Un poco triste
ESCENARIO
Ya han pasado un par de años desde que te separaste por completo de la ToMan y un día te llega una carta de alguien misterioso... ¿quien podrá ser?
Querida __________
Probablemente ya sabes todo lo que está ocurriendo, y doy por hecho que debes estar muy confundida. Lamento no poder resolver tus dudas, y lamento que debas pasar por esto, en serio. A decir verdad, todos tenemos un poco de culpa, todos, sin excepción.
No te diré mi nombre aún, primero quiero decir algunas cosas que considero muy importantes, algunos detalles que necesito que sepas.
La ToMan inició gracias a un grupo de niños pubertos, idiotas que no tenían nada más que hacer en sus vidas. (O al menos así quiero contártelo a ti, solo disfruta mi narración y no te quejes). En fin, visto desde un punto externo, podíamos vernos muy geniales ¿no crees?, el siempre estar en la mira de tipos más grandes y peligrosos, que todos nos reconozcan y algunos nos respeten al tener poca edad y llegar hasta donde estábamos. A eso de los 15-16 años la cosa se puso más fea, ¿cierto? ¿Lo recuerdas?
Estuviste ahí
Yo si recuerdo como presenciaste todo ________.
Lo recuerdo porque amaba ver como nos admirabas, como hablabas de todos nosotros, uno de mis pasatiempos era saber de ti y que pensamiento cruzaba por tu bonita cabeza cuando nos veías hacer idioteces.
¿Recuerdas como nos defendías?
¿O cuando defendías a Takemichi?
Me daba un poco de risa como te ponías a defenderle siendo que no eras de la ToMan, literalmente ibas contra quien sea, inclusive Mikey, para defender al bebé llorón de Takemichi. Eras y sigues siendo admirable. Soy tu fan número uno, si te soy sincero.
También recuerdo...
Espera, ¿cuántos integrantes de la ToMan te gustaron? creo que fueron cientos
Broma, broma, la verdad nunca supe quienes te gustaban en ese entonces.
Solo sé que cuando tenías 13 te gustaba Mikey, luego en agosto de ese mismo año tuviste un enamoramiento bastante tierno con Kazutora, a los 14 te atraía Draken, fue algo fugaz según escuché por ahí, después noté como mirabas a Keisuke, también vi como perdiste aquel brillo en tus ojos gracias a él, fue y seguirá siendo triste. En fin, sigamos con tus romances fallidos... te gustó Peyan, hasta que te dijo tonta esa vez que le golpeaste sin querer, después te gustó uno de los Kawata, la verdad no lo recuerdo bien, oh y se me había olvidado Mitsuya, con él si que fuiste extremadamente notoria.
Creo que nombré a todos jaja, bueno, eres toda una caja de sorpresas ________.
Eres inesperada, fuerte, valiente, hermosa, inteligente, creativa... mandona, perezosa, exagerada, gritona, agresiva, y bueno, ya me fui para otro lado, lo siento.
Pero si, tienes muchas cualidades en ti, tal vez por eso me enamoré.
Mierda, lo escribí de impulsivoOoOo, no puedo tacharlo o la carta se arruinará.
Está bien, de todas formas debía decirlo tarde o temprano.
¿Cuando fue que me enamoré de ti? Ni yo lo sé, nunca me lo he preguntado.
Le preguntaría a Mikey pero ya sabes que ahora está con otra gentusa... Digo, Manjiro, Mikey ya estiró la pata. El apodo claro está.
Le preguntaría a Chifuyu, o a Mitsuya, o a Hakkai, pero ya sabes, están ocupados.
Tal vez podría contactarme con los Kawata, y de paso pedirles que me den ramen, pero no lo sé, tú misma me has dicho que no sea tan descortés.
Le diría a Takemichi... mejor no, no lo preocuparé... y de seguro ni recordaría cuando fue que me enamoré de ti.
Probablemente Draken lo recuerde...
Y estoy seguro que Keisuke igual.
Entonces... supongo que no podremos saber el momento exacto de cuando supe que estaba enamorado de ti.
Espero recordarlo algún día.
¿Alguna vez te gusté? O más bien, ¿alguna vez te enamoraste de mi? Éramos amigos, muy amigos.
