Habían sido pareja por lo menos dos años de sus vidas. Sin embargó decidieron conocer a otras personas y dejaron entablada una buena relación de amistad. Giyuu Conoció a Sabito, un curioso y amable chico con él qué lleva Dos años de relación, Kamado Tanjiro, En cambio, conoció a un apasionante Rubio de reflejos rojizos, llamado Kyojuro qué prendía él ambiente cada vez qué estaban juntos.

Pero Kamado necesita tranquilidad, necesita tomar algunos tragos con su calmado amigo.

— ¡Entonces Senjurou Tiró los platos y todos salimos corriendo!

Giyuu sonrió al verlo, reír con fuerza mientras sus mejillas rojas se volvía cada vez más adorable. Tanjiro estaba ebrio y por eso mismo solo lo escucha sin decir nada.

— ¿¡Y tú, Giyuu-san!?

— ¿Yo qué?

—Pues, No me has dicho nada de tú Relación con Sabito-san

Giyuu negó, ¿Qué le diría?, ¿Qué había terminado con él curioso y Amable chico?

—Estamos bien

Kamado sólo volvió a beber, casi desesperado lo cual le daba curiosidad al más grande.

— ¿Sucedió algo entré tú y Rengoku?

Tanjiro negó con fuerza, con una sonrisa en sus labios.

Tanjiro se abrazó al cuerpo de Giyuu, Meloso mientras cuchicheaba varias cosas qué ni siquiera entendía. Tomioka por su parte soló se dejaba abrazar, estaban en su casa, así qué nadie podía molestarlos.

—Giyuuuuu-san... ¿Por qué terminamos?

Giyuu no respondió. Tanjiro sonrió meloso ante él silenció y quiso levantarse, sin embargó un agarré en su cintura lo hizo quedar dándole la espalda al mayor.

— ¿Giyuu-San?

Entonces él agarre que lo sostenía lo soltó, dejándolo caer en él suelo. Por un breve momento quiso quejarse, sin embargó varios gemidos se apoderaron de su boca al sentir la cálida lengua del oji-azul en su cuello. Quería negarse pero su cuerpo demandaba ese calor necesario, no necesitó espera mucho para qué él mayor bajara sus pantalones y subiera un poco su camisa, haciendo que su cuerpo caliente quisiese y anhelase más...

—Ah... Ahhh...Giyuu... San...

Apenas pudo sentir cuándo dos de sus dedos entraron en su ano, rápidos y húmedos, dilatando aquélla zona para qué pudiera recibirlo. Sin embargó para sorpresa de Giyuu...

—E-so...No importa...Giyuu-san...

Tanjiro lo veía engatusado, sumamente extasiado levantando su trasero para el disfrute del mayor. Sin esperarse a más desabrochó su pantalón y en abrir y cerrar de ojos ya estaba chocando la punta de su glande con sus nalgas, se estaba muriendo por una sesión de sexo, y no con cualquiera específicamente.

Necesitaba de Tanjiro.

— ¡Ah!

Su gritó sorpresa fue música para sus oídos, las embestidas tomaron fuerza y antes de poder intentar ser bueno ya lo había moreteado varias veces. Y es que sus manos se aferraban a su cintura, arañándolo y de vez en cuando dándole nalgadas, Amaba a ese chico, ¿Cuánto tiempo estuvo esperando por esto en silenció?

Tanjiro deliraba bajó su cuerpo, jadeante y sumiso, ido entré jadeos y gemidos qué salían ahogados. Tanjiro era tan lascivo, tan caliente y a la vez tan inocente.

Apenas terminar aquella sesión de sexo Giyuu pensó qué Tanjiro se dormiría, pero muy al contrario, se acomodó las ropas así nomas y evitó mirarlo.

—Tanjiro...Yo

—Rengoku-san y yo vamos a separarnos, Él conoció a alguien más, creó qué se llama Akaza

Y allí se quedó en silencio, sin saber que decir o hacer.

—Giyuu-san...¿Porque terminamos?

Entonces Tomioka recordó sus propias palabras en un pasado.

—Conocí a alguien más

Fin.

[Hay una Historia basado de este oneshot, se llama 'No todo es color de rosa', Esta en mi perfil por si gustan leerla.]