3 de octubre de 2021

—Mitch, ¿Qué haré sin Doire? Debe haber alguna manera que podamos rescatarlo de tu padre? —Mitch acariciaba el cabello de Brooke, quien estaba recostada sobre las piernas del chico. Desde el comienzo de aquel mes, cuando se llevaron a Doire, Mitch y Brooke eran lo único que tenían que los relacionara a Doire, con la situación en la escuela, y con el hecho de que ni siquiera sabían si Doire se había recuperado después de ese flechazo— Si tan solo hubiera confrontado a tu padre, las cosas serían diferentes para todos justo ahora. 

Antes de que Mitch pudiera contestar, se vio interrumpido por unos toques en la puerta, indicando que alguien esperaba por aquella pelirroja. 

—Espera aquí, iré a revisar —El de ojos claros indico haciendo que la pelirroja levantara su cabeza, para dejarlo pasar. Una vez frente a la puerta, ambos estuvieron atentos sobre quien estaba del otro lado. Al hacerlo, ambos pudieron ver a ese chico pelinegro, tan amable como siempre, sobre todo con ellos, con dos de las personas que su mejor amigo más protegía, por supuesto, quién estaba ahí afuera, era Maxwell

—Chicos, hola... Lamento tener que venir, pero... Doire presentía que se iba a ir, y aún así quedaron varias cosas de él... Le dije a Johnson que yo me encargaría de ello —miro a Mitch— no iba a dejar que tocaran las cosas de Doire... Pero creo que hay algunas cosas que siento que dejó a proposito... Brooke, me gustaría que vinieras

Ante aquellas palabras, Mitch rápidamente miró a Brooke, esperando su respuesta. Ella se levanto asintiendo, se acomodo el pelo mientras caminaba a la puerta

—Por supuesto, Max... —Fue lo único que la chica pronunció al respecto. Brooke agarró su chaqueta, al igual que Mitch, y ambos salieron de la habitación. El oji verde se despidió de ambos, dejando que se dirigieran a la que ahora solo era la habitación de Max. El camino fue silencioso y hostil, nadie quería hablarles, y nadie lo haría, pero ellos tampoco querían platicar y dar más razones para ser el centro de atención

Al llegar a aquella habitación, se podía sentir ese aire de que ya faltaba algo. En el tocador y en la mesa de noche de Doire se veían algunos espacios, que antes eran ocupados por las pocas cosas que Doire se alcanzó a llevar. Estaba mirando todo como si fuera la última vez que estaría en ese cuarto, al menos como lo conocía. Ese cuarto jamás sería en el que ella paso tantos momentos, porqué ya no estaba la persona que destacaba en cada uno de ellos, en cada risa, en cada beso, en cada caricia, solo quedaban como memorias atrapadas en los pequeños hoyos de la pared, y así siempre se quedarían. 

Max sacó a la pelirroja de aquel momento de reflexión, poniendo en sus manos, una polaroid de aquella pareja que desde su primera interacción, marcaba el inicio de una revolución; aquella foto, databa de la fiesta de Heather, si, aquella trágica fiesta donde Nicholas Herman perdería la vida; pero aquella foto, era de esas antes de la tragedia, en un momento donde para Doire y Brooke solo existieron ellos; Brooke suponía que aquella foto nunca llegó a sus manos hasta ese momento, por cada situación que se haya puesto en el medio. Al fijarse en los detalles de la foto, esta traía una pequeña anotación en el marco: "B + D", y al darle la vuelta, estaría una de las frases más impactantes que ella haya leído: "Brookie, aunque el destino lo quiera impedir, siempre estarás en mi corazón. Te amare por siempre". Claramente, en cuanto terminó de leer aquella nota, Brooke rompió en llanto, abrazando a Max. 

—No fue lo único que te dejo —Max susurró separándose de la pelirroja, después la tomaría de las manos, llevándola a sentarse en la que fue la cama de Doire, estando ahí, Max abriría un cajón de la mesa de noche, sacando una pequeña caja de color rojo, Brooke, dejaría la foto a un lado, para tomar aquella caja, mientras miraba al chico —Ábrelo, vamos... —Brooke se limpiaría unas lágrimas antes de hacer caso a la instrucción.

Para sorpresa de Brooke, adentro encontraría un collar que traía un dije de un avión de papel, no era completamente nuevo, y aún así relucía de una manera hermosa, ella no podía parar de admirar esa cadena.

