CAP. 1: Hermanito

ADVERTENCIA: este fanfic contiene escenas fuertes, sensibles y violentas, también contiene acoso, bullying, incesto, violación y SEXO entre diferente y mismo género, si no te gusta este tipo de contenido, por favor retírate, no estás obligado a continuar si no te gusta.

Es tu decisión propia avanzar con la lectura...

Si no es así, eres más que bienvenido, espero que disfruten de este fanfic :3

////////////////////////////////////////////////////////////////////
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

Yo...
.
.
.
Quiero un hermanito...
.
.
.

Y se preguntarán, ¿por qué lo quiero?

Bueno...

Eso es fácil.

Yo, Hércules Demigod, siempre estoy solo en casa...

¡Oh, pero!, ¡n-no es que me desagrade la compañía de mis padres!... ¡No, eso no!

Es solo que... a veces, cuando vengo del jardín después de pasar un día divertido con mis amigos, yo... no... no tengo a nadie más con quien jugar.

Mamá siempre está ocupada terminando el almuerzo, como papá viene en la tarde, ¡siempre comemos juntos!, pero... luego de terminar de almorzar, él se va y viene aún en la noche... justo antes de ir a dormir.

Y eso me pone triste...

Mamá lo sabe, ella es buena y por eso juega conmigo, pero... son tan pocas las veces que jugamos juntos que al final me deja coloreando un libro que ella misma me regaló.
.
.
.

Una vez, le dije a uno de mis amigos si podía quedarse a dormir en mi casa, en dónde él me preguntó si tenía hermanos.

No sabía que era esa palabra hasta que me lo explicó y la verdad... ¡Es que me fascinó la idea!

¡Cómo me gustaría tener un hermanito!

Pregunte mucho más sobre ellos a algunos de mis amigos y ellos me dijeron que es maravilloso tener hermanos, ya que puedes jugar con ellos y ser el Rey que mande entre ellos, además de iniciar guerras muy divertidas, en dónde el ganador, se definiría... ¡Con una batalla de almohadas!...

Ahora estoy tan celoso de mis amigos, ¡en serio!... justo ahora... ¡Quiero un hermanito!

Después de que me contaran aquello comencé a hacer mi plan, mamá y papá me dijeron que no cuando quería un perro, sin embargo, esto era totalmente diferente, un hermanito..., tenía que planearlo bien, esperé unos días hasta ahora, en dónde mamá me dijo que tomaríamos un baño.

Cómo ya lo había planeado, me porté bien en toda esta semana, así que esta vez voy a pedirle a mamá un hermanito, espero que escuché mi deseo.

-Mi pequeño Hércules, no creo que sea tiempo aún-

Mgh..., mamá me dijo eso...

¡Pero aun así quiero!, en serio, ¡quiero un hermanito!

Quiero tener a alguien que esté en casa para que pueda jugar conmigo todo el día, es por eso que en verdad quiero a mi hermanito, yo... quiero enseñar a mi hermanito todas mis cosas y divertirnos juntos con ellas, y también, prometo que lo cuidaré y no le hará falta nada, si es necesario, le daré todos mis juguetes o todas mis cosas si hace falta, yo solo... ¡Quiero un hermanito a quien amar!...

Cuando le conté a mi amigo sobre la respuesta de mi mamá, él me sonrió y me dijo que la llevara a lugares donde le recordaba a bebés, ya que seguramente así facilitaría mi deseo, al decirme eso, le agradecí y comencé a hacer otro plan.
.
.
.
.
.
.

Durante esta otra semana, cuando iba con mamá de compras, la llevaba a la sección de bebés, donde ahí le enseñé las ropas para mi futuro hermanito, ella solo reía mientras veíamos las cosas, luego con papá en su día libre lo llevaba donde los juguetes y le enseñaba cosas que mi hermanito podía tener, hasta los cuentos que podíamos leer mientras nos íbamos a la cama a dormir, pensé que así tendría más oportunidades para tener a mi nuevo hermanito, pero él al igual que mamá, solo reía.

Mgrrrrhhhh... ¡Porque ellos no quieren darme un hermanito!, ¡por qué!

Yo Hércules Demigod, prometo que lo cuidaré, ¡y mucho!, no dejaré que nada malo le pase, ¡lo prometo!, pero por favor, mamá y papá, ¡quiero un hermanito!
.
.
.
.
.
.
.
.

