-¡VAL, YO ESTOY ENAMORADO DE TI!-.decía el televisor, arto de otra discusión sin sentido con su socio.

La polilla se encontraba en el apartamento de la overlord, matando y destruyendo a cualquiera en su camino, por otro berrinche, después de que su preciada estrella, decidiera mudarse y no vivir más en el mismo lugar que el, para estar a su disposición 24/7.

-¡sera mejor que te des prisa en darle tu verga a esta maldita polilla, si no quieres que destroce tu pantalla de mierda!- decía velvette mientras llamaba a su compañero, para que la ayudara con el proxeneta y la dejara hacer su trabajo tranquila.

El televisor solo acepto y se dispuso a subir el elevador que llevaba al piso de la chica, donde se encontraba su socio asiendo el mayor desastre posible, sin importarle perturbar a su compañera.

-donde mierda estabas, deja de quedarte ahí parado y as algo-. Decía la menor ya arta de las actitudes infantiles de la polilla. Ser ella quien siempre tenía que aguantarlo ya la estaba cansando, el que ella fuera la unica perjudicada en las rabietas del proxeneta le era una completa injusticia.

-ya voy, ya voy, no me lo tienes que repetir dos veces, aquí el único ciego es val, no yo-.
Le respondía a la chica que no le dejaba de reclamar como si la polilla fuera un niño pequeño del cual se tenia que hacer cargo sin importar la situación.-val podrías venir un segundo?-.

-¡que quieres?, que no ves que me estoy desestresando!.- decía la polilla echa una furia mientras terminaba de romperle el brazo a una de las desafortunadas modelos de velvette.

-¡¿y se puede saber por qué con mi mejor modelo?!.- la chica ya cansada solo le gritaba para que dejara de hacer tantas estupideces en su estudio y se largara de una buena vez.

-vel yo me encargo, Valentino tenemos que hablar-. Decía en un tono autoritario, con la intención de que el contrario le hiciera caso.

Ya eran demasiadas las rabietas de Valentino por cualquier tontería que le pasara y velvette siempre era la más afectada, siendo sus modelos y vestidos los que pagaban la ira de su compañero, mientras que ella lo único que podia hacer era ver el cómo sus mejores vestidos eran manchados por la misma sangre de sus empleados. Seguido de esto llamar a Vox era la única opción que le quedaba para que se llevará al proxeneta con el y la dejara en paz para poder limpiar todo el desastre que avía echo, siempre era lo mismo.

-¡enserio no se por que sigo viviendo con ustedes par de idiotas!-. Gritaba antes de verlos cruzar la puerta, cuestionandose a ella misma sus propias decisiones.

                                        *

-aver ahora que paso?-. Preguntaba el televisor a la polilla, ya sabiendo cómo actuar ante los berrinches y rabietas de este  mismo.

-el jodido angel se largo a ese hotel de mierda, como putas se atreve a dejarme, yo lo hice una jodida estrella, le di fama, dinero, e incluso un jodido techo en el que se pudiera drogar cuando quisiera ¡y así me paga!?-. El proxeneta no lo podia creer, le avía dado todo y aún así no se conformo y decidió irse a vivir con la princesa de infierno, como si el de verdad se fuera a redimir.

-y renunció?.- preguntaba el televisor conociendo la respuesta pero aún así cuestionando a la polilla para hacerla estallar todavía más y después poder complacerlo con una buena ronda de sexo.

-no, sabes perfectamente que no puede renunciar para que preguntas eso?-. El proxeneta no entendía a que venía ese comentario por parte de su compañero ya que el era conciente del contrato que tenía el actor porno.

-no lo se, soñar no es malo sabes?-. respondía el contrario riéndose de si mismo al saber que aquello era imposible.

La polilla arta de que lo interrumpieran en media masacre solo para hacerle las preguntas más estúpidas y obvias, decidió que iria a molestar a alguien mas para que no lo estuvieran jodiendo ninguno de los dos.

-sabes que, me largo, primero angel se muda, después tengo que aguantar a velvette quejarse como una perra solo por que llene de sangre sus preciados vestidos de mierda y ahora tengo que escuchar tus preguntas estupidas, pero no te preocupes puedes seguir acosando a ese venado de mierda, puedes estar tranquilo ya que yo ire a otra parte, para que ninguno de ustedes dos zorras me tengan que aguantar-.

La polilla era conciente del dolor de cabeza que era para sus compañeros y aunque sabía ocultarlo muy bien otras veces no podía y explotaba diciendo todo lo que pensaba de esos dos para después largarse a cojer con cualquiera que estuviera dispuesto a que le destrozara el culo.

Realmente lo único que quería es que alguno de sus compañeros se preocupara de vez en cuando y le preguntara al menos como estaba o que le pasaba pero sabía que la única forma de que le pusieran atención al menos uno de ellos, era hacer un desastre por qué de otra forma nadie le pondría la más mínima atención a menos que vox estuviera con ganas de cojer.

-¡pues para tu información yo también tengo trabajo al igual que velvette pero tú no puedes entender eso por qué para ti es más importante hacernos perder el tiempo solo por qué tú jodida prostituta se canso de ti y se fue a otro lugar para no tener que cojer contigo cada cinco minutos!-. Gritaba el televisor ya cansado de las actitudes del contrario.

-no tendría que hacer todo esto si ustedes fueran un poco más considerados y tuvieran la decencia de preguntar cómo me siento.- se defendía la polilla tratando de expresar lo que sentía al ver qué después de tantos años tenía que hacer está clase de escenarios para conseguir un poco de atención de parte de sus socios.