—El collar del avión de papel... —Max apenas fue capaz de pronunciar algo, como si se tratará de un tesoro perdido de alguna antigua leyenda— ese collar, fue de su mamá, el lo encontró cuando era niño, y su mamá ya se había ido de su casa... Lo salvo de su padre, supongo que desde entonces siempre lo llevaba con el —Ambos admiraban el collar, mientras Max seguía hablando— el collar, venía con algunas fotos de su mamá —abrió otro cajón y saco las fotos —Esas fotos, eran de ella, y el amor de su vida, un joven, siempre fue un misterio lo que realmente haya pasado, pero por lo poco que me ha contado Doire, todo podría indicar que ustedes dos no eran tan diferentes a aquella relación... Entendería que dejará esto aquí, para que estuviera lejos de su papá—Max busco una de las fotos en los cajones, para probar su relato, una vez que la encontró, se la enseño a Brooke— mira, aquí dice "Steve me regaló un collar de un avión de papel"... —Max hizo una abrupta pausa, como si estuviera uniendo algunos puntos—  observa bien el interior de la caja, Brookie

—¿Uh? — Al ver dentro de la caja, se podía ver una nota doblada en un avioncito de papel demasiado pequeño, Brooke inmediatamente pensó en cada avión que ella recibió del chico, que parecían cobrar sentido sobre su verdadero significado. La pelirroja bajó el collar para dejarlo en sus piernas, mientras agarraba el avioncito, para leer su contenido: "para mí verdadero amor" acompañada de una firma que parecía ser de Steve. 

—Doire desde entonces creció influenciado con esa idea, darle ese collar lleno de amor, a su gran amor— El chico sonreía con nostalgia— El jamás hubiera dejado esto de no tener a quien dárselo, su persona correcta...

—¿Y cómo sabes que me lo dejo a mi? —Brooke negó— Es un gesto demasiado lindo... Pero, no estuvimos años juntos, ¿Cómo el podría estar seguro que más adelante no encontraría a la verdadera merecedora de esta belleza?

—El collar estaba sobre la fotografía... Cómo cuando el encontró las de su mamá —Max sonrió levemente— Me había platicado que te iba a dar un gran regalo el día de la obra, me imaginé el día de la obra, Y por la manera en que te ama, Solo tú podrías ser la indicada para usar ese collar... no importa el tiempo, cuando sabes quién es la persona correcta, lo sabes. Y si no lo fueras, al menos estaría seguro que tu puedes ser tan especial como su mamá y Steve

—Te creeré, Max —La chica sonrió volviendo a tomar el collar— Es un detalle tan lindo, es tan lindo saber ahora la historia detrás de... todo —Brooke dejaría el avión en la cajita— ¿Me podrías ayudar con el collar?

—¡Por supuesto! —Ambos se levantaron de la cama, y el chico ayudó a que esa cadena, quedará como el accesorio más hermoso que Brooke Mills podría llevar a portar— Listo roja... —Inmediatamente, recibió un fuerte y cálido abrazo del amor de su mejor amigo

—Gracias por todo Max, Doire tiene el mejor amigo del universo entero —Ambos se separaron con una sonrisa— Si necesitas ayuda para guardar, solo avísame, ¿si? Tengo que ir a acomodar unas cosas en mi habitación, pero puedes llamarme

—Esta bien, Brooke, lo tengo todo controlado.

De regreso en su cuarto, Brooke no evitaría sentarse frente al espejo, para admirar el dije, lleno de historia y simbolismo, porque Brooke sería Felicia, la madre de Doire, y Doire siempre sería Steve, en un mundo donde Felicia y Steve siempre son separados, Brooke tenía la esperanza de que ella pudiera romper aquel ciclo.

Brooke sacó su vinilo de The Ronettes, para colocar su canción favorita "Be My Baby", que siempre la transportaría a su felicidad con Doire. Se detuvo a ver la pared, que estaba llena de fotos de ella y Doire, la cuál había estado organizando en los últimos días, pensando en lo rápido que había cambiado su vida de la noche a la mañana; en medio de los lamentos, Brooke se preparaba para colocar su nueva foto, cuando noto un detalle demasiado interesante, en aquella foto, se podía ver a una persona en el fondo, la cuál volteaba a la cámara al momento de que la foto fue tomada: Jennifer Nolan. La chica que jamás bebió en ni una sola de las fiestas, ¿y si su acercamiento repentino tenía que ver con ese día? ¿si era una forma de redimirse de algo que haya revelado?

