32
Titulo: ¿Eres tú?
Tom Holland y lectora
Advertencia: posible smut.
Mierda, ya iba tarde. De nuevo...
Shawn me había llamado para ir con él y guiarlo por Londres, pero me había quedado dormida.
Salí apresuradamente de mi casa, sin darme cuenta que mi vecino también, así que chocamos en el pasillo.
-Lo siento/ Excuese me, please...-Dijimos ambos al mismo tiempo. Sin darme cuenta que había hablado en español.
-Im so sorry, i did not see you...-Me disculpe como debía. Sonriendo nerviosa, sin subir mi mirada aún. Escuché la risita divertida de mi contrario.
Frunci el ceño, pensando en qué le parecería tan gracioso al extraño.
-No es nada, _____. Perdoname a mi, que no te vi.-Esa voz... ¡Oh por dios! No podía ser él, ¿Cierto?
-¿Tom?-Cuestionó riendo yo también. Alzando mi vista está vez. Encontrándome con el castaño sonriendo. Si, era él.-¿Eres realmente tú?-Pregunté asombrada, tenía años sin verlo.
El británico asintió sin dejar de verme. Yo reí apenada.
-El mundo es muy pequeño, ¿no crees?-Cuestiona comenzando a andar, conmigo a su lado.
Sonreí de nuevo, asintiendo en repuesta. Sin poder creer que de verdad fuese él.
Thomas y yo habíamos salido un par de veces mientras yo estaba en la universidad, pero dejo de ir un día, nunca supe el por qué. De eso pasaron 4 años, y no le guardo rencor alguno.
Comenzamos a hablar de cosas triviales y de cómo nos había ido esos años, ahí fue cuando me enteré que él había comenzado su carrera de actor, mientras que yo seguía siendo la ayudante de composición de Méndes.
-Me tienes que dejar escucharte cantar alguna vez, pequeña.-Comenta él emocionado.-Estoy seguro de que cantas hermoso.-Yo sonreí sonrojada ante su halago. Dándome cuenta de que lo había seguido hasta su auto.
-Yo... Perdón, creo que me concentre tanto en nuestra charla que olvidé que iba al bus.-Argumente nerviosa. Sacándole otra sonrisa al castaño.-Nos vemos, Tom.-Me despedí, para comenzar a caminar hasta la parada.
-¡Espera!-Me grita. Yo me detengo de inmediato, más al ver lo cerca que quedó de mi.-Yo...emmm, si... Si quieres... Yo te puedo llevar.-Tartamudea nervioso. Sin despegar su mirada de mis labios.
Mi respiración se corto en ese momento. Pues se me había olvidado lo hermoso que era Tom. Y no lo digo porque antes no lo viera de cerca, sino que en serio tenía unas facciones que eran realmente bellas.
-No quiero ser molestia, Tom.- Me excuso ante, pero no me muevo. Sin poder evitar mantener la vista fija en esos hermosos labios rosados.
-Nunca, vamos...-Argumenta, sacándome de mi trance. Comenzando a caminar de regreso a su auto. Cabe destacar que estaba realmente sonrojada.
Llegamos una vez más al vehículo y él me abre la puerta de la parte trasera, yo me adentre con cuidado, sin dame cuenta de que mi bufanda se había enganchado uno de los botones del Jesey del castaño.
El enredo, causó que Tom y yo cayeramos recostados en el asiento, con él encima de mi.
-Yo...-Dice él nervioso.-Lo siento.-Se disculpa, dejándome confundida.
En el momento en que le iba a preguntar el por qué de su disculpa, Thomas me besa, y yo terminé respondiendo al sentir la calidez y dulzura de sus labios sobre los míos.
Comenzó siendo un beso bastante dulce, el cual poco a poco se fue tornando más fuerte. Tanto, que enrolle mis piernas en su cintura, y él me se sostuvo del asiento para no aplastarme.
Sus labios eran demasiado adictivos... Realmente no sabía que hacía, pero no quería parar. Y creo que él tampoco...
Poco a poco, la ropa comenzó a ser un estorbo en ambos, por lo que comenzamos a desvestirnos. Escuche como la puerta del auto era cerrada, mientras que Tom se sacaba el Jersey y el suéter cuello alto que traía.
Yo imite su acto, solo que quitándome la chaqueta y la camiseta que tenía encima. Quedando en franelilla.
Volvimos a besarnos una vez más, agradeciendo que el auto tenía espacio suficiente como para movernos con libertad.
