| Jugando a la Botellita EXTRA 2 |

Escribí más de 11mil palabras así que gozenlo. Y comenten porque me gusta cagarme de la risa con sus comentarios <3


El hielo que te trajo Chifuyu lo presionaste contra tu mejilla, está te ardía como el infierno.

Por otro lado, estaban arrodillados Mikey y Mitsuya limpiando tus rodillas que tenían uno que otro raspón y algún pequeño rastro de sangre.

—Perdón.—Kazutora hizo una mueca desde lejos, estaba sentado en el sofá más alejado de ti para asegurarse de que no te le lanzaras encima a golpearlo.

—Lo sentimos, ________.—rascó su nuca Draken, totalmente avergonzado. Jajaja, no tiene pelo, digo ¿que?.

Te reíste de lo que pensaste al verle rascarse.

—Ya está... ¿Te duele algo más?.—Mitsuya te observo con preocupación aún arrodillado frente a ti.

Mikey en cambio seguía con su lengua fuera mientras estaba concentrado limpiando una de tus heridas, casi tratando de desaparecerla con "súper poderes".

—Si, el culo.—respondiste sincera. El pelo lila hizo una mueca, no podía ayudarte en eso. De pie Smiley contuvo una risa que iba a salir de su boca, tapandosela con una mano para no cagarla más.

—Lo lamentamos mucho, ________, debimos pensar mejor cómo traerte.—Inui estaba totalmente nervioso al verte lastimada, y más porque en parte era su culpa.

—Si, no debieron subirme a una moto, CON KAZUTORA CABE RECALCAR, DETRÁS de él mientras voy DURMIENDO.—Resaltabas ciertas palabras para darle gravedad al asunto. Después del largo camino, casi llegando a tu casa te caíste de la moto en la que ibas y Kazutora no alcanzo a sujetarte.

Y este es el resultado, además de sobria ibas toda raspada.

Por un momento estabas que le hablabas a Izana por si tenía alguna foto o video tuyo dándote el lote con tus nuevos amigos. Ya luego te arrepentiste, un poco.

Bueno, la verdad no te arrepentiste, solo que no tenías su número para pedírselo.

—Perdón.—Angry también se disculpó contigo, todas sus miradas de lastima te llegaron al corazón, menos mal tú pensabas con tu cerebro así que los enviaste directo a sus casas.

—Y no vuelvan, me enoje.—Toda la ToMan te miro desde el patio. Cerraste la puerta de la casa y fuiste a tu habitación para dormir.


Flashback

Momentos antes...

—¡Vayan con cuidado!.—Draken habló desde delante, girando un poco su cabeza para ver cómo iban los demás.

Todos iban despacio para vigilar que no te cayeras, bueno casi.

Cuando un vehículo les tocó la bocina, Smiley comenzó a gritarle que se la meta en el culo. Por otro lado, Chifuyu le hizo una grosería con sus brazos. Nadie pensaría que en la moto de Kazutora, ibas ya en el quinto sueño, totalmente inconsciente.

—¡SE ESTÁ MOVIENDO!.—Takemichi gritó al ver como moviste la cabeza hacia un lado. Kazutora se asustó un poco y giró su rostro hasta ti.— se va a caer, se va a caer...—este estaba notablemente nervioso, pálido y sudoroso.

—FALSA ALARMA.—Kazutora gritó siguiendo el camino.

—Creo que fue mala idea que Kazutora la lleve.—Inui le susurro a Mitsuya, este hizo una mueca. En verdad, a ninguno se le ocurrió que vaya con alguien más responsable, tal vez por lo tenso que estaba el asunto de ti y tus nuevos amigos.

Ya faltaba unas cuadras, tus amigos disminuyeron un poco más la velocidad pero en apenas un descuido, Kazutora pasó con su moto sobre algo que no debía y debió soltar tus manos por apenas un segundo para tomar el manubrio. Al volver a buscar tus manos se horrorizó al ver que no estaban donde las había dejado por un segundo.

—NOOOOOOO.—Un grito al unísono resonó por parte de todos los demás, Mikey y Draken iban en frente pero el primero no escuchó el escándalo y siguió andando despacito.

—PERO KAZUTORA, ¿¡QUE HICISTE!?.— Baji dejó su moto tirada al igual que los demás, para ir donde ti.

Cuando caíste habían demorado en procesar lo que había ocurrido, no pensando qué pasó lo que en ese momento se veía poco probable, aunque si que dos de ellos iban todo el camino rezando a que no te cayeras.

Habían parado al instante, todos corrieron hasta tu "yo" extendida en el suelo de costado. Pareciese como si no te habías pegado un porrazo hace unos segundos ya que estabas de costado con tus manos bajo tu mejilla, casi durmiendo tranquilamente. Pero toda llena de raspones, esa era la diferencia.

—Ah.—Chifuyu al acercarse y verte se desmayó del susto, cayendo en los brazos de un Takemichi realmente preocupado. Este último a pesar de todo el miedo que sintió se hizo el fuerte, armándose de valentía para llegar donde ti y ver si respirabas, colocando sus dedos bajo tu nariz.

—¿Está respirando, Takemichi?.—Inui preguntó asustado viéndote, el mencionado asintió tras dar un suspiro aliviado. Botó a Chifuyu al piso y se arrodilló frente a ti.

—¡MIKEY, REGRESA!.—Draken gritó al rubio que ya iba hartos metros más lejos. Mikey al escucharlo se giró y tras presenciar que todos veían un cuerpo en el piso, dio un fuerte grito chillón.

—Mierda, ¿Que hacemos?, ¿¡QUE HACEMOS!?.—Hakkai se desesperó, sus manos apretaban su cabeza totalmente asustado.

—Cálmense, está respirando, está bien.—Mitsuya murmuraba eso más para sí mismo que para los demás.

Ninguno atinó a nada al momento, cuando llego Mikey haciendo un escándalo fue cuando sus cerebros hicieron click.

—Hay que levantarla.—Angry apego su rodilla al piso y tras pasar un brazo bajo tus rodillas y otro en tu espalda, te levanto del suelo con cuidado. Mikey observó todo con la boca abierta de par en par.

—Pobrecita, casi la mato.—Kazutora al verte se desesperó un poco y comenzó a regañarse a si mismo.—otra vez lo mismo.

—Nos va a matar.—Draken sentenció asustado.

—Pero mierda, Angry tápala un poco.—Smiley se acercó para bajar tu vestido un poco, de paso tapando unos raspones en tus piernas.

—Sácate la chaqueta Kazutora.—Mikey le dio un fuerte empujón, el chico obedeció sin entender. El rubio tras quitarle la chaqueta la puso sobre ti, ya se estaba haciendo más helado y a Mikey le había dado frío verte con tan poca ropa. También no quería ver tus heridas, pero lo otro era lo principal.

Todos con muecas en sus caras, y para qué decir de Kazutora que se quería puro lanzar de un puente por ser indirectamente el culpable. Angry se enfocó únicamente en ti, cargándote hasta tu casa. Los demás llevaban las motos mientras ellos caminaban, Mitsuya llevo la suya y la de Angry, para no molestarle y que siga cargándote.

Oh, y Takemichi tuvo que llevar a Chifuyu desmayado en su espalda, el pobre chico iba a quejas con tal peso encima.

—Entremos por la ventana.—Baji miró al segundo piso.— Su mamá nos retará si la ve así....

—No podemos dejarla en la puerta, tocar el timbre y correr... como en las películas.—Smiley comentó, Hakkai le miro de mala manera.

—Despierta.— Mikey pateo a Chifuyu que estaba ahora descansando sobre el pasto.— ¡Despierta!.

—Con más delicadeza.—Baji sonrió y se agachó un poco hasta Chifuyu, este alzó la mano y le pegó una cachetada en la mejilla, por la fuerza es que el rubio comenzó a abrir los ojos.

—¿Ahora como subimos?.—Por otro lado Mitsuya trato de procesar un plan para llevarte a tu habitación, a todos sus cerebros les hizo un corto circuito y pensaron puras idioteces.

—Todo esto es una mala idea...—Kazutora lloriqueo, fingiendo estallar en llanto.

—A ver, subamos, nos quedamos con ella y cuando su mamá la llame le despertamos para que responda.—Smiley sonrió ampliamente con su plan.

—Que plan de mierda la verdad.—Inui susurro mirando con terror la puerta de entrada de la casa.— pero no se me ocurre nada más, me da miedo decirle a su mamá que se nos cayo su hija.

—Nos pegaría a todos, tengo pruebas y cero dudas.—Draken hablo, inconscientemente dándole un escalofrío al pensar como tú madre le golpearía y odiaría.

—Pero... ¿Su mami estará en casa?.—Mikey se preguntó en un murmullo, todos se pusieron a pensar mientras miraban la ventana de tu habitación.—Chifuyu, ahora que despertaste... Anda a tocar el timbre y te escondes.

—¿Ah?.—El rubio se paro de un salto del suelo y se acercó a Mikey.— ¿Por qué yo?, que lo haga Kazutora, el no la sostuvo bien.

—¿Ah?, si ________ se hubiese ido contigo, se hubiera caído apenas la hubieses subido a tu moto, idiota.—Kazutora se exaltó un poco, mirando con ira a Chifuyu.

—Es buena idea, si su mamá sale entonces sabremos que no debemos hacer ruido y entrar por la ventana.—Mitsuya agarro su mentón, procesándolo. A decir verdad, su lado lógico murió, estaba tan indeciso y preocupado que no ideó nada bueno como de costumbre.

