Y cómo dijo papá, él vino al día siguiente......

Después de que Hlokk lloró en sus brazos, todos nos fuimos al comedor donde mamá sostenía seriamente a un dormido Castor, papá nos indicó que nos sentáramos al frente mientras que él nos diría algo, así que le hicimos caso y una vez sentados, comenzamos a mirar frente a frente a nuestros padres.

El ambiente era tenso, nadie quería hablar, ni Hlokk, que miraba a papá con tristeza. El silencio lo rompió mamá llamándole a papá por su nombre, yo.... jamás la había escuchado hablarle así a papá, siempre eran palabras con cariño pero ahora... sé que de aquí en adelante no será lo mismo.

Ante la sorpresa, mamá nos miró a nosotros con una sonrisa para calmarnos, pero yo sabía que había algo diferente en esa sonrisa y era que no era la de siempre, inmediatamente quise levantarme de mi asiento y abrazar a mamá, pero fue entonces papá habló.

-Mis niños, se que... en estos días papá no estuvo y... la verdad... es que los extraño... pero debido a mi mal comportamiento nosotros... ambos, mamá y papá hemos decidido que lo mejor... es vivir separados por un tiempo, espero... espero que lo comprendan hijos-

Estoy por decirle que NO pero Hlokk me ganó comenzando a llorar y a correr hacia los brazos de papá.

-¡NO!, papi no ise, papi no.... ¡NO IISE Ahhhhahhhh wuahhhh!-

-Snif.... Pa..... Papá- no quería que se fuera, no lo quería, no entiendo qué pasa... porque..... porque las cosas tienen que ser así.

-Oio a mami wuahhhh, mami te peo wahhh mami te peo snif mami...... ¡Mami mala!- entonces papá levantó a Hlokk hasta sentarla en su rodilla y la agarró cuidadosamente del rostro.

-No cariño, no es así.... papá hizo... algo malo, por eso..... por eso merecía ese golpe de mami, mami no es mala, ella te quiere... y yo también y mucho, a ambos los quiero-

No podía más, bajé de mi asiento y fui donde papá, yo no quiero que se valla, yo.... ¡no quiero!..... sin que dijera nada me aferré más a él junto con Hlokk, papá nos tuvo en sus brazos hasta que nos calmó, en eso se separa de nosotros y agarra nuestras mejillas mientras nos sonríe de forma cálida.

-Mis hijos, ¿ya están más tranquilos?-

-¡No! snif... ¡porque te irás y nunca volverás! Snf...-

-Snf shii....-

-Yo jamás dije que los abandonaría- a pesar de la tristeza, papá lo dijo con mucha decisión.

-Pero.... pero entonces... porqué nos dices que te irás a vivir a otro lugar snif... snf...-

-Oto lugar NO, oto luga ¡NO! uhh... wuuuahh...-

-Hércules, Hlokk, estaré cerca a ustedes, dije que viviría separado de ustedes pero eso no significa que no los vaya a visitar, hasta incluso puedo ir por ustedes para llevarlos a jugar en mi nuevo hogar, no... ¿no es así cariño?- papá miró con una sonrisa nerviosa a mamá esperando una respuesta, pero ella seguía aún seria.

-Si..., los dejaré solos para que hablen-

Mamá se fue incómoda de aquí, dejando a papá algo triste, cuando eso ocurrió, Hlokk lo abrazó haciendo que papá nos miré otra vez.

-Bueno... es hora de recuperar nuestro tiempo perdido-

No vimos a mamá durante toda la tarde, sin embargo a pesar de que ella no estaba, papá jugó con nosotros en casa y luego nos llevó al parque que estaba a unas cuadras de nuestro hogar, como era otoño las hojas que caían de los árboles eran muchas y formamos montañas de estas hojas para luego tirarnos en estas, de verdad, ¡fue muy divertido!

Fue así que los tres, al estar echados en las hojas, comenzamos a conversar, Hlokk le decía a papá las cosas que hacía Brunhilde en casa y yo le decía las cosas que hacía en el jardín y que muy pronto entraría a primaria, al principio papá estaba algo incómodo, pero luego nos mostró su mejor sonrisa, por último, regresamos a casa, pero no para descansar, sino para entrar al coche de papá y una vez que papá lo encendió, comenzó a alejarse del vecindario.

