| ToMan en las aguas termales |
"Continuación" de los cap de la botellita.
Agarraste tu gran mochila y la pusiste sobre tu espalda. Por suerte todos estaban en lo suyo y nadie se fijo en lo que habías metido ahí. Mientras les veías hablando, pensabas cual era más despistado para así ir detrás de él.
—Oye Chifuyu.—llamaste al rubio a lo que te acercabas a su moto.— Me iré contigo.
—Ah bueno, súbete.— me subo.—Sujétate bien, no quiero accidentes nuevamente.— me bajo, digo no no. Te sujetaste fuerte de su torso, al él acelerar de golpe sin querer se escucharon sonidos en tu mochila.
Chifuyu miro hacia atrás, preguntándose qué había sonado.
—¿Que fue ese ruido?.— reíste completamente nerviosa, le apretaste más del torso para que no haga preguntas.
—Ya vamooooss, llegaremos tarde.—Chifuyu asintió y comenzó a andar, los demás les siguieron de cerca.
—________, ¿quieres un plátano?.— ¿un plátano? Giraste tu rostro hasta Mikey, este te mostró varios plátanos en una de sus manos.
—¿Que haces con eso?.—tu boca se frunció, no podía sin duda estar sin comer.
—Es para comer, dah.— respondió sonado obvio. Estiraste tu mano y él te dio la fruta.—Gracias.
—De nada.—te demoraste en entender.— digo, gracias. ¿Por qué hablas primero? No ves que me confundes.— Mikey soltó una risa y adelantó la moto de Chifuyu.
El transcurso del camino fue rápido, por suerte sin ningún inconveniente. A excepción de Mikey, que en plena carretera se le cayeron un par de plátanos y se estuvo quejando todo el camino para que lo esperen y el los vaya a buscar. Obviamente eso no sucedió.
Los demás si le esperarían pero tú les amenazaste que debían llegar temprano a las aguas termales, al final te hicieron caso.
—Hace mucho no veníamos todos a las aguas termales, siento que me saldrán escamas.— su ceño se frunció a lo que menciono Kazutora.—Lo mejor es que estaremos con _______, ven que te abrazo.—te agarro del cuello de tu camiseta y te acercó para abrazarte desde tus hombros. Eso era verdad, eran mixtos así que estarían juntitos como una familia feliz.
—No me abraces.—te removiste únicamente para burlarte de tu amigo.— Pegote.
—Ya dije, tú eres una cabeza y yo sería un piojo.—que metáfora más extraña y acertada.—Ya, vete.— de un empujón te soltó.
Bipolar
Todos se prepararon para el baño, te habías puesto ya tu bikini y tenías tu toalla a mano así que todo debiese ir bien. Ahora, tu misión era escabullir tu mochila a escondidas por entre la gente y cuando nadie te vea, sacar las botellas de tequila que tenías dentro. Pensaste que si el encargado del recinto te veía, sin duda te echaría o algo así. Preferiste evitarlo.
—A mi me gustaba el rojo.—Smiley habló cuando apareciste a un lado de ellos.
—A mi el rosado.—Angry opino.
—Cállense, yo elijo el que más me guste.—te cubriste con la toalla para esperar más cómoda a los demás. Al menos los dos gemelos ya tenían una toalla envuelta en sus caderas. Sujetaste con firmeza tu mochila en uno de tus brazos, cuidando que no suene ninguna y de paso se rompa el contenido.
—EaEaEa.— se acercaba Chifuyu con Takemichi celebrando a su manera. Los más felices en este paseo, que cosas.
—Kenchin, ¿viste mi patito?.— te giraste levemente a Mikey, este venía hablando y hablando sin parar, Draken le escuchaba con atención pero se hacia el desinteresado.
—Está en la mochila, Mikey.—habló Draken con su típico tono de voz ronca. Ese pato del que habla esta todo carcomido y cochino, hiciste una mueca de disgusto al acordarte.
—APÚRATE.—diste un salto en tu lugar por el grito. Al fondo del pasillo venía corriendo Kazutora y detrás de él Baji. Ambos riéndose a boca abierta.
—Ojalá se caigan de cara.—a tu lado apareció de la nada Inui, una toalla en sus caderas y tenía otra sobre sus hombros.
Cuidado que babeo, permiso [se limpia con un pañuelo]
—TE GANARE.— pudiste ver perfectamente como Baji le dio una patada voladora a Kazutora y este se cayó de cara al suelo. Baji se le adelantó y llegó primero donde ustedes.— ¡JA!
—Eso es trampa, mamoncito de mierda.—Kazutora dejó de apoyar su rostro en el piso.—Me vengare.—con ayuda de sus manos y pies se levantó y fue cojeando hasta ustedes.
—¿Ya llegaron todos?.—Hakkai y Mitsuya estaban detrás de ti sin siquiera tu darte cuenta. Todos asintieron a la vez, totalmente entusiasmados.
Al entrar por fin, al haber llegado temprano prácticamente no había nadie. Ni un pie pusiste dentro y todos comenzaron a correr sacándose las toallas y dejando ver sus trajes de baño.
Por aquí uno de patitos, uno de autos... oh, Takemichi tiene un traje de baño de tomates.
Espera... ¿Draken tiene uno de fuegos?, bueh no me sorprende.
—Como siempre, a recoger sus toallas.—acomodaste bien tu mochila y te agachaste para poner cada toalla sobre tu brazo. Eras algo borracha, si, pero responsable.
La ToMan habían elegido la más grande del lugar y se tiraron como si fuese una piscina. Al acercarte dejaste caer todas las toallas de tus amigos, con cuidado la mochila la apoyaste en la orilla y tras quitarte tu toalla de un salto te metiste. Los demás casi ni te notaron, por alguna razón Baji estaba metiéndole el rostro bajo el agua a Chifuyu y eso si que era digno de mirar.
Con cautela, abriste la mochila y sacaste una botella de tequila, te costo un ojo de la cara pero lo valía. La destapaste y comenzaste a tomar.
—No me jodas.—Un murmullo terminó en tu oído.
—Mierda, debí pedir la cita a alcohólicos anónimos más temprano.— luego de beber le golpearías a Kazutora por decir eso.
—Invita, egoísta.—Smiley se puso a tu lado y te quito la botella para comenzar a beber.
—Ah ya antojaron.—Kazutora se puso a tu otro lado y sacó una botella de tu mochila sin cuidado alguno.
—Quien rompe, paga.—anunciaste cuando al sacar la botella hizo sonar todas las otras. Kazutora soltó una risa nerviosa ante tu amenaza.
—Que calentito.—un suspiro de satisfacción pura soltó Mikey, acurrucándose en el agua. Draken a su lado se tuvo que hundir más en el agua ya que quedaba casi todo su torso al descubierto.