Holland bajo sus besos a mi cuello, donde dejó un pequeño chupete y una mordida que me sacó de juicio. Con mis gemiditos saliendo de vez en cuando.
Me vi tentada a sacarle la camisa, y él se dejó sin mayor problema. Dejándome ver lo bien trabajado que tenía el abdomen, y lo perfecto de sus brazos.
Holland continuó con sus besos por mi cuello, mientras que yo me dedicaba a acariciar su espalda a medida que él se acercaba más a mí hombro. Sacando con delicadeza los tirantes de mi franelilla y los del sostén.
-No sé cómo terminamos así, pero te juro que paro en cuanto tú me lo pidas.-Susurra sonrojado el castaño, volviendo a ser el Tom tímido y tierno que conozco.
Relami mi labio inferior mientras asentia. Thomas tenía razón. Entonces, las neuronas volvieron a funcionar en mi cerebro, abriendo mis ojos ante lo que estabamos a punto de hacer.
Mi respiración se torno pesada, al igual que mis latidos.
-Mierda... Yo, en serio lamento esto.-Susurre en shock por lo que estábamos a punto de hacer.
Tome mis cosas, me arregle los tirantes y salí de ahí. Corriendo como la cobarde que soy...
¿Cómo lo iba a ver a los ojos ahora? La habíamos cagado, en serio lo habíamos hecho...
Ese día me la pase distraída toda la tarde, por lo que el tour con Shawn salió del asco.
-_____...-Me llamo el castaño, pero no le respondí. Ni me moví, mejor dicho.-¡______!-Grita en mi oído, sobresaltandome.
-¿Q-que pasó?-Cuestionó asustada. Sacándole una risa a Méndes, quien me miraba divertido.
-Nena, tengo rato diciéndote que Thomas esta llamándote.-Susurra con una sonrisa pícara. Haciéndome sonrojar.-¿Cuando pensabas decirme que habían vuelto? Sabes que quiero ser tu padrino en la boda.-Bromea divertido. Haciéndome reír con él.
Negué con la cabeza con una sonrisa.
-Thomas y yo no somos nada, Méndes. - Corrijo tomando un trago de mi café. El alza una ceja con escrutiño.
-Claaaaro, por eso es que esta viniendo hacia acá con un ramo de flores y mirada de cachorro.-Comenta con ironía, señalando a mis espaldas.-Y yo soy Harry Potter, me cuentas todo lo que pase. Yo me voy.-Murmura sonriente, antes de tomar sus cosas y levantarse.-Recuerda usar el condon, no quiero ser tío aun.-Susurra para mi, antes de irse.
Al tiempo en que llega Tom.
Me quedé anonadada viéndolo, con la boca ligeramente abierta y un sonrojo bastante fuerte en mis mejillas.
-Quiero arreglar las cosas...-Murmura apenado. Tal parecía que me había quedado un buen rato viéndolo, y él había comenzado a hablar, pero creo que no le preste demasiada atención.-Sé que a penas y estamos volviendo a hablarnos, pero te ruego que me dejes hacer las cosas bien esta vez.-Pide este, mientras se sienta en la silla en la cual anteriormente estaba Shawn. Él extiende el ramo hacia mi, mientras que yo dudo entre aceptarlo o no.-Te juro que no soy esa clase de chico que solo quiere un revolcon. Sabes que ese no es mi estilo.-Añade él con una sonrisa nerviosa.
Una vez más, en todo el día, mi respiración se corta, con escalofrío recorriendo mi cuerpo. Sonrío débilmente, tomando las flores.
-Vamos a iniciar de cero, ¿Te parece?-le pregunto con una sonrisa, a lo que él asiente feliz en respuesta.
Sé levanta de la mesa y se para frente a mí, estirando su mano en mi dirección, con una sonrisa de felicidad que hizo sentir mariposas en mi.
-Hola, soy Tom Holland.-Dice el como si no me conociera. Yo rio nerviosa ante eso, estrechando su mano y escondiendo un mechón de mi cabello detrás de mi oreja.
-Un gusto, Tom. Yo soy _____ Dallas.-Comento sonriendo, mientras que ambos estrechamos nuestras manos con fuerza.
-¿Puedo sentarme?-Pregunta con una mueca divertida. Yo asiento, haciendo un ademán con mi mano para indicarle que proceda.
-Por supuesto...-Añado viéndolo con diversión.
Realmente sería muy lindo lo que saldria de este nuevo reinicio... Me alegra que Tom haya reaparecido en mi vida.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top