Titulo: Lo tumbaron.
Tom Holland y lectora
Advertencia: Se me salió lo venezolana con este OS, así que sí eres de otra nacionalidad, y no entiendes algo... Tranquila.

Me levante con calma, no tenía muchas ganas de hacer nada, realmente no estaba de ánimo para nada. Hoy era uno de esos días en lo que la depresión me invadía sin motivo.

Removi mi pelo con una de mis manos, dándome cuenta del desastre que tenía en mi cabeza. Rodé los ojos frustrada, sacando mi ladillado cuerpo de la cama y poneniendome de pie, en dirección al baño.

Después de hacer mis necesidades y cepillar mis dientes, até mi pelo en un moño bastante desordenado, viéndome al espejo del lavamanos. Y casi me da un patatus...

Mis ojeras estaban mil veces más grandes que hace unos meses, mi piel estaba de un pálido casi enfermizo, mis labios secos y agrietados, y para rematar... Parecía un espanto. Entonces caí en cuenta del cambio tan radical que tuve desde que me fui de Venezuela. Tenía ya 6 años fuera del país, pero nunca me había detallado tanto como entonces, me sentía como una extraña en el cuerpo de una muy maltratada y deprimida mujer.

-¿Cómo carajos es que Tom se fijo en mi? Nawebona'... Un zombie es mas bonito que yo. Nojoda ni el Transdracula esta tan escoñetado...-Exclame atónita, sintiendo a alguien detrás de mí.

-Good mornin' for you too...-Ironizó mi británico favorito al escucharme. Pues sí, después de andar 2 años conmigo entendía español, y parte de las groserías típicas.

Por eso lo de "Mamaguevo means Have a good day" ya no servía, pues el chico conocía el verdadero significado de casi todo mi repertorio de insultos. Desde el: Maduro coño e' tu madre, hasta el: Mamaguevo. Thomas se había dedicado a investigar a profundidad todo sobre mi país de origen, y eso de alguna forma  se lo agradecía, al menos ya dejó de comerse las árepas con tenedor...

-Perdón...-Me disculpe, acercándome para abrazarlo con fuerza. Apretando mi cabeza contra su pecho.

Thomas, aun dormido un poco, me abrazó también, acariciando mi espalda con su mano.

-¿Estas bien, mocosa?-Pregunta el dejando un besito en mi coronilla. Negué aún escondida en sus brazos.-¿Quieres que haga el desayuno yo, hoy?-Pregunta de nuevo, volviendo a besar mi frente, esta vez obtuvo mi afirmativa, lo que le sacó una pequeña risita.

Me separe a regañadientes, mientras que él se metía a la ducha y yo salía del baño para darle algo de privacidad. Encontrándome con nuestro cuarto hecho un desastre.

'Lo que pasa cuando Holland se pone Horny...'-Maullo mi conciencia ante los estragos de la habitación. Podría jurar que había una de las medias de Tom en el ventilador del techo.

Bufando, me dedique a arreglar todo a mi alrededor refunfuñando cuando no lograba alcanzar algo o gritando cosas como: "Maldito Maduro, por su culpa es que la cama suena así" ó "Verga que arrechera con este bicho del coño" para referirme a algún objeto que no colaboraba con mi mal humor mañanero.

Para ponerle la guinda al pastel, mi teléfono repicó en el momento en que me encontraba barriendo en el balcón del departamento, cómo tenía la ventana cerrada (es decir las "puertas" que daban al balcón) no logré escuchar a tiempo. Por ende cuando regresé adentro cómo 20 minutos después, me encontré con Tom sosteniendo una bandeja llena de comida y buscando algo que ver en la tele.

Me acerque al británico rápidamente, picandole el hombro para que me viera.

-Necesito que me ayudes a bajar esto, cariño.-Señale la media en el techo cuando se dignó a pararme bolas. Si tuviera una cámara para ese momento, les juro que hubiese enmarcado la foto con la cara de Tom cuando vio su prenda, sus ojos se abrieron más de los debido y su boca formó una "o".

Entre risas y mi persistente chalequeo por lo desesperado y bestia que se pone mi novio cuando quiere sexo, nos pasamos la mañana. Ambos saltando de vez en cuando de canal, o hablando de cualquier cosa que se nos ocurriera.

Debían de ser no más de las 3 pm, cuando mi teléfono sonó de nuevo. En ese momento fue que me digne a revisarlo por primera vez en todo el día, sorprendiendome en desmedida cuando me conseguí con 45 llamadas perdidas de mi mamá, 20 de mi abuela y otras 18 de mi tío. Además de que los grupos familiares de WhatsApp y mis redes sociales estaban al tope de notificaciones. Preocupada, me separe del abrazo de Tom, quien se precipitó conmigo al ver mi reacción tan brusca.