Todos se hundieron hasta solo quedar sus rostros fuera del agua, incluso podías sentir los pies de Mitsuya, que estaba frente a ti. Tras poner una sonrisa disimulada estiraste más tu pie y le pegaste una patadita al de pelo lila, este abrió un ojo, ya que los tenía cerrados por la relajación del momento.
—¿Qué?.—te miro con un ojo.
—Nada.—tomaste unos tragos de tu botella y de nuevo le diste un toque a su pie por debajo del agua. Mitsuya no abrió los ojos, en cambio te devolvió el golpe.
—Déjense, mueven el maldito agua.—Smiley se quejó a tu lado, se había puesto un antifaz en sus ojos, el dibujo eran los ojos de Bob esponja.
Mientras seguías bebiendo tu tequila, te estiraste para darle otra patada al pie de Mitsuya. Recibiste como respuesta agua en tu cara, tu amigo había levantado su mano del agua para tirarte una gran cantidad.
—LES DIJE QUE SE DEJEN DE MOVER.—Smiley se enderezó y le tiro agua a Mitsuya, este abrió los ojos de inmediato así que le entró directamente. Tu amigo de pelo lila llevo sus manos a sus ojos y los refregó.— y tú, deja de hacer tonterías.—Te hundió en el agua, de un manotazo le quitaste sus manos que estaban en tu cabeza.
—Pero enojon, Tranqui.—comenzaste a reírte, tratando de sacar el agua de tus ojos.— igual puedo pegarte pataditas, no te pongas celoso.
Smiley se te quedó mirando con sus brazos cruzados contra su pecho. Si pudiera, estaría fulminandote con la mirada.
—Ya relax, me dejo de mover.—te enderezaste más contra la orilla y terminaste la botella para abrir otra.— llego _________ tranquilita, ya no hará alboroto.
—¡yei!.—celebró Chifuyu, con los ojos cerrados y la nuca recargada en la orilla.
—¡al fin!.—Baji estaba con los brazos extendidos sobre la orilla, era el único que no estaba metido hasta el cuello en el agua.
—Ay me queme.—lo que dijo Takemichi te hizo atorarte y dejaste caer un poco de tequila al agua.
—Voy a poner música.—Chifuyu se estiró para salir del agua, tras sacudir su cabello moviendo la cabeza de un lado a otro fue a buscar su móvil, supusiste.
—Oh está empezado a llegar gente.—Inui se quejó contra sus lentes oscuros que ni puta idea de donde los sacó sobre sus ojos, este vio a personas entrar y ponerse en las aguas que estaban más alejadas.— que mal.
—Toma, para pasar la vergüenza.—te arrodillaste contra el piso y le diste una botella, Inui subió sus lentes un poquito y observo la botella, dudoso.— Vamos, yo se que quieres.
Cae en la tentación guajajaja
—Gracias.— el recibió la botella y le dio unos tragos.— aunque no me avergüenza, solo que van a hacer más ruido.
—¿QUE MÚSICA PONGO?.—Chifuyu iba corriendo hacia ustedes con su celular en la mano. Cuando se resbaló por el piso húmedo y se cayó de culo todos comenzaron a reírse de él, tú no, estabas demasiado ocupada viendo cuántas botellas te quedaban.
—A la gente le podrá molestar.— Hakkai hizo una mueca al ver a Chifuyu buscando música totalmente entretenido mientras acariciaba su trasero, al parecer le dolía.— ponla bajito.
— Ponla fuerte, así los demás se van.— Smiley sonrió ampliamente ante su idea. Draken soltó una carcajada.
—Hazme un masaje en los pies, _______.—Kazutora se apoyó en tu hombro para hacer un puchero, te miro con total lástima.
—Jodete.—seguiste bebiendo tu tequila.
—Que buena amiga, la mejor.— Kazutora murmuraba para sí mismo.—ni un toquecito a mis pobres deditos, que maléfica.— insultame bien Kazu, no me enojo.
—Me dio hambre.— hasta en tu lugar escuchaste el estómago de Mikey sonar. El rubio hizo una mueca y acarició su abdomen.— ¿________, no tienes nada más en esa mochila aparte de tequila?.
—Déjame ver.—te giraste y comenzaste a rebuscar bolsillo por bolsillo. Un moño, una boleta, un cepillo, unos envoltorios de dulces, más basura, un lápiz y una bolsa de gomitas.— ESAA, vamos que se puede.— le tiraste a Mikey la bolsa y este la atrapó en el aire.
— Ve la fecha de vencimiento.— Draken le quitó la bolsa y comenzó a revisarlo.
— Que mal pensado, como si tuviera esa cosa hace años en mi mochila.— calvo idiota.— Draken a veces me caes mal, no entiendo como a Emma le gustas.
Draken le lanzó la bolsa a Mikey y se hundió en el agua, evitando lo que habías dicho.
Sabe la maldad que hace, idiota.
—Tirame uno Mikey.— Takemichi le pidió una gomita al rubio, este le miro por un rato, pensando. Al tu mirarle para que comparta el accedió, Take abrió la boca y el rubio se lo tiro; le llegó a la nariz pero de todas formas cayó dentro de su boca.
—Oh, al fin vamos a relajarnos un poco.— se escuchó una voz entrando al lugar, por alguna razón te resultó muy conocida.
—¿Uno se puede bañar sin nada?.— esa voz también la conocías perfectamente. Te incorporaste un poco y te sentaste algo inclinada, tratando de así oír mejor.
— No seas enfermo.— ¡ESA VOZ LA CONOZCO!.
NooooooOoOooOoOOoo ya se
—¿Habrá alcohol por acá?.— las voces se iban acercando.
NOOOOOOOOOOOOOOO
—Lo dudo.— ESA VOZ TAMBIÉN LA CONOZCOooooooOoooOo.
—Por la re puta madre que me tuvo, ¿por que me odia el mundo?, ¿dios que te hice?.—comenzaste a susurrar bajito, tapaste tu cara con tus manos y te encogiste en el agua.— todo me pasa a mi, ¿que mierda me ven, Dios?, que acaso ¿me persigue la desgracia solo a mi?.
Todo me male sal
—¿Enloqueció?.—Inui le murmuró a Takemichi, preocupado de tus murmullos lamentosos y por cómo refregabas tu cara queriendo desaparecer.
—Tanto hablar me dio sed, conchat...—taparon tu boca para que no termines la grosería.
—Me estresas.—Kazutora te soltó cuando le lamiste la mano.— ¿que te sucede, puerca?.
—Tu mamá.— te giraste únicamente para tomar una botella nueva de tequila.