Me gustaría verte para confirmar ciertas dudas, y para que me respondas sinceramente, pero creo que esto no podrá ser.
Recuerdas esa vez que... dios, que nostalgia, esa vez que le pegamos chicle en el pelo a Keisuke fue inolvidable. Una anécdota en la que toda la ToMan puede recordar cómo si fuese ayer. O cuando le tiramos pintura a Mitsuya, quedó todo morado el pobre...
Esa vez que sin querer planeamos una muerte inesperada y ridícula, y Hakkai con Takemichi casi se nos mueren en verdad... joder, que recuerdos.
¿Y CUANDO DEJAMOS CALVO AL CALVO? (Draken) y si, lo escribí en mayúsculas y con color rojo a propósito. Recuerdo que todos nos pusimos de acuerdo para decir que tú fuiste así nadie salía herido... y resultó :D
Solo te miró mal... su frente se arrugó un poco y sus cejas casi quedaron como una al juntarlas tanto, pero no te dijo nada y eso fue un final feliz.
Omitamos la parte cuando Mikey se re cagó de la risa y lo golpeó a él pero bueno, equis.
Ya como que alargue mucho la carta, ¿no? En fin, te amo.
Mierda, lo solté muy a la ligera jajaja, ¿te sonrojaste? dime que si
Bien, al punto al que iba es que, lo que sea que pase ahora, en unos días o meses más, que te dé igual. Hablo por toda la toman cuando digo que tú fuiste lo mejor que nos pasó, a todos, y ninguno quiere que te sientas mal por el futuro que se acerca. Porque si, desde un inicio supimos que esto podía terminar como una jodida historia trágica, en el fondo lo sabíamos. Tener una pandilla no es una mierda ligera, es peligroso, pero todos estamos en ello así que no queda de otra.
Menos tú ________, tú no eres parte de pandillas, no eres parte de este mundo. Quiero que seas feliz, y también deseo que ninguno de nosotros, idiotas y con poco juicio, impida que tengas una bonita sonrisa en tu bonita cara.
Creo que sabes que da igual si Manjiro comete mil crímenes, la Toman estará ahí, tarde o temprano. Tú sabes más que nadie que a ningún amigo se le deja solo. Eso tienes en común con Takemichi, la verdad me sorprende como no son familiares si tienen bastante en común.
Quiero que sepas que no importa si Manjiro, o Mitsuya, Hakkai, Smiley, Angry, Kazutora, Chifuyu, o cualquiera de los chicos llegara a morir, ninguno estaría feliz si lloras. Ninguno estará tranquilo si tú caes, ya sabes a lo que me refiero, por lo que, más que una carta de declaración y profundo amor, está carta es para quitarte un peso de encima, para darte tranquilidad, y para que sepas que todos te amamos.
Siempre y para siempre.
Desde que te acercaste a nosotros con dos coletas, sujetando con una mano al gato de Chifuyu y con la otra teniendo firmemente un palo para pegarle al dueño irresponsable que dejó a su gato suelto por las calles. Desde ahí, hasta ahora que somos mayores y nuestros caminos se separaron forzosamente.
Gracias por estar ahí, en cada problema y en cada idiotez random en la que yo y los chicos te involucramos.
Gracias por no rendirte, aún cuando tú madre no te dejaba ver al "grupito desastroso con aspecto de maleantes de cuarta, que ni saben bañarse" según nos decía tú mami.
Gracias por apoyarnos, a todos, créeme cuando te digo que todos los chicos te agradecen cada acto que hiciste por la ToMan.
Y por esto mismo, por toda la alegría que nos brindaste, y por las lágrimas que nos sacaste a cada uno (aunque varios admitieron que nunca lloraron, malditos mentirosos), y bueno, porque desde el segundo uno que te vi me encantaste totalmente... por esto mismo es que te diré una cosa
__________, no eres parte de la toman.
__________, no cargues con lo que nosotros debemos cargar, tú nunca la cagaste, no sabias donde te metías, así que por favor... no te involucres en nada de lo que sucederá después.