Brooke fue más rápida que sus pensamientos, pues salió rápidamente de su habitación, evitando a todos en su camino. Una vez frente a la puerta de Jennifer, dio unos pequeños golpes, que podrían haber tumbado la puerta si ella quisiera. 

Jenn salió extrañada

—Brooke...

—Se que esto me puede valer un castigo de Andrew

—No lo hará —La chica recibió una mala mirada, haciéndole quedarse callada

—¿Tú le dijiste a Amber que Doire y yo estábamos saliendo para que nos tomara esa foto el día que nos expuso? —Brooke amenazó— ¿Por eso nos empezaste a hablar? ¿Para remediar el daño?

Jennifer palideció

—Brooke, no... ¿Porqué dices eso? —Jenn negaba rápidamente 

—Tengo una foto de nosotros dos besándonos y tú nos viste... Se que estabas sobria en esta fiesta... —Brooke suspiro— Y se que lo sabías, cuando tu estabas en las escaleras, ya lo sabías perfectamente....

—Si, los vi, pero no le dije a Do... Amber —su cambió de nombre extraño a la pelirroja, haciendo que esta alzará la ceja

—¿Cómo podría creerte? —Brooke reprendió— En este momento no le puedo creer a nadie

—Amber y yo no nos llevábamos —dijo en seco, como si eso le molestará, como si Brooke la hubiera ofendido, pero de igual manera, se le veía herida por ello. Brooke no quiso indagar más en ese aspecto

—¿Sabes cómo se enteró Amber? —Brooke se había relajado, otorgándole a Jenn el beneficio de la duda 

Suspiro pesado

—Brooke, quiero contarte algo, porque eres buena chica, y no mereces nada de lo que está pasando — Ella extendió su mano, esperando que la pelirroja correspondiera su acción. Nadie tenía idea que eso cambiaría la forma de ver las cosas, para siempre. Amber era una caja de secretos, aún más oscuros de lo que cualquiera podría desear.

18 de octubre de 2021

Ya habían pasado algunas semanas desde aquel momento que siempre estaría marcado en los libros de historia, al menos para Brooke y Danny. Las habían derrotado, o al menos así lo creía Danny. Mitch se había convertido en el apoyo de tiempo completo de Brooke, pues desde ese primero de Octubre, jamás dejo sola a Brooke a menos que ella se lo pidiera. Pero aún incluso en las noches, en encontraba la manera de escabullirse gracias a unos pasadizos secretos, y cada noche, se veía con Brooke, y en ocasiones, tomaban alcohol hasta más no poder. Con ello, traería un momento muy controversial para ellos.

Una noche de días antes, ambos estaban tomando, mientras hablaban de sus más oscuros secretos, entre ellos, lo mucho que ambos extrañaban a Doire, y que en el otro, veían la forma de aferrarse a ello, una cosa llevó a la otra, y solo supieron que a la mañana siguiente, ambos se habían dejado llevar por el alcohol y por la necesidad de un escape en sus vidas. Dando por iniciada, una extraña relación entre ambos, unida más que nada, por el dolor. No eran novios, pero todos sabían que ahí algo, de donde uno de los dos saldría herido

—Entrega especial para Brooke Mills — aquella mañana, Mitch decía de una manera tan alegre, que nadie podría creer que casi era un mes desde que se empezó a vivir en el infierno. El chico había pasado por debajo de la puerta, un avión de papel. Brooke se levanto de su escritorio para recoger este

"Te veo en el sótano esta noche" decía el mensaje escrito dentro del papel" Debido a la situación de la escuela, hasta un avión de papel era mejor medio de comunicación que Storybrooke Teller. Era curioso pensar, que con un Nottingham se veía en la cima de aquel castillo, pero con otro, parecían incluso esconderse en el más profundo rincón del castillo. 

Brooke guardó el avión en un baúl que tenía, lleno de estos, en su mayoría, mandados por Doire, cada vez más, aceptando la idea de que podía no volverlo a ver, y que su vida tenía que seguir. 

La hora del almuerzo se había convertido en un verdadero conflicto desde la revelación. Y ese era el momento en el que Brooke debía enfrentarse a la sociedad. Brooke acomodó todas las cosas que tenía fuera, y en cuanto abrió la puerta, podía ya sentir los murmuros de toda la gente. Los rumores sobre que todo aquel que se le acercara a las mellizas Mills, salía gravemente afectado, rápidamente recorrió la escuela, y en un par de días, llegó a la mente de las mismas chicas, ¿ellas eran las culpables de sus propios males? A cada día que pasaba, ambas perdían gente que creyera en el bien que ellas podían aportar, o eran amenazados por Amber, la nueva reina del orden.