—Shh, Shh.—Angry te movió suavemente de un lado a otro entre sus brazos, habías comenzado a removerte para despertar pero no era buena idea aún.—Shh, joder, díganme una canción de cuna para que no se despierte.— susurro a los demás.

—Estrellita donde estas, me pregunto quien serás, en el cielo y en el mar.—Mitsuya comenzó a cantarte en voz baja. Hubieses deseado estar despierta en esta instancia, te cantaba como si fueses sus hermanitas pequeñas.— Un diamante de verdad. Estrellita donde estas.... y no se que sigue.

—Que mamoncito.—Smiley se burló de Mitsuya, el pelo lila le fulminó con la mirada para que se calle.

—Ya, iré así que cállense.— Chifuyu se estiró en su lugar, preparándose para correr. Todos en susurros apoyaron a Chifuyu mientras caminaba paso a paso a la puerta de la casa, se escondieron los demás a un costado.

Chifuyu tocó el timbre dos veces y salió corriendo despavorido hacia ustedes, soltó unos chillidos en el camino.

—Shhh, CÁLLATE.—Mikey le gritó, Draken tapó su boca cuando la puerta de la casa se abrió y se asomó tu mamá.— Ahí está su mami, vamos a tener que escabullirnos.

—O esperamos a que salga... son las seis de la mañana así que ¿no debiese ir a trabajar?.— Inui preguntó.

—No se que podemos hacer...—Angry frunció aún más el ceño, sin tener ninguna idea en mente.

—Joder ya subamos, estando allá pensaremos en algo.— Baji comenzó a caminar hasta quedar bajo el árbol junto a tu ventana y comenzó a trepar como un mono.

—Conociendo a _______ y lo astuta que es para tomar sin que su mamá se dé cuenta... le debió haber dicho que estaría en casa de Yuzuha o Emma.—Mitsuya proceso las posibilidades, Draken le escucho con atención y asintió, coincidiendo en tu dedicación a beber.

—Ya joder, subamos.—Kazutora comenzó a hacer lo mismo de Baji, al estar sobre una gran rama miro hacia abajo.—Tirenmela.

—Oh ni creas, de nuevo se te puede caer.— Mikey le observo mal, reprochándole aún el accidente. Kazutora tras chasquear la lengua rodó los ojos y siguió a Baji, este último ya había abierto la ventana y entrado a tu habitación.

—¿Como la vamos a subir?.—Angry te observo aún entre sus brazos, durmiendo profundamente.

—¿Quien tiene más fuerza?.—Hakkai miro a los presentes, lamentablemente Baji ya había subido de los primeros, el tenía bastante fuerza.— Draken tú.

—¿Yo?.—Hakkai y los demás asintieron a Draken.—Bien, pero que alguien vaya abajo por si se cae o algo.

Angry y Takemichi ayudaron a que te acomodes contra la espalda de Draken.

—Podríamos amarrarla.—Chifuyu observo cómo hacías ademán de hacerte para atrás de vez en cuando.

—No tenemos nada para amarrarla...—Takemichi comenzó a desesperarse de nuevo.

—La conch... esto es muy difícil.—Smiley se quejó a viva voz. Todos se miraron entre sí, no tenían idea de cómo siquiera subir el árbol.

—Podría Takemichi subirse sobre Draken y yo sobre ellos dos.—Mikey pensó concentrado, sacando la punta de su lengua mientras miraba al cielo.—Luego me pasan a la borrachita y la subo hasta que Kazutora y Baji la agarren desde arriba.

—¿Y nos ahorramos la subida al árbol?.—Mikey asintió a la pregunta de Inui.

—Hey... psss, apúrense.—Baji les apuro mirándoles desde el segundo piso.

—Cállate perra, mira que llegaste y subiste, dejándonos solos.—Draken le reclamo, totalmente enrabiado.

—Cilliti pirri, bastardo pelón.—Baji salió de la ventana, más que seguro yendo a acostarse a tu cama. Kazutora se asomó para mirar que hacían los demás debajo.

—Bien, súbete Takemichi.—Draken apoyo sus manos a la pared de la casa, justo debajo de tu ventana. El rubio mencionado entre temblores se acercó a Draken y se subió sobre su espalda.

Chifuyu y Hakkai impulsaron desde los pies a Mikey para que se suba sobre Takemichi.

—¡Vamos Draken, tú puedes!.—Inui le apoyo, seguido por Smiley.

—Mides casi dos metros, es fácil para ti Draken.—Smiley ánimo a tu alto amigo mientras Hakkai observaba todo asustado. Mitsuya por otro lado estaba atento a que saliera como esperaban.

Cuando los tres se enderezaron como pudieron, ya teniendo poca distancia a la ventana Mikey hizo la señal para que te alcen.

Hakkai se acercó a Angry y te puso sobre sus hombros con ayuda de los demás. Era terriblemente difícil esa mierda que estaban haciendo, Takemichi estando a una altura prudente ayudó a que no te vayas de un costado y te caigas.

—¿De donde la tomó?.—Mikey entro en pánico al verte ya casi frente a él, durmiendo.

Te hubieses partido de la risa por cómo se esforzaban todos, hasta para alcanzarte sobre Hakkai Angry se había subido sobre Smiley para sujetarte. Era toda una escena.

Luego los gemelos decidieron cambiar de posición, Smiley se colocó sobre los hombros de Angry.

—¡AGARRALA!.—Smiley que estaba sobre Angry te agarro de las caderas y te alzó un poco para que Mikey te sujete bajo tus brazos.

—Puta madre, no tengo tanta fuerza para esto.—Mikey te sostuvo y Kazutora estiró las manos para que llegues hasta el, Baji igual se asomó para alcanzar a agarrarte.

Inui y Chifuyu estaban abajo, atentos por si te caías de repente y debían agarrarte.

Mikey comenzó a subirte con mucha fuerza, de tomar tus brazos ahora tenia sus manos en tu cintura, alzándote más aún. Kazutora y Baji se inclinaron más desde la ventana para sostenerte. Ninguno sabe cómo, pero estos últimos te alcanzaron y del brazo te tiraron para arriba, los tres cayendo al suelo de tu habitación por la fuerza que hicieron al tomarte.

En el primer piso, todos los demás se dejaron caer al suelo, sudando por todo lo que habían hecho, y más por lo concentrados y a la vez preocupados que estaban. Hakkai estaba sonrojado hasta las orejas ya que él era quien te había cargado y vio cómo Mikey te alzaba, sin querer había visto tus calzas bajo tu vestido. El peliazul no podía más de la vergüenza y lo poco buen amigo que fue, creyendo sin duda que vió tu ropa interior.

—Casi se me para el corazón.—Kazutora llevo su mano a su pecho, Baji comenzó a reírse suavemente por la baja de adrenalina. Tu entre ellos estabas de cara en el piso.

Cuando todos subieron a tu habitación con ayuda del árbol, regañaron a Baji y a Kazutora ya que seguían los tres en el piso, estos dos riéndose por el momento divertido que pasaron.

—Ya está amaneciendo, no puedo creer que nos tomo horas subirla hasta acá.—Susurro Mitsuya mientras te tapaba con tus mantas.

Todos tratando de hacer el menor ruido posible en la habitación para que nadie sospeche.

—Menos mal no se les cayó, ahí si que estábamos fritos.—Baji se tiro a la cama junto a ti, para recostarse y tratar de dormir.— Que comoda la cama... Me quedaré aquí.

—Ya párate, no seas intruso.—Angry le miro de mala forma como Baji se acurrucaba y trataba de quitarte las mantas para taparse el.

—Déjame, segundón.—Baji se burló de Angry riendo suavemente con sus ojos cerrados mientras se hacia el dormido. Se quejó cuando Smiley le tiro una almohada, defendiendo a su hermano.

—Voy a vigilar, si su madre sale entonces podremos despertarla y curar todos los raspones que se hizo.—Mitsuya abrió un poco la puerta y observo si había un movimiento extraño, tú mamá ya estaba en el primer piso preparándose para salir de casa así que no demoraría mucho.



FIN FLASHBACK







—Uuuuh, ¿Tanto se enojaron esos cabrones?.—Ran te miro entrecerrando los ojos hacia ti, mirando tus raspones.

—¿Quieres que vayamos por ellos o que?.—Rindo se acercó para inspeccionar tu rostro más de cerca.

—No sean tontos, me caí de la moto.—Soltaste una risa al ver como ambos se miraban entre sí.

—¿Te caíste o...—Rindo levantó tu cara desde tu mentón.— te botaron?

Bueeeeno, técnicamente no se como responder a eso.

—Difícil pregunta, pero diría que me caí.—admitiste asintiendo con la cabeza, Rindo y Ran se miraron no muy convencidos.

Está bien que Kazu sea algo agresivo peeeero tampoco tanto.

—Y... ¿Que te trae por acá?.— Ran se posicionó a un lado de Rindo, le miraste.

—Me cayeron bien así que vine a pedirles su número.—Les tendiste tu celular mientras ellos te observaban arqueando una ceja, una mueca sorprendida apareció en sus rostros.— oh y si preguntan porque tan directa, Sanzu me invito unas copas antes de venir aquí.

—Con razón.—Rindo se carcajeó al verte de tan buen humor a pesar de físicamente estar algo... mal.

—Yap, anoten anoten.—Ambos teclearon en tu móvil para agendar sus números y luego te lo pasaron, lo recibiste guardándolo en tu bolsillo trasero.