Llegó el día de mi cumpleaños y muchos de mis amigos vinieron, todos jugamos por el jardín, la mesa que pusieron ahí al centro estaba llena de regalos, a pesar de que aún no tengo a mi hermanito, hoy es un día fantástico, jaja... jugaré con mis amigos hasta ya no poder correr.

Luego de un tiempo mamá me llamó, mis piernas temblaban un poco por lo mucho que corrí con mis amigos, los padres de algunos de ellos tuvieron que cargarlos porque estaban agotados, a pesar de mi cansancio fui donde mamá, donde papá me cargó de sorpresa, al ya estar en frente de mi pastel de chocolate con fresas.

Después de cantar, recibí muchos aplausos y por último partimos el pastel, estaba delicioso y los trozos de fresa también.

Luego de que los adultos hablarán, se retiraron de mi casa, despidiéndose junto con mis amigos; al final, ya todo había terminado.

Estoy tan agotado que papá tuvo que ayudarme a lavar mi cabello, el baño que nos dimos era tan refrescante que me dormí.
.
.
.
.
.
.

Cuando abrí los ojos ya era de día, apagué la alarma del reloj y baje a desayunar, era hora de ir con la Miss Geir.

Al bajar al comedor, vi a mi padre cargar a mi madre mientras la abrazaba, dando así muchas vueltas; parecía divertido así que abracé la pierna de papá para unirme, no entendía lo que sucedía, así que me deje guiar por las vueltas de papá. Cuando él se dio cuenta de mi presencia, bajó cuidadosamente a mamá y me cargó mientras me hacía muchas, muchas cosquillas.

Jajaja no podía parar de reír.

-Tú.... pequeño travieso, al parecer tu deseo se cumplió-

No entendí lo que papá me quería decir, le pedí explicaciones luego de que el ataque de cosquillas paró, a lo que él me veía un poco nervioso, pregunté esta vez un poco preocupado a mamá y ella sólo me sonreía, me levantó y me sentó en una silla, antes de acariciar los mechones de mi cabeza.

-Mi pequeño Hércules, tendrás un hermanito-

La sorpresa me invadió y abracé a mamá feliz, no lo podía creer, tendré a mi hermanito, ¡tendré a mi hermanito!, estoy tan feliz, ¡no puedo esperar para conocerlo!, aún con mi sonrisa le pregunté ¿dónde estaba?, busqué con la mirada por el comedor pero no lo veía por ningún lado, así que miré a papá y le pregunté por mí hermanito, pero él sólo me dió una sonrisa nerviosa mientras miraba a mamá.

-¿Dónde está mi hermanito?- mamá me miró y contestó.

-Mi pequeño Hércules, tu hermanito, aún no llega, él... necesita crecer un poco, mnnn... además, debes saber... que no puedo asegurarte de que si es hermanito o hermanita, para eso, tiene que venir aquí-

No entendí a qué se refería con eso, así que pregunté.

-Entonces, ¿cómo vendrá mamá?, ¿cómo vendrá mi hermanito a la casa?- lo dije dudoso y ella comenzó a mirar a papá, él sólo mantenía su sonrisa nerviosa hasta que habló.

-Veras hijo, hay un ave, no... una cigueña que trae a los bebés para...- Papá no terminó de decirme aquello porque mamá se reía un poco, sus risas eran tan contagiosas que nosotros dos también reímos con ella.

-Cariño, creo que Hércules ya está un poco grande para creer en ese cuento-

-Si querida tienes razón, entonces.... tú le explicaras- lo decía papá mientras tomaba de la mano a mamá.

-De acuerdo, de acuerdo, pero primero tomemos el desayuno que se enfría-

A pesar de que en esos momentos no me hallan explicado nada, en el fondo de mi corazón, estaba muy feliz al saber que tendría un hermanito, ¡no puedo esperar más!, ya quiero comenzar a jugar con él.

Después del desayuno, papá se fue a la editorial, donde trabajaba de periodista y mamá comenzó a alistarse, para llevarme con la miss Geir, cuando me ayudó a ponerme mi ropa me contó que muy pronto su pancita crecerá tanto que posiblemente no pueda caminar mucho y eso no debería de asustarme, porque ahí dentro estaría mi hermanito, al final, cuando llegue la hora de que salga, mamá me dijo que se irá de casa por un día y lo traerá al siguiente día, yo sólo asentí feliz y le prometí protegerlo con mi vida, mamá sólo me sonrió y me acarició la cabeza mientras abría la puerta para irnos ya con la miss Geir.
.
.
.
.
.