-que acaso no te das cuenta que está es la única forma en la que puedo hacer que siquiera me preguntes el por qué estoy así?.- Literalmente estoy más ciego que la misma mierda, que me tardo mas de treinta minutos en contar tres putos billetes y ustedes acaso se an dado cuenta de eso?-.

El menor no podía creer que le estuviera reprochando todo eso ahora, solo por qué el actor se avía mudado, de verdad que no tenía descaro, siendo el, literalmente un proxeneta y abusador se ponía a reclamarle como un jodido adolescente.

-suenas como un niño por qué eres tan dramático? si todo esto es por angel está bien, lo secuestrare y te lo traeré de vuelta pero ya deja de ser una perra dramática.-

-esto ni siquiera es por el, ¿enserio pensaste que me importaría una mierda lo que aga? sabes muy bien que tengo su alma y que por lo tanto no puede dejar de trabajar para mí, ya te dije que solo quería que dejaras por un segundo a ese idiota sonriente-.

-espera todo este drama es por alastor? nunca crei que te importará además sabes que lo odio por su culpa tu estás sin una antena y no puedes ver una mierda-.

-si claro, lo odias tanto como para pasar todo el día pegado a las camaras de la ciudad canibal, el dron en el jodido hotel y, tener una puta almohada de el?, desde que regreso no haces otra cosa mas que pasar todo el tiempo pegado a las pantallas-.

El televisor no sabía cómo negar sus acciones o defenderse si quiera de tales acusaciones que incluso velvette sabía. Era verdad que después de siete años estaba más pendiente de alastor, aunque quisiera negarlo no podía esconder el echo de que se preocupaba por el después de no haberlo visto durante tanto tiempo pero era solo eso simple preocupación disfrazada en odio aunque no supiera disimular muy bien.

-¡pues yo no tendría que pasar todo el tiempo con alastor si tú no pasarás todo el tiempo con esa puta barata y le dieras tanta importancia como para hacer todo este drama, solo por qué no tienes su jodido culo pegado en tu verga!-.

-¡ya te dije que no es eso, mierda enserio no puedes entenderlo? Estoy celoso de ese jodido venado de cuarta por qué te quiero para mí solo ok¡-. Grito la polilla cansada de esconder sus celos y sus sentimientos por su socio. Después de tanto tiempo era inevitable no sentir algo por ese estúpido televisor y ahora solo esperaba que fuera mutuo para no quedar como un completo imbécil.

El contrario abrió los ojos a más no poder por la impresión de saber que su socio tenía celos de su enemigo y que incluso podía deducir que estaba enamorado de el o que al menos le gustaba.

-debe ser una puta broma, es enserio lo que me estás diciendo por qué para tu información, se llama estar enamorado idiota y de ser así entonces yo también lo estoy maldita polilla de mierda-.

Realmente cuando empezó todo esto, solo creía que iba a ser la misma discusión sin sentido de siempre, empezar destrozando el estudio de la chica, para que ella llamara a su socio y después el le trajera los empleados que ganaron menos ese mes, para que no tuviera que masacrar a las modelos de velvette. Así que esto era lo que menos se esperaba cuando empezaron a discutir.

Simplemente nunca pensó que algún día se confesaría y si eso pasaba solo esperaba un rechazo por parte del contrario, después despertar y haber olvidado todo, ya que solo estaban borrachos y estaban diciendo puras estupideces. Pero el que ahora mismo en una discusión por una tontería y celos se le allá salido fue lo más estúpido que a echo sin estar borracho o drogado y más estúpido aún que el sentimiento sea mutuo.

-espera, no estamos borrachos cierto?-. Preguntaba la polilla incrédula de lo que acababan de decir.

-nop-. decía el televisor con las mejillas ardiendo por haberse confesado de la peor manera. Que inteligente de su parte haberlo echo en medio de una discusión.

-y ahora que hacemos- cuestionaba el proxeneta a su compañero siendo inexperto en esos temas.

-no lo se, tal vez decirle a vel-. Respondía siendo lo único que creía prudente en ese momento.

Los dos no sabían que decir o que hacer, nunca habían estado en esa situación antes, que no fuera borrachos pero ahora que pensaban con claridad y estaban en sus cinco sentidos era mucho más difícil de lo que creían.

-quieres cojer?-. preguntaba la polilla sin tener otra idea en el la mente.

-por favor-. al igual que el proxeneta también pensaba que solo era otro drama más, igual a los otros por lo que no tenía pensado el discutir, ponerse celoso, confesarse y terminar cojiendo con su ahora nuevo novio.

Sabían que no duraría, que a la mañana siguiente lo olvidarian por todo el éxtasis de la noche anterior, sabían que serían de lo peor como pareja celando al otro de cualquier cosa, básicamente ellos no serian el modelo perfecto, por su puesto que no, era obvio que serian toxicos y abusivos, pero sabian que no siempre seria asi y que tendrían esos momentos de intimidad donde se entregarían el uno al otro con amor y no lujuria como solían hacerlo.

Sabían que despertarían y estarían cubiertos por las alas de la polilla y que en las noches está se quedaría viendo por horas la pantalla azul de su novio asta quedarse dormido, eran concientes de que despertarían cada mañana y se preocuparían por qué desayunara el otro, que al final del dia estarían el uno para el otro ya sea para cojer o para contarse cada una de sus mierdas por mas insignificantes que fueran y apoyárse a pesar de todo.

Sabían que no sería perfecto y que discutirían más de lo común pero de todas formas querían intentarlo y hacer que funcionará.