-Revisa tu teléfono.-Le ordene desesperada, tirándole el aparato para que lo viera también, abriendo yo rápidamente el WhatsApp de mi mamá primero.

Mommy 😍
124 mensajes sin leer.

-¡_______!
-Hay golpe de estado
-La calle está prendía.
-ATIENDE CARAJITA DEL COÑO.
-Verga mardita, pa' que coño tienes un hijo de puta teléfono si no lo vas a atendér.
-ATIENDE MAMITA.
-NOJODA, PRIMERO ATIENDE EL COMADANDTE INTERGALACTICO CELESTIAL QUE TU.
-Segurito estas cogiendo con el gringo que no atiendes malparia.

Cosas así por el estilo eran las que habian en los chats con mi abuela, mi abuelo o mi tío. Y cosas como: "Crisis en Venezuela: El nuevo intento de golpe de estado que está siendo liderado por opositores y militares exiliados", "ULTIMA HORA: Militares exiliados regresan a Venezuela, armados hasta los dientes, con apoyo de unidades de fuerza internacional como la INTERPOL y la CIA, decididos a dar un golpe de estado fulminante" ó "Líderes opositores exiliados: Los nuevos héroes de Venezuela" eran los titulares que noticieros como Caracol, CNN y la BBC tenian.

Mi corazón latía con fuerza, mis ojos se estaban comenzando a empañar. Esto tenía que ser el mejor sueño de mi vida...

-Bonita.-Llamó Tom, pasando un brazo por mis hombros y obligándome a verlo, él tambien tenía una sonrisa bastante grande en su rostro.-Mira...-Señalo la televisión, donde estaban dando un live desde Caracas. Cientos de tanquetas y yo iré a saber cuantos militares con distintos uniformes, todos apuntando a un sólo lugar: El palacio presidencial de Miraflores.

Yo ya estaba llorando a mares, tomándole con fuerza la mano al castaño a mi lado, quien se dedicaba a darme besos en la cabeza o sobarme la espalda mientras que yo solo podía obsercar y  exclamar: Por favor, que ahora si tumben al maldito. Por favor, por favor, por favor que se acabe esta desgracia, marico.

-Presidente Nicolás Maduro, se le ordena desalojar el lugar con todos los presentes.-Dijo una voz que por su acento era gringa.-¡No hay a dónde ir, Senor!-Exclamó el mismo hombre por la bocina.

Segundos después, en los que aguante la respiracion pegando chillidos abrazando al pobre chico a mi lado, quien correspondia lo mejor que podía, salieron las lacras que causaron más 27 años de desgracia a un país, con las manos en alto.

Delcy Rodríguez, Diodado Cabello, los Taarek, la escoria de Elaisami junto a Arreaza, y por último, bien cargado y sudando, Nicolás Maduro. No pasó ni un segundo, cuando ya todos estaban esposados y siendo metidos a una de las tanquetas.

-Se acabó...-Murmure aún sin creerlo. El corazón me latía con fuerza, sentía como si se fuera a salir de mi pecho, la emoción y la esperanza que pensé perdidas hace años, de pronto habían salido a flote.-¡Tom, se acabó! ¡LO TUMBARON!-Grité eufórica, derramando lágrimas a más no poder, abrazándome con fuerza al castaño chillando en su pecho, de nuevo.

Sentí como él me devolvía el gesto con igual fuerza, antes de coger su teléfono.

-Hola, señora K.-Saludo el chico con la voz algo rota, dándome cuenta de que él también estaba llorando.

-¡Ay mijo, lo tumbaron ¿viste? Al fin tumbaron a ese desgraciado!-Grito mi madre al teléfono, aun peor que yo. Tom respondió de manera afirmativa. Explicando que habíamos visto el noticiero, yo no podía ni articular pio del shock que tenía.

-Todo va a mejorar.-Respondo yo después de un rato de estar chillando y gritando en el pecho de mi británico, quien asintió igual de emotivo, antes de plantar con cálido beso lleno de cualquier cantidad de emociones en mis labios.

-¡MADUROOOO!-Exclamó mi familia al teléfono cuando Tom y yo nos separamos.

-¡Coño e tu madre!-Respondimos al unísono, riendo con júbilo.

Al fin se había acabado. Y si bien faltaba un largo trecho que recorrer, y más personas a las que atrapar, esto era el comienzo de algo grande. Algo muy muy grande.

Sé que van a salir muchas críticas de este One Shot, que si los temas politicos, que si las groserías, o lo "fantasioso" que es.

Pero les voy a decir algo, este Os representa (a mi parecer) el día que todo venezolano quiere llegar a ver....

Y si, llore escribiéndolo, porque lo escribi con un ataque de esperanza arrecho.

Espero les guste. Y perdonen si las hice llorar.

La escritora.