Yo......

No me acuerdo cuánto tiempo esperé para que llegara mi hermanita, si.... al parecer tenía que esperar un poco más para el hermanito, pero aún así eso no significa que la quiera menos, cuando ella venga podré jugar a las atrapadas y a las escondidas por la casa, justo ayer en la noche mamá se fue con papá y ahora gracias a mi prima Brunhilde pude llegar temprano al salón de clases dónde mis demás compañeros estaban conversando y otros jugando con las plastilinas, la Miss Geir estaba sentada en su escritorio mientras nos vigilaba, me pregunto qué pensará.

Al final de la clase la Miss Geir se acercó a mí y me dio un regalo, estoy sorprendido pero cuando voy a abrirlo ella me detiene y me dice que era para mi nueva hermanita, yo con una sonrisa se lo agradezco y me quedé conversando con ella hasta que mi prima Brunhilde vino a llevarme a casa, este día la pasé muy bien, aunque mis padres no esten en casa ya ansío ver a mi nueva hermanita.

A la mañana siguiente sentí que alguien me movía, al abrir mis ojos vi que era papá, le dije buenos días algo cansado pero luego al notar su sonrisa me levanté de golpe, ¡era hora!, ¡era el día!, rápidamente fui corriendo a la habitación de mis padres, papá venía por detrás mío y entonces antes de que abriera la puerta él me detiene dándome una señal de silencio, aún super feliz asiento y entramos a la habitación cuidadosamente dónde logro ver a mamá cargar un bulto.

Busque en la habitación a mi hermanita mientras devolvía el saludo a mamá, ahora ¿dónde estaría ella?, sino fuera por las leves risas de mamá, jamás hubiera dejado de buscar.

-Mi pequeño Hércules, tu hermanita está aquí-

Me acerqué a mamá y vi que dentro del bulto, ¡había un bebé!, miré aún dudoso a mamá y ella me explicó que mi hermana aún estaba pequeña y debía de crecer, yo sólo le regalé una sonrisa mientras veía a mi pequeña hermanita dormir.
.
.
.
.
.

Clases, días con mis amigos, días con mis padres y mi hermanita, los días pasaron y la he visto crecer, ella ya caminaba así que siempre cuando podía jugaba con ella al escondite por la sala, por cierto el nombre de mi hermana es Hlokk, a pesar de su apariencia tierna, es terriblemente una mandona y una chillona, si no le gusta lo que ve llorará hasta que se lo quites de vista, una vez lloró tan fuerte que mi amigo que me visitaba se fue corriendo a su casa, creo que también es un poco celosa ya que quiere acaparar mi atención y la de mis padres.

Bueno hablando de ellos, me dejaron con mi hermanita en casa al cuidado de mi prima Brunhilde, al parecer mamá tuvo otra pancita luego de unos meses, está vez enserio deseo tener un hermanito, así podré dejarlo con Hlokk para que también pueda jugar con ella.

Ahora mismo me encuentro sentado en el sofá mirando el canal de Barby al lado de una feliz Hlokk y una serena Brunhilde mientras comía una bolsa de papitas.

-Conqueee... la siguiente semana cumplirás 7-

En eso mi prima habla y me mira lo más relajada posible.

-Shiii sete amos, sete amos, feis cumpeamos- contestó Hlokk feliz abrazándome mientras aún veía su canal.

Yo sólo reí y asentí ante la pregunta de la prima Brunhilde.

-¿Ya sabes que vas a pedir?, recuerda aún que tu prima es una estudiante de primaria-

-¿Pimaea?-

-Primaria Hlokk, al igual que yo muy pronto jajaja-

Los tres nos reímos un rato y luego Hlokk siguió mirando la tele, mi prima me ofreció papitas así que las acepté.

-Entonces, ¿ya sabes que vas a pedir?-

-Yo..... sólo quiero un hermanito-

-Ahhhh.... niño tonto, me refiero a cosas materiales, como no sé un ¿lápiz? ¿un estuche de colores?¿Una nueva lonchera?... o algo así-

-jijiji... si lo dices así, ammm.... no creo que los necesite, si tú quieres puedes regalarme alguna de esas cosas pero con un abrazo y un saludo tuyo será más que suficiente-

De pronto sentí que mi prima me abrazó mientras hundía su cara en mi hombro, luego de eso me hizo cosquillas hasta estar hechado en el sofá, no podía parar de reír.

