estado.
"No seas una bebé, dime."
"No sé cómo...Está bien yo quiero...ahm, estaba pensando—Mierda, no puedo decirlo."
"No digas mierda," le reclamo frunciendo el ceño. "Vamos, dilo."
"¿Puedo, um, escribirlo?"
Le entrego mi celular y Lucy se demora un millón de años en escribir. Una vez que ha terminado coloca el celular en su pecho ocultando la información de mí.
"No puedo decirlo, es mucho para mí. No te rías, pero um, yo...lo deseo, es raro, pero no te rías."
Pongo los ojos en blanco y extiendo mi mano hacia ella. Lucinda me entrega el celular y trata de retroceder pero mi brazo se mantiene alrededor suyo para mantener su equilibrio. Desbloqueo la pantalla y leo su mensaje. Quiero reír pero reclamar porque el mensaje consta de una palabra.
"Sexo," yo leo en voz alta. "Olvídalo, no va a suceder, Lucy."
"¡¿Qué?!" Ella grita y casi me deja sordo. "¿Por qué no? Hay gente que lo estaba haciendo."
"¿Qué? ¿Cómo sabes eso?"
"Me dijo Tatiana," ella frunce el ceño pero su molestia se transforma en tristeza y vergüenza. "Pero yo—Me estás...rechazando."
Trata de zafarse de mí y luchamos hasta que ella logra retroceder. Mis manos jalan mi cabello. Que desesperante está Lucinda esta noche.
"No te estoy rechazando."
Ella niega con la cabeza. "Me estás rechazando como...como lo ha hecho...toda la gente en mi vida," dice con tristeza.
"¿Qué? Lucinda, claro que no, pero acá no—"
"Olvídalo, yo...um, voy a buscar a Marcel."
"¡¿A Marcel para qué?!" Le grito siguiendo sus apresurados pasos. "¡Olvídalo, ese puto pendejo no te tocará ni en esta vida ni en ninguna otra más!"
Sus pasos no son más rápidos que los míos y logro agarrarla a tiempo. Lucinda chilla pero cuando se encuentra con mi gélida y amenazante mirada se queda callada.
"¿Podrías parar? ¿Estás loca? ¿Quieres matarme?"
"¿Qué?"
"Tú y Marcel juntos sería la perdición para mí."
Ella suspira y desvía la mirada. "No iba enserio y, um, tú lo sabes."
"No, no lo sé y eso me asusta más que la mierda. Hablemos de lo importante, quiero que pares, tú no eres así, tú no eres la Lucinda que yo conozco."
"Claro que sigo siendo yo...sólo que estoy un poco más lenta y con la motricidad fina más torpe y con pérdida un poco de los sentidos. Sigo siendo, um, yo...p-puedo hablar de todo lo que leí hoy, puedo reclamarte porque no has hecho la tarea de álgebra o recordarte que debemos preparar un pastel a Henry o que debemos ver a Charlie porque Gemma está distante de nosotros o decirte que Sherlock necesita ropa para el invierno, puedo quejarme del grupo de física o decirte que jugué ajedrez con Marcel, puedo decirte que casi me he caído acá y que me ahorré una gran vergüenza o regañarte porque tratas de espiarme mientras me ducho o sacarte cómo puedo del baño porque siempre quieres ver cómo me cambio y sabes que me avergüenza mucho y-y esas cosas," ella habla súper rápido y sus mejillas van adquiriendo su color habitual.
No puedo evitar sonreír al escuchar todo eso. Me encanta ese lado de ella, su lado verdadero y todo lo que ella es. Tan adorable, inteligente y torpe.
Lucy se abanica con la mano antes de quitarse el cárdigan. Me percato enseguida que se le desabotonó un botón de la camisa y puedo ver un poco de su sujetador. Trago saliva y abotono la camisa blanca. Lucinda se queda muy quieta mirándome directamente a los ojos.
Literalmente fue en una fracción de segundo y fue una mínima parte lo que vi pero no puedo evitar imaginarme cuando estamos solos, recordar el sabor de su piel, su sonrisa nerviosa, su exquisito aroma, sus labios, la manera en que me desviste, la manera en que me mira, el sonido de su risa o su deliciosa timidez. Quiero cada pedazo de ella y lo querré por mucho tiempo. Maldición, la idea era resistirme pero ahora estoy considerando la propuesta que ha hecho Lucinda.
"¿Qué?"
"Te quiero."
"Yo también, Harry," comenta antes de bostezar. "Calor... hace calor aquí."
"Olvida eso, me tienes, vamos," cojo su mano y nos guío a la salida del recinto.
"Es-Espera, ¿qué?" Pregunta y noto el nerviosismo en su voz. "¿Vamos a-a—?"
"¿Tener sexo?" Me giro hacia ella con una ceja levantada y mi infaltable sonrisa. "Sí, en el Jeep."
"¡¿Qué?!" Lucy chilla antes de caerse como saco de patata en el suelo.
+
¡Hola! Para las que se preguntaban sí pasé todos mis exámenes, ya disfruté de mis vacaciones y el segundo semestre ha empezado. Gracias por todos sus mensajes y buenas vibras!!
SÓLO ME FALTÓ DECIR: LOUIS PAPÁ?????¿¿¿¿¿¿ ME RE CAGO EN LA PUTA BIDA. Y ZAYN Y PERRIE ROMPIERON? NIGGA WHAAAAAAAAAAAT DAMN.
PREGUNTA: ¿Qué persona les inspira? (En un sentido de vida, que sea como un modelo a seguir o algo así) ¿Y por qué?
pd: pasen por mis otras fics :-)
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top