Cuando ya estábamos lejos de casa, papá nos preguntó si queríamos ir a patinar o a comer pastelillos, ambos gritamos por los pastelillos y papá con una sonrisa comenzó a cantar una canción que nosotros ya sabíamos de memoria y la cantamos, hasta llegar al estacionamiento de la pastelería, a la que siempre íbamos.

Fue entonces, que cuando salí, vi claramente de lejos, como un señor estando de espaldas pegaba con un bate a una niña, esperen....

Ella... ¡ELLA!... ¡ELLA ES MÍ HERMANA!......

Sin pensarlo, corrí donde ese señor y agarré de su brazo deteniendo así otro golpe con el bate.

-¡Lárgate de aquí niño!-

A pesar de su tono furioso, no lo solté, sin embargo, el señor, sin mirarme, sacude fuertemente su brazo, haciendo que lo suelte bruscamente mientras que en el proceso me golpeaba la espalda con el gran bote de basura que había cerca a nosotros.

Me dolió, mi cuerpo me dolió, pero al mirar que a ella ya no la golpeaban, eso me alivio.

Es entonces que siento como me cae un golpe de ese bate, antes de escuchar tan claro mi nombre venir de dos personas, pero... antes de caer inconsciente, pude sonreír a mi hermanita, que en esos momentos, tenía el ojo morado...., jaja... ja... perdón hermanita, sé que estás muy preocupada pero tranquila, ahora... todo estará... bien.......
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*Pip..... pip...... p... pi... piiiiiiiiii......*

Era lo primero que escuché al despertar, no sé en donde estoy pero cuando me moví mi cuerpo me dolió haciendo que lancé un quejido al sentir ese dolor, de pronto sentí una mano agarrar la mía y cuando volteo a ver es mamá, ella se sobó las pestañas antes de sonreírme y abrazarme delicadamente.

-Mamá, ¿en dónde estamos?-

-Oh mi pequeño Hércules, me asustaste mucho mi pequeño aghhhahhhh-

Al igual que esa noche dónde dormimos juntos, mamá lloró en mi hombro, creo que la asusté al desmayarme así.

-Mamá estoy bien, estoy bien, no quería que ese señor lastimara más a mi hermanita-

Entonces eso la alteró y se separó para mirarme.

-¡¿QUÉ?!, ¿¡ ESE SEÑOR QUERÍA LASTIMAR A HLOKK?!-

Agarré tranquilamente sus mejillas y las sobé negando con un movimiento ligero.

-No, a ella no, sino a mi nueva hermanita-

Entonces mamá me miró confundida y yo sólo le sonreí.

-¿Cuál otra hermana?¿Acaso tu padre te llevó a conocer a otro hijo suyo?- al igual que la pregunta anterior negué ligeramente y le hablé calmado.

-No mamá, yo.... sé que te da tristeza hablar de eso pero esa hermana del que te hablo es la misma niña que vino con aquella señora a la casa- mamá me miró como si estuviera pensando en algo y por eso la miré curioso.

-¿Mamá?- de pronto habló algo seria.

-Hijo, esa nueva hermana de la qué hablas en realidad es.....- entonces la puerta es tocada, ambos miramos quién había sido y me sorprendí al verla parada en el marco de la puerta con un parche en el ojo derecho y sosteniendo un pequeño pedazo de periódico doblado.

-Tú....- fue lo que escuché de mamá antes de interrumpirla.

-¡Eres tú! ¡Viniste! me alegra de que estés bien, mamá ella es mi hermana, mi nueva her...- fue entonces que vi a mamá correr a ella y agarrarla de los hombros mientras la miraba molesta.

-Tú.... ¡tú le hiciste daño a mi hijo!, sino fuera por tí ¡él no estaría así!- me sorprendió mucho la actitud de mamá así que a pesar de que me dolía el cuerpo me levanté de la cama para detener todo eso.

-MAMÁ, DÉJALA EN PAZ, ELLA NO HIZO NADA, FUE ESE SEÑOR PASTELERO, FUE ESE SEÑOR-

Rápidamente tomé la mano de mi hermanita y la llevé detrás de mí mientras que mamá veía todo eso incrédula.