-Ahhhh.... porque eres tan humilde, tú... tonto primo-

-Babi, babi, shhhh-

-Ups, lo siento primita-

Luego de aquellas cosquillas, nos quedamos mirando la televisión hasta que Hlokk se quedó dormida aún lado mío, Brunhilde la cargo hasta su habitación y luego de ello yo fui a la mía, me coloqué mi pijama, me lavé los dientes y la cara y por último apagué las luces de mi habitación, mañana posiblemente vea a mamá llegar con otro bebé, espero que está vez venga mi hermanito.

Justo cuando voy a cerrar mis cortinas veo una estrella fugaz, ¡Era de buena suerte!, me sorprendí tanto que deje lo que estaba haciendo y junté mis manos para pedir mi deseo.

"Oh estrella fugaz, gracias por dejarme mirarte, no te pido grandes cosas pero lo único que deseo es que me des a un hermanito, prometo protegerlo de todo lo malo y estar a su lado por siempre, sólo te pido por favor.... que me dés un hermanito al cual proteger y amar por siempre".

Abrí mis ojos y miré el cielo, no importa cuánto tiempo te demores hermanito, yo siempre te esperaré y compartiremos muchas cosas tanto ruidosas como calmadas, al final me fui a la cama con una sonrisa, espero que esa estrella fugaz me halla escuchado.
.
.
.
.

Justo mientras almorzamos, escuchamos unos ruidos en la puerta, Brunhilde fue a ver y sólo pude escuchar desde el comedor un "bienvenido a casa tío" antes de lanzarme a correr mientras que detrás de mí venía una feliz Hlokk, cuando ellos entraron noté el como mamá se veía cansada pero aún así caminó hasta la sala con el bulto que ya conocía, Hlokk miró todo esto curiosa pero lo que muy pronto iba a saber era que un nuevo hermano o hermana estaba dentro de ese bulto.

Papá dejó las cosas que llevaba aún lado del sillón y se sentó en este mientras que cargaba a una curiosa Hlokk.

-Brunhilde, Hércules, Hlokk, reciban a Castor, su nuevo hermanito-

No lo podía creer, mamá...... me trajo un hermanito...... ¡WAAh, gracias, muchas gracias mamá y gracias estrella fugaz! Estoy feliz, ¡ESTOY MUY FELIZ!, sé que mamá está muy cansada así que le di muchos besos en la mejilla.

-Jajaja.... ¿Y este amor tan repentino?-

-Uhhh, creo que me voy a poner celoso-

-Io e doi beshos a papi mua mua-

-Gracias mi pastelito-

-¡Gracias, gracias mamá, gracias por darme un hermanito, gracias, muchas... muchas gracias, prometo cuidarlo protegerlo y... y...!-

-Hecules ya no kielle a lo-

Mi hermana me miraba triste así que me acerque donde papá y la abracé, no quería que llore.

-Por supuesto que sí te quiero Hlokk, pero ahora, ¡tenemos un hermanito!, aún está pequeño pero cuando crezca jugaremos mucho con él-

-Shiiiiii lo jugá, lo jugá-

-Y yo le enseñaré a usar una bicicleta, a los tres les enseñaré-

Ese día fue el mejor día de mi vida, conocí a mi hermanito que tanto esperaba y ahora sólo a esperar a que creciera un poco para poder hablar de muchas cosas con él.
.
.
.
.
.
.

La semana pasó muy rápido y ya era el día de mi cumpleaños, justo cuando papá y yo estábamos por recoger mi pastel vi a una niña mirándonos de lejos, le dije a papá que esperaría afuera del local a lo que él sólo asintió mientras entraba para hablar con el señor que estaba adentro, cuando el señor me vio me saludó con su gran sonrisa antes de atender a mi papá, sólo muy pocas veces lo he visto pero puedo decir que ese señor era muy alegre.

Mientras que los adultos conversaron me acerque a esa niña, parecía temerosa y al notar que me acercaba se alejó aún más corriendo.

-¡E-Espera!- le grité.

Cómo había un cerco la niña no pudo escapar y sólo se ocultó detrás de un bote enorme de basura.

-A-Ale-jate- lo decía con una voz muy temerosa.

-Perdón, no te haré daño, sólo quiero saber, ¿porque nos mirabas?- dije calmadamente mientras esperaba su respuesta.

La niña sacó su cabeza un poco y ahí pude apreciar sus bellos ojos..... agh que estoy diciendo, las niñas son molestas no.... lindas...

