"Las primeras horas de la madrugada"

Emparejamiento: Greg House x Alison.

Resumen: Te despiertas a una hora impía para encontrar a House desaparecido.

Advertencias: Ninguna que realmente me venga a la mente a menos que haya un error tipográfico que me haya pasado por alto.

Ambos se habían conformado con una noche tranquila, lo cual estaba bien en lo que a ustedes respecta. No tenías ningún reparo en tener a House solo para ti, incluso si no estaba necesariamente contigo mentalmente. .Realmente no fue una sorpresa para ti, sabías que si él estaba trabajando en un caso, seguiría dándole vueltas hasta que lo averiguara. .Sin embargo, lo que no esperabas era que te despertaras a las tres de la mañana para encontrar su lado de la cama no solo frío, sino vacío. .se había deslizado debajo de las sábanas contigo hace solo unas horas, y parecía que se había escapado de las mismas sábanas sin que tú lo supieras. .

Te quedaste en la oscuridad por un segundo, estirando los dedos para agarrar las frías sábanas de lino. Ojos entrecerrados mientras escuchaba el ruido silencioso proveniente de la habitación contigua. .su mente aturdida por el sueño se tomó unos segundos para registrar que el sonido provenía de su novio desaparecido. Quitándose las mantas, caminó por el suelo tan silenciosamente como pudo. .deteniéndose en la entrada de la habitación principal del apartamento, una pequeña sonrisa cruzó sus facciones al verlo frente a usted. .

Se sentó en el sofá, con las piernas apoyadas en la mesa y cruzadas a la altura de los tobillos, mientras hojeaba las páginas de un libro con más cuidado del que jamás hayas visto a nadie manejar algo. .sus anteojos que casi nunca usaba se tambaleaban en el puente de su nariz mientras sus ojos examinaban cada palabra que cubría la página que estaba leyendo. Siempre se veía doblemente concentrado cuando intentaba resolver y dar explicaciones para las cosas. .su frente se fruncía y sus labios se apretaban en una línea firme mientras se concentraba.

La luz que resaltaba las páginas que sus ojos examinaban rápidamente, delineaba sus rasgos y resaltaba los mechones de su cabello que se habían vuelto plateados alrededor de sus sienes. .el pequeño destello que brillaba en las monturas plateadas que encapsulaban las lentes parpadeó cuando levantó la mano para bajar las gafas y frotarse los ojos. Y de repente, sin siquiera molestarse en echar un vistazo en tu dirección, habló...

—"Si quieres un autógrafo o una foto, todo lo que tienes que hacer es pedir". Su habitual mordisco sarcástico es un poco más juguetón contigo que con cualquier otra persona. .una risa salió de tus labios cuando te acercaste a él,

—"si haces más comentarios como ese, es probable que alguien piense que eres arrogante".

Volviéndose levemente, podía ver la sonrisa que hizo que sus labios se volvieran hacia arriba, una reacción que casi siempre tenía poco o ningún problema para provocar en el hombre generalmente pesimista,—"mira fijamente a otras personas así y alguien seguramente pensará que eres grosero".

—"Mhm, pero eres el único al que jamás consideraría mirar fijamente ..." las palabras te dejaron junto con un bostezo silencioso, antes de que te mudaras para sentarte junto a House en el sofá, el cuero frío golpeando tus piernas desnudas. haciendo que se le ponga la piel de gallina. .la reacción no pasó desapercibida para House, quien miró tus piernas antes de mirarte por encima de sus lentes, "después de un comentario como ese voy a tener que asumir que esos -" señaló a tu piel de gallina, "fueron causados ​​simplemente por ti estar en mi ... presencia."—Dijiste.

—"Totalmente" seguiste el juego, acercándote más a él en un esfuerzo por absorber algo del calor de su cuerpo, "son las gafas, me atrapan todo el tiempo".

—"Tendré que memorizarlo".—Dijo House.

Sus ojos azules se cerraron con cansancio por un segundo antes de quitarse las gafas y frotarse los ojos, se notaba que estaba cansado, se movía despacio y encorvado, frotándose los ojos con una mano. .Sin embargo, no servía de nada decirle que descansara, ya que sabías que se resistiría a todos tus esfuerzos para que volviera a la cama para dormir. .en cambio, decidiste dejarlo seguir buscando su respuesta, no se detendría hasta que la encontrara de todos modos, su inclinación natural por ser obsesivo agotaba a cualquier otra persona. .besaste su mejilla, moviéndote para pararte y volviste a la cama antes de que su mano se aferrara a la tuya.

—"¿Qué?"—Le preguntaste mientras te volteaste, mirando sus ojos muy abiertos que horas atrás habían perdido todo su brillo, —"¿te quedas conmigo?".—Te pregunto el.