-Hércules-

-¡No! nada de eso, mamá que es lo que te pasa, ella estaba en peligro así que la ayudé, el que tiene toda la culpa es ese señor que quería lastimarla yo sólo la defendí, como tú misma me lo dijiste aquel adulto que abusa de un niño es más que.... que una.... UNA BASURA.....- temblé un poco al decir esa palabra grocera pero seguí mirándola decidido para que no lastimara más a mi hermanita -mamá no podía evitar correr y defenderla porque ella... ¡ella es mi hermana ahora! Y.... Y la defenderé ¡quieras o no!-

Mamá me miró sorprendida y luego suspiro antes de mirarme con preocupación para luego ver a mi hermana y por último regresar a mí, es cómo si pensara en sus palabras.

-Oh Hércules.... yo lamento....- la interrumpí.

-¡Primero tienes que disculparte con ella!- sostuve la mano temblorosa de mi hermana y la coloqué frente a mamá, tengo miedo que pase algo malo pero aún así no solté su mano esperando qué es lo que iba a pasar.

-Yo.... lo siento mucho, debiste tener mucho miedo ¿no?...... ven aquí- entonces cuando mamá la abrazó sentí el como ella presionó un momento mi mano antes de que la soltara para devolver el abrazo.

-Yo.... lo.... lo siento mucho....... no quería que Hércules se dañara..... en verdad lo lamento- lo decía ella algo temblorosa cosa que me hizo reír un poco.

-Descuida no fue tu culpa- dijo mamá.

-En realidad no me dañanaron.... mucho...., estoy bien hermanita, tu hermano es muy fuerte- de pronto mamá me acarició la cabeza antes de reír un poco.

-De hecho Hércules, ella no es tu hermanita....- eso me ofendió un poco así que paré las caricias de mamá con mis manos y la miré algo molesto.

-De qué estás hablando, claro que sí, ella es....- entonces me interumpe colocando esa misma mano sujeta en mi mejilla.

-Déjame terminar, ella no es tu hermanita porque "ella" en realidad es un niño, él es tu hermanito básicamente-

-.........................- mi cara... creo que quema..., todo este tiempo que hablamos, ¡¿en realidad lo estaba insultando?!, ¡le dije niña en vez de niño, y más de una vez!, yo.... soy un tonto.

-¿Hércules?¿Te encuentras bien hijo?- no podía más así que cuidadosamente retiré la mano de mamá de mi rostro y coloque mis manos tapando mi cara, la vergüenza que sentía no tiene nombre, hasta incluso creí que era linda y... y que al saber que era su hermano imaginé que la ayudaría a conseguir a alguien muy bueno para que la acompañé por el resto de su vida, en verdad ¡soy un tonto!......

-Ammm... Hércules- lo decía algo temeroso mí "hermano" mientras sostenía la ropa que llevaba puesta.

Luego de que mamá se diera cuenta de lo que me pasaba, comenzó a reír algo fuerte haciendo que me dé más vergüenza por lo que me hizo hundir más mis manos en mi rostro, miré un momento a mi hermano y él parecía confundido ante toda esta situación, suspiré de disgusto por las risas de mamá antes de abrazarlo aún estando avergonzado.

-P-Perdón por llamarte hermanita en vez de hermanito, enserio lo siento- la vergüenza no paró porque mamá reía mientras decía oh mi estómago, si sigue así espero que le duela, mamá eres mala.

-No.... descuida... a veces se confunden, por eso siempre me escondo- tras decir eso mamá paró de reír y nos abrazó a ambos.

-Los dejaré solos para que se conozcan ok, nos vemos dentro de un rato, Hércules cariño ¿quieres volver a tu camilla?- lo dijo calmada mientras me miró.

-No, así estoy bien- le respondí con una sonrisa ganándome así un beso suyo en la mejilla.

-Bien, si quieres subir a la camilla ahí hay una pequeña silla que te ayudará, nos vemos luego chicos- ella se fue dejándonos solos.

Una vez solos tomé de su mano y lo guíe hasta sentarnos al sofá que estaba al costado de mí camilla, por unos buenos minutos ambos no nos decíamos nada hasta que se me ocurrió decirle que le pareció los panes que le conseguí, volteo entonces y al querer hablar él lo hace primero.

-Mi.... mi nombre es Jack..... eso te quería decir antes de irme..... pero no pude estar más tiempo ahí... yo.... encerio lamento mucho lo que te suce.....- lo interumpi, no quería ponerlo triste.

-Jack, Jack, ¡Jack!, Es un bonito nombre, es igual al de papá- a pesar de que le dije eso él miró el suelo algo triste.