-Y-yo no te miré a ti, miré... al cubo de basura, que estaba a tu lado...-

A pesar de estar asustada no se mostraba completamente, quizás esté herida-

-¿Porque lo mirabas, acaso te lastimaste?, Ven déjame verte-

-¡NOOO!, y-yo... sólo quédate ahí..., más tarde iré a ese cubo-

Tenía muchas ganas de ver si estaba bien, pero con sólo dar un ligero paso ella se ocultó, si miró al cubo quizás mnnn.... quiera algo de ahí.

-Yo iré, iré por tí, sólo dime qué es lo que necesitas-

Me miró un poco dudosa y luego dijo que tenía hambre, si podía conseguir algunos panes de ese cubo estaría más que feliz, entonces rápidamente le dije que me esperará, fui rápidamente a ese cubo de basura pero no había más que cáscaras, es por ellos que seguí buscando.

De pronto, en medio de mi búsqueda, papá sale y me detiene, al parecer parecía confundido.

-Pero ¿que es lo que estás haciendo Hércules?- su mirada era de molestia y a la vez de confusión.

-Yo.... buscó un pan para mi amiga-

-¿Amiga?, ¿qué amiga?-

-Está allí doblando esta esquina cerca de un gran bote de basura al costado de ese cerco, ella dice que tiene hambre-

Papá suspiro algo incómodo y me sacudió las ropas mientras me miraba.

-Mi pequeño Hércules, no creo que debas acercarte a ese tipo de gente, ellos son muy peligrosos, ¡esa niña te podía hacer algo!-

-Pero... tiene hambre y está sola- lo miré con determinación haciendo que solo suspire de cansancio.

-Está bien, está bien, le llevaremos algo para ella, ven pidamos algunos panes al panadero, pero no menciones que hurgaste en su basura- sólo asentí feliz antes de entrar al local, espero que a esa niña le guste lo que elegiré.

Papá aún se quedó hablando adentro mientras que salí y me llevé una bolsa con 5 panes de fruta, todas ellas muy grandes, espero que a ella le guste.

Al llegar la miré de espaldas buscando en el gran bote de basura donde se había ocultado, la llamé tosiendo un poco, pero eso hizo que ella se callera adentro, asustado trepé el bote y ahí la vi, era.... muy linda, está vez nos miramos a los ojos y no sé, es como.... si mamá ahora mismo me estuviera haciendo cosquillas en el estómago, no lo sé, es.... curioso.

Después de un rato ella miró a otro lado haciendo que me ría un poco, pero noté que eso la incomodó así que le extendí mi mano para sacarla de ahí, ella captó lo que quería hacer y aceptó mi ayuda, una vez que la ayudé a salir le extendí la bolsa con los 5 panes, ella lo miró muy feliz y me regaló una bonita sonrisa.

-Muchas gracias Onii-chan- al ver que ella se iba la detuve estando frente a ella, no quería irme sin saber su nombre.

-¡Espera! ¿Cómo te llamas? Yo soy Hércules y hoy cumplo 7 años.

Ella parecía asustada pero entonces me aleje un poco y le regalé una sonrisa cálida ayudando así a calmarla un poco.

-Yo..... yo tengo 5 años, por cierto... feliz cumpleaños Hércules mi nombre es.....-

-¡HÉRCULES!¡¿DÓNDE ESTÁS?¡-

Y ese era papá llamándome, antes de que me diera cuenta la niña desapareció, ah... me habría encantado saber su nombre, quizás con mamá pueda más tarde hallarla, me acerque a papá y lo acompañé hasta el estacionamiento dónde nos subimos al carro con mi pastel, si papá hubiera esperado un poco ya sabría su nombre.

-Te noto molesto, acaso interrumpí algo- lo decía feliz, yo sólo miré aún lado, estoy molesto pero no tanto, quizás en algún momento me la vuelva a encontrar.

Al llegar a casa, subí hasta mi habitación y me dí un baño, espero que esa niña disfrute de esos panes, al terminar me sequé, me cambié y baje al jardín donde todos mis familiares vinieron, tanto mis abuelos de otro país como los que vivían cerca a nosotros.

El abuelo Zeus me regaló un genial carrito a control remoto, estuve jugando con él hasta que le cedi el turno a Hlokk, la mayoría de mis familiares veían a mi hermanito y yo muy orgullosamente lo presumía como el bebé más lindo del mundo, junto a Hlokk claro.

