Pedido #2: RaiBaru (Laito X Subaru)
Raito estaba tocando el piano mientras recordaba lo que paso hace más de 3 meses con el menor de la familia.
Flash Back
Estaban en la limosina en camino al instituto, Kanato jugaba con Teddy, Ayato molestaba a Yui, Shu dormía escuchando su música, Reiji leía un libro, Subaru solo tenía los ojos cerrados y Raito empezó a molestar a Yui. Después de un rato el castaño volteo a ver al albino.
Raito: ¿Por qué me vez así, Subaru-kun~? - el albino lo miraba de reojo y como si estuviera enojado con él.
Subaru: Tsk – volteo la mirada al lado contrario – no te importa.
Raito: Moo~ no seas así Subaru-kun, no te he hecho nada malo para que me trates así, debes portarte bien con tus Onii-chan, te castigare por tu mal comportamiento nfu~ – se le acerco, pero antes de hacerle algo la limosina salió volando.
AAAAHHHHH
El grito de la humana molesto a más de uno, se tele-transportaron fuera de la limosina antes de que cayera al pavimento, levantaron sus miradas y vieron encima que de una pequeña colina estaban los Mukami.
Fin Flash Back.
Una sonrisa salió a relucir mientras dejaba de tocar el piano, se levanto y se dirigió a la habitación del menor de sus hermanos.
Entro a la habitación, más el menor no estaba allí, cuando iba a salir escucho el agua caer de la regadera del baño, con una sonrisa perversa se quito la ropa y entro sigilosamente al baño, el albino le daba la espalda mientras se terminada de quitar el jabón del cuerpo, tenía los ojos cerrados y estaba tan relajado que no se dio cuenta de la intromisión del castaño.
Raito: ¿Qué tenemos aquí? - lo abrazo por la cintura desde atrás, Subaru se sobresalto – un niño malo que no ha sido castigado nfu~
Subaru: ¡Suéltame Laito! ¡¿Qué haces aquí?! ¡Sal de inmediato! - se removió entre sus brazos sonrojado e intentando apartarlo, más no podía porque su fuerza le fallaba.
Raito: ¿Hm? ¿Por qué no me alejas tú? Tienes más fuerza que yo, hazlo – le susurro al oído - ¿Sera que no puedes? Nfu~ - sonrió mientras empezaba a chupar y morder el cuello del menor, quien intentaba apartarlo.
Subaru: ¡Déjame! ¡¿Qué me hiciste?! - intento apartar el rostro del contrario de su cuello sin resultado.
Raito: ¿Yo? Nada – mordió su hombro sacándole quejidos - ¿Te gusto la comida? Ayude a Reiji a servirla, me esmere mucho en que tu comida estuviera perfecta para ti – lo acorralo contra la pared, beso sus hombros, fue bajando por su espalda y volvió a subir mordiendo el lóbulo de su oreja.
Subaru: AAHH – se intento zafar de su agarre sin éxito - ¡Suéltame! ¡Sabía que era tu culpa! - lo intento patear.
Raito: Niño malo, no se patea a tus hermanos mayores – le dio una nalgada haciendo que se sobresaltara – te voy a tener que castigar Subaru-kun~ - mordió con fuerza su hombro.
Subaru: NO – intento alejarse - ¡Déjame en paz! - el castaño rasguño su espalda - ¡No me rasguñes! ¡Maldito pervertido! - se removía.
Raito: ¿Hm? ¿Por qué no estás erecto? - acaricio con su mano libre el miembro del albino.
Subaru: N-no – su voz temblaba – déjame, no sigas.
Raito: Esto es un castigo, Subaru-kun, no me detendré hasta que entiendas quien es el mayor – cerro la llave del agua, lo tele-transporto junto a él hasta su habitación, le puso unas esposas dejando sus manos en la cabecera de la cama.
Subaru: Esto ya es demasiado, suéltame o te arrepentirás – se intento liberar de las esposas.
Raito: Mal, muy mal, aun no entiendes tu posición, esto no es una broma – una sonrisa salió a flote – esto apenas comienza – tomo un látigo – esto te es lo primero, con este látigo entenderás que no es una broma – lo dejo en una mesa al lado de la cama, tomo un frasco que obligo a tomar al albino – esto hará que te arrepientas de cómo me trataste ese día.
Subaru: Ya basta – se sintió caliente – ah – se éxito - ¿Un afrodisiaco? - le pregunto removiéndose intentando romper las esposas.
Raito: Si~ deberías dejar deforcejear, no funcionara lo que haces – tomo un consolador pequeño – esto es lo segundo, será tu amigo por poco tiempo, con esto me suplicaras que pare – lo dejo al lado del látigo – el tercero y último – tomo un pequeño aparato con un largo cable que tenía un control – con este pequeño no querrás que pare, me pedirás más y más, allí es cuando serás por completo mío – lo tomo de la barbilla, el oji-rubí le escupió en la cara – con que esas tenemos.