—Oh, pero mira nada más.— NOOOOOOOOOOOOO LA RE CONCHA DE SU HERMANA.— Ran mira, es ________.
PERO POR QUEEEEEE
POR QUEEEEEE
—Uh, reunión familiar.—Hanma apareció junto a los hermanos Haitani.— ¿Me dejan unirme?.
Quisiste estrellar la botella de tequila en tu cabeza, lo pensaste en serio... unas tres veces.
—¿Que están haciendo?, ese esta ocupa...— Izana al acercarse vio a la ToMan y a ti con la frente apoyada en la botella de tequila, sufriendo.— Ooh, eres tú.
Mierda y aún falta una voz
—Acá, vengan.— de reojo viste a Sanzu con el cabello suelto, este apuntando a otro espacio con agua temperada justo a un lado de ustedes.
Ah y cabe recalcar que estaban hasta sin toallas. Bueno, las tenían en la cabeza o en la mano, prácticamente era lo mismo. Quedaste tendida en la orilla, derrotada.
Lo peor para ti era que sus trajes de baño no eran infantiles, incluso estabas segura se asomaba la marca CK en el de Hanma. Claro el rico humillando al pobre
—Me quiero morir, me quiero morir, alguien que me mate, ahóguenme.—mascullaste en voz baja, para ti misma.
¿Por qué conté ocho cuadritos?, eso es imposible... o no... puta madre.
Están como para lavar la ropa en su abdomen, perdona mamá pero así si que lavo.
Antes de que toda vayan donde Sanzu, Hanma se arrodilló frente a ti para susurrarte en voz baja.
—¿Me das una?.— apuntó a la mochila o más bien su contenido. En vez de hablarle le alzaste el pulgar, ya te importaba una mierda el tequila.— Gracias dulzura.— y la caga más, la re cago. Tras decir eso a propósito para molestar a tus amigos, tomó la botella para luego ponerse de pie e ir hasta donde los demás, metiéndose al agua.
—_______ derrotada, ________ no quiere salir más del agua.— seguiste susurrando contra ti misma, por suerte dándole la espalda a los demás.
Hoy sería buen momento para saber teletransportarme.
Diste un hondo suspiro y te diste la vuelta sentandote correctamente, frente a tus amigos. Las miradas cargadas en seriedad no se esperaron venir, varios pares de ojos fijos en ti.
Cierto que nunca hablamos de lo qué pasó en el bar hace unos días... me había salvado hasta que aparecieron estos hijos de perra.
Mentira amigos, me caen bien.
La tensión era notoria, y agregando que tus amigos estaban casi sin nada encima, te sentiste en una película.
De contenido algo raro, a decir verdad.
Recapitulemos... tú saliendo de noche sola al bar, parte uno. Tú siendo vista toda manchada con lápiz labial, y tus nuevos amigos con rastros de ese labial por toda la cara, parte dos. Tú en el bar, te comiste con sal y pimienta a Wakasa, parte tres. Oh, y no olvidemos cuando Akashi se fue de bocón y te hablo en presencia de ellos.
OH, Y VERDAD, que te vieron con su chaqueta...
OH NO, CIERTO QUE SE LO DIJISTE DIRECTAMENTE QUE hicieron lo que hacen papá y mamá cuando se quieren mucho CON EL CASI TREINTON.
Varias cosas se te habían olvidado a decir verdad.
Y a los demás también, hasta ahora, hace un segundo.
Mamá, perdón.
Pero me enseñaste que nunca me rinda y luche con todo... por eso fue qué pasó lo qué pasó con Imaushi, te juro.
No me rendí.
—...— desconectaste tu cerebro cuando alguien tosió falsamente.
Ya, si me dicen algo da igual, les digo que no les importa lo que haga y deje de hacer, total es mi vida.
Púdranse, pájaros.
Digo, pajeros.
—________, tú...
—Carajo si, digamos que si me precipité a decir verdad y la cague UN POCO, solo un poco.— ¿PERO QUE TE PASA?.— Aunque... Aunque...
Ustedes me botaron de la moto así que no tienen derecho a nada
—Aunque me caen re bien esos de allá, lo admito, lo confieso.— ni dejaste hablar a los demás, simplemente confesaste todo por ti misma.
De todo me podré disculpar, de tomar mucho, ser algo impulsiva, si... PERO lo único que no me disculparía, fue de ir por segunda vez al baño del bar, joder que deleite.
Se cenó bien
—_______.—
—¡¿AH?!.— carraspeaste, te enfocaste en quienes te seguían mirando ahora cada vez más fijo, queriendo atravesarte con una lanza tal vez.
—Está bien, creo que no podemos prohibirte nada.—Draken rascó su ceja con un poco de incomodidad.
—Aunque si preferiríamos que nos dejes acompañarte cuando salgas.— Mikey asentía mientras hablaba.
¿MIKEY MADURO?
—Y bueno, aunque no nos dejes creo que iríamos igual.— No lo hizo.
—Si, _______. Aguantaremos los celos si es necesario.— Hakkai te regalo una sonrisa. Que tiernos, me dio un subidón de azúcar.
Miraste a los demás, estos te devolvieron la mirada.
— ¿y ustedes no hablan?, díganme que haga lo que quiera pues.— incitaste a tus demás amigos a hablar. O más bien permitir que te juntes con la chusma.
—Yo no te prometo nada.—Kazutora hablo con total seriedad.
—Al menos trata de no verte tan feliz con ellos y estoy satisfecho.— Baji masculló a lo que se hacía un moño, dejando unos mechones delanteros sueltos contra su cara.
—Está bien que seas su amiga solo... No te confíes tanto de ellos.— a Inui se le vio algo perturbado, a pesar de la frialdad con la que dijo aquello.
—Me caen del orto, pero ve tú.—Smiley sonrió.
—Haz lo que quieras, ______.—Mitsuya soltó aquello antes de cerrar sus ojos y relajarse contra el agua.
Le importo una pija(?
—Solo espero que sean sólo tus amigos.— a Chifuyu le entró un escalofrío al decir eso.
—Sin comentarios.— Angry se rehusó a decir su opinión.
—Está bien que tengas amigos _______.—Takemichi trato de esbozar una sonrisita, al estar tan nervioso fallo. Te relajaste contra el agua, menos mal no habían sacado "ese" tema.
Ya que todo salió bien, que vengan a unirse.
Broma... Me desmayaría.
—¡Hey!, Mikey.—La voz arrogante de Hanma llegó a tus oídos, casi te desmayas. Todos tus amigos giraron su cabeza en su dirección, no disminuyendo su expresión de rabia.
Mierda, nunca había escuchado que su nombre salga tan lindo de alguien.
Que voz tan BUENA.
