Los pitidos del lugar me hacen sentir mas agotado, observo a mi costado y noto a mi mejor amigo de hace años, está con la cabeza gacha y agarro su mano, el alza la mirada y me sonríe, sus ojos marrones brillan.

--que sucede Scotty?—dice agotado, ambos ya estamos cansados.

--quiero contarte un secreto—digo susurrándole a él le brillan mas los ojos y sonríe abiertamente.

--claro, aunque se todos tus secretos—dice murmurando como para que nadie nos escuche, cosa que me hace reír y toso un poco.

--recuerdas a Isaac Lahey?—pregunto enarcando una ceja.

--por su puesto—asiente con la cabeza—era muy sexy.

--¡te estoy escuchando!—escuchamos del otro lado un gruñido, sonrió ante el ataque de celos de Derek.

--pero tu lo eres más cariño—le grita Stiles para que su amado lo escuche.

--mi secreto tiene que ver con él.

Y así me atrevo a contarle mi más grande secreto a mi amigo.

Flashback

El chico nuevo me trae como loco y siento como mi corazón bate record en latidos, parece una locomotora cada vez que me sonríe, sus hoyuelos se marcan, aunque sea más alto, y su rostro duro marque aquel toque de macho inquebrantable, el conmigo se comporta diferente.

Se acerca a mí después del entrenamiento, ya que tengo una lesión.

--¡ey! Amigo—me saluda con una abrazo, por costumbre sus abrazos suelen durar más de diez segundos y esta vez no es la excepción, me encanta como su olor corporal se mezcla con su sudor, luego se separa y me sonríe—como va tu pierna?

--pues bien—a lo lejos veo como las porristas taladran la nuca de Isaac pero a este no le importa, los del equipo nos abuchean porque necesitan seguir entrenado—debes regresar a entrenar o nos mataran aquí mismo y ya tengo suficiente dolor en la pierna como para más.

El ríe y acaricia mi brazo, sus hoyuelos se vuelven a marcar y un brillo especial se marca en sus ojos, su caricia hace que me estremezca pero trato de que él no se dé cuenta, ya que su novia como la mía nos están viendo, el se acerca a mi oído. Y desde el Angulo de las chicas pareciera como si se estuviera agachando para coger unas cosas de su bolso.

--quiero que me esperes cuando acaben las clases, quiero decirte algo—me vuelvo a estremecer al escuchar sus susurros como si no quisiera que nadie supiera lo que estamos diciendo.

Yo solo asiento levemente con la cabeza y me sonríe de vuelta, se aparta y se va corriendo hacia donde los demás que conforman el equipo, empieza la práctica y algunas veces es tecleado y pienso que es por mi culpa, porque esas veces me ha mirado de soslayo y es lo que lo desconcentra, así que para no interponerme en la práctica me voy del lugar, mi pierna ya no duele pero el entrenador me dijo que debía curarse completamente así no asisto a las practicas desde hace dos días, tomo el mejor lado ya que he estado relajado y mis músculos no se han tensado como cada vez que salgo del entrenamiento.

Me tope con Stiles –mi mejor amigo- en el salón y le digo que no voy a poder irme con él el día de hoy y que me disculpe, me pregunta el porqué y le digo que Isaac quedo en que el me iba a dejar a la casa ya que quería saber que si mi lesión había mejorado, noto la mirada escrutadora de Stiles pero no dice nada.

Al finalizar las clases salgo y me detengo al ver a Isaac sonriéndome, Allison y Cora se acercan, Cora va a Isaac y a él se le borra la sonrisa, Allison se acerca a mí y me da un beso.

--Amor, hoy me iré con Cora a hacer unas compras al condado de Beacon y regresare en la noche—ella dice y aunque no le prestó atención a lo que dijo yo asiento con la cabeza.

Se despide de mi con un beso y noto como Cora también se despide de Isaac pero ambos seguimos viéndonos, el se acerca a mi después de que las chicas se han ido y me empuja con su hombro.

--tenemos el día libre—dice riendo.

--qué?—pregunto confundido, el ríe con una leve carcajada.

--se van de compras y regresan en la noche, creo que hasta regresan mañana ya que se iban a encontrar con Lydia y de seguro ella las ha de decir para quedarse en algún hotel y recorrer el condado—yo rio.

--creo que tienes razón—digo devolviéndole el golpe con mi hombro y vuelvo a sentir la corriente que recorre mi cuerpo ya que mi mano roza la suya.

El me observa por unos breves segundos y ruego por ser besado por esos labios que los acaba de morder, desvía la mirada hasta su camioneta y le señala.

--vamos Scotty—dice—debemos ir a tu casa.

--es importante lo que me tienes que decir—inquiero mientras me abre la puerta de su camioneta y la cierra cuando yo entro, el rodea y se sube en el lado del piloto.

--es muy importante—y le creo porque me sonríe.

