50/100k

Chris, desgraciadamente, luego del accidente que tuvo, como secuela presentó un tipo de amnesia retrógrada, donde ha olvidado casi todo lo acontecido antes de ese día.

Cuando supe del accidente, estuvimos varios días hasta que fue estabilizado y tuvimos la triste noticia de la amnesia. Él volvió a la casa de sus padres, donde ellos y sus hermanos lo acogieron brindándole toda la información que solicitaba.

Por mi parte, tuve miedo de acercarme y escuchar que había olvidado los tres años que compartimos juntos, todas nuestras aventuras y sueños a futuro. Me presenté ante él como una amiga de Scott, al principio tuvo mucha desconfianza, pero poco a poco me aceptó.

─Él de verdad es mi amigo ─afirma Chris acariciando la cabeza de Dodger.

─Lo es, ellos son los más fieles amigos ─respondo ocultando mi sonrisa al verlo feliz.

─Dodger también te quiere mucho, Scott dijo que durante mi hospitalización tú lo cuidaste ─me informa y bajo la mirada ─. Gracias.

─No es nada, adoro a Dodger y no quería verlo triste ─afirmo llamando al perro quien corre hacia mí para que también lo acaricie.

─¿De verdad eres sólo amiga de Scott? Porque es muy extraño la familiaridad de Dodger, él realmente te quiere y respeta.

─Bueno, tú y yo también éramos amigos, y estuve en contacto con Dodger desde que lo adoptaste ─respondo jugando con la mascota.

Chris no responde y se permite observar nuestro juego. Scott llega en compañía de sus sobrinos, que inmediatamente se unen a dicha actividad.

Los meses pasan y sigo visitando a Chris algunas veces a la semana, él me confía un poco más de cosas y me acepta como amiga, aunque yo lo sigo amando. Me gusta verlo sonreír al darse cuenta de que recuerda pequeños detalles de su vida habitual.

Para mi desgracia, hace tres meses ha conocido a una chica, se llama Anne y es muy dulce. Mi identidad verdadera se ha mantenido en secreto y probablemente así será porque Chris se ha vuelto muy apegada a ella. Para sorpresa de todos, Dodger no la acepta y aunque no la daña, le ladra cuando ella se acerca a Chris, quien se ha alejado un poco de su mascota por estar con ella.

─Anne es muy hermosa, ayer salimos a cenar ─me relata Chris con emoción.

─Debió ser muy romántico ─ afirmo con una sonrisa fingida, que trato de que parezca natural.

─Lo fue ─murmura y se queda callado por unos segundos ─. ¿Sales con alguien?

─No, hace tiempo lo hice, pero nos hemos separado. ¿Por qué la pregunta?

─Es que, quería saber al cuánto tiempo sabes que esa persona es la indicada ─confiesa apenado.

Es lo peor que puedo escuchar. Mi corazón parece partirse en muchos pedazos que reflejan las dolorosas sensaciones que me invaden, me tomo unos segundos para calmarme antes de responder.

─Algunas personas esperan poco más de un año de tener una relación formal para dar un siguiente paso, pero a veces, cuando el amor es verdadero, basta con sólo mirar a los ojos de la otra persona para saberlo ─murmuro esquivando su mirada.

─Realmente sonaste como una enamorada ─musita sonriendo.

Ya no puedo hablar y simplemente le dedico una pequeña sonrisa, me disculpo y salgo de la casa en búsqueda de alejarme de él. Desde ese día, no volvimos a tocar ese tema.

Anne, conforme tomó confianza, comenzó a expresar su rechazo hacia el miembro de cuatro patas de la familia, y con ello vino el abandono de Chris hacia él; no pude soportar ese cambio de actitud, e inmediatamente me ofrecí a tener a Dodger conmigo, cosa que, aunque no muy convencido, Chris no se negó.

Dodger se encontraba recostado en su cama, mordiendo uno de sus juguetes, cuando sonó el timbre de la casa. Se levanta de un salto y olfatea por la parte inferior de la puerta mientras mueve su cola. Cuando abro, me encuentro con Chris quien se emociona al ver a su perro, que, olvidando su anterior rechazo, lo recibe con felicidad.

─¿Cómo están? ─me pregunta entrando al departamento seguido de Dodger quien salta.

─Estuvo un poco triste los primeros días, pero ahora está tranquilo y salimos a correr todas las mañanas, tiene juguetes nuevos y ama su nueva cama ─afirmo.

─¿Y tú?

─Yo estoy muy bien ─respondo.

─Ya no nos visitas mucho ─murmura acariciando la cabeza del perro.

─Siento que ahora era innecesaria mi presencia ─musito en un intento de no evidenciar mi incomodidad por la presencia de Anne ─, Dodger ahora está conmigo y no tengo mucho porqué asistir.

─Pensé que te gustaba que platicáramos ─replica confundido.

─Sí, es agradable, pero ahora con tu relación con Anne, siento que soy un mal tercio y prefiero mantenerme alejada.

Él sólo asiente, Dodger le acerca su juguete para que se lo arroje. Pasamos varios minutos en silencio, observando el divertido juego que tienen, hasta que él se levanta.

─Creo que es momento de que me vaya, sólo quería saber que estabas bien y saludar a Dodger ─afirma con una media sonrisa.

Asiento en respuesta y el perro vuelve a dejar su juguete en los pies de Chris, el rubio vuelve a arrojarlo, pero en esta ocasión, cuando Dodger intenta tomarlo, tira un florero que ocasiona que algunas cosas caigan.

─Lo lamento ─exclama Chris apenado acercándose al desastre, hago lo mismo.