Y por favor, pase lo que pase, que nosotros, que un idiota aunque sea, no sea razón para verte infeliz. Ninguno merece eso, tú eres mucho más que todos nosotros juntos, así que, no estés triste por un grupo de desastrosos idiotas que no maduraron a tiempo y no vieron la dura realidad que luego enfrentarían.
No es culpa tuya lo que pase de ahora en adelante, no tenías como saber todo esto, toda esta jodida situación se nos escapó de las manos. No mereces cargar con esto.
ya se me cansó la mano
ya me dejo de ser penoso, no quiero que mojes la carta con tus lágrimas. No llores eh, ni se te ocurra llorar o iré a donde sea que estes y llevaré pañuelos y tu helado favorito... si, es una amenaza, una amenaza amistosa.
Cierto que no podemos vernos, se me olvidó ese detalle... bueno, te amo.
¿Ya te lo dije? Creo que donde nunca lo dije en voz alta antes entonces pasó esto, no puedo dejar de escribirlo. Te amo te amo te amo te amo
Carajo, y justo ahora que todo está perdido
Sin duda los integrantes de la toman tienen una suerte de mierda
Bueno, _________, supongo que dos paginas no están nada mal. Espero que esta carta la guardes por siempre y, bueno, no lo sé, solo quiero que esto sea importante pero no tanto como para dañarte cada vez que la leas.
Tenla como recuerdo, un último recuerdo que te envía la Toman antes de desaparecer, si, eso. Probablemente pronto no sepas nada de nosotros, no te asustes, dudo que todos nos matemos a la vez o algo así... si sale medianamente bien lo que nos depara el futuro, entonces igual nos alejaremos de ti por tu bien. No te pido que nos olvides, pero si que esto no sea una huella en tu corazón que no puedas sanar.
Increíble como puede escribir tanto este lápiz... te juro que esta todo roto y sucio pero escribe genial.
_________, fuiste una bonita luz para todos, inclusive para Mikey, siendo que ahí hay más oscuridad de la que debería. Pero fuiste capaz de pasar todo obstáculo, eres asombrosa.
Ahora entiendo porque me enamoré de ti.
A quien engaño, tengo miles de razones para enamorarme una y mil veces de ti.
Espero que en alguna otra vida, si es que tenemos la suerte de obtenerla, nos crucemos sin estas circunstancias. Me hubiese gustado pasar cada maldito segundo a tu lado, en verdad.
Pero ya está, no podría arrepentirme de lo que he hecho en mi vida y en la ToMan, no podría. Aunque esto termine con un escenario trágico, nunca me arrepentiría de lo que pasamos porque al fin y al cabo por algo pasan las cosas ¿no crees?
Quien diría que estoy siendo tan positivo ahora...
Y por último, no te he dicho mi nombre aún... incluso hablé de todos jaja, así que no sabes quien podría ser yo. Soy un tramposo, ódiame si así quieres.
Pero, querida _________, todo tiene su respuesta. Piensa en lo que he dicho, piensa en quien podría ser.
De seguro adivinas quien era el hijo de puta cobarde que te admiraba desde tus espaldas y nunca tuvo el coraje de acercarse y declararse como debería. Sé que en el fondo encontrarás la respuesta.
Te amé, y te amo ahora más que nunca. Siempre fuiste la única chica que estuvo en mi mente cada segundo, y siempre lo serás, incluso si muero, mi último pensamiento serás tú.
No se cuando te llegará esta carta, puede que a estas alturas ya todo se haya jodido y esté muerto jaja, pero está bien. Créeme que estará todo bien.
No te desanimes por un estupido como yo, solo eso pido.
No firmaré con mi nombre jeje
Seré quien quieras que sea, así que, puedes pensar en quien desees. Te prometo que no me enfadaré, solo quiero que seas feliz.
Firma nada más ni nada menos que el amor de tu próxima vida.
Posdata: ¿Ya te dije que te amo? Lo hago, te amo.
Fin del escenario
Lo que sigue no tiene que ver con lo antes leído.
—Tal vez sea bonito si compartimos sudaderas.
—Mi estilo de ropa no es muy bonito, ________...— Takemichi rascó su nuca y sonrió ampliamente, sus ojos se cerraron.— O al menos eso me han dicho.