—En unos días más también nos juntaremos con los demás.—Rindo empujó sus lentes más cerca de él con su índice.— Nos caen del orto pero en las fiestas se pasa bien con ellos.

—Lamentablemente.—Ran se carcajeó.

—¿Por qué no vas?.— alo? Ganas de beber?

Mmmhm, no sé si debería.—A paso lento fuiste retrocediendo hasta la puerta de aquella bodega.— Tendré que pensarlo...

—Está bien, nos hablas para decir tu decisión.—Ran te saludo con un movimiento de mano, te despediste de igual forma mientras te dabas media vuelta e ibas directamente a la puerta.

—Puede que no te interese pero... será en un lugar importante e irán varias personas.—Escuchaste la voz de Rindo teñida con una pizca de arrogancia.— incluso se puede aparecer por ahí el tal Akashi.— tu siguiente paso se desequilibrio por unos segundos pero diste otros más.— y puede Imaushi, solo es un dato curioso, nada seguro....—paraste de andar, mirando a la puerta frente a ti.

A ver... respira _________, calmadita... normal, cool, todo bien, es una suposición, puede que ni esos dos hombres vayan, vaya hombres la puta madre es que no puedo.

Me envían el lugar por mensaje.—Abriste la puerta y antes de cerrarla asomaste tu cara para que te vean con atención los hermanos.— Digo, yo les hablo ahora, en un segundo, y me envían detalles y todo.

—Claro, adiós.— Rindo estaba sonriendo macabramente, se despidió de ti como un soldado con dos dedos sobre su frente. Asentiste un poco y cerraste la puerta con algo de fuerza.

Perdónenme amiguitos, Mikey, lo siento. Puede que te enojes pero tranqui chiqui, ultima vez que salgo con ellos, lo juro.
Kazutora me va a matar, ahora si que me botara de su moto a propósito de una patada.

¿Y porque estoy hablando sola?, puta madre estoy ansiosa, nerviosa, quiero vomitar.

A ver _______, debes armar un plan para verte mayor, ¿o no?, ¿les gustarán las más jóvenes?, puta madre ¿que estoy diciendo?, Dios perdón.

Dejaste de concentrarte en tu pensamiento cuando te golpeaste con un letrero. Soltaste un grito en voz baja y acariciaste tu frente, luego de mirar mal al letrero e insultarlo un poco te concentraste en fijarte por donde caminabas.













Mientras te hacías el delineado, un sonido excesivo sonó fuera de tu casa, te moviste inconscientemente y la línea llego hasta tu ceja.

—La re concha de mi mamá.—Te paraste golpeando tu escritorio con tus palmas, tras acercarte a la ventana pudiste ver a la Toman en tu patio con instrumentos y uniforme de Mariachis sobre su ropa normal. Les miraste con el entrecejo arrugado, formaste un "o" pequeña mientras ellos te veían con una sonrisa tensa, un poco incómoda.

Abriste la ventana y comenzaron a tocar los instrumentos, o intentarlo.

Draken y Mitsuya estaban con una guitarra, Angry y Smiley con una trompeta cada uno, Chifuyu ni idea que hacía con una vihuela, Takemichi estaba con un... ¿Triángulo?. Baji estaba con un puto violín, no sabiendo ni sostenerlo, Inui al menos si lo sostuvo de la manera correcta. Kazutora no tenía nada, al parecer solo cantaría al igual que Hakkai.

Oh y Mikey estaba con una flauta.

Una... flauta... bueno, al menos se ve  feliz.

—No me digan que robaron esas cosas.—Soltaste lo primero que pensaste al verles, el sonido tan rechinante e incomodo llego a tus oídos y prácticamente a toda la calle.

—PEEEERRRRDOOOOOOONAAAAANOOOOOOSSSSS.—Kazutora no canto, gritó. Los demás le siguieron haciendo un eco a la palabra. Sonaba algo como onaaaanos nanoss an...

—Mejor no hagamos el coro.—Mitsuya se negó a terminar de cantar. Todos coincidieron y siguieron "tocando" los instrumentos.

Les miraste atenta hasta que se dignen a terminar, aunque ya tu vecina de en frente había salido de su casa y te observaba más o menos con odio por el ruido molesto en tu patio.

—La puta que te hizo, violín de mierda.—Baji tomó el instrumento y lo estrelló contra el piso haciéndolo añicos.

— PERO BAJI.—Draken gritó completamente enojado, su mirada fue directamente a el de pelo castaño, este último no quitó su enfado visible en su cara.

—No se como se toca.—Admitió Baji viendo que destrozo el pobre violín.

—Equis.—Mikey dejo de observar su pataleta y puso su atención total en ti.—_________, perdónanos por no cuidarte y que te hayas caído de la moto.

—Te juramos no volver a hacerlo.—Chifuyu terminó por el. Ya te sentías muy culpable por sus caras arrepentidas, pero aprovechaste la oportunidad que el destino te dio.

—¿Si los perdono harían una cosa por mi?.—Te inclinaste un poco hacia delante, sacando tu cabeza de la casa.

—¡Claro que si!.—Kazutora gritó ahora alegre, que te hayas enojado con él era muy terrible para su pobre corazón. O al menos eso decía cundo peleaban.

—Son mis amigos así que no les ocultaré nada.— a excepción que me gustan tipos de más o menos treinta años *tose*.—  Uno de estos días saldré con unos nuevos amigos, no hagan el escándalo de la vez pasada y los perdono.

—Con "nuevos" amigos, te refieres a ESOS amigos ¿no?.—Baji te miro con las cejas alzadas, su pelo en una coleta alta te dejaba ver a la perfección cómo apretaba más de la cuenta sus dientes, algo enfadado.

—Mmmh si, algo así.— en verdad si.— Solo no jodan mi noche y están perdonados.

Cuando todos iban a hablar a la vez se adelantó Kazutora;

—¡Esta bien Estrella de mi cielo!, todo sea por obtener tu perdón.—Kazutora pego una rodilla al pasto y levantó sus brazos hacia ti, casi haciéndote una reverencia. ¿Y este que se fumo antes de venir...?

—Ajam...—Murmuraste no muy convencida.

—Pero dinos donde estarás al menos, ¿No crees?.—Draken se quitó la guitarra de encima y la apoyo en el piso.— Por si necesitas ayuda o algo, así sabremos a donde ir.

Como que quiero decirles pero no...

—Pero ni se aparezcan allá eh, se los advierto.—cambiaste tu expresión a una más seria y les apuntaste uno a uno.—Ahí si que me enojare con ustedes y no les hablo más.

Mentira, no podría dejar de hablarles [cry]

—Está bien, es un trato entonces.—Inui pareció satisfecho totalmente, a su lado Takemichi palmeó su espalda en señal de "se pudo".

—Genial, ahora váyanse que quiero dormir y no quiero que mis vecinos entren a mi casa a descuartizarme.—Luego de sonreírles brevemente cerraste la ventana y las cortinas. Gritos desde fuera se escucharon, todos despidiéndose a la vez.— Necesito una cerveza, ahora ya.





EL GRAN DÍA
Ta ta taaaannnnnnnnnn






—Oh pero que linda viniste, _______.—Sanzu alzó su palma y tu le chocaste los cinco, de inmediato él te agarró de la mano y se acercó lo suficiente para dejar un beso en tu mejilla.

—Holaaas, llegue prendida.—Alzaste tu mano y mostraste la botella de cerveza que habías comprado en el camino. Hanma, que estaba a un lado de Sanzu no pudo evitar comenzar a reírse.

—¿Que te paso...—Hanma levantó su dedo índice a tu rostro, justo bajo tu ojo derecho había una curita para cubrir un raspón de aquel accidente.— ahí?

—Me intentaron disparar.—bromeaste con toda la seriedad del mundo. Hanma no te creyó absolutamente nada así que te hizo seguir hablando.— aish nada, solo me caí de una moto.

—Aah.—Hanma volvió a meter su mano al bolsillo de su pantalón y tras echarte un breve vistazo de arriba a abajo se dio media vuelta para guiarte a su lugar "vip", si, los cabroncitos estos podían entrar a aquel lugar algo exclusivo.

Quizás a quien tuvieron que amenazar para dejarles subir al segundo piso...

Claramente llegaste de las últimas pero aún así no te quejaste, pudiste apreciar con totalidad a tus nuevos amigos sentados sobre los sofás de cuerina que se posicionaban en casi un cuadrado, en medio de estos había una gran mesa con alcohol.

Empezamos bien, si hay diez botellas ocho son mías.

—Háganme un ladito.—le diste un manotazo a la pierna de Ran y este cerró un poco sus piernas para que te sientes a su lado, le saludaste con una mini sonrisa y giraste tu rostro para saludar también a Izana.—Permiso.—estiraste tu brazo para alcanzar la botella que había tomado Izana.

—Pero si tienes una ahí.—observo a la botella de cerveza de tu otra mano.

—Está me la tomo después, es para no pararme a buscar otra.—Izana no pudo no negar ante tu respuesta, mirándote con reproche.

—¿Y tú no saludas?.—Rindo, que estaba frente a ti, te miro con intensidad, casi directamente a los ojos.

—Ouh, ¿No te salude?.—Bebiste un trago de una botella, Rindo negó con la cabeza.— Pues hola.

Este soltó una risa sarcástica, comenzó a reírse mostrando parte de sus dientes y se estiró para alcanzar una botella de alcohol para comenzar a beberla.

—A mi menos me saludaste, que maleducada.—Mientras tomabas tu botella moviste tus ojos hasta el sujeto que había hablado; Koko.

