ESPECIAL #pechictubre, Disfruten !.
MitsuKim07
Yawar1shullka
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SiberiaX
(No se palteen por los otros shipps Nenis xdd)

“Amor en lugares inesperados.”

Era ya medio día y el sol se encontraba en su punto más alto, en casa una hermosa mujer castaña de rasgos delicados y piel canela silbaba mientras limpiaba tranquilamente uno de los estantes de su sala hasta que sus ojos se toparon con una pañoleta roja la cual tenía un número escrito a la rápida con marcador negro. Al tener la prenda en sus manos ella sonrió girándose a ver a su esposo quien estaba semi acostado en el sofá revisando gráficos de su empleo en una tableta.

—Oe, feo, ¿Recuerdas el día en que nos conocimos? —Tarareó la de ojos azules sentándose a su lado, el azabache soltó una pequeña risa dejando de lado el aparato—.

—Cómo olvidar el primer día más importante de mi vida.. —Aún manteniendo la sonrisa pasó su mano derecha por el parche que cubría su ojo del mismo lado—.

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Una indomable peruana iba con prisa de un lado a otro atendiendo a los heridos de las marchas pacíficas que se tornaron en campos de batalla por culpa de las autoridades del mismo país, el pueblo de Chile estaba alzando la voz para lograr el cambio y como en toda dictadura...trataban de reprimirlos con violencia, pero el pueblo ya no iba a callar, los chilenos eran guerreros hechos y derechos.
Aquella joven de apenas 22 años estaba de vacaciones en el momento en que el estallido social comenzaba a prender y no dudó ni un segundo en quedarse a ayudar luego de oír por muchas bocas que probablemente habría que prepararse para pelear. Ahora, ella y y otros cientos de voluntarios en todo el país tanto médicos o de cualquier otro ámbito que deseasen ayudar estaban repartiéndose para detener sangrados y limpiar los ojos de jóvenes y adultos que se veían afectados por los perdigones y bombas lacrimógenas que lanzaban los carabineros a las personas sin importarles el hecho de que velaban por una mejor oportunidad para el futuro de la nación.

Entonces.....entre todo el humo y los cánticos del himno nacional, un muchacho pasó corriendo con la bandera mapuche en hombros huyendo de la misma autoridad que debía cuidar de ellos, lastimosamente el humo de los pequeños incendios y de las lacrimógenas hacían difícil el desplazarse en esa zona por lo que el azabache desconocido se estrelló contra otro hombre que huía y lograron atraparlos, Victoria había sido advertida muchas veces de no meterse entre los carabineros cuando estaba sola pues podían llevársela como a muchos otros a quienes jalaban directamente a las patrullas y trágicamente desparecían. Sin embargo la impotencia de ver cómo pateaban con brutalidad a ese chico no la dejó hacer de la vista gorda pues su madre desde niña le inculcó en proteger a cualquiera que lo necesitase, así que elevando una una rápida plegaria a los Apus y a Inti.... tomó uno de los extintores vacíos y corrió lo más silencioso posible golpeando a los uniformados en los cascos desorientandolos el tiempo suficiente para tomar al chico de la bandera y decirle al otro hombre que corra lejos, en el momento en que la adrenalina bajaba luego de correr algunas calles notó que su mano estaba húmeda y al bajar la vista vio Sangre.

Asustada giró a ver al extraño y ahogó un gritó de pánico al ver su ojo derecho, estaba tan hinchado y sangrante que manchaba la mitad de su rostro con carmesí, el ojo verde visible del joven la miraba con un extraño brillo mientras la histérica castaña buscaba entre los bolsillos de su chaleco táctico alguna compresa húmeda empaquetada de las tantas que les habían repartido a los ayudantes, una vez encontrando un par las colocó sobre el área afectada en lo que recuperaba el aire pues no estaba muy acostumbrada a correr tanto para salvar su pellejo.

—¿Cómo te sucedió esto y hace cuanto?, Tal vez aún podamos salvar el ojo, por Dios ¿Me estás escuchando?. —La peruana no entendía y le desesperaba el silencio el ojiverde que la miraba bobamente, tal vez tenía alguna contusión por los golpes de hace un momento—.