—¿Como dijiste, Hanma?.—te hiciste la sorda y acercaste un poco tu oído a esa dirección.
—Mikey.—repitió arqueando una ceja en señal de confusión.
—uf...—hiciste un sonido con tu boca a lo que cerrabas los ojos.—tsk, música para mis oídos.
Un pellizcon en tu estomago te hizo quejarte, viste a Kazutora con ira.
—Mikey, no puedo creerlo.—Izana intervino en la conversación, se apoyo en la orilla y pudiste ver como apoyaba su antebrazo en el piso de madera.— ¿Tienes un patito?.
—Tiinis in pititi.—Mikey se burló de él, imitándole con una voz boba.— Si, pedazo de gil. Me lo compro tu mamá.
—Uuuuuh.— le hicieron burla a Izana tus amigos al unísono. Ya viniste llegar la discusión.
—Ja, lo dudo mucho, ella se encuentra donde está tu hermano.— A Izana no le afecto para nada su burla.
PERO QUEEEEEE PASÓ AQUÍ
—¿Que dijiste?.— Mikey hizo ademán de levantarse pero Draken lo paró colocando su brazo frente a él.— puf, sigue ladrando, perra.
—Uuuuuuh.—Miraste mal a Kazutora, Chifuyu, Baji y Smiley por hacerle coro e incentivar la violencia.
Tus ojos no sabían que ver; a Mikey apretando los dientes, aguantando de pararse e ir a golpear a Izana, a Izana que tenía una sonrisa burlona en su rostro o a los hermanos Haitani que te estaban casi llamando con sus ojos a que vayas con ellos.
Espera... ¿me están mirando?.
Disimuladamente, pusiste tu brazo sobre los hombros de Kazutora, tu amigo pensó que le ibas a abrazar pero en cambio lo empujaste hacia adelante para ver mejor a los dos hermanos.
Ran levantó su mano que sostenía tu botella de tequila, no sabías si agradeciéndote o invitando a ir para que la compartan.
No puedo no puedo no puedo no puedo no puedo
—Hey, casi me sacas el cuello.—soltaste a Kazutora.— no te dije que me sueltes, abrázame.
—Decídete.—le exclamaste mirándole arrugando tu entrecejo. Kazutora desvió su mirada de ti y pudiste sentir como se comunicó con Mikey, en únicamente miradas.
—OH, ________ AMIGA DEL ALMA.—Tus cejas casi se juntaron cuando Kazutora te tiro hasta el abrazándote y gritó lo de antes, esto llamó la atención de tus amigos que estaban a un lado más lejos.— Te quiero tanto TANTO yo también.
Y yo cuando le dije que lo quería?
—¿Que estás haciendo?.—tus manos se posicionaron en su espalda, perfectamente pudiste ver como Hanma e Izana les veían a ambos en una mueca graciosa y como los hermanos Haitani comenzaban a reírse.
—Le estoy dando cariño a mi ALMA GEMELA.—gritó esto último a lo que afianzaba su agarre en tus hombros.
—________, SI TE AMAMOS MUCHO.—Mikey se tiro de donde estaba hasta ti, te abrazo de igual forma que Kazutora, pasando un brazo por el frente de tu cuello y uno detrás, prácticamente abrazándote de costado.
—No creo que funcione su plan a decir verdad.—admitiste en un murmullo para que ambos puedan escuchar. Le diste unas palmaditas a la espalda de Kazutora y con tu otra mano acariciaste el cabello de Mikey.— Si, si todo muy lindo, ahora suéltenme.
—Awww yo igual quiero.— Smiley también se acercó entre risas a abrazarte.—pero háganme un espacio, egoístas.— al final se rehusó y simplemente te abrazo desde la espalda.
—Pero... oigan idiotas, ellos no son celosos como ustedes.—ya te estabas ahogando con tantos abrazos.— ya suéltenme que me voy a desmayar.
Mikey y Kazutora se separaron de ti pero Smiley siguió apegado como garrapata con hambre. Llevaste tus manos hacia atrás para hacerle cosquillas y que te suelte de una vez.
—JAJAJAJAJAJA, ahí no ahí no.—de un tirón Angry separo a su hermano de ti. Moviste tus hombros con incomodidad, esos te habían dado un abrazo del oso. Luego del espectáculo te apegaste nuevamente a la orilla pegando tu espalda a esta.
—Oye, _______.—Hanma te llamo desde lejos, esta vez puso su expresión más burlona posible y apoyo sus dos codos en la orilla, mirándote fijamente.
—No me jodas ahora, Hanma.— diste un gemido derrotado, siempre cuando ponía esa cara era porque iba a bromear con algo.
—Akashi me pregunto por ti.— ah
—¿Quien era ese?.—fuiste casi nadando al extremo justo frente a Hanma, les separaban algunos metros.
Que mentirosa que soy, Akashi era el otro vejestorio con vibras de dinero que es amigo de Imaushi.
—Pero si te acuerdas, no te hagas la loca.— Hanma sonrió al ver tu expresión tan fingida de confusión.— No se si Imaushi quería saber algo de ti o el pero me preguntaron algunas cositas de ti.
[Verguenza activada] [paranoia activada]
—Jejeje.—diste una risa nerviosa, incluso llevaste tus uñas a tu boca.— ¿Que cosas?.
—Ven aquí y te cuento.— PERO NO ME LO CUENTES ENTONCES.
—Sabía que era sólo para joder.—te ibas a girar para volver a tu lugar pero este volvió a interrumpir.
—¡Espera!, no es broma, en serio que hablamos de ti.— me tiritó el alma.
—Lo hablamos por WhatsApp entonces, ahora no puedo ir para allá.—te giraste y volviste a tu lugar. No se te paso desapercibido como Takemichi celebraba que no le hiciste caso y a Baji preguntando porque tenías su número.
—¡_______, te conviene!.—Izana gritó esta vez, esta demás decir que si llamo tu atención.
Tentador... esa cosa era tentadora, saben como persuadirme.
—¿No vas a ir?.— Kazutora perro déjame.— se que eres curiosa.
—Cállate.—estabas irritada, demasiado. Querías saber pero no ibas a dejar a tus amigos solos, aunque... NO, no podías dejarlos.
Chifuyu al poco rato puso música, en tono bajo claramente.
Lo que no te esperabas era que tus amigos de al lado se pongan a cantar. Eso hizo que toda la ToMan les miren de mala gana. Tu de los nervios ya estabas en la última botella de tequila, no habías dejado de beber durante todo este tiempo.
—Cantan como el orto.—Baji gruño lo suficientemente alto para que los demás escuchen. Ran y Rindo cantaron más fuerte.