Brooke sabía, que muy en el fondo, siempre podría contar con amigos como Tiny y Heather, simplemente, sería ponerse en riesgo si había alguna interacción, incluso hablar con Rolly, Henry o Rob era peligroso, porque eran castigados. Mitch y Brooke caminaban por el pasillo cuando la pelirroja choco con Guinevere

—¡Lo lamento Ginny! —Brooke habló lo suficientemente alto, para ser escuchada por toda la escuela 

—No te preocupes, Cervenka —Ginny susurró, evitando el contacto visual. No era que Ginny no quisiera hablar con Brooke, pero siendo la hermana de Andrew, con su rivalidad, ella podía terminar como la villana también, con una simple interacción.

Era realmente triste, que ahora no hubiera nadie, y no porqué no lo quieran, si no, por razones distintas. Brooke y Danny se habían obligado a si mismas a hacer como si nunca hubieran conocido a esas personas. Pero para Brooke, todavía existía la hermandad que ellas tenían, y podían salir adelante si lo hacían juntas, sin embargo, Danny se sentía como un barco sin rumbo, perdida en el océano intentando volver a casa en medio de la peor de las tempestades 

—Hey, Dan... ¿quieres almorzar con los chicos y conmigo? —Brooke dio unos toques a la puerta

—No, Francine, adiós —A pesar del intento de contestación seca y directa, Brooke pudo sentir como la voz de su hermana estaba a nada de quebrarse al llanto 

—¿Quieres hablar? —Brooke, aún mantenía un tono suave, sin recibir respuesta— Entiendo, te veré después.

Dicho aquello, la pelirroja se marcharía junto con Mitch a la cafetería, donde Max, con Stella estarían ahí. Aunque Stella se había limitado a encerrarse en su cuarto a diseñar, se había vuelto una gran amiga para Brooke. Pero era inevitable pensar en los demás, la cafetería había regresado a ese fatídico primer día de clases, cuando todos se sentaban por grupos, fue cuando todos se dieron cuenta de que la revolución de Amber y Andrew, solo fue una trampa para llevarlos a un régimen aún peor. Por un lado, estaba la mesa de Heather y Tiny, quienes estaban con los demás ayudantes de personajes principales. Por otro, estaban Gardine y Aiden, a pesar de que habían terminado, era la única persona a la que Aiden creyó que no le juzgaría, y se volvieron mejores amigos, confidentes, como si ambos hubieran olvidado su pequeño momento de amor, que en el fondo, parecía que estaría ahí, no se la pasaban tan mal, Dine siempre buscaba alegrar a Aid, por otro, estaban Grid y Ginny, quienes se sentaban con la prima de Grid: Gerda. Neal se sentaba con algunos otros príncipes, como Phillip, y con Gemma. También estaban personas como Jié, Blair, parte de las rebeldes de Brooke, y ahora, solo eran desconocidas. Hope y Rolly lograron sentarse juntos de alguna forma, al igual que Jace y Nash, Brooke sentía felicidad por ellos. No había tanto problema entre la jerarquía de los héroes, pero los aspirantes a antagonistas, no podían acercarse a ellos, ni de chiste.

—Y entonces yo le dije que los vestuarios eran horrosos, que debía estar bromeando, es una obra escolar de gente poderosa, no de vagabundos —Stella comentaba, sacando alguna que otra risa

—Si, después de que entraste a vestuario, mejoro mucho lo que hacían para la obra —Brooke negaba mientras tomaba un poco de su agua

—Hablando de la obra, ¿Tu hermana y tú ya pudieron controlar lo de los ojos? —Por cada ensayo que pasaba, Brooke y Danny por un momento parecían ser poseídas por la reina mlavada y la bruja cruel, porque en el momento que empezaban a cantar, todo dejaba de ser actuación, y cada vez era aún más intenso. Curiosamente, esto empezó cada que cada una empezó a tener problemas en su vida amorosa, o en su vida como tal 

—No, Danny lo iba a investigar con Douxie cuando paso lo de Nick, luego los rumores, luego que Amber no nos dejará acercarnos a nadie que tuviera la consciencia tan sucia como nosotras... según sus palabras, y bueno, se esta volviendo una preocupación 

—Brooke, la obra es en prácticamente 4 o 5 días —Max suspiró

—¡Lo se! Estoy consciente de ello —Brooke se quitó su pulsera donde tenía ahora el dije de Fran— Les voy a revelar que tengo un poco de ayuda multiversal, y estaba pensando en llamarle a esa amiga, por ayuda, si conoce a alguien que pueda ayudarme... —Brooke bajó el tono de su voz para no ser escuchada

—¿Multiversal? 