—Hola, cajero con patas.—Le saludaste cuando bajaste la botella de tus labios. El pelinegro en vez de enojarse sonrió a boca cerrada, desviando la mirada de ti.

—¿Que te paso en la cara?.—Izana paso la yema de sus dedos por sobre tu curita, no te molestaste en girar a verle simplemente seguiste mirando con atención las luces led que apuntaban para cualquier lado posible y como en el primer piso bailaban las personas.

—Me caí de una moto.—¿cuantas veces ya he respondido esa pregunta?.— ¿Me veo más ruda con esto en la cara?

—No.—Se metió a responder Hanma, que estaba en un sofá individual a un lado.— Si te lo quitas entonces si se vería más rudo, dirían al mirarte "Wow, se entró a puñetazos con otra persona, que ruda".

Claramente estaba de joda, era un tipo muy castroso cuando quería.

—Ah.—Tras dar otro trago y echarte en el sofá con la espalda apegada totalmente en el respaldo, llevaste tu mano para quitar el pequeño parche.— ¿Ya me veo más ruda?.

—Ugh, tienes feo mejor póntelo.—Koko observo fijamente tu raspón.

—Puf, Decídanse.—volviste a colocar tu curita en el lugar afectado.

—¿Juguemos a algo?.—Choji, quien no había hablado en todo el tiempo que estuvieron ahí, por fin abrió la boca.

—¿A qué?.— Ran habló interesado. Dejaste la botella que tomaste por completo en la mesa y seguiste con la otra.—Nada de cosas raras eh.

Define raro

—Aspirar y soplar, ¿les parece?.—El tipo venía ya preparado, saco un juego de cartas de su chaqueta.

Oh esperen, ¿eso significa que se quitará la mascarilla?

—¡SI!.—diste un grito ante tu pensamiento, ganándote miradas confusas de los demás.— digo... jajaja ¿Que es eso?.

—Hay que ir pasándonos la carta, a quien se le caiga debe hacer penitencia, reto o castigo, como quieran llamarle.—Choji se preparó para abrir la cajita de cartas y las separo sobre la mesa, tras tomar una la mostró al público. ¿Premio?

Digo no, NO, Mikey te juro que no soy tan fácil.

Diste un largo trago en tu botella de cerveza, Ran miro con atención como de un trago pasaste a dos, tres, cuatro, hasta terminar la botella en un segundo. La dejaste de un golpe en la mesa y sobaste tus palmas entre sí, preparándote para lo que sea que venga.

—¿Listos?.—Choji preguntó a los presentes, algunos asintieron y otros solo soltaron un sonido como asentimiento.—¿Lista?.— asentiste con la cabeza, preparada y no demostrando tu nerviosismo.

Choji se saco la mascarilla, SE SACO LA MASCARILLA, madre de Dios pellízquenme.

Puta madre ToMan NO, no fui yo quien pensó eso. Fue el diablo.

Choji estaba lindo, bueno, realmente estaba re bueno. Dejo la mascarilla a su costado y tras aclararse la garganta apegó las carta a su boca, por cierto, te llamo la atención la forma tan marcada de sus labios, los tenía más lindos que tú pensaste. Tras girarse un poco se la paso a Hanma, este se la paso a Koko y Koko se la paso a Rindo, aquí ya la carta se cayo al Rindo acercarse y ponerse a reír de lo concentrado que estaba el pelinegro.

Estos o son muy idiotas o simplemente no piensan que están literalmente dándose besos indirectos... aquel pensamiento recorrió tu cabeza, viéndoles entre divertida y entre nerviosa. Bueno, no era que te quejabas, a decir verdad esto hubiese sido muy improbable entre tus amigos de la ToMan.

Por la presión de la situación, te inclinaste un poco para alcanzar otra botella y comenzar a beberla con precaución.

—Te retamos Rindo.—Ran dio una risa maquiavélica, trazando tal vez un plan excelente en su mente.

—Mete estos hielos dentro de tus pantalones.—Hanma acercó un vaso con varios cubos de hielo a él.

—JAJAJJAJAJAJAJAJAJA.—Comenzaste a reírte contra la botella de cerveza exageradamente, Izana miro hacia otro lado para evitar mirarte y reírse contigo.—Dios, es que ay, ya, perdón sigan.— Rindo te observo entrecerrando los ojos hacia ti, fingidamente decepcionado de tu burla.

—Que reto de mierda.—Rindo se puso de pie y tras agarrar el vaso comenzó a con una mano tratar de desabrochar su cinturón. Tu mirada fue para un lado, mirando la pared mientras silbabas como si nada, disimuladamente.

—________, ayúdalo.—Ran coreo a un lado, no dijiste nada solo le golpeaste en la frente causando un gritito de su parte.

—Carajo.—Rindo maldijo entre dientes, al parecer ya había cumplido el reto así que volviste a mirar hacia delante, justo donde estaba ya el sentándose nuevamente.

Para evitar ponerte nerviosa tomaste la botella de cerveza de golpe, pidiéndole a Izana otra botella de alcohol.

—Agarralo bien o te mato.—Sanzu advirtió a Rindo, este último parpadeo asintiendo. Se pasaron una nueva carta, si, la habían cambiado jeje. Sanzu se la paso a Kakucho que hasta el momento se encontraba calladito bebiendo y viendo su movil, este se la dio a Izana y el moreno se giró hasta ti para que sea tu turno.

—Perdón.—dejaste de beber al ver que no le habías prestado atención, te giraste para acercarte a la carta y tras aspirar para que no caiga al sofá miraste a Izana fijamente para que la suelte, el chico frunció el entrecejo sin entender porque le mirabas tanto, alzaste tus cejas por un segundo, indicando que ya habías tomado la carta.

—Puto ya suelta la maldita carta, joder.—Ran se carcajeó al ver que Izana no hacía ademán de separarse.

Izana se separó de golpe y alcanzaste a retener la carta sobre tus labios, te giraste rápidamente para impactarla contra la boca de Ran, tú nariz casi rozo la suya así que casi y te reíste un poco. El chico la tomó bien pero al momento de tu separarte apenas un milímetro este la sopló, dando a entender que nunca pudo retenerla bien y tu ya te habías separado.

—¡ESO ES TRAMPA, BABOSO!.—tomaste la carta y se la tiraste en la cara, Ran ni se inmutó.

—No hice trampa, se te cayó a ti solita.—Se hizo el desentendido completamente a lo que desviaba su mirada lejos de ti.

—RETO A _________ guaajajaja.—Hanma se burló abiertamente de ti, Kakucho por otro lado soltó una risa breve mientras veía su móvil.

—No seremos tan malos contigo esta vez.—Izana hablo pensativo.

Hola dios soy yo de nuevo...

—Saquémonos una foto entre todos y la tendrás que subir a todas tus redes sociales.—Kakucho opino relajado totalmente, un escalofrío te entro de repente. Quiere que me asesinen.

—Oh esa si estuvo buena, jajajaja, démosle.—Hanma se puso de pie en un santiamén y se acercó al sofá que compartías con los otros dos, cuando todos se fueron acercando para hacerse espacio te levantaste de un salto.

—No van a caer todos.—murmuraste viéndoles. Choji, Kakucho y Rindo fueron detrás del sofá para que al menos parezcan sus caras en la foto.—¿Y yo donde me pongo?.—Sacaste tu celular y aunque te costo un poco encontraste la cámara.

—Tampoco es un reto tan terrible así que ven aquí.—Sanzu, que estaba en el lugar tuyo de antes, apunto sobre sus piernas. Lo único qué pasó por tu cabeza fue a Kazutora golpeándote con un fierro si vería aquella foto.

Es ahora o nunca, te sentaste sobre el  apoyando la espalda contra parte de su pecho y hombro, luego de alzar tu móvil hacia arriba todos se acercaron para salir en la esperada foto, algunos haciendo muecas, otros groserías con sus manos y algunos sonriendo levemente.

Cuando sacaste ya unas cuantas, todos observaron como las subías a cada red social, te obligaron a etiquetarlos a cada uno para mayor adrenalina decían.

—Fue fácil, ¿no?.—Rindo sonrió en medio de la pregunta, ya todos yendo a sus lugares. Sanzu dio unas palmaditas a tu muslo para que te levantes de encima, le dejaste irse y te sentaste como antes.

—Ahora fue fácil, esperemos unos...—miraste la hora en tu móvil antes de guardarlo.—cinco minutos.

Tras volver a jugar, como casi nadie perdía ahora los demás debían hacer reír a quienes tocaban la carta, sin duda tenían más retos en mente para dar y no debían aprovechar la oportunidad.

Cuando perdió Ran y su hermano se le quedó viendo, casi como planeando algo, te entró pánico.

—Oh no jodas Rindo.—Ran le miro amenazante. Rindo llamo a un camarero al parecer, tras susurrarle algo al oído su hermano Ran le reto con la mirada.—Mierda, ya se que harás.

—_________, ¿Nos prestas tu cuello?.— ¿ah? Dejaste tu botella de lado y le miraste atenta.— A Ran el otro día le gusto el reto que le hicieron a Izana, simplemente quiero que cumpla su sueño.

Que maldito más considerado, me cae genial.

Llego el limón y la sal al mismo tiempo que Ran enterraba su rostro en sus manos, tal vez un poco avergonzado y a la vez emocionado. Solo esperabas a que no hubiese ningún raspón en tu cuello sino te ardería como el infierno.