—No me importa.— tu mano buscó la suya y las entrelazaste, Takemichi cambio de expresión a una completamente sorprendida por tu toque tan gentil. La mano que tenía en su nuca fue bajando poco a poco hasta su costado.— Quiero que combinemos. Nos veremos muy bien, ya verás.
Le viste esbozando una sonrisa, una sonrisa que dejó sin habla a Takemichi. Luego de sonreír no dijo nada más, solo decidió dejarse llevar por el tiempo y por ti.
Comenzaste a caminar, lo tirabas hacia la dirección a la que ibas con la suficiente fuerza para que despabile y no quede quieto en su lugar, plasmado.
Tu meta en este capítulo de tú vida era simplemente estar ahí, existir.
No sabes como, pero eras consciente de que la actualidad en calma que presenciaban todos era muy poco duradera.
Aún con el calor y leve sudor que presenciabas en la mano de Takemichi, afirmaste el agarre. Él siguió tu ritmo y caminó junto a ti, viéndote de reojo durante todo el trayecto a la tienda que te encantaba visitar.
—Está bien, pero tú eliges la sudadera, ________.
—No, la elegiremos ambos, Takemichi. Debe gustarnos a los dos— dictaminaste apurando tus pasos. Takemichi gimoteó en silencio, simplemente murmurando del cómo te arrepentirás de esto.
Entraron a la tienda y comenzaron a rebuscar entre los estantes y colgadores. Pasaron horas ahí, yendo de un lugar a otro con el objetivo de encontrar una prenda digna de ustedes.
Una la cual usarías demasiado.
—¿Te gusta esta?— Takemichi extendió una sudadera frente a él. Era roja con una pequeña palabra en el centro de color negro. Abriste tus ojos y asentiste de inmediato.
—¿Está mi talla?— preguntaste tomando la prenda entre tus manos, viéndola a mayor detalle. Takemichi se volteó y comenzó a buscar tu talla de donde había sacado la sudadera.
—Oh, si— la sacó de su lugar y te la mostró, él sonrió como de costumbre.— Esta es de tu talla, ________. ¡Comprémosla!
—Bien.— te limitaste a no sonar tan entusiasmada frente a tantas personas, la tienda se llenaba a estas horas.— ¡Vamos a pagarlas ya!
—Esto es demasiado difícil...
—No es difícil si lo haces con calma —. Mitsuya comenzó a revolver la mezcla, su entrecejo se frunció al estar del todo concentrado en sus movimientos. Kazutora le observaba de un lado y Hakkai del otro.
—Calma...— Mikey giró la tapa de aquel frasco, ejerció más fuerza y más fuerza, esta nunca cediendo—. NO SE ABRE.
—Solo debes jalar hacia arriba—. murmuró Draken en un cansado tono. Su palma refregaba su rostro como si no hubiera mañana.
Mikey al hacerle caso dio un chillido de pura emoción al ver que si abrió el frasco con total éxito.
No se le dio vuelta como la vez pasada.
—Pon un poco acá, dentro del frasco— le pidió Mitsuya, extendiendo su mano que mantenía sujetado el pote. Chifuyu detrás de ellos soltó una risa.
—No será que lo ponga fuera del frasco— Chifuyu tras su broma comenzó a reír, solo él rió en ese momento— Baji, ríete... lo que dije fue gracioso.
—__________, sácate mi camiseta, la vas a ensuciar— el pelinegro volvió a darle un tirón a la orilla de la prenda, tú nuevamente volviste a darle un empujón.— La vas a ensuciar y me voy a enojar.
—Déjame en paz— te alejaste de él rápidamente y te sentaste en aquella butaca frente al televisor. Keisuke te siguió a paso firme, apretando sus dientes con tal de no decir una tontería— Me la diste tu mismo.
—Ahora la quiero de vuelta— alegó Baji cruzando sus brazos contra su pecho. Le viste enderezarse junto al marco de la puerta de la cocina, te vio irritado— No te la di para que la ensucies, no seas mala.
—Déjala, Baji— Se oyó la voz de Smiley.— Puede que si se ensucia tu camiseta se vuelva más decente.
