- Que quieres Jake? - Dijo Nico.

Jake era un nuevo semidios. Jake era alto con el pelo azul y ojos del mismo color, era bastante moreno y era hijo de Deméter.

A Nico lo sacaba de quicio ese chico no lo dejaba en paz, el iba a un sitio Jake lo seguía, a cualquier sitio. Ya no podía ni siquiera estar con Leo a solas.

- Solo quería practicar contigo con la espada. Y una pequeña apuesta, si yo gano tenemos una cita hoy en la playa, si ganas tu te dejo en paz.

Nico se puso en guardia igual que Jake. Estuvieron cadí media hora cuando Nico estaba a punto de ganar, pero Jake hizo que una enredadera se enredara en su tobillo.

Eso hizo que el hijo de Hades se desequilibrara y perdiera la espada, por lo que hizo que Jake ganara.

- Es trampa, has usado tus poderes.

- No dijimos nada de no usarlos. Nos vemos en la playa.

★★★★★★★

- No me lo puedo creer! - Gritaba Leo.

- Ese chico es insufrible!

Ambos chicos están enfadados, el culpable es un hijo de Deméter.

- A un así tengo que ir, hice una apuesta. - Se lamentaba Nico. - Pero no te preocupes no pasara nada entre el y yo a parte de aburrimiento mortal.

Entonces ambos se rieron soltando todo su enfado en esas risas.

★★★★★★★

Nico había llegado a la playa, junto a la orilla había una toalla y encima distintas comidas. Jake estaba sentado mirando el horizonte.

- Hola, Jake. - Dijo Nico.

Pero Jake no se movía, después de un rato Nico empezó a preocuparse porque el hijo de Deméter no reaccionaba.

- Jake.

Entonces Jake se giró, tenía una rosa negra en las manos.

- Dime Ángel, te dolió cuando te caíste del cielo.

Entonces cometió el peor error de su vida besó al hijo de Hades, este se separó rápidamente y le contesto.

- No, sabes porque? Porque Leo estaba allí para cogerme. - Dijo Nico levantando una ceja.

- Booom! - Todos los amigos, y novio, de Nico salieron de detrás del arbusto.

- Chicos, en serio, se cuidarme solo.

- Claro que si primito.- Dijo Percy.

- Vete Jake. - Dijo Anabeth.

- Y no vuelvas a molestarlo. - Dijo Piper usando su embrujahabla.

Jake salió corriendo muriéndose de vergüenza.

- Yo sabía que me amabas.

- No digas tonterías Leo. - Pero el rojo de su cara lo delató.

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Es uno de los capítulos de los que más me gustan a pesar de ser corto.

Besos,
Yo.