56.

Febrero.

Jungkook miro a Taehyung subir sus cosas a la cajuela del carro y aunque la mitad del equipaje con el que llego se encontraba en su casa no importaba, su chico se estaba yendo, Seokjin abrazo a su prometido y Hoseok se acercó a la pareja para despedirse.

Taehyung miro a Jungkook desde la puerta de copiloto esperando recargado, se acercó a pasos lentos hacia él.

—Jungkook te amo —Dijo y el azabache sonrió satisfecho mientras tomaba al castaño por el abrigo y lo apegaba a él.

—¿Qué estamos haciendo? —Pregunto pegando su frente a la de Taehyung.

—Lo que queremos —Hablo sobre los labios del azabache.

Jungkook trago saliva y fundió ambas bocas en un apasionado beso. Su ano subió hasta la unión de su cabello y la otra la apoyo en su cintura. Abrazo su cintura con posesión, sus labios se movían ansioso sobre los de Taehyung.

Ya no importaba el ultimo frio de ese febrero, porque el calor de sus cuerpos era más que suficiente para calentarlos el uno al otro. Una de las manos de Taehyung en el pecho del azabache los separo, ambos pudiendo estar separados pero conscientes de sus respiraciones aceleradas. Taehyung cerro sus ojos y los abrió mirando nuevamente a Jungkook quien le regalo una de las más hermosas sonrisas.

—¿Me amas? —Pregunto Taehyung con un brillo especial en sus ojos.

—Claro que te amo, Tae. Joder, claro que lo hago. ¿En serio tenías alguna duda? ¿Me has visto? ¿Has visto como me afectas? —Pregunto y Taehyung sonrió.

—Eres la única persona en mi vida por la que quiero cambiar a mejor. Tae.

Taehyung sonrió y beso la nariz de su chico.

—Eres mi punto débil —Le aseguro en voz baja.

—Y no sabes lo aterrador y emocionante que es eso — Susurro y Taehyung hizo un puchero.

—Jungkook...

Sus ojos se habían llenado de lágrimas. Negó con la cabeza y Jungkook lo acerco a él, pegando nuevamente su frente a la del castaño.

—Nunca pensé que dorias eso —murmuro finalmente Taehyung.

Jungkook trago saliva y sujeto la cara de Taehyung con sus manos, obligándolo a mirarlo.

—Pues métetelo en la cabeza, porque no va a cambiar.

Afirmo el azabache y Taehyung derramo unas cuantas lágrimas.

—¿No? —Sonrió.

—No voy a dejarte de amarte por muy idiota que pueda llegar a ser, así que prepárate para aguantarme por mucho más tiempo.

Taehyung ilumino su rostro con una gran sonrisa.

—¿Cuánto tiempo? —Bromeó Taehyung y Jungkook sonrió divertido.

—Hasta que te canses de mí.

Sentencio y Taehyung sonrió.

—Prepárate Kim Taehyung, porque tendrás que soportarme para toda la vida.

Susurro antes de juntar sus labios en un beso tierno y tranquilo.

Y Taehyung sintió su corazón palpitar de emoción ante aquello.

Entre sus recuerdos, recordó aquella vez que Jung Hoseok le hizo una pregunta tan tonta para él en ese tiempo de joven.

—¿Qué es el amor?

Le pregunto el chico de alrededor de once años a su hermano mayor.

Y Taehyung lo miro con una sonrisa mientras buscaba una gran respuesta.

—El amor, es cuando tú me robas cada día mi pedazo de pastel de chocolate del almuerzo y yo, aun así, sigo dejándolo en el mismo sitio para ti todos los días.

Y podían decir que ese amor es de hermanos y sí, pero es similar al amor, el hecho de que te esfuerces por ver una sola sonrisa de la persona que amas.

Pero ¿Cómo sería describir su amor hacia Jeon Jungkook? Imposible tal vez, porque con solo una mirada, una sonrisa, un simple toque. Jeon Jungkook desbordaba millones de emociones y sentimientos por Kim Taehyung.