-S-si..... igual al de padre......-

No sé qué pasaba pero tomé de su mano y él al verme le regalé una de mis sonrisas más cálidas, no quería preocuparlo pero entonces siento el cómo me abraza y llora en mi hombro, de seguro estaba muy asustado.

-Descuida, ese horrible hombre ya no te dañará más porque ahora yo estoy aquí y no dejaré que estés triste hermanito- a pesar de que le dije estás palabras no paró de llorar hasta por un buen rato más.

En estos momentos, mi cuerpo dolía un poco por su abrazo pero no lo dejé saber, por alguna razón, no quiero preocuparlo.

-Perdón, perdón Onii-chan perdón- lo decía muy triste, aún así.... esa palabra... me confunde ¿onichan? ¿que significa eso?

-Descuida, estoy bien, además amm.... que significa ¿onichan?- lo dije algo confundido.

Entonces él tranquilamente se separó un poco de mí y me miró fijamente, a pesar de que tenía ese parche en el ojo reí algo nervioso por la cercanía, eso lo notó él así que se separó un poco más mientras miraba sus rodillas como si estuviera pensando en qué decirme.

-Esa...... esa palabra "onii-chan".... es....... Aamm...... un día, mi tía Anne me dijo que era una palabra que.... agradecía a la persona que te ayudaba..... ella decía que a los hombres les gusta que le digan así, pero sólo a los especiales.... y yo.... lo usé la primera vez cuándo te agradecí por los panes de fruta y.... y ahora lo uso porque sé que ahora eres mi nuevo hermano mayor, yo..... si te molesta que lo diga entonces pararé- levanté mis dos manos a sus mejillas y lo hice mirarme tranquilamente, todos los niños que conozco de 5 años son torpes al hablar, pero él.... lo hace con una fluidez que es sorprendente, solamente le sonreí antes de continuar.

-No, de hecho me gusta esa palabra, puedes decirme onichan todas las veces que quieras hermanito- ambos nos sonreímos pero nos asustamos cuando escuchamos a alguien tocar la puerta.

Los dos volteamos a ver y era papá con una expresión seria, no sé porque está así pero en eso sentí como Jack bruscamente se alejó de mí, se levantó del sofá y bajo la cabeza, es cómo si alguien le hubiera gritado en ese mismo instante, miré a papá y él sólo mantenía una expresión serena al verme.

-Hércules, hijo, me alegra de que estés bien- su tono parecía normal pero entonces miré nuevamente a Jack y al hacerlo lo noté teniendo leves temblores por el cuerpo.

-También me alegra de verte papá, pero ahora estoy hablando con mi hermanito- me levanté del sofá y fui hacia Jack pero el simplemente se alejó aún más.

-Yo..... perdón Hércules, yo.... iré a mi habitación- iba a decirle algo pero se fue corriendo y pasó por un costado de papá.

-Ahhhhh, encerio muchacho que me preocupaste- entonces papá corrió hacia mí y me cargó, no sé qué está pasando pero creo que papá le causó ese temor a mi hermano.

Olvidé lo que pensé en esos instantes ya que papá me abrazó tan fuerte que el cuerpo me dolió y eso se lo hice saber inmediatamente ocasionando que él mismo me lleve a la camilla mientras me quejaba del dolor.

Papá se quedó un buen rato conmigo conversando sobre lo valiente que fui al salvar a Jack, no sé porque pero tengo la sensación de que algo ocurre, papá evadía fácilmente mis preguntas cuándo se trataba de mi hermanito Jack, papá simplemente me decía que aún no era tiempo de hablar sobre él y que cuando las cosas se calmaran hablarían recién de él.

Ya no le di más importancia al asunto así que decidimos conversar el como estaba mi hermana Hlokk, papá me dijo que ella estaba triste porque el señor panadero me había golpeado tan fuerte que tuvieron que traerme aquí, aún así sabiendo quién fue no lo podía creer..... ese señor que alguna vez me sonrió era en realidad una persona violenta, cómo me gustaría que ese señor recibiera su merecido, mientras imaginaba como el señor iba a la cárcel escuché de pronto el cómo papá justificó difícilmente su actitud, diciendo que posiblemente mi hermanito halla comenzado la pelea pero simplemente le dije a papá que eso era imposible y que por favor no diga más porque me molestaría, papá al entenderlo comenzó a cambiar de tema.