Su solicitud era más una pregunta que una solicitud real, parpadeó en respuesta a él durante unos segundos mientras sopesaba sus opciones, él podría estar aquí desde treinta minutos más hasta tres horas,—"vamos, voy a poner las gafas de nuevo ".

Hizo una demostración de ponérselos de nuevo, una sonrisa infantil se abrió camino en sus facciones mientras te miraba. .Finalmente, la expresión jocosa con la que te había fijado te hizo doblar y volviste a sentar, tus piernas moviéndose para estirarse junto a las suyas en la mesa.

—"Las gafas siempre ganan".—Bromeó, volviendo su atención al libro que descansaba en su regazo, sus largos dedos bailando en el borde de la página mientras anticipaba darle vuelta. .lo viste repetir estas simples acciones de pasar la página, los dedos bailando en el borde, los ojos recorriendo las palabras que cada nueva página ofrecía antes de que todo comenzara de nuevo. .no tenías duda de que él ya conocía la información que estaba leyendo, pero no lo cuestionaste, todo era parte de su proceso.

Sin embargo, después de unos veinte minutos más, descubrió que sus ojos se estaban volviendo cansados, con la cabeza apoyada en el hombro de House mientras se acurrucaba contra su costado. .Los ojos luchaban por permanecer abiertos tanto como los de él parecían, pero fue en vano, pronto se cerraron, cerrando el libro mientras lo hacían. .al enterarse de esta simplemente sonrió, colocando el libro que leyó en su regazo antes de estirar la mano para agarrar la manta con la que te habían cubierto antes de irte a la cama. .cubriéndote con él, le dio un pequeño beso en el hueso de la frente, antes de volver a levantar su libro.

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Cuando sus ojos finalmente se abrieron de nuevo, lo primero que notó fue la terrible torcedura en su cuello. Causado por dormir con la cabeza apoyada en el hombro de alguien, sin duda. .ese mismo alguien, que aparentemente también se quedó dormido alguna vez, cuando usted no sabía exactamente. Pero, te alegrabas de que finalmente se hubiera quedado dormido, por lo general solo se trataba de permitir que se desgastara. .cualquier sugerencia de que se fuera a la cama y descansara normalmente era recibida con una actitud obstinada acompañada de que él te llamara “mami”.

Ahora, sin embargo, se veía tan extrañamente pacífico a pesar de su incómoda posición, que querías dejar que siguiera durmiendo. Rara vez dormía bien, su mente siempre estaba en movimiento, dejándote inseguro de si era una elección o no. .anteojos torcidos en su rostro y libro todavía abierto en su regazo, la vista te hace querer sonreír y reír. Sin embargo, solo permitiste la sonrisa, haciendo todo lo posible por moverte lo más lenta y cuidadosamente posible para no molestarlo. .Sin embargo, parecía imposible no molestarlo, porque al menor indicio de movimiento un bostezo abandonó sus labios y sus ojos se abrieron somnolientos.

—"Ya sabes -" comenzó, su tono tranquilo ahogado por el repentino timbre del teléfono. Ante esto, puso los ojos en blanco, inclinándose hacia adelante a regañadientes para recogerlo y cesar el ruido.

-"¿Alguien se está muriendo?".—Él siempre tuvo la forma más encantadora de contestar el teléfono, su sarcasmo mordaz te hacía reír. Durante las seis y media de la mañana fue más ingenioso que cualquier otra persona que hayas conocido. .el sonido de tu risa hizo que te guiñara un ojo con picardía, antes de mirar a la pared con su habitual expresión ilegible. .lo veías con asombro mientras bromeaba y preguntaba a quienquiera que estuviera al otro lado del teléfono, la conversación terminaba con él colgando abruptamente.

—"¿Todo está bien?" Preguntaste, mirando mientras se dirigía rápidamente por el pasillo hacia el dormitorio.

—"sería mucho mejor si todos los que tuve el llamado placer de trabajar no fueran idiotas".—Dijo molesto.

Reapareció, subiendo las mangas de su camisa abotonada que se había apresurado a ponérsela. Su respuesta le valió que pusiera los ojos en blanco mientras comenzaba a abrocharle la camisa,—"¿por qué no puedo usar mis manos ahora?".

Abotonando el último botón, le pasó las manos por los hombros, le dio un beso en la mejilla antes de dejarlo de pie frente a la puerta con una expresión burlona,—"¿Ni siquiera puedo conseguir un beso adecuado por aquí?".—Preguntaste.

—"Quizas mas tarde.".—Enviándole un guiño antes de sonreírle, sacudiendo la cabeza antes de salir y cerrar la puerta silenciosamente detrás de él. .si sabía la mitad de lo que pensaba sobre leer a la gente, sabía con certeza que recibiría su "beso adecuado" cuando llegara a casa esa noche.

PALABRAS: 1.544, (WUAU ESPERO Y LES GUSTE!!!)