─No te preocupes, suele pasar muy seguido ─dice restándole importancia.

Agrupo algunas cosas hasta que me percato que sus manos han tomado una pequeña caja de madera que ha dejado regado su único contenido: una sortija de compromiso. Sus ojos se abren más por la sorpresa, pero no me mira y se permite observarlo a detalle mientras yo muero de angustia.

Su mirada se encuentra con la inscripción dentro del hermoso anillo: "Todo mi amor, toda la vida". Permanece cerca de un par de minutos en silencio, se sienta en el piso lleno de sorpresa y noto que su respiración se altera. Intento tomar el anillo de su mano, pero él cierra su palma.

─Estuviste comprometida ─afirma con cierto dolor, aunque no consigo identificar la razón.

─Fue hace mucho ─respondo restándole importancia.

─Dime la verdad ─murmura con cierta molestia.

─Es la verdad ─insisto.

─Encontré un reloj en mi casa con la misma inscripción en la parte trasera, mi mamá dijo que era mío, ¿por qué ese reloj y tu sortija de compromiso dirían lo mismo? La única razón sería... que yo era tu prometido ─las últimas palabras las dice en un susurro.

Dirige su mirada hacia la mía, puedo ver la confusión y sorpresa en sus ojos. No me percato en el momento en que he empezado a llorar, pero ya lo hago.

─No eras la amiga de Scott, eras mi prometida ─murmura mirando se nuevo el anillo ─, ¿por qué me lo ocultaron? ¿Por qué me hicieron vivir esa mentira? Sé que tenía una vida antes del accidente, pero no que estuviera a punto de casarme.

─Creímos que eso te iba a afectar ─respondo en un susurro mientras limpio un poco mis lágrimas que siguen cayendo.

─¿Acaso no te afectó a ti? Fuiste la oyente de mis sentimientos por Anne, me diste consejos sin mostrar un más mínimo dolor. Sufriste por mantener una mentira. Por eso Dodger se mostraba apegado a ti ─reclama con molestia.

─Eso ya no importa, estás haciendo una nueva vida y lo respeto. Quiero lo mejor para ti, porque eso desean las personas que aman.

─¿Tú me amas? ─cuestiona y yo asiento.

No respondo una respuesta verbal y sólo asiento, pero coloca el anillo dentro de la caja, se levanta y se va, dejándome hecha un mar de llanto.

Pasan unos días antes de que Scott se entere y me visite, me cuenta lo afectado que se muestra Chris y que se ha alejado de todos, incluyendo de Anne. Él me da muchas palabras de consuelo y se queda bastante tiempo conmigo.

─¿Crees que pueda llevarme a Dodger a mi casa esta noche? ─cuestiona luego de revisar su celular ─. Mis sobrinos lo extrañan.

─Claro, no hay problema, deja te pongo sus cosas.

Le entrego una pequeña bolsa con alimento, juguetes, platos y algunas pertenencias para que se lleve a mi compañero por algunos días. Luego de que se retira, vuelvo a hundirme en mi tristeza, pero apenas pasan 10 minutos vuelven a llamar a la puerta. Pienso que es Scott y que ha olvidado algo, pero cuando abro, me sorprendo al ver a Chris con un semblante cansado y los ojos rojos.

─Chris... ─lo nombro confundida.

Él no responde, en cambio, sus manos toman mi rostro antes de que sus labios se precipiten sobre los míos en un gran beso. Inmediatamente le correspondo, respondiendo a la necesidad que tuve de él por todo este tiempo. Cierra la puerta de una patada y me acorrala entre ella y su cuerpo, sus manos ahora me aprisionan en un abrazo mientras yo me estremezco por su cercanía.

Se quita la chaqueta dejándola caer en el piso y sin apenas separase de mis labios, sus manos buscan el borde de mi blusa donde deja varias caricias. Cierro mis ojos al sentir sus besos descender por mi cuello y suelto un pequeño gemido cuando llega al punto exacto.

─No hay momento en el día que no piense en ti ─confiesa acariciando mi espalda ─. Extraño tu compañía y todo lo que me haces sentir, te necesito demasiado ─murmura con voz ronca acercándose de nuevo hacia mi cuello.

─Espera... ─le pido al sentir sus manos en mi espalda y sus besos en mi hombro derecho ─. Tú sales con alguien.

─Ya no, me he disculpado con Anne por el tiempo que le hice perder, porque desde que te presentaste en la casa de mis padres me he sentido atraído hacia ti, primero pensé que eras la novia de Scott y luego me enteré de sus preferencias, pero para ese momento habías marcado una línea entre nosotros. No quise decir nada porque tuve miedo de que te alejaras, pero todo terminó así ─murmura dejando pequeños besos en mi rostro ─. La pregunta que te hice acerca de la persona ideal no era acerca de Anne, sino por ti, porque la necesidad de pasar tiempo contigo me parecía enfermiza.

─¿Estás seguro de lo que dices? No quiero que lo hagas porque te enteraste de que estábamos comprometidos ─digo acariciando su mejilla con delicadeza.

─Lo estoy, creo que nunca dejé de quererte, y cuando volviste a formar parte de mi vida, mis sentimientos hacia ti volvieron ─explica tomando mi mano para que caminemos y nos sentemos en uno de los sillones─. Déjame volver a amarte.

─Con todo mi amor, toda la vida ─le respondo atrayéndolo hacia mí para poder besarlo.



.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.

Sé que tal vez no es lo que esperaban del OS #50 y especial 100k (que tan pronto se hicieron 105k), pero esto lo escribí a lo largo de varios días y así quedó, les quedo debiendo el smut.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top