Luego de un rato papá salió y trajo una caja de panquesitos cortesía de la pastelería dónde él me contó que ese señor era el jefe, al parecer ese tonto quería comprar mis disculpas pero rápidamente le dije a papá que no quería nada de ese señor, yo aún estoy enojado por lo que le hizo a mi hermanito, a pesar de la insistencia de papá mantuve mi decisión firme y clara.

Papá al captar que no cambiaría de opinión dejó la caja de panquesitos aún lado de la mesa de mí camilla mientras suspiraba, en eso entra mamá y con sólo mirar a papá hizo que se retire mientras bajaba la vista.

Después de que papá se retiró mamá comenzó a traerme un vaso con agua de la mesa cerca a la puerta, se lo agradecí mientras tomaba el agua, ella al ver la caja de panquesitos cerca a mi mesa lo agarró y lo tiró directamente al bote de basura, no dije nada al respecto pero la miré con una sonrisa calmada.

-Descuida hijo, ese señor tiene que pagar por sus pecados- no dijo nada más y comenzó a darme mis medicamentos.
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No vi a Jack por el resto del día, mamá me contó que un familiar vino por él y se lo llevó ya que no tenía fracturas graves así que le dieron de alta, ahhhhh.... me gustaría poder hablar con él, quiero saber ¿en dónde vive? ¿estará bien? o ¿porque esa vez que nos conocimos..... buscaba en la basura?

Esa misma noche salí del hospital ya que no sentí a mi cuerpo doler tanto, mamá subió al coche justo en la parte de atrás conmigo mientras que papá conducía de forma callada, una vez que llegamos me despedí de él y pasé con mamá a casa, al llegar a la sala a la primera persona que vi fue a mi prima Brunhilde, ella cubría con una manta a Hlokk mientras que sostenía a un dormido Castor, mamá se paró frente a ella y le agradeció por todo, ella sólo asintió y luego fue hacía mí para abrazarme, creo que tendré que explicarle muchas cosas.
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Pasó alrededor de otra semana dónde no sabía nada de Jack, a pesar de que busqué con mamá por los alrededores de aquella panadería, que cerró por cierto, no lo encontraba, como era fin de semana podía buscar por los alrededores de casa con mi prima Brunhilde aún así no encontré nada, justo antes de regresar a casa una mujer salió de los callejones mientras tomaba del pico de una botella, la iba a ignorar pero comenzó a hablar de su sobrino, decía que el pobre de su sobrino tiene un mal padre y encima su madre permite que su sobrino Jack se vea con ese tipo, no sé si acercarme a hablar con esa señora pero dijo el nombre de mi hermanito y quizás sea de otro de quién habla pero no me cuesta nada con intentar hablar con aquella señora.

-Ammm.... hola- ella me miró un poco curiosa antes de seguir caminando algo tambaleante -¡Hey, espera!-

-Será mejor que te vallas niño, no quiero a otro pvto policía regañándome- ella seguía ignorándome pero en eso logre sujetar su falta haciendo que está se baje un poco.

-¡¿Qué rayos haces niño?! ¡suéltame!- bruscamente me quitó la tela de su falda y después se la acomodó.

-Perdón señora, pero no pude evitar escuchar su conversación, ¿podría hablar con usted?- ella me miró de reojo antes de tomar otro trago de su botella.

-Acaso tu madre no te dijo que es de mala educación que un niño escuché conversaciones de adultos- eso era cierto, me sentí tan avergonzado por actuar así que simplemente baje la cabeza y me disculpé, cuando me iba a despedir la señora habló -Agh, que más da, dime niño que más quieres saber de esta joven señorita- me dijo mientras se tomó otro trago de esa botella.

-Perdóneme que la interrumpa pero escuché de usted que tenía un sobrino llamado Jack- ella dejó de hacer lo que hacía y me miró de forma seria.

-No es la primera vez que me preguntan por él, dime muchacho acaso vienes de parte de ese cliente rechoncho y enfermo del otro día, un tal ¿Cupery?- me acusó mientras colocó su mano en mi hombro, no entiendo qué pasa pero rápidamente lo negué.

-NO, NO, No vengo de parte de él, además ni siquiera sé quién es él, sólo quiero saber si su sobrino Jack es aquel niño rubio que lleva unos shorts algo cortos, una camisa blanca grande y un abrigo marrón- me miró pensativa por unos momentos antes de que nuevamente tomé de su botella y conteste.

