Abro los ojos y me encuentro sola en la cama, pienso que Chris se ha ido, pero el penetrante olor a hot cakes recién hechos, me hacen levantarme. Tomo una de sus camisetas y me la coloco junto con mi ropa interior. Chris se encuentra en la cocina, sólo con pantalones de gimnasia puestos, terminando de picar un poco de fruta.

─Buen día, amor ─le saludo y dejo un beso sobre su hombro desnudo.

─Buenos días, cielo ─responde y toma el tazón con una mano y con la otra rodea mi cintura.

La mesa está lista con una torre de hot cakes, la fruta que ha traído, un poco de yogurt, café y jugo de naranja. Se ha esmerado mucho y esos detalles me encantan. Desayunamos en medio de una plática, pero él está más meloso de lo usual, cosa que me encanta, pero sé que hay algo raro con él.

─Amor... ─dice en un tono que sé que algo me pedirá.

─¿Qué pasa, Evans? ─termino mi café y lo miro a los ojos.

─Debo decirte, bueno, pedirte algo ─lo sabía. Lo miro esperando a que siga hablando ─. Sabes que vienen las premiaciones y me gustaría que tú me acompañaras a la entrega de premios de la Academia.

Agradezco no estar bebiendo nada, no sé qué hubiera pasado. Lo miro incrédula y él tiene una sonrisa inocente en su rostro,

─Sé que no te gustan esas cosas, pero, de verdad deseo que me acompañes ─pide con un puchero que lo hace ver adorable.

No se equivoca, en el par de años que llevamos de relación, siempre evité alfombras rojas, a excepción de las que eran de las películas donde actuaba o dirigía. Iba al estreno oficial y volvía a desaparecer de los reflectores. Amaba mi anonimato, además que soy una persona muy susceptible a tener accidentes vergonzosos y no deseo que ninguno quede grabado en alta definición.

─Chris... ─murmuro lista para utilizar palabras sutiles y negarme.

─Por favor, cariño. Me encanta llevar a mi familia y amigos, pero, quiero ir contigo.

─Pero los medios...

─Amor, tú misma me has dicho que no me deje llevar por sus comentarios, sabes que no me interesa nada de lo que digan respecto a ti. Yo te amo por la maravillosa mujer que eres y nada me hará cambiar de opinión. Acepta, por favor.

Sus hermosos ojos azules son mi debilidad y la manera en que ahora me mira hace que mi corazón se estruje en todas las formas posibles. Medito un poco mi respuesta, pero ya está más que decidida.

─Está bien, acepto ─murmuro.

Chris se abalanza hacia mí en un apasionado beso que termina por conducirnos hacia la habitación y que hace que no salgamos de ahí hasta después de mediodía.

Le comunica a su familia que he aceptado asistir con él, sus hermanas no tardan en, literalmente, secuestrarme para que elija un vestido. Vamos a varias tiendas y con diseñadores locales, todos los vestidos que me muestran me encantan, pero es uno el que me conquista por completo.

La noche esperada llega y la familia de Chris llega para darme apoyo moral, luego de una larga charla por teléfono con mis familiares me comienzan a peinar y maquillar. Mi cabello queda semirecogido y ondulado, mientras que mis ojos se ven más expresivos y mis facciones mucho más definidas, culminando con labios rojos. Me ayudan a colocarme el vestido, que luego de unos ajustes, me queda a la medida.

Observo mi reflejo en el espejo, giro observando cada detalle de mi vestimenta. Es un vestido largo de color rojo vino, con detalles en encaje y suelto por debajo de mi cintura. Levanto un poco la falda para observar los hermosos tacones que llevo, creo que ahora se convertirán en mis favoritos. Me encuentro con Chris en la planta baja, se apresura hacia mí y me besa.

─Podría decirte que te ves hermosa, pero te mentiría, no hay una palabra que describa lo bella que estás, aunque, ¿Cuándo ha existido? Siempre te ves perfecta ─murmura con voz ronca mientras acaricia mi cintura.