—Si, Stella, Brooke tiene una historia larguísima con eso, Doire jamás podía terminar de contarla —Max soltó una pequeña risa— 

—Si, y aunque las cosas no son iguales en todos los universos, tal vez exista algo que me pueda ayudar 

—Pues ojalá y si, tenemos que arreglar estos desastres —Mitch puso su brazo por detrás de los hombros de Brooke

En medio de la plática, se escucho una discusión

—¡Suéltame Amber! 

—¡Recuerda que tienes que hacer lo que nosotros digamos! —Amber tomaba de ambas muñecas a Rosemary, mientras Andrew acorralaba a Douxie

—¡Eso hacíamos! —Douxie reprendió mientras intentaba zafarse del agarre de Andrew

—¡Hacer pociones a escondidas esta prohibido! —Andrew contestó molesto— ¡Eso podría ser traición al reino!

—Brooke... no —Max rápidamente miró a la pelirroja, que sabía que iría a meterse al ojo del huracán. Brooke se levanto de su mesa, haciendo caso omiso. Justo cuando Amber planeaba darle una bofetada a Rose

—¿Cuál es tu problema Johnson? —Brooke podía ver que Jennifer negaba con la cabeza, indicando que dejará todo. La pelirroja había detenido el ataque, sosteniendo la muñeca de Amber— Con mis amigos no te metas 

—¿Tus amigos? Te he dicho que no puedes juntarte con esta gente 

—Tu no eres dueña de mi vida para determinar lo que puedo o no puedo hacer —Brooke amenazó sin miedo alguno a lo que podía recibir de castigo 

—¿Eso crees? —Amber alzó la voz— Aquí, tenemos a una de las peores amenazas de la escuela, y de nuestra sociedad, infectada de la tierra sin magia, llegando a querer cambiar la naturaleza de esta gente, solo generando disturbios, una bruja en su totalidad... ¿Y saben que se les hace a las brujas? Ser quemadas. Para su desgracia, estamos en medio de la cacería de gente de su tipo, así que tomen esto como su única advertencia, apara todos —Amber jaloneaba el brazo de Brooke, sin dejarla irse. Andrew amarraba con una cuerda las manos de Brooke. Todos estaban atónitos, Aún reprendiendo a Rose y a Douxie, los obligaron a poner unos escudos frente a la zona de la mesa, para que nadie pudiera rescatar a Brooke— Te dije que yo siempre estaba un paso delante de ustedes —Amber susurró mientras tomaba a Brooke del cabello— ¡Rosemary! ¡Atacala! 

—¡Brooke no! —Mitchell gritaba mientras le pegaba a la barrera mágica

—¡Te están dando una orden, LeGume, hazla arder! —Andrew reprendió

—Perdóname Brooke... —Rosemary concentraba su magia preparando un ataque que hiciera sentir a Brooke, como si la estuvieran quemando viva. Y justo cuando iba a disparar, Amber fue atacada con magia. Todos voltearon a ver a la fuente de aquel ataque

—Con mi hermana nadie se mete, Johnson— Danny Mills aparecía en la puerta 

Amber se levantó del piso riendo

— Miren a quién tenemos aquí, era una reunión de brujas, y yo no lo sabía 

—Pero si tu la organizaste, Amber —Danny sonreía malvadamente, para después ayudar a su hermana a zafarse del agarre— No nos esconderemos más, ataquen a uno de los nuestros, y los atacaremos a ustedes —Brooke miraba con orgullo a su hermana— Estamos dispuestas a tomar el papel que ustedes nos dieron, si ustedes amenazan

—¿Creen que son rivales para mí?

—Ya te hemos vencido varias veces, lo haremos de nuevo —Brooke contestó con seguridad 

—¿Y a dónde las llevo eso? A su punto más bajo —Andrew se unió a aquella conversación— Siempre vamos un paso adelante de ustedes

— Algún día los papeles se invertirán... —Danny hizo una bola de fuego en su mano— Pero mientras tanto, podemos divertirnos y aprovechar la situación a la que ustedes nos llevaron, si algún día Storybrooke se encuentra en una incomoda situación, donde todos morirán porque sus mejores brujas cometieron una venganza, sepan que es su culpa

—¿Estarían dispuestas a quemar a Storybrooke?