-Sabes...., con esa descripción te puedo distinguir a varios niños por esta zona, no lo sé la verdad, mmmnnnn.... pero quizás pueda aclarar mis dudas ¿tienes algo para ofrecerme cariño?- su mirada era de total burla.

-Yo.... no entiendo señorita, a qué se refiere con algo para ofrecer- al decir esto ella rodó los ojos mientras colocaba una mano a su cintura y me miraba fastidiada.

-Agh estos niños de ahora, por eso no me gusta que se topen conmigo, bueno a lo que íbamos, con algo para ofrecer me refiero a dinero niño, Di-ne-ro, si quieres que te brinde información tienes que pagar- oh.... a eso se refiere.

-¡Pero!..... pero, yo no tengo dinero-

-Pues qué pena, ahhh.... suficiente niño, no estoy aquí para perder mi tiempo- ella me dio la espalda y comenzó a caminar algo tambaleante.

-¡ESPERA! ¡Espera! yo amm.... creo que tengo algo- comencé a buscar en mis bolsillos y si mal no recuerdo tenía un billete de un dólar, sabía que era el billete que mamá me dijo que le diera a Brunhilde pero.... este era una situación de emergencia, en verdad espero que sea mi hermanito de quién habla está señora -Aquí, esto es todo lo que tengo-

Le di en las manos a la señora el billete y los cuatro caramelos que mamá me dio antes de salir, la señora miró el billete y comenzó a reír a carcajadas.

-Oh muchacho no creí que me dieras algo de dinero jajajaja-

-Entonces... ¿me dirá si el Jack del que le hablé es su sobrino?- ella dejó de reír un poco y me miró.

-¿Para qué quieres saber de él? ¿Acaso te debe, te ha robado o?..... posiblemente no me lo crea pero ¿te golpeó?- lo decía con una sonrisa burlona.

-Jack, es mi hermanito y quiero saber ¿dónde está él?- fue entonces que la botella de esa señora se le calló al suelo, me miró con incredulidad y luego de estar callada un momento me volvió a preguntar con duda.

-Tu.... tu padre es aquel hombre que trabaja en una editorial y que es reportero- solamente asentí antes de ver como la señora llevaba si mano a su rostro con preocupación y luego volvió a la seriedad.

-Será mejor que te vallas muchacho, las decisiones de tu padre son una completa mierda, si quieres torturar también a mi sobrino créeme que no me importara ir a la cárcel, al final de cuentas soy sólo una prostituta para ustedes- sus palabras a pesar de molestas eran confusas, ¿torturar a Jack otra vez? ¿prostituta? no comprendí mucho pero lo que sé es que ella quiere proteger a Jack, algo que yo también quiero y eso tengo que hacérselo saber.

-Yo no quiero lastimar a Jack, sólo quiero saber dónde está, papá lo oculta de mí y a pesar de todo, ¡quiero saber si está bien!, ¡quiero saber de su salud!, la última vez que lo vi fue en el hospital y tenía un parche en él ojo, por favor señorita lléveme con él, sólo quiero saber ¿cómo está mi hermanito?- al decir esto lágrimas gruesas caían por mis mejillas no podía evitar llorar, encerio quiero saber dónde está Jack.

-Ya, ya, tranquilo niño, agghhhhh de acuerdo si quieres saber dónde está Jack entonces sígueme- limpié mis lágrimas mientras se lo agradecía, ella sin importancia alguna suspiro cansada y comenzó a caminar.

Caminamos y caminamos por un par de minutos, un poco cansado le pregunté si estabamos cerca pero ella decía que aún faltaba llegar, las calles que veía eran nuevas para mí por suerte al cruzar una carretera pude ver de lejos la panadería cerrada, al menos desde aquí me podía guiar, sólo bastó con caminar unos 5 minutos más para llegar al frente de una casa muy grande, el lugar era algo concurrido pero aún así aterrador, la señora insertó una llave logrando abrir la puerta de aquel edificio.

-Esperas una invitación o vas a pasar- deje de distraerme y la miré.

-Ah, ¡sí, perdón!- al pasar pude notar como él ambiente estaba algo sucio, el olor de aquí era desagradable y se podía ver algo de humo por los pasillos -este lugar apesta- al decir eso me tapé la boca por ser grocero y miré avergonzado a la señora por mi mala actitud.