—Si me muerdes te tiro la trenza.—Le advertiste mientras Rindo ponía la sal en tu cuello. Ran se preparó moviendo su cuello de un lado a otro, estirándose. Koko le pasó un vaso de tequila y este se lo tomo al seco para luego ir directamente a tu cuello como si fueses su presa.

Miraste de reojo como en vez de pasar su lengua a lo largo de tu cuello, cerraba la boca en donde estaba la sal para tomarla, dándote ligeros chupetones. Esa acción en todo el largo de tu cuello hasta tu hombro, cuando terminó de dejar rastro de sal se separó con una nueva sonrisa en su rostro y mordió un pedacito de limón, observando tu cuello ya bastante húmedo.

Necesito hielo para enfriarme, help.
MITSUYA TE FALLE, CHIFUYU TU AMIGA ES UNA FÁCIL.

—A ver otro.—Ran habló haciendo estallar en risas a los demás.— Broma, broma.—Te limpio el cuello con la orilla de su camiseta, mientras tanto para no prestarle tanta atención le quitaste el trago a Izana. El moreno ya harto de que le quites sus vasos te observo realmente de mal humor.

El siguiente turno pareciese que todos confabularon en tu contra, cuando tuviste la carta en tu boca los muy idiotas se pusieron a hacer caras graciosas para desconcentrarte, aunque no lo lograron de eso ser por Koko, que con una sonrisa en su rostro te mostró una botella de algo muy llamativo, al mirarle estiraste tu mano hasta el, pidiéndosela, causando un descuido de tu parte y antes de que Ran alcanzase la carta está ya estaba en el piso.

—PUTO KOKITO.— te quejaste mirándolo.— PASA PARA ACÁ.—Te levántate únicamente para quitarle la botella que te llamaba con su color llamativo, era rosado.

—RETO, RETO, RETO, RETO.—todos aplaudieron a la vez, menos Sanzu que estaba un poco...relajado contra el sofá.

—¿Le tienes miedo a los tatuajes?.—Izana al decir aquello, soltaste un chillido entusiasmado. Pues claro que no, siempre había querido uno a pesar de que tus amigos no estaban muy de acuerdo con ello.

—Obvio que no, ¿Por qué?.—Miraste a Izana, este sonrió mostrando sus brillantes dientes, tras impulsarse se puso de pie y bajo de la zona vip por unos minutos.— ¿A donde va?.

—A buscarte un tatuador o algo así.—Kakucho alzó su mirada de tu móvil para mirarte.— ¿Estás segura?

Mierda, si

Asentiste repetidas veces con la cabeza, si era gratis pues mucho mejor.

—¿Y que te harás?.— Hanma sonrió complacido totalmente por tu entusiasmo, y atrevimiento a la vez. En tu defensa ya habías tomado lo suficiente para realizar una locura.

—¿Puede ser a Mickey Mouse?.—Te ganaste miradas serias, sin gracia.— Puf, son antipáticos, no saben lo que es bueno.—Te enterraste en el sofá cruzadas de brazos.

O pueden ser los ojos de Chifuyu... o la cara de Inui... o Mikey con el pelo verde....

— YA SÉ.—Los demás te observaron por tu grito.— me gusta el tatuaje de Kazu, es un tigre creo.—la verdad ni forma le encontrabas pero te parecía genial.

Ran hizo una mueca a tu idea.

—¿Y donde te lo harás?.—Rindo pregunto. Frunciste la boca, bebiste un trago de la botella a tu lado y hablaste.

—En un lugar que no se vea, sino me matan.—Diste un largo trago de aquel líquido rosa, estaba sorprendentemente rico.

Hanma se ahogó con la bebida que estaba tomando, Koko con fuerza le azoto la espalda, la cerveza de Hanma se llegó a caer del vaso.

—Listo ________, cuando quieras.—Sanzu llegó con un tipo desconocido y una maquinita, "otra vez lo habrá sacado del bolsillo o que". Sacaste tu móvil para buscar alguna foto del cuello de Kazutora, turbio, pero le habías sacado una de imprevisto ya que te encantaba su tatuaje. Se lo mostraste al tipo y comenzaron con el esperado tatuaje.

Decidiste tatuarlo en tu espalda, un poco más abajo y a la izquierda de tu hombro derecho, el tamaño no era exagerado y media mucho menos que el de tu amigo. Claramente tuviste que bajar un poco el cierre trasero de tu top para que no moleste, ni de broma te irías a sacar la prenda. El tatuador te vio algo incomoda en la posición actual, sentada de lado, así que te hizo recostarte boca abajo en el sofá. Izana se rehusó a salirse así que tus piernas quedaron sobre el, ni te molestaste en sacarlas cuando se quejó.

—Me duele.—exclamaste en un murmullo, todos los demás observaban de cerca el proceso del tatuaje.

Rindo se acercó con tu botella rosa y le puso una bombilla para que aún acostada sigas bebiendo.

—¿A ustedes sus tatuajes les dolieron?.— agregaste algún tema para que te distraigan de cómo las agujitas se metían en tu piel. Ran levantó una parte de su camiseta, mostrando su tatuaje a la mitad.

—Este un poco.—Observaste la tinta negra en su definido abdomen haciendo una mueca de dolor.—Tranquila nena, te va a quedar estupendo.

—¿Y a ti Rindo?, ¿te dolió?.— dale men, súbete la camiseta también.

—Nop.— puta madre no lo hizo.—¿Lo quieres ver?.— SIiiiiI

—No es necesario.—dijiste sin siquiera pensarlo, me falta beber más.

—Listo.— apenas lo había hecho de unos pocos centímetros el tatuador, hiciste puchero al ver la foto que te había sacado Kakucho para mostrártelo. Después de ponerte un papelito que desconocías del todo para cubrirlo, este se despidió y se fue, así como así.

—Tatuaje gratis, yei.—celebraste volviendo a acomodar tu ropa y sentandote como antes, Ran volvió a tu lado y te dio un par de botellas, gustosa comenzaste a beber nuevamente.

—Otra ronda.— celebró Kakucho más emocionado. Este último soltó varios insultos al azar cuando de primera perdió, su reto fue que camine con tus tacones hasta el primer piso y luego regrese, todo sin caerse.—Esto me lo van a pagar eh.

—Si, si, si, ya baja de una vez los escalones que quiero verte caer.—Izana le dio un empujón para que se ponga de pie.

Tomaste los zapatos de Kakucho y te los colocaste, estos eran más grandes que tus pies sin duda. Comenzaste a mover las piernas de arriba hacia abajo, Ran te observo divertido mientras los demás veían al retado como cumplía su castigo. Tras verle como tenía intenciones de burlarse, te pusiste de pie e hiciste como si le pegaras una patada, al no pensarlo bien el zapato como te quedaba grande salió volando directamente a la cara de Ran.

—Oooh perdón perdón.—te acercaste a él entre risas, este sosteniendo su nariz más que nada.— no pensé que iría a salir volando, te juro Rancito.

—Que loca que eres.—te miro con un ojo, el otro lo mantenía fuertemente cerrado. Te acercaste a su rostro y quitaste su mano de su nariz.—Ya vete, me tiraste un zapato en la cara.

—Ay no fue para tanto, a ver quita la mano.—Ran se hizo el difícil así que la botella que andabas trayendo en la mano que contenía Whiskey la alzaste para hacer como si se la fueras a echar encima.— quita la mano o te mojo.

Ran quitó la mano de su nariz y viste cómo está estaba algo roja por el golpe, sonreíste un poco y luego de soltar una risa boba dejaste un beso en su nariz, este se sorprendió realmente, sus ojos se abrieron un poco más al verte hacer dicha acción.

—No se te va a salir la nariz ni nada así, disculpa.—Entre risitas giraste tu rostro para dar un trago a la botella pero Ran se te tiro encima, agarrando tu cabello en un puño con la mano sobre tu cabeza. No alcanzaste a decir ni pío, estrelló sus labios con los tuyos ladeando su rostro casi posesivamente.

Hizo que te inclines hacia el, que seguía sentado, y te beso con profundidad, acariciando salvajemente su lengua contra la tuya, dándote de vez en cuando mordiscos en tus labios al dejarte con la boca entreabierta por su impulso.

Lo que más te sorprendió fue cuando te alejo de golpe, incluso dándote un leve empujón desde tu hombro. Tu, totalmente confundida, te quedaste de pie frente a él, aún algo impactada y con la respiración irregular. Ran siguió como si nada, incluso se inclinó hasta la mesa y tomó una botella para disponerse a beberla. Entre risas llegaron los demás con Kakucho, este último te dio tus tacones en la mano entre exclamaciones por hacer el ridiculo un poco al caerse apenas dio un paso.

Siguieron jugando, no perdiste por suerte ninguna vez. Tampoco nadie se dio cuenta del golpe que tenía Ran en la cara así que fue como si nada paso.

Ahora mismo, ya te habías devorado varías botellas de cerveza y tequila que te había regalado Izana para que le acompañes, ambos hicieron una breve batalla de Chupitos la cual tú saliste ganadora.

—Jajajajajajaja.—Hanma se carcajeó.—¿Me estás retando?.— le hablo a Kakucho, este asintió.— Esta bien, Muñeca hey, acompáñame abajo.—Te codeo llamando tu atención instantáneamente.

—BUeno.—Asentiste distraídamente haciendo notar tu pequeño grado borrachez. Te tomó de la mano para bajar al primer piso, Hanma iba riéndose como un demente. A decir verdad, tú amigo al parecer se había influenciado de ti y terminó bebiendo más de la cuenta.