—Que les gusta llamar la atención.— se quejó Mitsuya en un gruñido ronco, este estaba demasiado irritado pero lo trataba de disimular lo más posible. Takemichi por otro lado estaba todo metido bajo el agua evitando el drama.
Te enfocaste en el humito que salía de las aguas, y te metiste hasta el cuello bajo esta. Te veías muy relajada pero estabas re contra nerviosa, en tu cabeza pasaba el escenario de qué intenten irse antes que tus nuevos amigos y te entró una vergüenza inmensa. Una cosa era que te vean en bikini tus amigos de años y otra que te vean los nuevos que conociste en una fiesta hace poco.
No habías traído alcohol suficiente como para atreverte a levantarte e irte, aunque si se te ocurrió preguntarle a Kazutora si tenía algún... cigarrillo.
Ya luego con lo qué pasó en tu experiencia anterior, te negaste de inmediato.
Cinco más cinco son diez, cuatro más cuatro son ocho, dos más dos son cuatro...
—¿Por qué está tan callada?.—Angry pregunto a su hermano. Él te había estado mirando durante todo este tiempo mientras estabas "relajada" contra el agua.
—Debe estar teniendo un debate mental o algo así.— respondió Smiley.
—Ya se agotó su tequila, ¿se lo tomó todo?.—Inui le pregunto a Mitsuya.
—Si, bueno casi.— el de pelo lila respondió de inmediato.
Espero se vayan ellos antes que nosotros, voy a ponerme a rezar para que suceda.
—¿Vamos a jugar al ping pong que está afuera?.— habló Chifuyu.
La re concha que me parió.
—Oh si, ya más a la noche volvemos a bañarnos, total nos hospedamos en el hotel de al lado.— se me había olvidado ese detalle, gracias por recordármelo Draken de mierda.
—Si vamos, ya se me están arrugando los deditos.—Mikey se puso de pie rápidamente, movió su cabello con sus manos para tratar de no ir goteando mientras caminaba.
Tal vez si no me muevo no sepan que sigo aquí
—¿Vienes _______?.—Kazutora tocó tu hombro, se quedó mirando por un segundo tu tatuaje.
Que es peor, salir y que me vean en bikini o quedarme y arriesgarme a que venga el otro grupito.
Mierda tampoco es como si fuese un castigo peeeero, no estoy tan atrevida como de costumbre y me pondré nerviosa.
Además, estos sí me ven con ellos tan juntitos se van a enojar.
—Este... quiero ir pero.—Miraste a Kazutora y él te devolvió la mirada, alzando las cejas atento por lo que dirás.— me va a dar frío.
Buena esa _______, funciono tu neurona.
—¿Tienes frío?.—Mitsuya también se había puesto de pie y acercado a ustedes dos. Kazutora se levantó de su lugar y tomó su cabello con su mano, imitando un moño.
No
—Sip, si me levanto ahora me voy a re cagar de frío.— si hablo así puede que no se noten mis nervios, muy bien.
—A puf, pero eso se resuelve rápido.—Mikey se aproximó rápidamente a las toallas y le tiro una a Mitsuya.
Kazutora siguió a un lado de ti de pie, dándole la espalda a tu grupo nuevo de amigos que miraban con diversión como ya se iban uno por uno y prácticamente hacían lo posible para llevarte con ellos.
Mitsuya te miro desde arriba para que te coloques de pie, al levantarte estiró la toalla y te envolvió para que la coloques bien. Kazutora espero pacientemente a tu lado y ya cuando estuviste cubierta salió del agua.
—¡Buuuu!.—Hanma abucheó al ver cómo Kazutora salió de tu lado únicamente cuando te pusiste toalla.— le quitan la diversión a todo.
—Muérete.— Smiley le sacó su dedo de en medio mientras se secaba los brazos con su toalla.
Saliste del agua y te entro un mareo breve, al parecer ahora que estabas menos nerviosa si que sentiste el tequila en tu organismo.
—Te apuesto a que te gano una partida.—Kazutora envolvió su brazo en tus hombros. Los demás caminaban a un lado o detrás de ustedes.
—Soy pésima jugando al ping pong.— admitiste. Prácticamente soy mala jugando a todo, mierda.
—¿No lo intentaras al menos?.— a tu otro costado apareció Hakkai.
—¿Me están retando?.—miraste al más alto con diversión. Hakkai sonrió levemente y miró al frente.
—Apostemos.—Kazutora volvió a hablar.— yo digo que al menos no haces un punto, tú apuesta a que si puedes hacer uno.
—¿Quieres apostar?.—indagaste pensando en la propuesta, según tú eras capaz de hacer un solo punto al menos.
—Depende, ¿que ganó yo?.— Pregunto Kazutora nuevamente, su sonrisa ahora mismo más amplia que de costumbre.
—¿Que quieres ganar?.— volviste a preguntar, el hizo una mueca moviendo ligeramente la cabeza; pensando.
—¿Que quieres perder?.—soltó observando de reojo tu reacción.
—No seas cabron y deja de responderme con preguntas.—le dejaste una cachetada suave en su mejilla, Kazutora comenzó a reírse.
Les interrumpieron el rostro de Smiley, que se puso en medio de ambos. Este con cada brazo sobre el hombro de ti y de Kazutora.
—Yo igual quiero apostar.—Smiley se giró hasta ti mientras caminaban, este te sonrió.
—Ya a ver, ¿qué quieres apostar tu Smiley?.—Le miraste de reojo.
—Si haces un punto, seré tu esclavo por una semana.— Smiley sonrió mostrando sus dientes. Era buena idea pero...
—Un mes.— hagamos esto más intenso. Smiley se lo pensó por bastante tiempo, al llevar al salón con la mesa de ping pong les soltó y procesó su contraoferta.
—Dos semanas.
—Tres semanas.— finalizaste. Smiley asintió con la cabeza, de todas formas algo desanimado.—Esooo, haré un punto.
Si no hago un punto entonces yo seré su esclava, miedo...
—Yo dije que igual quería apostar.—Kazutora alego viéndoles a ambos.
Los otros ya estaban pidiendo paletas y pelotas para comenzar a jugar, ustedes se enfocaron en sus apuestas a un costado.
—¿Que vas apostar tu?.—Smiley giró su cabeza en su dirección. Kazutora quedó pensando, una mano bajo su barbilla. Al verle el pelo húmedo te entró frío, si tuvieras una toalla adicional se la hubieses pasado para que se seque.
—Si ________ no hace un punto... mhmm...—Kazutora pensó por bastante rato, hasta Smiley le apuró unas cuantas veces.— Les dirás a esos idiotas que son tus "nuevos amigos" que soy tu novio.
Por las bragas de mi abuela... TENGO QUE GANAR.