—Cierra la boca, sonrisas— Baji ni se molestó en verle, siguió mirándote con irritación.
—Mañana es el cumpleaños de ________, mañana es su cumpleaños, mañana es tu cumpleaños—. Canturreó Smiley, apuntándote cuando dijo la última frase.
—Mi ________ va a cumplir 10—. Kazutora esbozó un puchero. De inmediato recibió una intensa mirada de Mitsuya—. Estoy jugando, sé que ya no está tan chiquita.
—Pelo de plátano, déjate de bromas —. Le advertiste, no logrando no contagiarte de su sonrisa tan alegre.
No faltaron las risas, todos soltaron una gran carcajada al apodo que le habías puesto, aunque sin duda Keisuke fue quien más se rió.
—_________, si tuvieras que elegir entre una sudadera de gatos y un gato real, ¿que elegirías?—. Chifuyu escondió para nada disimulado el block de notas que tenía en su mano, se puso detrás del sofá para que no veas el lápiz ni la agenda.
—_________, ¿un día de spa o un día en el parque de diversiones? —. Habló por otro lado Angry, observando su móvil.
—_________, ¿quien es tu favorito y por qué soy yo? —. Draken golpeó en la cabeza a Smiley tras preguntar eso. Este se carcajeó mientras acariciaba su cabeza— es que ustedes ni saben que regalarle, no la conocen como a mi.
—¿Si? Y tú qué piensas regalarle, ¿ah?— Hakkai le miró de mala forma y se cruzó de brazos. En su mente repitió varias veces que según tus acciones él era tu favorito, no debía ser mentira ¿no?
—Queti
—Oh, ¡yo podría regalarte a Emma!
—¡Mikey!
—Pero si son amigas... si se la regalo entonces pasarán todos los días juntas—. Mikey hablaba seriamente, no hizo ninguna mueca —. Yo si que conozco a ________, no como ustedes, idiotas.
—________, ya dame mi camiseta—. Keisuke volvió a insistir, interrumpiendo a Mikey.
—Cállate, Baji.
—Cállate, Mikey.
Ambos se miraron desafiantes luego de eso, todos se quedaron callados por un instante.
—¿Por qué mejor no me regalan dinero? —. Propusiste—. Así ninguno se complica tanto... quiero dinero...
—No, serán regalos para que sea algo significativo —. Afirmó Mitsuya, moviendo su cabeza de arriba a abajo. Emitiste una leve queja— y para que se les dificulte a los demás... oh, y sería bueno ver como quedas encantada con mi regalo y con lo de los demás no...
—¿Que carajos pasó con Mitsuya? —. Keisuke le miró elevando una de sus comisuras y arrugando el ceño—. ¿Se endemonizó?
—¿Se qué? —. Soltó una carcajada Smiley.
—Mejor terminemos de hornear el pastel—. Inui se dio media vuelta e ingresó a la cocina nuevamente. Los demás quienes estaban haciendo de espectadores, le siguieron luego de decidir terminar de una vez con tu pastel de cumpleaños.
-.-
—Hoy es el día número 25—. Mitsuya tachó aquel número del calendario. Se quedó ahí, observando un poco más todas las cruces que estaban en el mes de Septiembre, todos los días llevaban cruces con un lápiz rojo, algunas de estas dibujadas violentamente sobre el papel.
Detrás de él venía Draken, sus manos traían una manta bastante gruesa de color celeste, cuando llegó a la camilla te tapó cuidadosamente con ella. Del mentón hacia abajo estabas completamente cubierta, luego de aquello acomodó la almohada bajo tu cabeza y se separó después de dejar una suave caricia en tu cabello, cerca de tu frente.
En completo silencio la puerta se abrió, te hubieses alegrado al ver entrar a Kazutora, Keisuke y Takemichi, pero estabas durmiendo.
No deberían estar tantas personas dentro de una sala de hospital, a pesar de esta ser solo para ti, pero bueno, ya conoces a tus amigos. Para ellos un "no", no significa del todo que no puedan hacerlo.
—¿Como está la princesa?—. Kazutora sonrió ligeramente, no dudó en acercarse hasta la camilla y dejar sus manos a un costado de tu brazo derecho. Se inclinó para dejar un suave beso en tu frente y luego movió una silla para sentarse junto a ti.