—¿Ah?...ah si, un perdigón creo..o una wea así, no me fijé hace rato kdjsks —Rió él como si contase cualquier otra cosa, de hecho ya ni sentía el dolor por algún motivo—.

La expresión de extrañeza de la chica era épica, ¿Enserio se estaba riendo mientras corría el enorme riesgo de perder un ojo o desangrarse?, Chileno loco....... simpático pero loco.

—Debo llevarte con el resto de mi equipo para que te atienda un experto, ¿Crees que puedes caminar unas calles más? —Cuestionó aún preocupada por su estado aunque lo viese actuar como si nada—.

—Si si, claro po. Toi de pana wachita~ —Una vez más el tonito que usaba el desconocido descolocaba a la castaña, efectivamente este chico tenía una contusión grave—.

—Supongamos que entendí lo que dijiste... —Murmuró esta limpiando la sangre de su mano con un poco de papel obtenido de otro bolsillo y luego de mirar atentamente a su alrededor tomó la mano el pálido para comenzar a caminar nuevamente, debía tenerlo sujeto en caso de que de un momento a otro se desplomara o tuviesen que correr—.

Mientras los pensamientos de la peruana eran de preocupación y auto preservación, la mente del chileno era un arco iris con risas...y eso que no había fumado desde la mañana, tal vez si se golpeó un poquito al caer por los pacos culiadøs....o cuando se resbaló del monumento......o cuando uno de los "Huanacos" lo aventó al suelo por la fuerza del chorro.....o tal vez cuando..., bueno, probablemente los moretones se le quedarían como tatuajes.

—Es la quinta vez que le hablo y sigue sonriendo así. ¿Crees que sea muy grave, Mafer? —Preguntó la canela a su jefa de grupo que a pesar de la gravedad de la apariencia del joven, soltó una risa percibiendo a primeras la situación de los chicos— ¿Porqué todos se ríen hoy?, ¡Por Inti!

—Calma calma querida, ve a beber un poco de agua que estás toda pálida, yo me encargo del Romeo. —La mujer mayor palmoteó con cariño la coronilla de Victoria antes de que esta se fuera a hidratarse sin rechistar pues su garganta pedía agua a gritos.

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—Al parecer si era grave, que bueno que lo trajiste hasta aquí perucha, no hubiese pasado de la tarde si seguía desangrándose y recibiendo de frente el gas en ese estado, buen trabajo campeona, nuestro grupo a acabado por hoy. —Comunicó María Fernanda, la agradable recepcionista que se la luchaba por sus compatriotas desde el inicio de las marchas, ella tenía dos hijos por los cuales salía a exigir un Chile digno—.

—Bueno, supongo que esta es la despedida, chico que se cree invencible. —Finalmente ella sonrió mirando al chileno que se levantó un poco para tomarle las manos y depositar en estas su bandera Mapuche junto a una pañoleta roja—.

—Soy Sebastian. Guardamelos, volveré...

—".... También por ti.." —Completó el azabache cuyo parche de estrella resaltaba, con todo el amor del mundo abrazó a su esposa llenándola de besos mientras reían—.

Sebastian acabó por perder ojo y por ende tuvieron que extirparlo pues estaba inservible. Muchos jóvenes tuvieron el mismo desafortunado destino durante las marchas de protesta en el 2019, los perdigones usados por los carabineros fueron apuntados directamente a los ojos de muchas personas inocentes que sólo querían la mejora de su hogar, muchos otros desaparecieron y otros tantos más perdieron la vida o quedaron incapacitados por el resto de la misma. Una semana después salió del hospital y exactamente a la misma hora en la que por primera vez se cruzó con aquella chica que ya le robaba el sueño y ahí, con los rayos del sol adornando su brillante cabello y suave piel la volvió a ver como el ángel que era.

—¿Ahora si vas a decirme tu nombre? —Murmuró este al oído de la fémina que de encontraba de espaldas organizando cajitas con tranquilizantes y analgésicos, soltó una risita ronca cuando la vio girarse sorprendida....ella traía su pañoleta puesta, en la cuál había colocado su número con ayuda del paramédico que le echó la mano apuntándolo—.

—Puedes llamarme tu victoria —Respondió la peruana son una sonrisa amplia, ese fue un excelente juego de palabras—.

T h e  E n d . . .