—Lo que tienes de burlón lo tienes de malvado.—le diste un empujón cuando pasaste por su lado para ir a la mesa de ping pong.— Si yo gano, te haces un tatuaje de lo que yo diga.
—Bueno.— Kazutora con felicidad le quito una paleta que tenía Mitsuya en su mano, preparándose para jugar.
Que idiota lo que dije, si a este no le dan miedo los tatuajes.
—¿Puedo cambiar lo que dije?.— Kazutora se negó.— Pero...
—Shhh, Smiley yo empiezo.— el mencionado le tiro una pelota y Kazutora la tiro contra la mesa un par de veces. Tras Takemichi darte una paleta, te pusiste al otro extremo de la mesa.
Debo ganar o es mi fin.
Digo, no es como si decir que era mi novio era algo malo en sí, pero esos chismosos correrán la voz y no, me rehúso.
—¿Estas lista?.—Kazutora ubico la pelota frente a su paleta, ya listo.
—No...— Te enfocaste en como levantó la pelotita y la golpeó, a duras penas estiraste tu mano para que dé con tu paleta.
Al menos no toco la malla
Kazutora de nuevo la golpeó a tu zona y con temor la regresaste de un leve golpe.
—Pero vamos, ______ no te acobardes.—Inui te hizo barra a un costado.— ¡golpea con decisión!.
— ¡Se salvaje!.— gruñó Mikey, también apoyándote. Tomaste sus palabras y golpeaste la pelota con más fuerza, esta salió volando por el costado de Kazutora.— Tampoco era ser tan salvaje.
—Punto para mi.—Kazutora estaba terriblemente entretenido, parecía un simple juego para el.
—Maldito.— te quejaste contigo misma. Volvieron a jugar y golpeaste mal la pelota, la tiraste a un costado.—NOOOOO.
—¡BIEN AHÍ ________!.—Kazutora celebro moviendo el puño con desdén.— ¡Sigue así _______!
Este idiota no me puede derrotar, me niego totalmente.
—VOY A HACER UN PUNTO.— te diste aliento tu misma, ahora todos tus amigos estaban pendientes de su partida, viéndoles en los costados.
VAMOS ________, TÚ PUEDES REINA.
—Bueno al menos... perdiste con honor.—Draken acarició la cima de tu cabeza, dándote apoyo. Hace ya media hora que estabas sentada en el piso, con una camiseta seca de Hakkai, y tu rostro enterrado en tus manos, lamentándote ya que perdiste.
Perdiste en la apuesta de Kazutora y en la de Smiley. No pudiste siquiera hacer un punto.
—Sabía que era inútil pero pensaba no tanto.—te quejaste en voz baja. Draken te dio apoyo moral, y caricias como un perrito.— ¿Para que seré buena?.
—Para beber.—respondió automáticamente Draken. Alzaste tu rostro para mirarle.— también eres buena amiga, y... cocinas bien... a veces.
Entrecerraste tus ojos hasta el, Draken al ver como le veías fijamente a los ojos parpadeo un par de veces y desvió su mirada hasta el piso.
—También haces buenos masajes, hazme uno.—Smiley apareció frente a ti y se sentó entre tus piernas extendidas.— desde ahora me harás caso, leru leru.
Su burla te hizo enojar, pero aún así tenías que hacerlo en honor a tu orgullo. Habías perdido limpiamente así que no había opción.
Smiley se había puesto ropa pero seguía sin camiseta, al parecer lo evitó ya que estaba seguro los demás podrían tirarlo otra vez al agua en un descuido. Apoyo su nuca en tu regazo y llevaste tus manos a sus hombros para masajearle.
—Jajajajaja, pero al menos cambia la cara.—La burla de Draken te hizo pegarle en la nuca con la palma, el alto se quejó y para no ser golpeado nuevamente se paró y fue con los demás.
—Me pondré una meta.—Smiley te hablo mientras masajeabas sus hombros.— te enseñaré a jugar bien así cuando tengamos otra partida al menos puedas hacer un punto.
—Que considerado eres.—Miraste como Mitsuya le estaba ganando a Hakkai y como Angry aplaudía cuando este metía un punto.— pero ya no quiero saber más del Ping pong, lo odio.
—Que rápido te desilusionas, eso no es de Rockstars.— soltaste una carcajada a lo que dijo.
—Oigan ustedes dos.— levantaste tu mirada a Baji.— Iremos a darnos un último chapuzón, ¿van?.
—Les acompañó pero no me meteré.—Miraste como Smiley se levantaba de un salto, tras estirarse comenzó a ir rápidamente en dirección a las aguas termales.— este cree que vamos a una piscina...
—Si.—Inui ya tenía una toalla en su hombro y el traje de baño.
—Apúrense antes de que nos echen.—Mikey los paso volando, Takemichi fue corriendo detrás de él, también huyendo.
—¿Que les paso?.—Al preguntar eso apareció Draken también corriendo en dirección a las aguas.
—MIKEY ROMPIÓ UNA VENTANA.—Draken gritó eso a lo que se alejaba con grandes zancadas. En un dos por tres todos huyeron de la habitación de juegos antes de que alguien se diera cuenta.
—Espérenme... mierda, corren como el rayo mcqueen.— todos ya se habían metido al agua en cambio tu trataste de recuperar el aire perdido.— ¿que tienen en los pies?.
He pasado mucho sin beber, se me bajo la presión.
—¿Acá habrá un bar o algo así?.— te sentaste en la orilla y subiste la camiseta de Hakkai para meter sólo tus pies.
—No.—respondieron todos a la vez.
Que conveniente.
—¿_______?, nuevamente el destino nos quiere juntos.—Enderezaste tu espalda de inmediato al escuchar la voz de Rindo.
—Nuestra amiguita volvió.— Ran te hizo sentarte más derecha. Cuando los hermanos se pusieron a cada lado tuyo, si, metiendo sus pies en el agua, viste todo rojo.
—Van a ensuciar el agua.—Chifuyu les miro feo a ambos.
—Relájense, parecen perros rabiosos.—Rindo observó a cada uno de tus amigos y sus muecas. El giró su rostro, mirándote fijamente a los ojos.— ¿Como estás?.
—Bien.— lo dije rápido, ¿porque lo dije rápido?.— ¿y ustedes?
—Ahora bien.—Ran se inclinó hacia atrás apoyando ambas manos contra el piso.— ¿Quieres...
—Mi amor.— necesito un whiskey o alguna mierda así de fuerte, gracias.— Dile a estos que no se sienten en mi lugar, ¿si?.— Kazutora se había salido del agua únicamente para ponerse detrás de ti, de pie ahora les miraba a los tres desde arriba.— O no, quédense ahí da igual.— se sentó en el piso y pasó cada pie por tus costados, Ran y Rindo se alejaron un poco al sentir lo que quería hacer.