Subaru: Púdrete - lo intento patear, fallando por poco – ni te atrevas a tocarme – lo miro furioso.
Raito: Ya veremos quien ríe al último – le dio la vuelta dejándolo de boca al colchón – no me gustaría hacerte esto – tomo el látigo y lo paso por la espalda del menor poniéndolo tenso – si me pides perdón tal vez no utilice el látigo – beso sus hombros.
Subaru: Ni en tus sueños – lo reto.
Raito: Bien, tu lo pediste – se incorporo, golpeo suavemente los muslos del albino con el látigo antes de golpearlo con fuerza.
Subaru: AAAHHH – se quejo, dolía mucho.
Raito: No quiero hacer esto, discúlpate y disfrutaras – golpeo su espalda con el látigo.
¡PLAZ!
Subaru: ¡LAITO! ¡MALDITO! - apretó sus dientes.
¡PLAZ! ¡PLAZ! ¡PLAZ!
Subaru: ¡AAAHHH! - Raito siguió por 2 horas golpeando el cuerpo de Subaru con el látigo, dejo el látigo en la mesa y fue por agua fría a su baño, pasando un paño húmedo y frío por las partes golpeadas, recibiendo insultos del menor – te matare.
Raito: Nfu~ – lamio su mejilla y espalda escuchando los quejidos que salían de la boca del oji-rubí – esto es solo el principio – tomo el consolador y lo paso por el cuerpo lastimado hasta que llego a su objetivo, la entrada de Subaru.
Subaru: ¡Aleja esa cosa de allí! - se removió.
Raito: Oh vamos Subaru-kun~ te va a gustar~ te lo aseguro – le susurro al oído.
Subaru: ¡No quiero! ¡Suéltame! - grito y se intento librar de las esposas.
Raito: No, este es tu castigo – beso su mejilla y luego sus labios casi siendo mordido por el otro –Nfu~ a alguien le gusta jugar rudo~ entonces juguemos rudo – metió el consolador.
Subaru: AAAHHHGGG MALDITO – apretóla mandíbula en un intento de retener sus gritos, el castaño sonrió y empezó a mover el aparato – GGGGGHHH – no dejaba que ningún gemido saliera de su boca.
Raito: ¿Me estas retando? Muy bien, será divertido – empezó a masturbarlo mientras movía el consolador.
Subaru: AAAHHH de-detente – intento patearlo pero le dio la vuelta y le puso su miembro cerca de su boca – no – volteo la cabeza, no se metería eso en su boca.
Raito: Si, lo harás si no quieres que todos sepan lo que estamos haciendo – señalo a una cámara encendida.
Subaru: No te atreverías – el oji-esmeralda sonrió malvado.
Raito: Pruébame – el albino, sonrojado, acerco su rostro al miembro de Raito – si me muerdes te vas a arrepentir – le advirtió y metió su pene dentro de la cavidad bucal del oji-rubí casi ahogándolo.
Subaru: Cog – se lo saco – ¡No seas tan brusco, idiota! - el castaño movió el consolador – n-no – se dio cuenta que no se iba a detener, así que metió el miembro de su hermano en su boca de nuevo, tal vez si se corría en su boca lo dejara en paz.
Chupo la punta mientras se lo metía cada vez más, podía sentir como movía es aparato en su interior y escuchaba sus gemidos, se lo saco, lamio el tronco y los testículos, los chupo y metió en la boca jugando con ellos con su lengua, se lo volvió a meter en la boca, chupaba y pasaba su lengua por donde podía, jugó con la punta y rozaba sus dientes a penas sacando gemidas de la boca de su hermano.
Raito: Lo haces muy bien – acaricio los blancos cabellos de su hermano – tu cabello es muy suave MMMM así, métetelo todo – saco el consolador del interior de Subaru - ¡Me vengo! - se corrió en la boca del menor, quien no se lo pudo tragar todo y termino con semen en su cara – buen chico, aun no te has corrido ¿Eh? Bueno, yo me encargare de que lo hagas – el albino se alivio por sus palabras – cuando vallamos a terminar – se asusto al ver que el miembro de Raito se volvía a poner duro.
Subaru: ¡Ya basta! ¡Suéltame! ¡Es suficiente! - se volvió a remover, el castaño se bajo de encima del menor y fue por el último aparato en la mesa, lo metió en el ano del albino y lo encendió, empezó a vibrar - ¡N-no! Sácalo – su voz temblaba, cerró los ojos e intento sacar el aparato con sus movimientos – s-sácalo-o – el mayor sonrió por la reacción del contrario – MMMM – intento romper las esposas, de nuevo, sin éxito.
