-que? Acaso está vez no te fue suficiente tu putito privado?-. interrogaba el televisor a  aquella polilla que estaba detrás de el después de aver estado con angel dust.

Vox se encontraba vigilando a Valentino a través de sus cámaras en el estudio. El proxeneta estaba dirigiendo una nueva película siendo testigo y espectador de aquella escena tan erótica que ocurría frente a el. No sé podía escuchar otra cosa mas que los gemidos falsos de aquel actor porno que por muy actuados que fueran para angel, para el público eran más que perfectos y lujuriosos.

-perfecto Angie, está vez te luciste que te parece si papi te da una pequeña recompensa por ser una buena puta?-. Decía con tono meloso a su querida estrella por su buen trabajo esa noche.

Vox solo podía observar como le daban una cojida de verdad al actor que gemía sin parar, el nombre de su socio estando cerca del primer orgasmo de verdad y no actuado de esa noche.

El televisor aunque quisiera negarlo, no podía ocultar el echo de que cada que veía al actor ser follado por su socio, se ponía realmente duro y eso que no había visto sus películas, pero sabía que nada superaba la manera en como val se lo cogia ya fuera con arneses o juguetes. Incluso sin estos, siempre era una vista irresistible a comparación de esos actores mal pagados que solo eran capaces de calentar a simples pecadores.

Una vez terminada la sesión la polilla se  dirigió al piso que compartía con sus compañeros buscando relajarse y ver un poco de televisión antes de empezar otra grabación.

Realmente no había nada bueno que le interesara por lo que decidió irse del lugar solo para ver a Vox frente un montón de pantallas, mostrándose las camaras de aquel estudio porno como lo que recientemente avía visto.

-que pasa, disfrutaste la acción?-. Preguntaba Val dándose cuenta de lo que veía su compañero y sabiendo que lo avía visto cogiendo con el actor en el pequeño sillón que había en su camerino.

La polilla a ver qué no obtuvo respuesta por parte del televisor, decidió acercarse y tomarlo por los hombros para que le prestará atención.

-te hice una pregunta Vox, no quiero que empieces con tus dramas. Por qué el jodido angel se corrió antes de tiempo y no quiso otra puta ronda, y sabes bien lo que significa eso-. La polilla siendo conciente que su compañero lo avía visto, estaba seguro que el otro aceptaría complacerlo como se debe.

-val si vienes a que termine el trabajo de tu querida estrella, no estoy de humor así que será mejor que regreses a que te complazca una de tus putas ya que al fin de cuentas ninguna se negara-. Vox ya conocía bien el camino que tomaria está situación y sabía lo que pasaría si no lo detenía desde ahora, aunque en el fondo deseaba destrozarlo no debía.

-hay vamos no te hagas del rogar, no creas que no note tu erección Vox así que deja de de ocultar el echo de que estás jodidamente duro y follame de una puta vez-. Exigía la polilla cansada de tener que pedir lo que era obvio que quería que hiciera.

El televisor sin más opciones y con el cuerpo ardiendole por la reciente exitacion se lanzo a besar al proxeneta con posesión, apoyando sus manos en sus caderas para atraerlo más a su cuerpo, descargando lo que sentía en una buena ronda de sexo duro y sin compasión. Sabía que no era la mejor manera de calmar sus celos pero era la única que conocía y que lo ayudaba realmente a olvidar todo sin tener que estar borracho.

La polilla estaba siendo por fin complacida como quería y con quién quería, realmente deseaba un descanso en el que tuviera que recibir y no dar y Vox era justo lo que necesitaba en ese momento para estar satisfecho.

-vez Voxxy, que tan difícil era meter y sacar tu verga por unas cuantas horas para complacer a tu querido socio de negocios-. Valentino sabía perfectamente que era irresistible para cualquiera pero el saber que era una tentación para Vox lo hacía sentir mucho más afortunado de tenerlo como una más de sus putas a su disposición cada que tuviera ganas de que se lo cogiera.

                                       *

Vox era conciente que el mismo estaba sobrepasando sus propios límites y tirando su dignidad a la mierda. Realmente se preguntaba que era el para Valentino, aunque sabía perfectamente que solo era otra puta más que tenía comiendo de la palma de su mano, quería negarse a creer que era su única relación.