—El Kucho de mierda ese me reto a hacer algo, no quiero pasar vergüenza solo así que acompáñame.—Asentiste mientras Hanma les abría paso a la pista de baile, un sin fin de gente se encontraba bailando al compás de la música, o algunos simplemente se movían sin sentido.

¿Quiere que pase vergüenza con el?, Jalo.

—Haz como que me mori.— Hanma soltó y de golpe se dejó caer en medio de la pista, desde abajo te regalo un guiño y saco la lengua hacia un lado, haciéndose "el muerto".

—Oh.... NOOOOO, ¿AMIGO TE MORISTE?, DESPIERTA JIRAFIN, DESPIERTA.—te arrodillaste a un lado de él y agarraste su camiseta con tus puños, moviéndole de arriba a abajo.—¿¿¡¡¡ALGUIEN QUE ME AYUDE A LEVANTARLO!!!??.— tuviste que dar manotazos a quienes estaban alrededor y no se percataron de Hanma en el suelo, casi y lo pisaron.— MALDICIÓN, QUE ALGUIEN ME AYUDE CON ESTE DEMENTE DE EXTRAÑA ORIENTACIÓN SE...

Te callaste de golpe cuando frente a ti, de pie, estaba aquel hombre que viste antes. ¿Imaushi?.

QUE MIERDA, VERDAD QUE VINE POR EL Y AKASHI

—¿Me ayudas?.—le miraste fingiendo tristeza. El chico había apreciado aquel escándalo por sobre la música y simplemente sintió curiosidad al verte a ti, la chica de antes que casi se tomaba un barril entero de alcohol, con además un conocido, Hanma.

Que me ayude que me ayude que me ayude que me ayuda

—No está muerto, a lo mucho se durmió.—Hablo el chico contra el palito entre sus labios, a este tipo le gusta lo dulce, ¿soy dulce, no?

Mierda, soy de todo menos dulce.

—¿Tú crees?.—bajaste la mirada hasta Hanma, cuando Imaushi se arrodilló a un lado de él y frente a ti. No te paso desapercibido que efectivamente tu amigo se había quedado dormido, ni dándose cuenta que aún estábamos jodiendo con su apuesta.

—Te ayudaré a levantarlo.—Se ofreció el chico de pelo bicolor. Disimulaste tu entusiasmo y le ayudaste a colocar de pie a Hanma, el de un brazo y tu sosteniendo el otro. Prácticamente al final él hizo casi todo el trabajo y lo sentó en una silla al azar.

—Graciass.—salió más chillón de lo adecuado, tienes quince años o que, compórtate _________.—Disculpa por joderte así, digo, molestarte, si eso, malgastaste tiempo con este idiota.—apuntaste al dormido.

—Si, a decir verdad si.— confirmo que malgasto su tiempo, genial.—¿Viniste sola?.— saco la paleta de su boca por un momento y luego la volvió a saborear dentro de su boca, seguiste la acción embobada.

¿Como haciendo eso se veía TAN bien?, cuando Mikey come te daban ganas de darle más comida pero este chico te invitaba a quitarle la paleta y chantarle un beso.

Si, pero me encontré con unos conocidos... ¿y tu?.— claramente te hiciste la idiota que no sabia que era un pandillero y era obvio estaría ahí con sus demás amigos.

—No, vine con otras personas.—se sinceró tras una breve pausa. Sus ojos medio abiertos captaron su atención en los tuyos, tenia una mueca cansada en su rostro y aún así se veía que puede y no lo este.— Bueno, no te puedo dejar sola con tu amigo borracho.

El chico dio unos pasos lejos de ti y tras tú quedarte en el mismo sitio junto a Hanma este se giró para mirarte fijamente, parpadeaste un par de veces.

—Te invitó un trago mientras tu amiguito despierta, ven.— dios me has mirado a los ojos...—¿Como te llamas?.

Apresuraste tus pasos y ambos se guiaron hasta donde estaba el barman, copas por doquier y botellas con todos los tragos posibles te esperaban, se te hizo agua la boca.

—________, ¿Tu eres?.— tu eres el indicado la puta madre que lindo que eres.

Dime Waka.—Levantó una de las comisuras de su boca, esbozando una sonrisa de solo un lado muy muy breve.— de Wakasa, por si te lo preguntas.

Waka_____, nuestro shipp.

—Ah...— te quedaste muda cuando llegaron al mesón, Imaushi te observo con el rostro ligeramente inclinado hacia delante.—Em, recomiéndame algo rico.—Le pediste sonriendo levemente. No puedo actuar como borracha ahora, relájate _______ o la cagaras.

—Está bien.—Con su mano llamó al barman para hacer un pedido. Que formal todo, este tipo tiene estilo hasta para hablar...

—Waka, hasta que te encuentro.—Te apegaste al mesón tras sentir una voz más profunda hablar, se acercaba hasta ustedes a paso algo apresurado.—Oh, tú eres _______ ¿Cierto?.

AKASHI ESTÁ TOCÁNDOME EL HOMBRO, NOOOOOOOOOOOOOOOOO DIGO SIIIIIIIIIII, dios, ¿por qué siento que tiene dinero este cabroncito?

—Hola, si.—Respondiste de inmediato, aún anonadada por ahora tenerlos a ambos frente a ti a pacos distancia. Akashi era más alto que el otro pero ambos competían en quien tenía el rostro más guapo, imposible elegir.— Eres Akashi, ¿no?.

Hazte la loca, hazte la desentendida, no puede saber que hasta lo googleaste.

El asintió con la cabeza mientras te echaba un breve vistazo, luego de aquella mirada se volteó a ver a su amigo, este último le mantuvo la mirada pero luego la desvió hacia en frente, esperando los tragos.

Incómodo... Hanma ayúdame.

—¡TE ENCONTRAMOS!.—De los puros nervios al sentir como alguien agarraba tus hombros diste un codazo hacia atrás, tú profesor de defensa personal Baji te había enseñado.— Pero... ¿QUE CARAJOS?, ¿Por qué me pegaste?.

Te giraste para ver a Kakucho con su mano sobre su nariz. A otro más que lo dejo como Voldemort.

—PERDÓN, me asustaste y reaccioné sin pensar... bueno como casi siempre.—susurraste esto último para ti misma.

Rindo y Ran venían detrás de él y más atrás estaba Izana, Choji, Koko y Sanzu.

—Oh, con razón.—Rindo se carcajeó al ver a tus acompañantes.— ¿Y Hanma?.

—Este... lo dejé sentado en una silla, bueno lo dejo el.—apuntaste a Imaushi. Un "oh" salió de la boca de todos.

Imaushi te dio un vaso de algo color celeste, al parecer era un trago elaborado ya que tenía hasta un limón en la orilla. Que elegancia la de Francia. Le agradeciste y diste un pequeño sorbo, tú comportamiento hizo reír al grupito ya que de ser por ti te hubieses tomado de un trago todo.

—Imaushi, Akashi, ¿Nos acompañan?.—Rindo se atrevió a acercarse a estos dos y los abrazo por el hombro.

—¿Donde?.— Imaushi murmuró en tono bajo y cansado, el al parecer no había pedido nada para beber, solo te había comprado una bebida a ti.

—Estábamos entretenidos jugando a un jueguito, tienen cara de amargados ahora mismo así que deberían unirse.—Izana se carcajeó al ver lo serio que estaban ambos individuos. Antes de que se neguen quisiste hablar, tal vez si presionabas un poco accedían y eso te convendría claramente.

O no. Pasaré vergüenza.

—Oh, deberían unirse.—Te terminaste el vaso de un tirón, Akashi te observo con sorpresa pero esbozó una breve sonrisa casi invisible.— Puede que les guste

yo

—No creo...

—Está bien, vamos un rato.—Akashi accedió a la vez que el otro iba a negarse. Tus demás amigos celebraron entre sí, entre bromas, y los llevaron hasta la zona vip. Dejaste el vaso vacío sobre el mesón con total calma.

GOOOOOOOOOLLLL, AHORA ME LOS CHAP...

Tu celular sonó, interrumpiendo tu grito interno de alegría.

Al revisarle pudiste ver como tenías varias notificaciones específicamente en la foto que habías subido con aquellos chicos a tus redes. Para qué decir de quiénes eran.

Emma
¿PERDONA?, ¿de donde los sacaste?*emoji  carita con un lente" "emoji  mono tapando su boca"

Yuzuha
Cada vez me sorprendes más *emoji de gato sonriendo de lado*

Hinata
_________, :O

Takemichi
NOOOOO

Chifuyu
NOOOOO

ANGRY
NOOOOOO

Rindo
SIIIIII

Draken
NOOOOO

Sanzu
SIIIIII *emoji corazón*

Mikey
NOOOOO*emoji llorando* *emoji enojado*

Ran
Una de tantas fotos... *emoji carita tirando un besito*

Dejaste de ver tu móvil para ir rápidamente a la zona Vip, ya luego recibirías los regaños. Al menos ninguno fue a buscarte y cumplieron su trato de no intervenir.

—Me perdí, perdón.—Te sentaste en tu puesto de antes y ni te diste cuenta que los dos chicos mayores estaban ahora a cada lado tuyo. Soltaste un grito.

—Jajajajajaja.—Izana se burló de tu asombro.—se asustó.

—Bien, empecemos entonces a jugarrr.— Al parecer en tu ausencia estos se jalaron algo, no comprendías porque estaban todos tan animados de un momento a otro.