La fiesta fue muy divertida jugaba con mis amigos y hablaba con mis familiares hasta que llegó la hora de cortar el pastel, después de cantar mamá comenzó a repartir el delicioso pastel a cada uno de los invitados, una vez todos satisfechos comenzaron a retirarse, la mayoría eran mis amigos y sus padres.

El sol se ocultaba de forma muy hermosa y eso lo notaron todos mis familiares.

-Hércules, puedes venir- me llamó delicadamente mi madre.

Con una sonrisa fui hacía ella y me mandó a traer más platos desechables, al parecer algunos de mis familiares les gustó tanto el pastel que quisieron repetir la porción, yo con una sonrisa asentí y me dirigí rumbo a la cocina.

En eso, escuchó el timbre sonar, de seguro es Brunhilde que se olvidó su abrigo, no sabía si ir a abrir la puerta o ir a la cocina por los platos pero mamá sonrió y fue en mi lugar a abrir la puerta mientras que yo sólo fui a la cocina.

Cuando llegue busqué los platos desechables pero no los hallaba, de seguro lo dejaron encima del refrigerador, fue por eso que jalé el banco que había ahí y subí en este para poder encontrar los platos desechables, al ver que están ahí, los bajo cuidadosamente y sonrió feliz al cumplir está tarea, es hora de ir al jardín.

Mnnn.... que raro porque hay tantos murmullos, escuché una risa provenir de la sala y luego a papá gritar, ¿se estarán contando una broma?, entonces, antes de salir de la cocina, vi a Brunhilde entrar apresurada, estaba tan agitada que me reí por un segundo al verla así, de seguro ese abrigo que olvidó era su favorito, cuando estoy por hablarle, ella me interrumpió y habló primero.

-¿Dónde está Hlokk y Castor?- me pareció un poco rara su actitud -Hércules, ¿donde están tus hermanos?-

-Ellos están con los familiares, afuera en el jardín, ¿pasó algo?-

-Ven conmigo subiremos rápido a tu habitación pero tapate los oídos-

-Pero.... mamá me pidió....-

-Olvidate de eso, la tía me mandó a llevarlos a su habitación-

Brunhilde salió de aquí y fue al jardín, yo dejé los platos encima de la mesa de la cocina y esperé a mi prima, ella al llegar tuvo a mi hermanito Castor y a Hlokk en sus brazos, no entiendo que está pasando pero la seguí.

-Cuando diga "ya" te tapas los oídos mientras subes-

-Prima, me estás asustando-

-Primito, prometo que la tía te explicará luego, pero ahora necesito que escuches, ¿si?, estás listo-

Los gritos se hacían más fuertes así que asentí mientras me tapaba los oídos.

-YA-

Ambos pasamos por la sala y subimos corriendo las escaleras, escuchaba sólo murmullos hasta llegar a la habitación de Hlokk, cuando quité mis manos de mis oídos lo primero que escuché claramente era el llanto de mi hermana, no entiendo qué pasa pero la abracé con mucha fuerza, no quería que ella esté triste así que comencé a acariciar su cabeza.

-Perdonen primos, todo esto es mi culpa-

-De que estás hablando Brunhilde-

-Wahhhhhh wahhhh, mami peo a papi wahhhh-

-¡¿Qué?!- eso me sorprendió mucho, miré a Brunhilde y ella suspiró mientras nos miraba..... ¿con lástima?

-Ellos.... discuten, será mejor que no bajen por un tiempo- su mirada de preocupación se reflejó tan claro que pensé que algo muy grave había pasado, cuando papá y mamá discuten se gritan pero no llegan a los golpes, que es lo que vio mi hermana Hlokk.

En eso mi hermanito Castor comienza a llorar, Brunhilde lo revisa y se detiene al ver dentro del pañal, me mira pero yo respondí rápido a su pregunta.

-Los pañales de Castor los encontrarás en la habitación de papá y mamá-

Ella asintió y nos dijo que nos quedáramos aquí, al irse mi hermana Hlokk ya se había quedado dormida por los llantos, la cargué y la acomodé en su cama, sé que está mal desobedecer a un adulto pero salí de la habitación rumbo a la puerta.

Al llegar de puntillas a las escaleras vi a alguien pequeño llorar mientras estaba sentado, un momento..... esas ropas..... ¡ERA ELLA!, ¿porque llora?, ¿quién le gritó?, ¿quién le pegó?.