Los demás hubiesen reclamado por ello, pero cada día se turnaban por quien utilizaba la silla junto a la camilla. Hoy le tocaba a Kazutora.
—Estable —. Soltó Draken, aún de pie junto a ti.
—Estable—. Soltó irritado Keisuke, resoplando —. la única palabra que escucho todos los putos días.
—Baji—. Le reclamó Draken, alarmándolo.
—¿Acaso me lo negarás? —. El pelinegro sacó su chaqueta y la dejó en un perchero junto a la puerta, luego de eso se giró y siguió hablando—. no me calles, llevamos ya 25 días en lo mismo y los primeros días no dije nada, absolutamente nada.
—Baji, cierra la boca—. Habló Kazutora, concentrándose en tus ojos cerrados, en tus pestañas mientras su mano se instalaba en tu frente, verificando tu temperatura.
—Cállate, solo... no estoy diciendo nada malo—. Keisuke comenzó a caminar dentro de la sala, sus manos se escondieron dentro de los bolsillos de aquella chaqueta que llevaba esa noche—. quiero que esto acabe y ella despierte.
—Todos queremos eso—. Takemichi nunca se sintió tan valiente como ahora. A decir verdad, el estar al otro lado de la camilla, y viéndote luchar por tu vida, le dio valentía suficiente. Draken le vio de reojo, sus cejas se alzaron levemente al notar lo serio que estaba.
—¡_______, ya llegamos! —. Bruscamente abrieron la puerta y entró Mikey junto a Chifuyu, ambos con un cerro de peluches en sus brazos. Mitsuya esbozó un shhh a ambos, regañandolos.
—¡Cállense idiotas! ¿como se les ocurre entrar siendo así de ruidosos? —. Mitsuya les regañó como nunca, siguió regañándolos a pesar de que fue hasta ellos y agarró un par de peluches para acercarlos a un lado de la camilla.
—Puf, y nos dices a nosotros... ustedes están aquí y son las 10 de la noche, ¿cómo se metieron eh?—. Se las ingenió Mikey, dejando callados a Mitsuya y los demás. Kazutora al rato después de un profundo silencio soltó una risilla.
—Compré al guardia.
Todos se giraron y miraron a Draken. Mikey no lo podía creer.
—¿Y con qué dinero? Si ni tienes —. Habló Keisuke, lo dijo seriamente.
—Hice algo muy malo y de seguro si _______ supiera me golpearía por esto—. Admitió cabizbajo. Mitsuya le instó a que cuente la verdad—. El guardia va a donde yo vivo, lo he visto en el local y le he dicho que le diría a su esposa si no nos dejaba pasar cuando quisiéramos.
—Que cabrón—. Soltó de golpe Kazutora, casi al instante le miró con reproche.
—Sé que no es correcto... PERO, cuando _______ despierte le diré igual a su esposa, tranquilos—. Mitsuya le lanzó un peluche en la cara—. ¡Hey!
—Necesitaba golpearte—. Mitsuya sostuvo su cabeza con ambas manos, negaba mientras sonreía sin gracia.
Kazutora se estiró para agarrar otro peluche y de igual forma se lo tiró a Draken. Ahora el rubio se quedó totalmente quieto mientras le asesinaba con la mirada, no bastó mucho hasta que se agachó y agarró ambos peluches para revolotearlos en dirección a Kazutora.
—¡Le pueden llegar en el rostro a _______, simio!— Kazutora te cubrió con su cuerpo y los peluches le llegaron en la nuca. De inmediato todos comenzaron a regañar a Draken, algo nunca antes visto.
Semanas después
—Quiero que estés conmigo pronto—. Aquel susurro proveniente de Manjiro entró delicadamente por tu oído. Ese día pidió estar un rato a solas contigo, sin ninguno de los demás escuchando las posibles cursilerías que diría.
Era un escenario digno de ver; Mikey había trepado por la camilla y se encontraba abrazándote por un costado, con su brazo derecho sobre tu estómago y su rostro escondido en tu cuello, de vez en cuando miraba tu rostro, verificando si podías estar despierta.
