¿Que? ¿No estoy muerto? ¿Sigo respirando? ¿Mundo real eres tu? Con un gran dolor en el pecho, maldición, alabado sea el idiota quien creo estos trajes de asesinos. Ese maldito templario, apunto hacía un botón de metal. Sigo con vida.

Mire a mi alrededor, en el suelo estaba el cuerpo de ese maldito Crawford Starrick. Vaya... ese Cormac no le tiene piedad a nadie, no tiene corazón ni sentimientos. Es un hijo de puta. Fui hacía el cuerpo, debe tener aunque sea un revolver este idiota. ¡Bingo! Le quedaban 6 balas, tendría que buscar más... o robar más. Lo que venga primero.

Me levante con dificultad y guarde el arma. - Voy por tu cabeza Shay-

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Estaba rezando de que hubiera apuntado bien. Estaba demasiado preocupado. Sonará muy pervertido, pero todas las veces que desvestí a Jacob en aquello tiempos de pasión, me permitió estudiar como iban compuestos y de que estaban hechos los trajes de esos asesinos. Cada lugar en donde se encontraba cada botón de metal.

Ojalá haya apuntado bien y la bala haya dado en un botón que estaba debajo de la primera capa del traje y no lo haya matado de verdad.

Con tan sólo pensar en esa idea, me destrozaba y culpaba cada maldito minuto.

En eso, en el bar en la que me encontraba, un hombre entró disparado gritando alarmado "¡¡Un hombre me ha robado mis armas!!" ¿Uh? Eso no sería de mucho sorprender, sólo que aquí muy, muy raras veces sucedían esas clases de cosas.

Salí de aquel lugar, se volvió estresante, el atardecer cayo y las calles estaban vacías. Caminaba con mi mente enfocada en mis pensamientos. Hasta que un disparo se oyó sacándome de mis pensamientos, la bala golpea contra una pared que estaba a mi lado. Paso demasiado cerca de mi cara.

Voltee a ver quien disparo, y era Jacob.

- ¡¡Jacob!!- Estaba alegre al saber que seguía con vida, corrí hacía él dispuesto a abrazarlo... pero un fuerte ardor en mi mejilla me hizo retroceder y un rodillazo en el estomago me puso de rodillas y sin aire. - Jacob...-

- ¿Así que lo nuestro no significó nada? ¿Verdad Shay?- Como detestaba ser templario. Como detestaba haberme enamorado de la persona al que tenía que matar.

- No fue así... Jacob... yo te am- Fui interrumpido por una cachetada.

- Te ame, te acepte aunque fueras templario.. te di todo de mi, me entregue cuerpo y alma sólo para amarte... ¿Y así me lo agradeces?- Quería llorar, gritar, decirle lo mucho que sentía. Pero necesitaba ser fuerte.

- Perdóname Jacob... no sabes cuanto me arrepi- Otra cachetada. - ..ento...- Finalicé.

- Me arrepiento al no haberte matado ese día que te conocí...- Eso me dolió. - La próxima vez que intentes matarme.. intenta apuntar bien- Me reí por lo bajó. - ¿De que te ríes idiota?-

- Jaja, Jacob.. siempre tan ingenuo... si te hubiera querido matar... te hubiera apuntado en la cabeza- El rostro de Jacob delato su confusión. - ¿Enserio crées que después de tantas veces que te desvestí hasta dejarte desnudo y volverte vestir.. ya no sabría cada parte de tu traje? ... el sexo sirvió para algo... ¿No crées?... no soy capaz de matarte Jacob.. nunca lo fui... me enamore de ti al instante... y no me arrepiento de nada, my love- Agarre mi insignia templaría y la arranque de mi traje. - Por ti...- Tiré lejos la insignia. -... dejaría todo lo que tengo... así sea abandonar a los templarios o unirme a los asesinos-

Jacob no podía decir nada.

- Yo...- Ahi se viene el "lo lamento".

- Callate y bésame maldito idiota- Me hizo caso. Echaba de menos a este imbécil de mierda.