Tras los dos nuevos jugadores negarse a jugar con la carta, eligieron la típica; Verdad o reto.

Necesitabas más alcohol para que no te de vergüenza lo próximo que pasaría, le rogaste entre miradas a Sanzu que te de alguna botellita, el chico no dudo ni un poco así que aquella cerveza te duró menos de un segundo. Hiciste como si las miradas de los dos chicos a tu costado no existiesen y bebiste como de costumbre.

—________, cariño, verdad o reto.—Ran se sentó sobre el sofá como indio, su sonrisa te puso nerviosa.

—Reto, creo.—ya sentiste como arrastraste un poco las palabras, coma etílico aquí te voy.

Espera... ¿dije reto?, ¡¿POR QUÉ DIJE RETO?!

—Jejejeje.—Koko se rio así tal cual como se lee.— Hace un strip...

—Eso no, Koko.—Izana negó con la cabeza, viéndole mal. Kakucho a un lado ahogó una risa.

Ya pero si me tiras billetes le entro igual... no mejor no.

—Cámbiale la cara a tus compañeros de asiento.—Al mirar a Sanzu este se encontraba observando una pastilla fijamente mientras jugueteaba con esta.

—Besa a Imaushi.—Kakucho habló también mirando a Sanzu y lo que hacía.

—Espera espera, ¿cuantos años tiene?.— El mencionado miro a tus nuevos amigos algo enfadado por su reto, tú en cambio te encogiste en el sofá queriendo desaparecer, obvio sin soltar la botella de alcohol.

—Es mayor de edad, ¿Cierto, ________?.—Asentiste a lo que dijo Koko.

—Obvio compa.— Dios, cállate la boca ________. Akashi a tu lado dejo salir una risa, estaba totalmente cómodo con el drama.Aquí es todo legalisimo.

¿por qué soy así?, te abofeteaste mentalmente.

—Ya se me hacia raro que me hayan invitado a jugar.—Imaushi llevo su mano a su paleta y la separó por un instante de la boca. Dejo su mano recostada en sus piernas, manteniendo la paleta aún entre sus dedos.—Pero ya que, si la niña puede entonces acepto.

Si soy tu niña.
NOOOOOO, contrólate cabeza de nabo.

Por mi está bien, es solo un reto.—Ran y Rindo se re cagaron de la risa con lo que dijiste, ellos sabían que te había gustado un poco aquel aspecto del chico. Comételo, bésalo besuquealo, vamos fiera tú puedes.

—Sostenme esto.—El de pelo bicolor te tendió su paleta, la tomaste con algo de confusión, ¿ahora me la como o...?.

Imaushi se giró aún sentado en el sofá y tras agarrar tu cuello con su mano derecha te guió hasta que impactaste contra su boca. Cuando presiono su pulgar e índice a los lados de tu cuello inconscientemente abriste ligeramente la boca, teniéndote como el quiso, no pudo evitar soltar una breve risa y ataco tus labios con profundidad, tanta intensidad que Akashi llego a soltar un jadeo de sorpresa.

Tu mano aferraba la botella a medio terminar y la otra sostenía su paleta por lo que no pudiste ni rozarle. Wakasa en cambio profundizó el beso y su mano sobre tu cuello te empujó más hacia el sofá, más hacia abajo. Su rostro cubrió el tuyo de las miradas sorprendidas y cuando te tuvo con la nuca contra el sofá su lengua proporcionó caricias más feroces dentro de tu boca, robandote un apenas audible gemido para ti y para el.

Sus suaves labios, un poco tibios pero húmedos, se movían hábiles contra los tuyos, literalmente te esforzaste demasiado para seguirle el ritmo. Sin duda estabas sonrojada totalmente, y más a causa del alcohol. A su alrededor todo el "público" estaba mirándoles totalmente impactados, al parecer pensaban que Wakasa no sería del tipo tan intenso.

Abriste los ojos por un breve momento ya que sutilmente tiro de tu cabello para que le des más acceso.

Si se ve tan flojo ¿POR QUÉ ES TAN AGRESIVO?.
No me quejo, ojo.

Cuando tuvo suficiente se separó pausadamente de tu boca, dio una respiración honda y se acomodó nuevamente a tu lado con la espalda pegada al respaldo. Aún con la cabeza fija mirando al frente rebusco con su mano la tuya para tomar la paleta y llevarla a su boca. 

Ok... siguiente.—carraspeó Rindo, algo sorprendido aún. Tú seguías sentada con la nuca en el respaldo, estabas en la misma posición a causa de tu asombro, simplemente eso salió mejor de lo esperado para ti.

Tras calmarte por un segundo y aprovechar que a Koko le habían retado a beberse el alcohol que más podía en solo veinte segundos, llamando la atención de casi todos, te enderezaste en el sofá y por si acaso bajaste tu falda, de repente te sentías inquieta.

Llamada entrante de "Mamá"

—¿Si?.—contestaste al instante, tenías un tono de llamada especial para tu jefecita.

—Hija, ¿A qué hora volverás?.— dos pares de ojos te observaron a la vez.

—¿Por qué?, ¿Pasó algo?.—tu tono salió teñido en preocupación, sin querer frunciste el ceño levemente.

—No es nada, solo dime alguna hora.—respondió con su típica voz apresurada.

—Emm... en una hora más estaré allá.—afirmaste tras pensarlo por un minuto.

—Está bien.—Tu madre respondió, se escucharon de lejos unas voces. Seguro estará viendo casi cerrado.

—Chicos, en una hora más vendrá.—alzó la voz tu mamá al otro lado del celular.

—¿Chicos?, no me digas que.— te interrumpieron.

—Hola teletubbie.— ¿Smiley?

—Mamá, ¿están los chicos contigo?.— increíble, que bastardos más inteligentes que tengo. Te pusiste de pie y tras soltar una disculpa tapando el micrófono te apartaste de los demás y fuiste a la escalera que subía a la zona vip. — Mamá, me pasas con ellos porfis

—Ahí tienen, niños.— esta es más amorosa con ellos que con su propia hija, genial.

—¿Que pasa, piojo?

—LES DIJE QUE NO ME MOLESTARAN O ME IBA A ENOJAR.

—No te estamos llamando nosotros, te llamo tu mamá.—Aclaró Chifuyu, si, lo reconociste ya que acercó su voz exageradamente al micrófono.

—Nosotros solo estamos hablando por qué tú lo pediste.—Mikey terminó  de hablar con la boca llena de comida, se notaba.

—Váyanse de mi casa y dejen a mi mamá tranquila, yo iré en un rato para allá...

—¿Te vamos a buscar?.— Baji preguntó contra el móvil.

—No.— cortaste la llamada.

Soltaste un gritito en voz baja, pataleaste contra el piso tal como una niña. Si que eran molestosos tus buenos amigos, sabían que no te podrías enfadar si estaría tú madre ahí.

Pensaste seriamente si irte ya del bar, al fin y al cabo ya bebiste y ya te habías besuqueado con uno de los objetivos de hoy, prácticamente tu meta estaba lograda en su totalidad.

Pero

Todo se fue al caño cuando sentiste una presencia a tu lado, una bastante conocida.

—¿hmh?.—te giraste a mirar a Imaushi, este iba inexpresivo, sus ojos notablemente cansados o teniendo aquel aspecto.

—¿Me acompañas al baño?.—tus cejas se alzaron a su propuesta, tu boca de repente se secó a la vez.

Baño... esta pregunta... me habían advertido de esta pregunta antes, cuando empecé a ir de fiesta con los chicos de la ToMan... ¿que significaba?.

Baño baño baño baño baño
ª ya me acorde

Claro.—sin decir ninguna palabra más su mano fue a tu espalda para indicarte que avances primero. Ambos se guiaron sin charla de por medio, con el guiando tus pasos.

Cuando pasaron por todo el montón de gente pudiste sentir perfectamente como su abdomen se pego a tu espalda para no perderte de vista, entre empujones por parte del baile de algunas personas no tuvo más opción que sujetarte firmemente para que no tropieces.

—Ahí.—apuntó una puerta oscura, rozando tu oído.— no son los que usa el público. Conozco al dueño así que podemos entrar.— alto alto alto, ya entiendo esta cosa, YA LA ENTIENDO.

¿POR QUÉ ESTOY ENTRANDO?

Ya, que me lleve la verga, la vida se vive una vez, ¡Plus ultra!.
Jaja me bugie.

Que bonito baño.—soltaste lo primero que se te vino a la mente, aquello hizo a Imaushi soltar una risa nasal. A decir verdad si que era bonito y muy elegante. El lavamanos estaba en un costado del mesón de azulejo blanco demasiado brillante, un espejo sobre este de gran tamaño en forma cuadrada y los cubículos no estaban rayados, era sorprendente.

Te embobaste tanto que llegaste al lavamanos bonito, te miraste al espejo y te asusto un poco tu cara tan pálida, incluso se te había caído la curita sin que siquiera te dieras cuenta.

—¿Te duele?.—El chico se acercó hasta ti y se saco el dulce de la boca para luego botarlo al basurero junto a ti.

—Nah, solo es una raspadura.— te hiciste la valiente claramente, frente a ese adonis no podías quedar como llorona.—No es la primera vez que...—te callaste cuando le sentiste apoyar su mentón en tu hombro y sus manos fueron al mesón de azulejo delante de ti, apoyándose.—me caigo de la moto.

De los puros nervios voy a vomitar, por la puta.