—Hoy tuve que acompañar a Emma al centro comercial, tomé tu lugar por un día espero no te moleste—. Confesó apenado, ahora que nadie lo veía podía mostrarse un poco más, el demostrar lo que sentía—. La verdad no entiendo como puedes soportar que sea tan indecisa... a mi me estresó muchísimo—. Se acomodó mejor y antes de seguir hablando dejó un beso en tu mejilla—. pero al final se decidió por comprar algo para ti... luego de probarse varias prendas no compró nada para ella, es una rara—. Luego de un breve silencio soltó aire por la nariz, empezó a negar con la cabeza—. Perdona, si me oyeras ahora me regañarías por como hablo de mi hermana.
Luego de aquello, comenzó a pensar en que más decir, porque claro que él sabía o quería creer que le estabas escuchando cada palabra que decía. Tragó saliva hondamente y cerró sus ojos por un momento.
—No es por nada pero creo que quien más te necesita soy yo —. Admitió en voz alta. No quiso sonar presumido pero eso no era algo que podía evitar. Después de todo era asi—. ¿me escuchas, ________? Necesito que despiertes... lamento ser tan egoísta pero... no se que haría si te vas tú también.
Quedó en total silencio luego de decir aquello, Manjiro estaba pensando entre sí sobre qué decir ahora. Luego de unos segundos, soltó un chasquido de desespero y se quejó en voz baja.
—Además... yo te quiero mas que los demás–. afirmó como si nada, muy orgullosamente. Tras una pausa escondió su rostro cerca de tu mejilla, como si buscara sentir tu presencia aún más cerca—. sería bueno que pudieras responder a eso... ¿que dirías si dijera que te quiero más que a los demás? me gustaría saber la respuesta—. Se quedó pensando unos instantes—. Aunque pensándolo bien, puede que yo no sea tu favorito después de todo... siempre te hago enojar...
Un leve escalofrío recorrió su espalda, se movió ligeramente y separó su rostro de su improvisado escondite.
—Sé que me oyes, al menos en las películas dicen que aunque estés en coma puedes escuchar a tu alrededor... o algo así era, no lo recuerdo bien —. comenzó un breve diálogo en voz baja, hablando consigo mismo de si estaba bien lo que dijo o no—. En fin, da igual, sé que despertarás así que cuando lo hagas me respondes a la pregunta... si no me quieres tanto dímelo de todas formas, está bien, puedo sobrevivir con ello. Todo me da igual con tal de que despiertes.
Apoyó su codo a un costado de ti y su mentón descanso en su mano, desde ahí se te quedó viendo sutilmente. Nunca dejó de abrazar tiernamente tu abdomen, a excepción de ahora que llevo su mano hasta tu cabello, acarició con su pulgar parte de tu mejilla mientras sus demás dedos se enrollaban en mechones desordenados que caían contra tu cara. Tu cabello estaba igual de bonito que siempre, pensó Manjiro, fijándose en aquel detalle.
—No debería estar tan deprimido, no debería tener esta angustia que siento ahora en el pecho... se siente raro, pero no es tan agobiante como cuando pensaba que habías...habías—. muerto, eso quiso decir. Tras saber la noticia de tu atropello posterior al día de tu cumpleaños, Mikey sufrió demasiado en sólo segundos. Fue de golpe, un choque de emociones que recorrió su cuerpo de arriba abajo, fue la peor sensación que pudo sentir.
Aunque, esa sensación ya había estado presente antes en él.
—Si despiertas pronto prometo hacer que seas parte de la ToMan—. Pensó en voz alta, casi de inmediato arrepintiéndose de la idea—. mmmh no, si despiertas pronto entonces... entonces...
¿Que podrías querer de él?
Mikey se preguntó, dudoso y con el ceño ligeramente fruncido.
—No lo sé, aunque probablemente si despiertas estaría tan feliz que diría si quieres ser mi novia o algo así—. Soltó antes de reír levemente—. Oh espera, eso no debí decirlo... mierda, olvida eso, eso es un secreto.
Dejó tu cabello y en cambio plantó ambas manos en su rostro, golpeándose en el proceso. Soltó un insulto en voz baja y comenzó a lamentar ser tan bocota.
