67

Advertencia: Un tantito, casi nada :D 




Chris es claramente un hombre muy romántico, usualmente es él quien tiene las iniciativas de las citas o momentos dulces entre nosotros. Siempre tiene una nueva idea para que compartamos tiempo junto, sin embargo, los últimos días ha estado muy atareado con las grabaciones de su última película, por ello, se encuentra algo estresado y cansado.

Así que el día de hoy e intentando hacer algo lindo para ambos, pero más para él, quiero apartarlo un poco de toda aquella situación de estrés.

─Cielo, ya llegué ─dice entrando a la casa, su rostro denota cansancio y hasta un poco de molestia.

─¿Cómo te fue? ─cuestiono caminando hacia él para saludarlo ─, te notas cansado.

─Lo estoy ─menciona y suelta un profundo suspiro ─, necesito un respiro.

─Ven ─digo, tomo su mano y comienzo a caminar hacia la habitación.

─¿A dónde vamos? ─cuestiona confundido, pero dejándose conducir por mí.

─A que tomes un respiro ─afirmo.

Cuando llegamos a la habitación, de inmediato le quito la chaqueta y comienzo a desabotonar su camisa, él no dice nada y simplemente se deja desvestir. Lo dejo en bóxer y hago que entre al baño, ahí he dejado la tina lista y ahora ya tiene la temperatura perfecta, él tiene una pequeña sonrisa en su rostro cuando le pido que entre, me mira a los ojos cuando se retira su última prenda antes de entrar.

Veo su semblante relajarse al entrar en contacto con el agua, se recarga en una orilla, yo me coloco detrás de él y comienzo a masajear sus hombros. De inmediato sus músculos también se relajan, echa su cabeza hacia atrás y suspira.

─Se siente demasiado bien ─murmura con los ojos cerrados.

─No me gusta verte estresado ─le confieso sin dejar mis movimientos ─, quiero que te relajes.

─¿Entrarás conmigo? ─cuestiona abriendo los ojos y girándose hacia mí.

─Es tu momento de relajación ─musito.

─Pero también puedo relajarme a tu lado ─pide con un puchero instalado en sus labios ─, ven, cielo ─dice y extiende su mano hacia mí.

Titubeo un poco, pero ¿quién se negaría a acompañarlo en la bañera? Así que comienzo a retirar mi ropa ante su atenta mirada, me siento un tanto tímida, pero cuando ya estoy desnuda, él extiende su mano hacia mí y me ayuda a entrar. Me siento entre sus piernas con mi espalda recargada en su pecho, de inmediato entrelazo nuestras manos y el deposita pequeños besos en mi cuello.

─Te amo ─murmura dejando un último beso.

─También te amo, Chris ─afirmo y me estiro para besar su barbilla.

Estamos unos minutos hablando de cosas triviales, me gusta verlo así e intento mantenerlo distraído de sus ocupaciones. De pronto sus besos son más cálidos y nuestras caricias más intensas, hasta que me giro para quedar frente a él y besarlo.

Minutos más tarde, nos unimos en un momento netamente pasional, parte del agua se escapa por los bordes de la bañera por el movimiento de nuestros cuerpos, fuertes y profundos gemidos se escapan también de nuestros labios.

Siento como sus embestidas comienzan a llevarme a la gloria y por sus gestos, sé que él también está cerca, en pocos minutos, ambos alcanzamos tan ansiada liberación. Al final de esta apasionada faena, puedo observar su sonrisa y semblante relajado, me observa embelesado antes de volver a besarme.

─Te amo ─vuelve a decir.

Le sonrío y salgo de la bañera para colocarme un albornoz, tomo el suyo y se lo entrego cuando él también sale.

Sin cambiarnos, lo conduzco a la cocina donde sirvo un poco de té para ambos, él me sube a la barra y él se sienta en una silla alta en frente de mí. Bebemos de nuestra taza en silencio, simplemente disfrutando de la calidez y sabor de aquella bebida.

─Me gusta verte así de relajado ─afirmo y lo beso.

─Gracias por esto, cielo ─responde.

─¿Quieres hacer algo más esta noche? ─cuestiono terminando mi té.

─Además de hacerte mía de nuevo, no ─dice y río.

─¿Noche de películas en la sala? ─le pregunto y él me baja de la barra de la cocina.

Él asiente y primeramente vamos a ponerlos el pijama, tomamos algunas mandas y nos vamos a la sala, donde nos acurrucamos uno al lado del otro. Vemos una película y al culminar, volvemos a hacer el amor en la comodidad del sillón, y así seguimos hasta ya entrada la noche, me pego a su pecho y lo abrazo.

─Descansa, cielo ─susurra y besa mi frente.

─Se supone que yo tendría que decir eso ─le reprocho y beso su pectoral derecho.

─Gracias por esto, hermosa ─responde sonriendo.

.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-. 

Espero les guste, lamento si quedó algo raro y corto. En fin, no se olviden de votar y comentar :D 

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top