— ¡Usted me gusta, Giyuu-san!

Con sus mejillas rojas inclinó su cabeza, estaba muy avergonzado, sin embargó sabía qué al enfrentar a Muzan corría el riesgo de no volver con vida de esa misión.

—Lo siento, Pero no puedo corresponder a tus sentimientos

Era egoísta. Tomioka Giyuu era egoísta y no quería compartir su dolor, no quería qué Tanjiro cargará con sus heridas, no quería qué él...

— ¡Tanjiro, Inosuke no me deja estar cerca de Nezuko-chan!

Lo vio sonreír, cerrando sus ojos e inclinándose nuevamente hacia él.

—Gracias por responderme sinceramente

Se sorprendió, porqué Tanjiro no mostró ni un enojó o tristeza al ser rechazado, sin embargó en sus ojos pudo ver en un leve cambió qué no le agrado. Kamado se despidió y se fue con sus amigos, dejando al Pilar del agua solo en aquella finca.

— ¡Tanjiro!, ¡Abre los ojos Tanjiro!

Lo apretó contra su cuerpo, Dejando por fin qué las lágrimas cayeran. Un hilo de sangré caía por la boca del menor, y su pecho atravesado no le daba nada de tranquilidad.

—G...Giyuu...S-an...

Y fue lo último que salió de sus labios antes de qué un agudo dolor le atravesará, Había bajado la guardia, Muzan lo había apuñalado.

Extrañamente se había acostumbrado a ese lugar. Le era curioso al principio entender qué había sido reencarnado, y aún más él qué todos sus recuerdos estuvieran sin corte alguno. Le era curioso ver en aquella institución a todos los demonios, Lunas Superiores o no, como adolescentes normales. Le era curiosa la vida, y lo qué tuvo que pasar para poder encontrar Calma después de muerto. Era feliz, Por fin tenía una vida simple juntó a su hermana, Junto a su mejor Amigó Sabito, Era feliz.

Aunque algo le faltaba.

Algo...

Alguien...

— ¿Usted es Tomioka-Sensei?

Su piel se erizó, sus ojos picaron, Y unos breves segundos no se movió

—Seguro que no lo es, Vámonos, Gonpachiro

Y entonces volteó rápidamente

Era él.

Era Tanjiro.

—Sí. Soy Giyuu...

Habló sin pensar, A lo que él menor sólo sonrió cerrando sus ojos. Giyuu tal vez pensó que él también...

— ¡Mi nombré es Kamado Tanjiro y seré su nuevo alumno!, ¡Tomioka-Sensei!

Entonces lo recordó.

Habían renacido. La confianza qué había entré ambos se había esfumado.

Fin