—A veces para terminar con el problema tienes que terminar con la fuente de origen —Brooke continuó— No sigan más, antes de que sean los culpable de un desastre

—Ya causamos una guerra multiversal, ¿porqué no volver a hacer de las nuestras? al fin y acabo, siempre seremos las malas —Ambas hermanas sonreían — Ustedes ya dieron su advertencia, ahora nos toca a nosotras

—Deberían aprender a no jugar con fuego, porqué se pueden quemar —Brooke quitó las barreras mágicas— Vuelve a hacerle daño a alguien, y Danny y yo no dudaremos en atacar, no dudaremos en poner todo en llamas. 

Aquel acto, sería hablado por toda la escuela, ¿sería que estaban en medio de una posible catástrofe de lo caótico?  

—Fue impresionante lo que hiciste ahí —Mitch y Brooke estaban en el sótano, platicando 

—Lo se, Mitch, se aprovecharon de que estuve en mi punto más bajo, para intentar derrotarme... Y se que tu y Rose ya no tienen nada, pero, ella es mi amiga, y Doux también, no iba a permitir que Amber les hiciera daño

—Rose antes que mi novia, fue mi amiga, y siempre lo será, de mis mejores amigas, así que, seguiría dando la vida por ella, agradezco mucho lo que hiciste, fuiste muy valiente, y podría jurar que esta pequeña escuela se sintió aún más esperanzada, gracias a que ustedes ya no se dejaron burlar —Mitch intentaba tomar la mano de Brooke

—Estamos hartas del sistema, que siempre nos dice que hacer, y ahora nos separa de todos, nunca tuve amigos cuando era niña, y ahora que los conseguí, me los quieren arrebatar... Y si para regresar todo a como debería de estar, tengo que ser la mala, lo seré —Brooke suspiraba, mientras sentía el tacto de la mano de Mitch sobre la de ella, haciendo que ambos se tomaran de las manos, disfrutando del calor que podía dar esa mano, que hacía sentir que no estaban solos.

Fueron minutos de silencio en esta interacción, hasta que Mitch decidió dar el siguiente paso, intentando besar a Brooke, es uno de esos momentos en el que te das cuenta de todo lo malo que has hecho en tu vida

—Mitch, no... —Brooke se separaba un poco

—¿Porqué?... 

—Mitch, no puedo —Brooke se levanto del suelo tomando sus cosas— ¡Eres el hermano del chico que siempre tendrá mi corazón! ¡No puedo hacer esto!

—¿Y la otra vez?

—¡Estábamos ebrios, ni siquiera dijimos que nos quisiéramos de esa manera! —Brooke negó, mientras Mitch se levantaba del suelo

—Pero yo si te quiero

—No lo haces, vamos, ambos pasamos por una etapa amorosa difícil y luego toda la presión... Esto solo es una manera de escapar de los problemas

—¿Solo eso fui para ti? 

—¡Piensa en todo lo que nos llevo a esto? ¿realmente dirías que nos enamoramos? ¡No! Mitch, no quiero que esto termine peor, de por si Doire se enterará de esto, y de seguro nos odiara —Brooke suspiró— Y no lo digo por mi, lo digo por mi, Doire es la única familia que tienes, y no quisiera que lo perdieras solo por mi culpa, es mi responsabilidad dejar que esto se quede ene l olvido —Brooke tomó las manos del chico— Un día alguna chica te amará tanto como tú mereces ser amado... —Ante aquella frase, Mitch sintió como una historia que se repetía, donde nuevamente, decían lo increíble que era, ¿pero entonces porqué nunca podía ser la primera opción?— Pero yo no soy esa chica, y no estoy dispuesta a lastimarte diciendo que si lo soy... Porque tú eres un caballero, en un mundo de chicos, y yo no le voy a ocultar a las personas un tesoro que se que no me pertenece...

—Entiendo... esta bien, así que, a partir de este momento solo somos amigos, ¿correcto? —Mitch rápidamente soltó las manos de la chica

—Así es... Cuñados, incluso

—¿Engañamos a mi hermano?

—No como tal, el terminó conmigo por medio de una carta, cuando supo que tu padre vendría por el... Pero en el corazón, lo siento así, ¿sabes?

Al salir de ahí, ambos ni siquiera si mirarían, como si quisieran evitar que ese momento paso, ese pequeño roce de dos almas solitarias. 

"Brooke, nos vemos en media hora, tengo el plan perfecto" Un mensaje en el teléfono de la pelirroja, la pondría alerta para su conseguir su libertad