—¿Te caíste muy fuerte?.—su voz lenta y pausada te dio un escalofrío. ¿Por qué todo lo que dice suena tan caliente?, necesito mi tequila.

—Si, algo.—Tragaste saliva, mentalmente prometiendo que te ibas a confesar a la iglesia el día siguiente por tener tales pensamientos cochinos.

—Que linda.—viste por el espejo como te sonrió levemente, estabas tan acostumbrada a las sonrisas exageradas de Smiley que está te pareció realmente casi invisible.

Cuando giraste tu rostro para mirar sus claros ojos, Imaushi observo tus labios con total atención, queriendo repetir aquel beso tan intenso que tuvieron hace tan sólo minutos. En su pensamiento paso la pregunta de porqué tus labios le llamaban tanto la atención, toda tú desde que te vio bebiendo como si fueses perseguida por alguien o algo le había llamado la atención notablemente.

Se acercó lentamente hacia ti, y tras darte un pico en los labios se separó de tu cuerpo, dejando sus manos a sus costados.

—¿Eh?.—te diste media vuelta para verle frente a frente, no queriendo cagarla cerraste la boca.

—¿Qué?.—su mirada era sin querer tan intimidante, era como un perezoso pero de esos que te pueden agarrar a puñetazos en cualquier momento. Tampoco es mucha la diferencia de edad... digo, hay algunos que se llevan más de diez años y no se quejan.

Diste un paso hasta el y sin rodeos juntaste tu boca con la suya, inesperadamente siendo algo brusca. Imaushi enganchó su brazo en tu cintura, apegándote contra su pecho, sosteniéndote para que no te separes siquiera un milímetro.

Se pudo y se podrá, si se jode todo dejo de tomar.

No jodan, de la emoción me salió un verso

Sin intensiones de siquiera separarte para dejarte respirar, el de pelo bicolor te hizo retroceder unos pasos hasta que quedaste contra el mesón de azulejos costoso, te forzó a abrir la boca, pinchando sus dientes contra tu labio superior, tirándolo entre sí, no se detuvo hasta que diste un ahogado gemido y te aferraste con tus brazos a su cuello.

Tus manos solitas fueron a su cabello para tocarlo y juguetear con él entre tus dedos, eso al parecer le gusto al chico ya que dio un ronroneo ronco contra tu boca, ahora su mano libre sostuvo tu mejilla para besar con mayor profundidad, su pulgar dando leves caricias sobre tu piel.

Cuando te alzó para sentarte sobre el mesón del lavamanos tu móvil sonó nuevamente

—Mierda.—Imaushi dejó pequeños picos en tus labios mientras acariciaba con suavidad tu cintura. A regañantes buscaste tu celular entre tu ropa, contestaste algo molesta.—¿Si?...

—Ya pasó la hora, ¿segura que no quieres que te vayamos a buscar?.—ni idea tenias de quien habló, ahora mismo estuviste concentrada en los pequeños besos que dejo el chico frente a ti en tu mentón mientras bajaba a tu cuello con total dedicación.

—Puedo llegar... sola.—casi se te olvido hablar.

—Tu mamá nos pidió que vayamos a buscarte.—Diste un suspiro hondo, tranquilizándote mientras sentías los afilados dientes del mayor contra tu piel al inicio de tu cuello.—No queremos romper el trato pero debemos hacerle caso.—esta vez otra voz hablo.

—Bien.—cuando soltaste un sonido similar a un gemido tapaste tu boca con tu mano, sentiste como Imaushi rio contra tu piel ya que su espalda subía y bajaba con rapidez.

—¿Que cosa?.

Cague

—Que está bien, mierda vengan a buscarme.— Imaushi te abrazo del torso mientras besaba con ternura el otro costado de tu cuello.

—Ah que bien que aceptaste ya que estamos aquí esperándote en la barra.

—¿¡QUÉ!?.—Gritaste sin medirte. Al escuchar lo asustada que sonaste Waka dejo de besar tu cuello y te observo con atención.— Serán....— cortaste la llamada, tras reprimir tus ganas de estrellar tu móvil contra lo que sea lo volviste a guardar en tu bolsillo.

—¿Que sucede?.—Un susurro apenas audible salió de su boca algo más carnosa y enrojecida por la presión de sus besos. Le miraste totalmente arrepentida y se separó ligeramente para dejarte bajar.

—Ya debo irme, mis niñeros de turno llegaron por mi.—te diste el lujo de burlarte ahora que todo se fue al carajo.

—Oh, entiendo.— este hizo una mueca. Refregó sus ojos con su puño y dio un largo suspiro mirando hacia el techo. Quedaste por unos segundos viéndole hasta que le diste un toque en su hombro, ganándote su total atención.

—Nos vemos otro día, tal vez.— tampoco pensabas ir tan directa, tal vez para él hubiese sido solo diversión de besuquearte por una noche y ya, así que te limitaste a ser despreocupada. El al ver tu expresión se mostró sereno, con toda la calma del mundo rebuscó en su bolsillo trasero su celular y te lo mostró.

—¿Me puedes dar tu número?.—no pudiste evitar sonreír a boca cerrada, tomaste su móvil entre tus manos y guardaste tu contacto con un apodo ñoño, algo burlesca.—Es para estar seguros de que algún día coincidamos.

—Está bien, ya me tengo que ir o harán un escándalo.—rodaste los ojos al recordar cada espectáculo que han hecho cuando no te encuentran.

Caminaste de espaldas hasta la puerta, mientras le mirabas como rebuscaba en su bolsillo otra paleta. Como si hubieras tenido una sesión de besos con tu profesor, saliste del baño como si hubieses hecho algo ilegal.

Se te paso toda emoción del momento cuando escuchaste a alguien en el parlante del bar, si antes se encontraba música, ahora había un gritón anunciando tonterías.

—¡___________!, ESTAMOS BUSCANDO A __________.— Mikey gritó por los parlantes.

La vergüenza te consumió, se te quitó toda pizca de alcohol que te quedaba en la sangre.

Buscaste a tu grupo de amigos, por como eran sin duda se te fue algo fácil.

—Ya estoy aquí, dejen de gritar.— al verte todos se acercaron a abrazarte como pudieron, bueno menos Draken, el no alcanzo y A Hakkai le apeno hacerlo.

—¡Al fin!.—Chifuyu te agito de un lado a otro.

—¿Como estas?, ¿Que hiciste?, ¿Con quien bailaste?.—Afloró la curiosidad de Takemichi. Con lo que dijo te acordaste de algo...

DE NUEVO NO BAILE CON NADIEEEE, no saque los pasos prohibidos con ningún tipejo.
Decepción total.

Me la pase bien.—te limitaste a responder. Mitsuya se acercó a darte un abrazo de oso que tampoco duró tanto porque Kazutora lo tiro de la ropa hasta atrás y se acercó a ti a abrazarte como si no le hubieses visto en diez años.

—ALMA GEMELA, PERDÓNAME POR BOTARTE DE LA MOTO Y LLEVARTE A TAL EXTREMO DE AHOGAR TUS PENAS EN ALCOHOL.—Kazutora comenzó a hacer un espectáculo a todo volumen.

—Eh, tomo porque quiero, no tienes nada que ver en eso Tora.—aclaraste palmeando su espalda.— ya shhh shhh, ya volvió por quien lloraban.

Luego de aquel emotivo momento, salieron del bar, todos con sus ojos fijos en ti por si te desmayabas nuevamente. Habían quedado traumados con tu accidente.

—Y... ¿Que pasó allá dentro?.—Baji preguntó sutilmente, hasta silbó mirando a otro lado para que no veas sus intenciones.

—Solo bebí, la foto que subí era un reto de su parte porque perdí en una guerra de Chupitos eso es todo...— me autocastigo me castigo me castigo.

—¿chupar pitos?.—Chifuyu habló asqueado.

— CHUPITOS, Chifuyu, CHUPITOS.—Baji le golpeó la nuca al rubio. Smiley comenzó a carcajearse a todo volumen.

—Bueno eso, pero nada fuera de lo normal.—afirmaste con una sonrisa, tus amigos asintieron a la vez, creyéndote.

Cada vez estando más cerca del estacionamiento, fuiste transformando tu expresión a una más aterrada. Trataste de ocultarte detrás de Draken, comenzando a disminuir tus pasos para camuflarte entre todos los demás.

—Oh, ¡________!.— Akashi se acercó a ti trotando, una sonrisa ansiosa se apreció en su rostro.

Toda la ToMan se quedó quieta mirando al "intruso".

—¿Viste donde se metió Wakasa?.—tu corazón se paro por unos segundos.— Me aviso que se iría contigo así que pensé que tú sabrías donde estaba.

Agachaste la mirada hasta tus pies cuando los murmullos por parte de tus amigos se escucharon por montón. No pudo cagarla más, bueno, yo también la cague.

—Quedó en el baño... "exclusivo".—Un jadeo indignado seguido de un grito asustado salió de tus amigos. Quien gritó lo identificaste como Takemichi.

—Genial, gracias y adiós, nos veremos en otra ocasión—El se acercó para besar tu mejilla y partió corriendo dentro del bar. Te querías matar ahí mismo, en el estacionamiento.

—Mejor no digan nada.—mascullaste volviendo a caminar hasta sus motos, tus amigos aún ni queriendo saber más.


Oremos para que siga actualizando casi a diario :)

Entre a clases así que estaré menos activa [CRY]

Spoiler

SABIA QUE TENIA CARA DE SUGGAR EL HIJO DE SU MADRE

Pd; Senju diosa te amo

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top