Sin que me importara nada, bajé rápido y me paré justo a su delante, en verdad no me gusta ver su cara asi de llorosa, ella iba a decirme algo pero la abracé, no sé qué está pasando pero sé que ella también sufre.

Al parecer los adultos estaban afuera, aún los escuchaba gritar, no sé porque pero al menos me alegra de que está niña esté bien, de pronto mi padre entró a la casa y al verme me separó bruscamente de ella comenzando así a jalar de su brazo, yo lo seguí hasta verlo lanzar a la niña justo a los pies de la mujer que estaba en el suelo.

-¡Ustedes dos largense de aquí, no los quiero ver ni en pintura, me oyeron!-

-Pero snf... el también es tú hijo, a pesar de todos estos años juntos, ¡prometiste huir con nosotros!-

.........Papá, ¿nos iba a abandonar?..........

Yo....... ¿tengo una hermana más?

-¡YA LÁRGENSE DE AQUÍ O LLAMARÉ A LA POLICÍA!-

-NOoo, tu... ¡te irás!- lo dijo mamá mientras era consolada por mi abuelo Zeus.

-Cariño.... no.... no le creas, jamás te haría algo así, ¡JAMÁS!..., jamás haría algo así..... a... a mis hijos yo.....-

Mi abuelo dejo a mamá en brazos de mi abuela y se acercó a papá, me sorprendió mucho al verlo lanzar un golpe tan fuerte que derrumbó a mi papá al suelo mientras que él comenzó a tocarse la mejilla roja.

-Ya haz hecho suficiente muchacho, será mejor que te retires esta noche, mañana mandaré a hacer un análisis de paternidad y espero que estés ahí.

-Yo..... ¿tengo otra hermanita?- al decir eso los adultos presentes me vieron con preocupación, papá con miedo y mamá con tristeza.

Justo en ese momento llega Brunhilde con Castor en brazos y me jaló adentro para ya no salir.

Al llegar a mi habitación ella me dió un sermón que me hizo llorar, no entiendo que está pasando,.pero lo único que tengo claro, es que papá está en problemas.
.
.
.

No recuerdo cuando dormí pero desperté en los brazos de mamá, tal parece que ella pasó la noche conmigo, al ver su rostro aún podía ver la tristeza, así que me quedé un rato más abrazándola hasta que despertó.

-Mamá, ¿que pasó?, ¿que sucedió?, ¿porque papá.... Ummhhhh....- me hundió en su pecho y comenzó a llorar nuevamente, no me gusta ver así a mamá así que la abracé de nuevo hasta que paró de llorar.

Al levantar mi rostro la vi dormir, mi estómago comenzó a doler un poco así que con cuidado la dejé abrazando el león que ella me compró, era mi peluche favorito.

Con cuidado me dirijo a la habitación de mi hermana pero al entrar la vi llorar un poco así que también me acerqué a ella y la abracé.

-Chicos es hora del desayuno- nos dijo una seria Brunhilde.

Después de recibir aquel sermón comencé a temblar de miedo, jamás había visto enojada a Brunhilde y al verla sólo hace que quiera esconderme, eso se lo hice saber tan en claro, que ella vino y nos abrazó disculpándose en el proceso, no negaré que ambos lloramos en sus hombros hasta que ella nos cargó hasta el comedor, después de hacer eso mi prima se quejó por su espalda e hizo que nos riéramos.

Los 3 junto con mi hermanito la pasamos todo el día en la sala, de vez en cuando preguntamos por papá, pero Brunhilde sólo decía que él estaría fuera de casa por un tiempo, como mañana regresaba con la miss Geir decidí ir a mi habitación.

En eso, Brunhilde me detuvo en las escaleras, diciendo que ella guardaría mis cosas del jardín, al oírla me enojó un poco ya que no soy más un bebé, ahora tengo 7 años y sólo faltaban unos meses para que pueda ir a primaria, se lo dije pero ella con una sonrisa me dijo que cuidara de Hlokk, quise decirle algo más pero escuché el llanto de Hlokk así que me apresuré en ir con ella, cuando la vi en el comedor parecía asustada y señalaba un punto dónde al verlo pude notar una pequeña araña, en eso agarré el vaso que aún estaba encima de la mesa y la coloqué encima de la araña, arrastré el vaso por la pared y la guíe hasta la ventana abierta, una vez que se fue sólo abracé a Hlokk mientras la calmaba.
.
.
.
.
.