Kazutora tras estar pegadito a tu espalda te abrazo por el cuello uniendo sus manos.
—¿Ya les contaste la buena noticia?.—inquirió en un alegre murmullo. Ran y Rindo le miraron sin entender a qué se refería, aún algo sorprendidos de que dejes abrazarte así.— Ahora somos novios.
—¿Tu y _______?.— Ran no trató de disimular su sorpresa.
—Si, de eso hablo.— Confirmo Kazutora.
—No te creo nada a decir verdad.—Rindo sonrió luego de eso. Kazutora trato de no enojarse, trato con todas sus fuerzas.
Tus demás amigos de la ToMan aguantaron las risas. No les gustaba que Kazutora se pegue tal atrevimiento pero era eso o que los Haitani sigan revoloteando en tu alrededor.
—¿Quieres que lo demuestre?.
—Kazutora ahora no.— te quejaste queriendo meter tu cabeza al agua. Lo peor de todo es que hasta había mojado la espalda de tu camiseta, ahora estabas helada.
Pediste ayuda con tus ojos, mirando a los demás. Todos o desviaron su mirada de ti o simplemente te hicieron una seña de disculpa. Chifuyu y Takemichi te hicieron un corazón con sus manos, dándote "apoyo".
—Es que ________ es tímida, no creo que quiera.—Kazutora te movió desde tu cuello haciendo que le mires inclinando tu cabeza, ahora le mirabas desde bajo su rostro.
Ran y Rindo a la vez le dijeron que si eran novios no habría problema. Ahí mismo quisiste sacarte los ojos y comértelos. Kazutora dejó un besito en tu boca muy breve, de fondo escuchaste la risa de Smiley.
—Oh vamos, cualquiera le puede dar un beso así.—Ran se burló Kazutora.— sino pregúntamelo a mi o a
—BUENO, ¿QUIEN TIENE HAMBRE?.—quitaste de un empujón a Kazutora que estaba detrás y a Ran le diste un palmetazo disimulado en la nuca.—¿Saben quien tiene hambre?, yo no, yo tengo sed, permiso.
Rápidamente saliste corriendo de allí, no disimulaste tu desesperación por huir. Llegaste a la habitación donde dejaste ropa seca, te vestiste rápidamente y agarraste la mochila de antes que no sabías si Mitsuya o Hakkai habías traído por ti hasta acá. Hiciste todo eso en extrema velocidad y saliste de ahí.
Chocaste fuertemente contra una pared, no, peor.
—No se porque pero este día a sido mi favorito.—Hanma agacho su rostro para mirarte.— ¿A donde tan apurada?.
—Tengo sed, quiero ir a comprar algo.—Agarraste con mayor firmeza la mochila y quisiste pasar por su lado, Hanma interpuso su brazo frente a ti, frenándote.
—Te acompaño, yo igual tengo sed.— se apresuró a decir sin dejarte pasar.
—Al menos podrías ponerte ropa, ¿no crees?.— al estar sin camiseta tus ojos se distraían y no podías fijarte en su cara o en la puerta de salida.
—Acompáñame.— entre risas sujeto tu muñeca y te guío con el.— ¿Sabes?, hoy planeaba irme temprano de aquí pero el verte me dio una idea. Deja me cambio y salimos por algunos tragos, conozco un bar por acá cerca que de seguro te gustará.
—Ah.—ambos entraron a un cuarto casi igual en el que tenías tu ropa y él te soltó para ir a su bolso.—¿Vinieron ustedes cinco solamente?.— asintió con la cabeza.— ¿Izana ya se fue?.— se encogió de hombros, totalmente despreocupado. Se colocó una playera y tomó su bolso, camino hasta ti para nuevamente tomar tu muñeca y llevarte con el.
Me siento un llavero.
—No creo que tus amigos se enojen si nos desaparecemos cinco minutos.— si que se enojaran pero bueno, saben que para beber no tengo problema con nada.
Hanma te guío por las calles, trataste de seguirle los largos pasos que daba y terminaste por ir trotando. Por un momento pensaste que el se parecía un poco a ti; era igual de alcoholico. Unas cuadras más y presenciaste un gran local con luces azules y verdes, letreros por doquier y una gran fila de personas. Hanma fue directamente al costado y tras fijarse que nadie le veía se agachó un poco y entrelazó sus manos.
—¿Qué?.— el te miro y tu le devolviste la mirada.
—Te subo, vamos anda.—miraste hacia arriba, la ventana de al parecer el baño estaba abierta.
—¿Me estas jodiendo que entraremos de forma ilegal?.— Hanma asintió a tu pregunta.— ah, esta bien.— pusiste tu pie sobre sus manos y él te impulsó hacia arriba. Al estar a poca distancia se te fue fácil meterte por la ventana y caer de pie. Hanma subió de un salto y tambien entró fácilmente, al salir del cubículo estaba realmente vacío, ninguna persona había presenciado su intrusión.
—Listo, sígueme.— ya voy alcohol, espérame un poco más.— Aquí te sirven los mejores tragos, ya verás.
Te deleitaste con el ambiente del lugar, era diferente a los bares que frecuentabas, este parecía más... exclusivo. Hanma los guío hasta una gran barra de extremo a extremo, el Barman estaba hasta con uniforme, te sentiste importante por un segundo. Desde ese momento ambos empezaron a beber a la vez, probaron varios tragos combinados y mezclaban algunos solo porque si.
Por suerte, habías enviado tu ubicación a tus amigos para que te encuentren en caso de cualquier problema.
Un increíble bullicio acompañado de una luz intensa en tus ojos te hizo abrir los ojos poco a poco. En lo primero que te fijaste fue en el suero que te era administrado por vía intravenosa.
Tus ojos aún se encontraban terriblemente pesados así que con todas tus fuerzas los mantuviste lo más abiertos posible. En la puerta de entrada estaba un doctor hablando con varias personas a la vez, hasta ese momento no sabías qué estabas en un hospital.
Luego de ver aquella escena te quedaste dormida sin pensarlo.
—Hasta que al fin despiertas.—Confundida, observaste a Chifuyu, este solo a unos centímetros de tu rostro.— pensé que te habías muerto.
Y por qué no pasó?
—Ya era hora, casi me causas un paro cardíaco ________.— Hakkai estaba frente a ti demasiado pálido.
—¿Q-ue?.—te extrañaste lo raro que se sintió hablar. No dijiste nada cuando Smiley se tiro a abrazarte por el cuello con total tranquilidad.
—Cuidado.—Mitsuya lo separó de ti al verte tan quieta.— recién acaba de despertar, no hay que moverla tan brusco.