-Naa.... descuida, él primer piso siempre es así, aquí es donde se hace el trabajo rápido- dijo ella serenamente.

-¿Trabajo rápido?- no entiendo y ella al notarlo sólo negó algo divertida.

-Cosas de adultos, ven te llevaré a su habitación, hagas lo que hagas no te separes de mí muchacho, al menos que quieras traumarte- entonces ella subió las escaleras tranquilamente mientras yo la seguía desde atrás.

De pronto escuché a personas gritar en el segundo piso, al parecer alguien no tiene un buen día, también escuché el cómo reían y festejaban, decían "sí", "no pares" o "más rápido, más rápido", mfhmm... de seguro estaban viendo el fútbol, papá gritaba así cuando ponía su programa de deporte en la sala.

Una vez que llegamos al tercer piso ella me guío hasta estar frente a un pasillo, en este pasillo algunas de las puertas estaban abiertas, ella se quejó al notarlo así que la miré.

-Niño, hagas lo que hagas cierra los ojos y tapate los oídos yo te guiaré hasta entrar a la habitación de mi sobrino pero tienes que obedecerme- asentí y le hice caso, no veía ni escuchaba nada.

Con empujones torpes me guío de frente por el pasillo, no entiendo porque tenía que hacer eso pero con tal de ver a mi hermanito le haría caso, cuando mi pie chocó con el muro es cuando abrí mis ojos para encontrarme frente a la última puerta que vi en este pasillo, quise agradecer su guía pero entonces ella abrió la puerta he hizo que caiga dentro de la habitación.

-¡Jack, tienes visita!- la señora se fue dejándome sólo tirado en el suelo.

-¿H-Hércules?- después de levantarme un poco lo vi a él, estaba con esa misma ropa como cuando lo vi por primera vez, no me importó nada y me levanté para abrazarlo pero él me detiene, lo miro con duda pero él parecía alterado.

-Hércules, ¡no puedes estar aquí!, de hecho ¡no tienes porque estar aquí!, si padre se entera mamá.......... rápido ¡tienes que salir de aquí!- Jack agarró de mi brazo pero lo detuve calmadamente.

-Esta bien, está bien ven salgamos de aquí- extendí mi mano para que la tomara y así lo hizo pero entonces abrió rápidamente la puerta y me jaló hacia fuera.

Ahora que veo, todas esas puertas que antes estaban abiertas ahora están cerradas, Jack rápidamente jaló de mi brazo mientras bajábamos las escaleras, justo antes de llegar al primer piso vi que una pareja se besaban pero.... era muy diferente de lo que hacían papá y mamá, me quedé mirándolos mientras salía de ese lugar.

Al ya estar afuera Jack tomó aire agitadamente mientras recuperaba sus fuerzas, yo sólo me quedé mirándolo.

-¡Es-Estás loco! cómo rayos pudiste venir aquí, pudiste salir lastimado sabes qu....- no le tomé mucha atención y sólo me dediqué a abrazarlo, a pesar de que aún lo oía refunfuñar me alivia el saber que está bien.

-Me alegra saber que estás bien hermanito, me tenías muy preocupado- Jack paró con su refunfuños y también me abrazó feliz.

De pronto escuchamos el ruido de un coche y Jack se puso alerta, rápidamente él me jaló y nos escondimos detrás de un gran bote de basura, miré dudoso a Jack y pregunté lo que pasa susurrando.

-Jack ¿porque nos escondemos?- de pronto él me colocó sus manos en mi boca para que no preguntara más.

-Ssshhhhh......-

En eso escuchamos unos pasos tan cerca a nosotros que por un segundo ambos temblamos, parecía una de las películas de miedo de Brunhilde, los pasos seguían ahí presentes y juro que escuché el cómo se acercó a nosotros pero entonces alguien sale de la casa de forma ruidosa y conocía muy bien esa voz.

-Pero cariño jajaja... qué haces ahí metido por la basura- lo decía aquella señora que me acompañó a ver a Jack.

-Escuche algo- creo que reconozco esa voz pero no podía asegurarme si era él.

-Son las ratas cariño, siempre hay por aquí en todo basurero, mirá~- escuché como la señora pateó algo y luego escuché unos ruidos de ratas, al ver cerca a una quise gritar pero Jack me lo impidió.

