Only pain

Capitulo 22

By ____ :

Despierto por los rayos de sol que entran por la ventana, miro el reloj y veo que son las 11 de la mañana, me levanto de la cama, me ducho y bajo a la cocina, sorprendentemente allí están mis padres desayunando, cojo un bol, la caja de cereales y la leche y los vierto en el bol, y cuando estoy a punto de salir de allí, oigo la voz de mi madre a mis espaldas :

-Siéntate con nosotros, tenemos que hablar.

Su voz suena firme y autoritaria, así que para evitar problemas doy media vuelta y me siento a la mesa, frente a ellos, que me miran inquisitivos, como si fuera una fugitiva, ya se por dónde van a ir los tiros, y cómo va a acabar todo... Por desgracia...

-Bueno, ____-Comienza mi padre.-¿Te lo pasate bien ayer en esa fiesta de la que no nos dijiste nada?-Dice remarcando el "no".

-No os intereso para nada, para qué iba a deciros nada sobre la fiesta, si de todas maneras seguramente no me ibáis a dejar ir.-Dijo llevándome una cucharada a la boca, con desgana en la voz, cansada de todo.

-Por supuesto que no, ¿sabes una cosa?-Sigue mi madre.-Desde que vas con ese chico, ese chino,-dice en tono despectivo, lo que me hace tener ganas de estrangularla.-Ya no eres la misma, te está cambiando.

-¿Pues sabéis qué? Por lo menos él se interesa por mí, me cuida, le importo... Y me ama. Y está haciendo mi vida un poquito más agradable, cosa que vosotros,-Digo señalándolos-nunca habéis hecho.-Las lágrimas están a punto de salir, y ya tengo la voz ahogada.

-¡Porque tú nunca nos diste la oportunidad de ayudarte a cambiarla!-Dice mi padre.

-¡Ahora la culpa será mía, ¿no?! ¡Vosotros nunca, NUNCA, os habéis interesado en mí, NUNCA!-Y ahí exploto, de nuevo.

-¡Lo primero no nos levantes la voz!-Chilla mi madre.-¡Y lo segundo si hubieras pedido ayuda te la hubieramos dado, sin pensarlo dos veces!

-¡Sí venga, y voy yo y me lo creo, después de 16 años! ¡Y si no queréis que os levante la voz, no me la levantéis vosotros! ¿Sabéis qué? Olvidadme.-Y acto seguido me levanto de la mesa, dejando el bol en la mesa, con el apetito ido y muy, muy dolida.

Oigo que me dicen que vuelva, pero les ignoro, y cuándo estoy al pie de las escaleras chillo :

-¡Y nunca vuelvas a llamar de esa manera a Taemin!-Eso fue lo que más me dolió, como se refirió a él con ese asqueroso tono despectivo.

-¡Qué sepas que estás castigada sin salir!-Grita mi padre.

-¡¡Por lo que salgo yo!!-Digo entrando a mi cuarto, dando un portazo y poniendo el pestillo, quiero estar sola.

Entonces me derrumbo, las lágrimas salen sin control alguno, apoyo la espalda en la puerta y me dejo caer hasta el suelo, escondo la cabeza entre las rodillas y luego salgo corriendo hasta el baño, dónde saco a mi mejor amiga y la deslizo por mi piel gritando descontrolandamente, total sé que no va a venir nadie, hasta qué...

By Taemin :

Despierto a la mañana siguiente por los incansables gritos de Minho diciéndome que me levante, lo hago, me ducho y bajo a desayunar con ellos, son las 10 y tengo pensado de ir a las 11 y media a la casa de mi princesa. A Jong, Minho y Onew apenas se les notan los moratones, y Key y yo, bueno nosotros estamos intactos. Termino de desayunar, les digo a los chicos que a las 11 y media voy a ir a la casa de ____, subo, hago mi cama, me visto y cuando quedan 15 minutos para las 11 y media cojo el coche y me voy hasta su casa, cuando llego a la puerta sus padre están saliendo, genial...

-Si vienes a ver a ____, a dicho que no quiere volver a verte.-Me dice su madre antes de que pueda decir nada.-Aparte opinamos que hizo lo correcto, no creemos que fueras una buena influencia para ella, lo sentimos chico.

Vale, aquello me cae como una jarra de agua fría, pero sé que ella nunca diría algo así, así que mi mente rápidamente elabora un plan. Sin decir nada, doy media vuelta, me meto en el coche y espero a que ellos se vayan, cuando lo hacen bajo del coche, rodeo la casa y accedo al jardín trasero, del que ____ tiene vistas desde su habitación, entonces avisto un árbol que llega justo a la repisa de su ventana.

Sin pensarlo dos veces, comienzo a trepar al árbol con cierta dificultad, pero de sólo saber que algo ha tenido que pasar en esa casa quizá media hora antes me impulsa a seguir subiendo. Después de unos minutos consigo estar encaramado a la rama de su ventana, sin pensarlo mucho salto y entro a su habitación, ya que la ventana estaba abierta. Oigo gritos provenientes del baño, voy hacia allí imaginando lo peor y la imagen que me encuentro me deja devastado :

____, mi pequeña ____ que se esconde tras una coraza está en el suelo, con la espalda apoyada en la bañera, con una cuchilla en su mano derecha, y la izquierda, más bien la muñeca de la mano izquierda, llena de cortadas, de las que emana sangre y está creando un charco justo debajo.

-____...-Digo en un susurro, shockeado por lo que se hace mi princesa.

Entonces su mirada se alza y se queda fija en la mía, veo que sus lágrimas aumentan, y sus mejillas se ponen más húmedas si se puede.