Sólo puedo sonreír y volver a besarlo, Scott nos interrumpe alegando que debe tomar fotos y verificar que sí asistamos.

Durante el viaje, mientras más nos acercamos al lugar, mi estómago se contrae más. No puedo mantenerme quieta hasta que Chris coloca su mano sobre mi muslo, la suave tela me provoca sensaciones nuevas.

─Tranquila, no pasará nada malo ─me dice al oído y el auto se detiene.

Suelto un jadeo cuando noto que se acomoda la ropa y la puerta del auto se abre, quiero salir huyendo, pero su mano me detiene, con delicadeza me ayuda a salir y yo acomodo mi vestido una vez que me encuentro de pie.

─Sólo sonríe y recuerda que eres la mujer más guapa de todas ─dice acercándose a mi oído porque los gritos aumentan.

De la mano caminamos por la alfombra roja, casi voy al pendiente de cada paso que doy por miedo a tropezarme, cosa que, por fortuna, no sucede. Escucho que lo nombran con gritos, él se detiene y rodea mi cintura con su brazo.

─Sonríe, cielo ─me pide y lo hago por inercia.

Al parecer mi sonrisa se nota muy falsa al principio ya que mi nerviosismo es mayor, así que me roba un suave beso que deja una tonta sonrisa en mi rostro, una sonrisa enamorada pero genuina. Chris me guía acerca de cómo posar, hasta que le piden unas fotos solo y yo me alejo con cautela, lo veo tan natural ante las cámaras que me tiene embelesada, no noto cuando algunas personas toman fotos de mi tonta cara de enamorada.

Él se acerca de nuevo a mí y caminamos hacia algunos reporteros, ellos se acercan y con educación se presentan antes de comenzar con sus preguntas, al principio giran en torno a la carrera de Chris, hasta que todo se gira hacia mí.

─Te ves realmente hermosa ─me dice uno de los entrevistadores, Chris toma mi mano y hace que de una vuelta.

─Eres una chica afortunada ─me dice la mujer que lo acompaña.

─No, el afortunado soy yo ─responde Evans y le sonrío.

─¿Cuánto tiempo llevan juntos? ─cuestionan.

Chris me da un ligero apretón en mi cintura incitándome a que responda, en otra ocasión me hubiese comenzado a reír por aquel movimiento, pero me limito a hablar.

─Dos años y tres meses ─respondo y sonrío.

─¡Largo tiempo! ¿Y es la primera vez que lo acompañas a un evento de tal magnitud, o me equivoco? ─pregunta ella y yo niego.

─Fue un trabajo convencerla ─murmura Chris ─, pero ahora presiento que no podré apartarla de los reflectores, sólo mírenla, las cámaras la adoran, además que se ve preciosa ─afirma mirándome a los ojos, inmediatamente me sonrojo.

─¿Eso significa que te veremos por estos eventos'

─Sí, vendré más seguido, no puedo desaprovechar ver de cerca a Chris cuando se viste elegante y se ve tan guapo─agrego.

─Pues continúen disfrutándose y presumiendo uno del otro, son una hermosa pareja y esperemos que su amor continúe como hasta ahora ─nos felicita el entrevistador antes de despedirse de nosotros.

Chris me ofrece su brazo y así caminamos rumbo a nuestros asientos.

─Te dije que no sería tan malo ─murmura una vez que entramos.

─No es malo porque estás conmigo ─respondo.

Una vez que encontramos nuestro lugar él me besa.

A la mañana siguiente, la foto nuestra más reproducida, es donde él se encuentra posando y yo estoy a un lado observándolo con una sonrisa, no puedo evitarlo y la imprimo, es muy bella.

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Espero les guste este OS aunque el final quedó medio raro, gracias por leer, votar y comentar. :)

Adjunto foto de Chris para que tengan dulces sueños (27 de febrero de 2018):