—Era broma
No era broma
—Si quiero que despiertes, pero lo demás no era así como lo dije jaja... esperaría un tiempo hasta que te recuperes y ahí podría ser, si eso —. Ni Mikey sabía el porque actuaba así de raro—. bueno ya lo dije. Ahora que ya te dije el secreto esperaré que despiertes, tal vez funcione ya que eres bastante curiosa. Me gusta cuando eres curiosa.
Nuevamente se atrevió a mirar tu rostro, se asustó un poco al ver tu piel un tanto más pálida que de costumbre.
—Eres muy bonita, lo siento por no decirlo lo suficiente—. Admitió con cierta tristeza, recordando antiguos momentos nostálgicos—. te quiero muchísimo, demasiado, solo quiero ver tus ojos viéndome con esa mirada que me lanzabas de vez en cuando... la que decía que era una molestia... o esa que a veces utilizabas cuando halagabas mis patadas, cualquiera de ellas sería bueno de verlas otra vez.
Nuevamente luego de recordar momentos que no debería, dejó caer su rostro en tu hombro y sus ojos lagrimearon una poco, o más bien quisieron hacerlo ya que él estaba forzándose al máximo para no verse débil.
—No estoy pidiendo mucho —. Lamió sus labios rápidamente—. solo quiero que me mires una vez más... por favor abre los ojos, ________—. su control se descontroló un poco y ligeras gotas cayeron en tu hombro—. Te necesito aquí, conmigo.
tiempo después
—Córrase señora —. Keisuke empujó ligeramente a la anciana y siguió corriendo. Manjiro hace bastante le había adelantado por lo que el pelinegro se encontraba más preocupado.
Era cómico.
Era cómico ver a una tropa de jóvenes corriendo hasta el hospital. Algunos con los ojos llorosos, otros felices, otros preocupados, habían bastantes emociones en solo un pequeño grupo de personas.
Habían pasado por mucho, todos ellos.
Muchas veces quisieron rendirse. Habían días que simplemente pensaban en dejarte ir, no hacer que sufras, no impedir que descanses. Pero por alguna razón eso no pasó.
No esperaron por el ascensor y subieron directamente por las escaleras, corriendo peldaño por peldaño, algunos yendo más allá y subiendo tras dos o tres peldaños. Necesitaban verte cuanto antes.
Tras llegar a tu habitación, el alivio tiñó sus rostros y no les importó siquiera las indicaciones de los doctores y las enfermeras u enfermeros que estaban allí, que se jodan los demás. Ahora solo pudieron centrarse en ti. Hablaron todos a la vez, no pudiste descifrar que decían pero aún así no podías responder pues te faltaba la voz. Solo correspondiste a sus abrazos.
La ToMan se emocionó demasiado. Tus amigos estaban felices de verte despierta, una vez más. Fue un día jodidamente perfecto para ellos.
sus abrazos se sentían como estar en casa, al fin te sentías viva. El leve beso de Mickey te hizo sonreír, aunque no tuvieras fuerzas, las lágrimas de Hakkai y Angry mojaron tu bata pero eso fue lo de menos, no te importó aquello. Kazutora ni Keisuke pudieron alejarse de ti, te abrazaron y ahí estuvieron durante varios minutos. Takemichi lloraba contra la camilla, aún sin poder creerlo. Mitsuya y Draken estaban muy felices, ambos te hicieron saber la falta que les hiciste con solo un breve y fuerte abrazo. Chifuyu también lloraba. Smiley no hacía más que acariciar tu mano, lo hacía delicadamente.
Y así fue como sucedió.
No, así fue como se contó este trozo de la historia. El final no es verdadero, pero es menos doloroso, y eso es lo que vale. Escribir algo menos triste.
Escribir una mentira.
PONÍA UNA FOTO NADA QUE VER CON EL CAP WKDKKSKS
Pero bueno, inui re lindo te amo
se imaginan pasar por ahí?
Vale pero que opinan de todo lo que está pasando en el manga?
yo opino que Wakui simplemente quiere que enloquezcamos, fin.
:) REVIVIÓ WATTPAD
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top