—Miren la cara de tonta que pone.—Mikey te observo con total decepción en una esquina de la habitación.— Te dio un coma etílico por descuidada.
Ah con que fue eso
—Entiendo...—susurraste bajito.
—Que rabia me da.—Angry hablo al aire un poco más lejos de ti.
—Mejor ni te contamos lo que tuvimos que hacer cuando te desmayaste.—Draken realizo una mueca.— nos diste un gran susto.
—Está... bien pero.—tragaste saliva algo forzosamente.— ¿por qué Take tiene la cara raspada?.
Tu amigo estaba en una sillita a tu lado con un hielo en su mejilla y el mentón raspado, una expresión de dolor en su cara.
—Ah eso, nos pusimos algo nerviosos al no saber qué hacer así que... se cayó.— inui rascó su nuca, sonriendo de manera nerviosa a ti. Ese " se cayo" sonó algo improvisado.
— Ah...—le miraste con preocupación, Takemichi solo te sonrió en una línea recta, queriendo que no te preocupes por el.
—Uf al fin me deshice del viejo.—Kazutora entro a la habitación dando un portazo.— Me dio una charla de qué poco menos la amarre a la cama y la encierre por meses sin contacto a la cerveza.
El chico no se dio cuenta que estabas despierta y se sentó en la orilla de la cama.
—Te está escuchando.— Baji murmuró lo suficientemente alto. El de cabello largo estaba apoyado en la pared frente a ti con una expresión algo cansada.
—Ah, despertaste.—Ambos se miraron.— Le tuve que decir al doctorcito que era tu novio o no nos dejaba pasar.
—Mentira, eso fue lo primero que soltó sin que siquiera le pregunten.—Baji lo acuso de inmediato, Kazutora le dijo una grosería en voz baja.
—Que bien.— fue lo único que le respondiste.
—Ya no tomarás ninguna mierda rara, solo agua.— sentenció Mitsuya, tomó el lugar de papá controlador y sobreprotector en un segundo.— el doctor ya nos dio algunas recomendaciones para que no te dé de nuevo esta cosa.
—Ah ok.— nuevamente te entró el sueño y solo hablaste mediante pocas palabras.
—Y si te preguntas donde están tus otros amiguitos, los echamos.—Con lo que dijo Smiley te dieron ganas de reírte.— Ese cabrón de Hanma, que hijo de perra que es.
—Te dejó beber como si no le importara...— Angry frunció aún más su ceño.— Menos mal Draken lo echo de una patada.
—No era necesario contárselo.—Draken fijo su vista en Angry por un segundo, luego te observo con atención.— en unas cuantas horas más te deberían dar el alta, por suerte no paso a mayores, _________.
— Y agradece que no le contamos a tu madre.—Mitsuya te reclamo nuevamente.
—Bien, gracias... los loveo.— sonreíste a la palabra que inventaste.
Love... amor... ¿se entendió?, ¿no?.
Bueno
Hubo un silencio extenso luego de tu "broma".
En unas horas más luego de escuchar charlas y charlas de lo responsable que debes ser al tomar alcohol, te dieron el alta.
—Muévanme ustedes.—alzaste tus brazos al cielo.
—Puta madre, que nos das trabajo.— Draken y Hakkai te ayudaron a bajarte de la camilla y se acercó Mitsuya con la silla de ruedas. No era necesario pero ellos querían estar seguros de que no te cayeras.
— woah, nunca me había sentado en una de estas.—te acomodaste en la silla, como si fuese algo de última tecnología.
—Yo la quiero llevar.—Smiley le rogó a Mitsuya, este negándose.
—Yo, yo, yo la llevo.—Mikey también se lo pidió.
Mitsuya ni se molestó en responderles y simplemente comenzó a caminar fuera de la habitación. A regañantes Smiley y Mikey les siguieron de cerca, tu solo te dejaste llevar, relajándote del no caminar hasta la salida.
—LENTO.— tu cuerpo se movió bruscamente hacia atrás. Mikey ahora iba en control a tu silla y había comenzado a correr como demente por los pasillos.—¡Soy Flash!.
—Mierda Mikey me voy a marear.—con tu mano presionaste tu boca, todo tu estómago se revolvió.
—¡MIKEY SUÉLTALA!.
—NO CORRAS EN LOS PASILLOS.
—NO CORRAS TANTO QUE NO TE ALCANZO.— ese fue Smiley.
—MIKEY SE TE VA A CAER.
—¡YUJU!.— Mikey subió sus pies por unos segundos sobre unos fierritos traseros de la silla y ya luego siguió corriendo.
Los doctores que iban caminando por los pasillos se les quedaron mirando con la boca abierta, los pacientes para qué decir, algunos simplemente tapaban sus ojos para no querer ver cuando te des de lleno con el piso.
—MIKEY CUIDADO QUE AHI ESTÁ LA SALIDA.
—¿Ah?.— Mikey miró para atrás por ese grito y tu te giraste un poco para tironearlo de la chaqueta y que vea al frente.— Mierda.—Mikey paró de golpe cuando se fijó en la puerta en la que te ibas a estrellar, antes de que te caigas hacia delante alcanzo a agarrarte del brazo con fuerza.
Aún así todo tu cerebro se movió bruscamente y se te revolvió todo.
—Ay no, ¿estás bien pulguita?.—Mikey se agachó frente a ti, al verte más pálida de lo normal se asustó un poco.—¿quieres vomitar?.
— no, solo... me asuste.—llevaste tu palma a la frente, te apoyaste del todo al respaldo de la silla, tú corazón latiendo como un loco.
—¿Estás bien?.— todos los demás fueron llegando hasta ustedes, lo que más se escuchaba eran sus respiraciones agitadas de tanto correr. Asentiste con la cabeza.
—Mikey serás...— un golpe, dos, tres personas le pegaron a Mikey. El rubio no se quejó, sabía que lo merecía.
—Llévenme para mi casita porfa.— pediste aún echa polvo. Esta vez Mitsuya te llevo con total cuidado hasta fuera del hospital, al dejar la silla donde debían Takemichi y Chifuyu pusieron cada brazo sobre sus hombros para que camines mejor.
—Está vez te llevaré yo.—Take y Chifuyu te sentaron en la moto de Mitsuya.— e irás delante, no queremos que te caigas otra vez.
—Que considerados, aprendieron de sus errores muy bien.—Te apoyaste del manubrio y Mitsuya se sentó detrás.— tratare de no dormirme o desmayarme.
—Bien.— al todos comenzar a partir sus motos, Mitsuya salió primero en menor velocidad, vigilando que no te caigas esta vez.
Soy tu Emma, Draken
Ay
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top