Pasó más de una semana desde que papá aún no regresa, le pregunté a mamá y ella evade mis preguntas, Hlokk hace berrinches, ella también quiere ver a papá pero sólo hace que mamá se enoje y la ignore cuando se pone así, además, Brunhilde cuando venía a nuestro hogar sólo nos decía que papá estaba en un viaje de negocios, no sé porque no le creí, quería saber que estaba pasando, así que como un último recurso, le pregunté a la miss Geir.

- En-Entonces ¿tus padres pelearon? -

-Siii miss Geir, no sé porque mamá le pegó a papá, la mujer que vino a casa decía algo de que papá se iría con ella y también escuché que ella y papá tienen una hija, yo.... tengo otra hermana.... sólo eso pude escuchar, yo.... sólo.... quiero saber porque mamá y papá se pelearon- lo dije con mucha tristeza, enserio quiero ver a papá y mamá felices, pero ahora.... no sé el porqué mi mamá se enojó tanto para no querer ver a papá.

-Aaahhhh, Hércules verás....., no.... no puedo contestar a tu pregunta, pero sólo te diré que tú mamá se enojó porque..... porque tu papá le causó mucha tristeza- no entiendo, ellos siempre están felices.

-Pero ellos siempre nos sonríen, es cierto que a veces pelean, pero papá jamás haría llorar a mamá- lo dije tan decidido que sólo la miss Geir me acarició la cabeza mientras suspiraba.

-Perdón Hércules, me encantaría darte más detalles pero "eso" sólo puedes conversarlo con tus padres- asentí aún triste y esperé afuera sentándome en una grada y mirando el portón.

Sólo pensé en papá antes de verlo parado en la puerta, cuando lo vi corrí hacia él y me abracé a sus piernas, hace días que no lo veía y por eso comencé a llorar.

A pesar de que era casi de los últimos en estar ahí me levantó y me llevó cargando hasta su coche, por suerte este tenía las lunas oscuras así que nadie más me vio llorar.

-Hércules, hijo... escúchame-

-Wahhh Por-Porque no.... no vienes a casa snif wahaaa...... acaso.... acaso ya no te i-importamos snif..... Snf..... Ahahhh......- estoy triste, muy triste no quiero que papá se aleje de nosotros, entonces siento que me abraza aún más fuerte.

-¡POR SUPUESTO QUE ME IMPORTAN!- lo dijo decidido- TÚ MAMÁ, CASTOR, HLOKK Y TÚ son los más importantes que me han pasado en la vida, pero ahora.... por mis malas decisiones... están así, perdón Hércules-

-Snif.... Entonces..... Era cierto ¿que nos ibas a dejar?- Eso lo alteró y me miró aún más decidido.

-Eso jamás, no les haría tal cosa-

-Entonces ¿Porqué no vuelves?- ya no me sostuvo la mirada y miró por la ventana cómo si estuviera pensando.

-Yo.... hice llorar a tú mamá, es por eso que tu abuelo me alejó de ella, yo.... le hice daño y ahora debo de pagar las consecuencias, pero... a pesar de todo lo ocurrido, prometo no dejarlos abandonados, iré mañana a casa a hablar con tu madre y después con ustedes, así que por favor cuando llegué llévate a Hlokk y a Castor a tu habitación- deje de llorar y le di otro fuerte abrazo.

Cuando le pregunté de mi otra hermana él simplemente me dijo que no hablaría de ese tema por ahora; papá me ayudó a sentarme al lado del copiloto y nos fuimos, justo antes de llegar me bajó dos casas antes de llegar a la nuestra, lo miré confundido y él me dijo que aún no era el momento, así que sólo asentí, bajé del coche y lo despedí con la mano listo para ir a casa.

Al llegar a casa veo a Brunhilde colocarse las zapatillas, ella al mirarme suspiró y se disculpó conmigo porque se había olvidado de ir a por mí en el jardín, yo sólo negué y la abracé, enserio espero que papá vuelva a casa.

.
.
.
.
.
.
.
.
.

//////////////////////////////////////////////////////////////

Y bueno, el primer CAP, ¿Qué les pareció bueno o malo? En fin, tenía esto en mente así que no quería desperdiciarlo, espero que les halla gustado si fue así dejen sus estrellitas o comentarios uwu cualquiera de las dos me alienta a seguir escribiendo, nos vemos mi gente un abrazo \(・◡・)/ y adiós.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top