Raito: No lo niegues, Subaru-kun~ se que te gusta, pero no quiero seguir jugando más, ya estas más que preparado – se puso entre las piernas del oji-rubí, y sin sacar el aparato, lo penetro sacándole un grito de dolor.
Subaru: AAAHHHGGGG SÁCALO... por favor sácalo – las lagrimas salían sin permiso de los ojos del menor, lo había desgarrado y un poco de sangra salía de la entrada del albino – duele, duele mucho.
Raito: Tranquilo uff... que apretado estas... relájate – subió la intensidad del aparato, haciéndolo vibrar todavía más – me voy a mover.
Subaru: No lo hagas... te lo suplico, para, detente – el castaño no le hiso caso y lo empezó a embestir – AAAHHHGGG NOOOO – arqueo la espalda, intento patearlo y soltarse de las esposas, más todo era imposible, sus muñecas empezaron a sangrar y las embestidas del castaño lo desgarraban cada vez más por dentro – ya... AAAAHHHH NO AAAAHHHGGG – su garganta ardía por los gritos que salían de ella.
Raito: Ya me... uff canse de esta posición... mm probemos otra – salió del, lo puso en cuatro y volvió a envestirlo – aaahh Subaru-kun... me encanta como aprietas – le dio una nalgada.
Subaru: AAHHH ¡Detente! ¡Por favor! - de su entrada salía sangre al igual que de sus muñecas, a causa del afrodisiaco estaba excitado pero ya estaba en su límite, el aparato no dejaba de funcionar y Raito no dejada de moverse, más de una vez le había dado en la próstata dándole placer, más eso solo era momentáneo, el dolor venia a los segundos – AAAHHH – se corrió en las sabanas, lo cual hiso que apretara el pene de su hermano casi haciendo que llegara al clímax.
Raito: MMMM que rico aprietas... lástima que eso no es suficiente – mordió su cuello succionando su sangre.
Subaru: De-déjame ya aahh... ya no puedo más... duele mucho... por favor para ya – más lagrimas salieron de sus ojos, el dolor era insoportable – Laito... Laito por favor.
Raito: ¿Hm? Está bien, si me lo pides así no puedo negarme, pero aun no es suficiente, dime Onii-chan y lo pensare mejor – siguió tomando su sangre y embistiéndolo.
Subaru: Onii-chan, por favor para, te lo suplico – lo volteo dejándolo boca arriba una vez más, su cara estaba roja, sus ojos llorosos, un hilo de saliva salía de lacomisura de sus labios, lagrimas en sus mejillas y sus labios hinchados por estarlos mordiendo a cada tanto.
Sin poder resistirlo, beso sus labios, su hermanito era tan hermoso que no podía contenerse. El menor no correspondió el beso ni lo rechazo, poco a poco el miedo lo envolvía, el mayor por fin llego a su límite, corriéndose en su interior.
Raito: Mmm Subaru-kun~ has sido un buen niño al final – saco el aparato y lo apago tirándolo por ahí – ya te quito las esposas – salió del ano del albino, donde de inmediato salió semen y sangre, el castaño busco las llaves y libero al menor de las esposa, lamio las muñecas llenas de sangre y se acostó a su lado – me encanto castigarte, pero la próxima vez quiero hacértelo diferente ¿Te parece bien? Solo vuelve a portarte mal conmigo, nfu~ - beso su nuca y cerró los ojos – nadie te escucho porque puse somnífero a la comida – se puso boca arriba y se dispuso a dormir.
Subaru se levanto con mucha dificultad de la cama y se tele-transporto a su baño, abrió la llave de la regadera y se acurruco bajo el agua, le dolía todo el cuerpo, en especial su espalda, muñecas, cadera, ano y piernas, las últimas no las sentía, dejo que las lagrimas salieran libremente al igual que los sollozos que había estado reteniendo por tanto tiempo.
Cerro la llave del agua y tomo una toalla cercana, con mucho esfuerzo se envolvió con ella, no se pudo levantar ya que sus piernas no le respondieron, se tele-transporto al único lugar donde se sentía seguro, toco el timbre de la mansión, quien le abrió se quedo pálido al verlo y se arrodillo a su lado.
¿?: ¡Subaru! ¿Qué te paso? ¿Quiénte hiso esto? - sintió unas manos en sus hombros haciéndolo temblar todavía más.
Subaru: Laito – fue lo único que salió de sus labios, su voz era rasposa, se sentía asqueado de sí mismo, quería morirse.
¿?: Ya se las verá conmigo, no me importa que sea él, lo voy a matar – Subaru lo detuvo abrazándolo antes de que se levantara.
Subaru: No lo hagas cof cof – su garganta ardía – Ruki sniff no quiero volver allá, por favor – oculto su rostro en el pecho del mayor.