El era el encargado de satisfacer al proxeneta cuando el quería, donde el queria y a la hora que fuera, el era su niñero cuando las cosas se salian de control y decidía joder a velvette matando a sus modelos y destrozando sus vestidos, el era el encargado de la empresa que tenian y por lo tanto el que mantenía esa asociación a flote sin importar las estupideces que cometiera su compañero, el siempre estaba ahi para arreglarlo.

Adoraba pasar el tiempo con sus compañeros ya fuera saliendo de compras, viendo una película o pasar el tiempo juntos simplemente, pero estaban los otros momentos en los que la polilla lo cansaba interrumpirlo en su trabajo solo por sus estupidas rabietas. Le colmaba la paciencia y quería mandar todo a la mierda en ese instante siendo conciente de que no le importaba en lo más mínimo mas que su puto cuerpo.

Pero se detenía y pensaba en velvette, en lo que aria si el se fuera, tal vez solo quería creer que era importante para alguien aunque sabía que podía arreglárselas sola.

Esa noche Val se quedó dormido encima de el mientras Vox se quedaba despierto y pensaba en que tipo de relación tenían o que se suponía que eran. ¿Simples socios de negocios?, podía ser, ¿compañeros sexuales? También, amigos? A veces. Era una de esas noche en las que no podía dormir después de haber cogido con Valentino, recordando qué este solo lo habia buscado por qué no se sintió satisfecho con la que había tenido con el actor.

A veces hacia que se preguntara si de verdad le importaría un poco al proxeneta, si ya no estuviera con el, si se negara a cumplir todos sus caprichos. A veces pensaba si podía ser remplazado por alguien más como si cambiara de vestido para ir a un bar, o no habria nadie como el, que tuviera la capacidad de mandar descargas electricas cuando estuviera apunto de correrse o un simple pecador que aguantara cada una de sus rabietas y gritos.

Solo quería poder decir sus miedos y sentimientos con la esperanza de que no lo considerara dramático o un puto sensible, solo por cojer con alguien más cuando no podía reclamarle una mierda ya que ellos no tenían nada más allá del sexo y los negocios.

Simplemente quería poder hacer lo mismo que el, actuar igual a el sin importarle una mierda y cojer con quién quisiera sin el peso de sentirse culpable como si estuvieran en un matrimonio de años y aún se amaran cuando la realidad era otra, y el era el único con esos pensamientos.

Solo deseaba que se diera cuenta de lo que provocaba en el al verlo todas las noches cogiendo con quién fuera, ya sea con ese estúpido actor o estando en un bar esperando contratar nuevas prostitutas.

Se sentía como un robot, solo sentado esperando recibir ordenes por parte de la polilla o de su compañera, ya fueran sexuales o solo para arreglar los desastres que había echo en el estudio de la chica, para el, ya era una rutina. Escucharlo gritar sus desgracias, esquivar tragos en forma de desquitarse y traer a los empleados que ganaron menos ese mes solo para quitarle las ganas de dispararle a alguien. Y en las noches esperar a que le diera la orden de quitarse los pantalones. Eso era todo.

De aver sabido que terminaría así, se ubiera quedado con alastor, al menos el no lo trataba como una puta. Ubiera querido no haberse enamorado de la peor persona que pudo haberlo echo. Era una completa estupidez que cayera ante un puto proxeneta, era obvio desde un principio, ese era su trabajo y lo sabía, pero ahora que se enamoro solo lo quería para el mismo y era algo difícil siendo director de películas porno y acostarse con quién quisiera cada noche. En serio no podía ser más imbécil.

No quería ni pensar de la forma tan directa y dura en la que la polilla se burlaría de el si llegara en algún momento a confesarle sus sentimientos y celos. Sabía la clase de persona que era y que por lo tanto nunca lo tomaría enserio y creería que era un puta broma de mal gusto. No tenía mas opción que seguir siendo su puta asta que sintiera la mismo aunque era más probable la reina Lilith regresará a que el proxeneta fuera capaz de sentir algo por el.

Nunca fue el más inteligente ni en vida ni ahora, pero haber caído en la tentación de aquel proxeneta era lo peor que abia hecho sin duda alguna.

Fue un capitulo corto pero ví un edit de radiostatic como siempre en tik tok con la canción traición de miranda y como siempre pense que le quedaria a voxval por lo que decidi hacer unos tres capitulos con unas cuantas de sus canciones

Espero les guste y gracias por leer