--está bien--murmuro

--porque te fuiste del entrenamiento?—pone en marcha la camioneta saliendo de la escuela.

--porque pensé que te estaba distrayendo ya que piensas que todavía está mal mi lesión—dije ruborizándome.

--si me distraías—sonreía con la mirada en el camino—pero fue peor cuando te fuiste porque pensé que te había dolido aun mas y tuviste que ir a la enfermería.

Yo me sonrojo porque él se preocupa mucho por mí, como quisiera ser Cora para probar sus labios, y veo la puerta, y me doy cuenta que él nunca le abre la puerta a Cora, así que tengo algo a mi favor, el siempre me abre la puerta, y otra es que él no le sonríe como me las muestra a mí, el no se porta con nadie como lo hace conmigo, me protege, me cuida y sobre todo me entiende, habla mucho conmigo cuando no estoy con Stiles, incluso creo que Isaac le tiene un poco de celos a Stiles, ya que a veces lo fulmina con la mirada cuando mi mejor amigo me abraza pero lo que Isaac no sabe es que Stiles ya tiene novio, alguien que también es muy celoso.

Tan ensimismado estaba que no me di cuenta que habíamos llegado a mi casa, hasta el toca mi brazo.

--hemos llegado Scotty—lo veo y el está muy cerca de mi sonriéndome como siempre, luego se aleja y baja del auto, lo veo como rodea la camioneta y abre la puerta de mi lado—ha llegado a su castillo, Príncipe.

Y hace una reverencia, yo rio a carcajadas por sus ocurrencias, el me acompaña y nuestros sonidos se entrelazan haciéndose uno solo, siento como mi cuerpo quisiera fusionarse con todo de él. Un ruido desde el cielo nos avisa que la tormenta se acerca, así que bajo de la camioneta y él me agarra del hombro empujándome hacia mi casa.

--entremos antes que llueva y nos caiga un chaparrón y nos enfermemos—dice cuando llegamos al pórtico—no quiero que te me enfermes.

Me estremezco y entramos a mi casa entre risas, mi madre tiene que doblar turno, lo dice la nota que ha dejado en el refrigerador, le doy una bebida a Isaac y este empieza a rebuscar algo en la alacena.

--que buscas?—digo mientras me siento en la mesa.

--buscando algo de comida para hacerte—saca unas latas—de algo ha de servir esto.

--no te preocupes—le digo riendo—además no tengo hambre.

--tu vas a comer lo que yo te prepare así no tengas hambre.

--y si esta mala?—digo haciendo una mueca.

El ríe y deja las cosas en el mesón y se acerca a mí hasta tener su rostro a escasos centímetros del mío, sopla sobre mi rostro causando que mi piel se erice.

--es porque nunca has probado la comida que alguien prepara con amor para su futuro novio

Y dicho ese se dirigió a la cocina dejándome con la boca abierta, con la respiración entrecortada y con los latidos que chocan contra mi pecho, siento como alguien grita en mi interior que pregunte lo que significan esas palabras, pero no hago ningún movimiento, estoy como una estatua, escucho su risa que cala mis huesos y mi medula espinal vibra mandándome ondas de puro placer.

Fin del flashback

--desde ese día Isaac y yo fuimos novios, hasta que él...--una lagrima cayó por mi mejilla y la limpie con mi dorso--...sufrió aquel accidente.

Ambos nos quedamos en silencio por varios minutos.

--yo lo sabia—me dijo y lo vi con el entrecejo frunció---el me lo conto, y el día del accidente iba a hablar con tu mama, él quería formalizar su relación.

--porque me lo quitaron? Porque solo lo pude disfrutar seis meses? Porque la vida es tan cruel?

--no tengo respuestas a tu pregunta Scotty—lo escuche susurrar.

--creo que ya es hora de encontrarme con el—dije y tosí, sentía como me faltaba el aire cada vez mas.

--se que a nuestra edad no podemos seguir evitando a la muerte—lo escuche nuevamente y los pitidos cada vez iban acelerándose.

--a veces te envidiaba—sonreí tosiendo más—y también te respetaba, ósea, has soportado cincuenta y tres años al gruñón de Derek Hale.

--también escuche eso—volví a escuchar el gruñido de Derek del otro lado.

--te...--exhale una bocanada del aire mientras veía como mi mirada se iba llenando de motas negras--... quiero mucho Stiles, a ti y a todos mis amigos, en especial a Isaac, a quien llegue a amar con todas las fuerzas del mundo.

Y ya no había pitidos, ni sonidos aleatorios, ni mi mejor amigo a mi lado, solo oscuridad tremenda y un punto blanco que se agrandaba cada vez que se acercaba a mí, y podía jurar que al final de esa luz lograba ver los rizos y los hoyuelos de mi gran amor.

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no se olviden de pasar por mi novela The Reality of Our Love.