-¡Pero qué haces! ¡Deja eso, suéltalo!-Reacciono entonces, y me arrodillo frente a ella, le arrebato la cuchilla de la mano y la tiro en algún lugar del suelo del baño.

Acto seguido cojo su muñeca con miedo y la llevo hasta el vidé, que es lo que más cerca me queda. Le echo agua en la herida para limpiarla y busco en un armario alguna gasa para vendarle la muñeca. En todo ese tiempo ella no dice ni una sola palabra, tan solo está callada, mirando al suelo y llorando, en shock, como yo mismo me quedé hace unos segundos. Verla así me deja más que destrozado. Cuando encuentro las gasas le rodeo la muñeca con ellas cuidadosamente, sin apretarla demasiado para no dañarla... Y me doy cuenta al ver sus cortes de por qué siempre lleva muñequeras. Luego de eso agarro su cara y miro sus ojos. Tiene la mirada perdida, pero las lágrimas siguen cayendo, entonces coloco un brazo bajo sus rodillas y el otro lo pongo en su espalda y la levanto, camino hasta su cuarto y la dejo sobre su cama. Muerdo mi labio inferior y luego la abrazo.

-Lo siento...-Esas dos palabras se escapan débilmente de entre sus labios, y automáticamente sus brazos me rodean y siento sus lágrimas en mi cuello.

-Yo... Simplemente no sé qué decir ____...-Y es la pura verdad, ¿qué debería decir, hacer?

Se separa de mí y mira mis ojos.

-Vale, supongo que ahora es cuándo me dejas y no quieres saber nada de mí, les dirás a los chicos que soy una suicida y...

-Nada de eso, jamás, pero jamás, imagines eso.-Le digo cortándole.-Yo nunca, nunca, te dejaré sola, jamás, ¿me oyes? Jamás. Te voy a ayudar, voy a hacer que lo dejes, voy a hacer que dejes de mutilarte pequeña.-Le digo agarrando sus manos y besando sus muñecas.

-No quieres hacer eso, tu no quieres encargarte de una suicida Taemin, nadie lo quiere hacer, y nadie...-Dice mientras me da la espalda.

-Nadie se ha interesado en tí hasta ahora, eso es lo que pasa, ¿y cómo no querría ayudar a al persona que más amo en el mundo? A ver explícame eso.-Concluyo yo abrazándola por detrás acostándonos a los dos en su cama.

-Creo que eso es lo que pasa... Que me he llegado a acostumbrar a que todo el mundo pase de mi, que no se interese nadie en mí.-Dice dándose la vuelta y apoyando las manos a ambos lados de mi cuello, alzándose.

-Pues cambia ya el chip porque aquí hay una persona que se está interesando por tí y quiere ayudarte.-Digo robándole un pequeño beso abrazándola por la cintura acostándola sobre mí.

-Espero poder hacerlo...-Dice dejando su cabeza en mi hombro dibujando formas abstractas en mi pecho con su dedo.

Limpio unas pequeñas lágrimas que todavía salen de sus ojos y me sonríe tristemente.

-Supongo que ahora querrás saber por qué hago esto...

-Solo si tú quieres y te sientes preparada.-Digo acariciando su espalda.

-Es mucho sufrimiento Tae... Las palizas, el bullying constante, mis padres... Al final del día, o en el caso de hoy, tengo la necesidad inmediata de liberar ese sufrimiento, porque siento que si no lo hago puede ser letal para mí... Un día llegué a la conclusión de que ya no quiero seguir viviendo, o al menos no así...

Aquello me horroriza de pensarlo, el solo pensamiento de perderla me aterroriza, jamás dejaría que ella se suicidara, pero, ¿cómo?

-No puedes hacer eso, te dieron esta vida para vivirla, aún se puede cambiar, yo te ayudaré a cambiarla, aparte, ¿no crees que suicidándote le das el gusto a la gente?-Digo intentando hacerla cambiar de opinión.

-Taemin, tú no puedes hacer que un bullying desde que estoy en 5º curso se acabe de un día para otro, y creo que suicidándome puedo joder a la gente, porque ya no tienen con quién meterse... Siempre llevo muñequeras porque no les quiero dar el gusto de que sepan que me hago esto por su culpa, pero puedo joderles más si me suicido, creéme. Aparte, yo no quiero vivir esta vida, como ya te he dicho, al menos no así.-Dice con una sonrisa en sus labios, seguro que el simple hecho de jorobar a sus acosadores le parece satisfactorio, pero, ¿qué hay de mí? De los chicos, de Key.

-¿Y no piensas en mí? No solo en mí, sino en los chicos, en Jong, en Key. También nos jodes, pero para mal, me destrozarías, nos destrozarías.-Y esa frase hace que su sonrisa desaparezca, y sus ojos se pongan tristes.

-¿Crees que no te tengo en cuenta? Cada vez que me hago esto.-Dirige su mirada hacia sus muñecas y continúa.-Me siento fatal conmigo misma, porque sé que de algún modo, te estoy haciendo daño, a tí y a los demás, pero no tengo otra forma, creo que puedo resultar un tanto bipolar.-Dice mirando a la nada.

-Es que es mucho, creo que puedo llegar a medio entender tu bipolaridad.-Y en cierto modo lo hago, es como estar entre la espada y la pared : lo que parece bien para unos es malo para otros, y viceversa. Yo también podría ser así siendo ella, es demasiado para alguien como ella, tan frágil, tan dulce... A mis ojos.

-Me alegro de eso, porque seguro que pocos pueden llegar al menos a medio entenderla... Gracias...-Dice con los ojos cristalizados, emocionada, seguro.

-Por nada.-Y dejo un dulce beso en su coronilla.