Ruki: Esta bien, quédate aquí con nosotros – lo abrazo con cuidado y beso sus cabellos – vamos adentro, te vas a resfriar aquí afuera – lo tomo en sus brazos con cuidado y lo llevo a su habitación, podía oler la sangra que salía del cuerpo del menor, sentía su cuerpo temblar y escuchaba sus sollozos, la ira, enojo y furia lo inundaba, lo acostó en su cama, el albino se puso en posición fetal abrazando su vientre, lo cubrió con las sabanas, beso sus labios y fue a la cocina por te para su novio.
Yuma: ¿Quien llamo a la puerta Ruki? - se le acercaron sus tres hermanos.
Ruki: Era Subaru – puso el agua a hervir.
Kou: Uuuuhhh no puede estar sin ti~ - se recargo del brazo del más alto.
Azusa: Esta noche... tampoco dormiremos – miro al rubio.
Yuma: Es cierto, recuerda que debes tener cuidado, deben pensar en el bebe – sonrió pícaro.
Kou: Pero ¿Por qué huele a sangre? - abrazo a Azusa por el cuello.
Ruki: No le hare nada por un largo tiempo y la sangre es de Subaru – termino de preparar el té.
Yuma: ¡¿Cómo?!
Azusa: ¿Qué le paso? - Ruki camino a su habitación.
Kou: ¿Está bien? - los tres lo siguieron, el mayor abrió la puerta y los tres pudieron ver el estado del menor - ¿Quien fue? - su ojo cambio de color mientras la furia envolvía a los tres Mukami menores.
Ruki: Dijo que fue Laito – se sentó a su lado y de inmediato el menor lo abrazo ocultando su rostro en el pecho del peli-negro, Kou, Yuma y Azusa se disponían a salir, pero la voz del Sakamaki los detuvo.
Subaru: No vayan, sniff por favor – el oji-azul le dio el té y los 4 Mukami se enfurecieron al ver su espalda y muñecas – no vayan – era lo único que podía decirles, el miedo lo envolvía por completo.
Yuma: Esta bien, no vamos a acercarnos a Laito – se rindió por las suplicas del albino.
Kou: Pero iremos por tu ropa, no vas a volver a esa mansión – acaricio su cabello y Subaru asintió.
Azusa: Y por un... doctor.
Subaru: Reiji, vayan por Reiji - le devolvió la taza vacía al mayor y volvió a abrazar su vientre.
Ruki: Vayan – los tres asintieron y se fueron, abrazo al menor, acaricio sus cabellos y lo besaba de vez en cuando – no te dejare solo de nuevo, ni a ti ni al bebe –acaricio su vientre plano.
Subaru: Lo siento, no pude detenerlo sniff, soy horrible – lo abrazo.
Ruki: Por supuesto que no lo eres, nunca digas eso, eres hermoso y nunca te culparía por eso – tomo su barbilla haciendo que lo viera a los ojos – te amo más que a nada, eres mi vida al igual que nuestro hijo o hija, y no dejare de amarlos por nada en el mundo – lo beso y el albino correspondió su beso.
Subaru: Yo también te amo, más que a nada – esperaron por un rato hasta que llegaron Yuma, Kou y Azusa con sus cosas y con Reiji y Shu, el rubio traía un maletín.
Reiji: Ya me dijeron lo que paso, después me encargare de Laito, Shu dame mis cosas – el mayor le dio el maletín – salgan, yo me encargare de Subaru – todos salieron excepto Reiji y Ruki.
Al siguiente día.
Shu: ¿Como esta Subaru? ¿Y el bebe? - pregunto al ver a Reiji salir de la habitación.
Reiji: Subaru tiene algunas heridas que tardaran en sanar pero el bebe está bien, no le llego ningún golpeal vientre y no le hiso daño al feto, no podrá caminar por al menos 3 semanas, ya que al tener al bebe su energía se la lleva el en gran parte, mejorara con el tiempo, cuídenlo mientras tanto – se dirigió a los Mukami, ellos asintieron aliviados – será mejor que se quede aquí, vendré una vez a la semana para revisarlo, Shu vendrá 3 veces a la semana por pedido de Subaru, nos encargaremos de Laito, nos vemos después.
8 meses después, nació un sano niño de ojos azules y cabello blanco, Laito recibió su castigo y Ruki y Subaru siguieron con sus vidas junto a su pequeño hijo.
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Zami: No sé porque pero me gusta poner a Laito de malo en varias ocasiones ¿Sera por lo pervertido?
Tsuki: Solo querías poner algo relacionado con una violación y aprovechaste que era Laito ¬¬ y no lo niegues.
Zami: Aaahhh, adiós – se desaparece desaparesidamente.
Tsuki: Loca, bueno aquí tienen las imágenes del... de este one-shot, si tienen algún pedido solo pónganlo en los comentarios, hasta la próxima, besos y adiós.
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