-Los ves cariño- lo dijo mientras reía.

-Si..... tienes razón- los pasos se alejaron haciendo que nos relajemos.

-Oh más despacio cariño, acaso en la empresa que manejas no hay secretarias que te satisfacen-

-Todas ellas son unas credulas fastidiosas, piensan que el sexo significa matrimonio, porque crees que él terminó revolcándose aquí- de pronto Jack tembló y en su mirada se reflejó la molestia.

-No lo sé cariño, pero en tu caso estás mnnn~ más que disponible, si fuera tu secretaria dejaría que me embaraces jeje pero~..... eres un perro con suerte, no me gustan los bebés, son mini bestias con mucha baba agh- eso no era cierto Castor era tranquilo a mi parecer.

-Vamonos de aquí me estoy aburriendo, aparte una habitación en el casino que manejo-

-Jajaja siempre sacando en cara tus propiedades, ahhh eres tan odioso-

La señora río un poco antes de escuchar el cómo el coche arrancó y se marchó, Jack y yo esperamos un rato más antes de salir, cuando no se escuchó nada más salimos y ambos nos sacudimos las ropas, en eso lo escucho.

-Aún te queda un poco de polvo ahí- me dijo Jack señalando mi pecho.

-Oh, gracias hermanito, por cierto, ¿porque nos escondimos?- aún estaba confundido y la verdad que no lo creí necesario ya que el señor no nos conocía.

-Es que, verás.... un niño mayor que antes conocí estudió en el colegio de ese señor y cuando me vio jugar con él rápidamente lo reconoció como su alumno y..... al parecer lo expulsaron ya que al día siguiente ese mismo niño con el que jugaba me recriminó y golpeó ya que por mi culpa era la vergüenza de sus padres, no sabía más de él después de ese incidente- no podía creerlo, a pesar de que me contó algo tan cruel él parecía estar tranquilo, agarré de sus manos y le sonreí cálidamente no pienso dejar sólo a mi nuevo hermanito, no desde ahora.

-Yo.... recién iré a primaria el siguiente año y la verdad es que no me importa lo que ese señor diga, además eres mi hermanito y no pienso dejarte sólo por nada del mundo- lo digo con toda la seguridad del mundo.

Al decirle eso su miraba cambio a una de tristeza, así que sin importarme nada más lo abracé de nuevo, no sé porque pero cada vez que lo abrazo me siento muy feliz.

Luego de unos minutos así siento a alguien detrás de nosotros y al percatarme de eso volteo.

Era.... era una mujer alta y muy hermosa...., sus ojos eran brillantes al igual que Jack, en eso ella al ver que Jack lloraba rápidamente se agachó a nuestra altura y me miró enojada.

-¡Tú niño, suelta a mí Jack!- ella con un jalón me separó de Jack y ahora ella lo abrazó a él.

-Cariño ¿qué sucedió?¿ese niño te lastimó?- lo dijo mientras me miraba molesta, tengo que resolver este mal entendido, algo nervioso comencé a explicarle.

-¡NOo...! Se equivoca, yo no le haría nada a mi....- de pronto Jack intervino.

-No mamá, no estoy triste estoy..... feliz, gracias Hércules, gracias por ser mi Onii-chan-

Mi cara quemó demasiado al escuchar como Jack decía de nuevo esa palabra frente a su madre, me dió mucha vergüenza seguir viendo esa sonrisa sincera que me envió después de decir aquella palabra, me hacía muy feliz verlo así y la verdad que no pude agradecerle muy bien ya que confundía algunas palabras, en eso escucho mi nombre venir por un callejón, era Brunhilde, estaba entre agitada y molesta, rápidamente me despedí de la señora y de Jack antes de que vieran a Brunhilde pero creo que eso ya era demasiado tarde.

Al ya estar a su lado recibí un regaño suyo antes de acompañarla hasta casa, por suerte ella en el camino entendió el porque busqué a Jack y lo dejamos todo ello como un secreto, enserio no quiero que nada malo le pase a mi hermanito pero si tengo que ocultar mis visitas con mentiras entonces eso haré.

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Otra parte que no podía dejar pasar, espero que les halla gustado y si fue así dejen sus estrellitas o comentarios, eso ayuda a que continúe con la historia, bueno nos vemos mi gente 💖