Roommie
El joven moreno abrió lentamente la puerta de la que seria su habitación por, al menos, un año. Aquí comenzaba su vida en la universidad, su vida como adulto y su primera vez viviendo solo.
Al entrar vio a un chico un poco más alto que el, de piel pálida y cabello castaño dándole la espalda.
-Oh, hola. - saludo el chico cuando se volteo a verlo.
-Hola, soy Gulf. - se presento el recién llegado.
-Yo me llamo Mew. - dijo su nombre el más alto. -Espero nos llevemos bien porque viviremos un año juntos. - comentó divertido mientras se giraba para seguir sacando sus cosas de las cajas.
-Yo también espero que nos podamos llevar bien. - dijo el moreno mientras comenzaba a sacar sus cosas. - ¿En que facultad estas?. - pregunto queriendo saber más de su compañero de habitación.
-Música, ¿tu?. - pregunto de vuelta el pálido, tenia familiares que trabajan en esta área, algunos músicos otros cantantes, compositores y productores, debido a esto siempre se vio envuelto en ese tipo de arte.
-Ciencias del deporte.- Gulf había adorado el fútbol desde pequeño y sus padres lo hicieron practicar muchos deportes por lo cual les tomó tanto gusto como para estudiar una carrera relacionada.
Mew no lo admitiría en voz alta, pero ese chico lo cautivo en el segundo que lo vio. Ese cabello negro y rebelde, su piel morena, sus ojos redondos color café oscuro, su cuerpo delgado pero bien formado, su estrecha cintura y sus largas y fuertes piernas, podría enamorar a cualquiera.
Antes que el mayor pudiera decir algo un celular sonó, anunciando una llamada entrante. El moreno sacó su celular, sonrió al ver el nombre del contacto y rápidamente respondió. - Si Phoom, justo estoy acomodando mis cosas, esta bien, más tarde te llamo, te amo, adiós. - Con solo escuchar eso supo que no podría tener algo con el más allá de una amistad.
-¿Era tu novia?. - pregunto el mayor tratando de sonar desinteresado, aunque creía que la respuesta era obvia, quería estar seguro.
-Si, quería saber si ya estaba instalado en la habitacion. - respondió el menor.
-¿Llevas mucho saliendo con ella?. - tal vez no debía inmiscuirse en eso, dado que es algo personal, pero su curiosidad le gano a su sensatez. El menor se quedo en silencio un momento. - No tienes que responder, lamento si te incomoda que pregunte.-
-No, esta bien, hay que conocernos, después de todo viviremos un año juntos. - dijo rápidamente el menor para aclarar el malentendido. - Solo estaba contando los meses que llevo con ella. - ambos chicos se rieron del comentario. -En tres semanas cumplimos dos años. -
-Wow eso es mucho.- comentó asombrado Mew.
-Lo sé, es mi relación más larga. - concordo con el mayor.
Dos semanas habian pasado, se estaban llevando bastante bien, conversaban de clases y sus gustos. Descubrieron que les gustaba jugar video juegos y ver anime.
-Mew, ¿quieres ir a comer conmigo?. - pregunto el más bajito.
-Claro. - respondió gustoso.
-Hay algo que quiero contarte. - dijo el menor una vez estaban en la cafetería del edificio, sentados en una mesa uno al lado del otro y con sus platos, ya vacíos, frente a ellos.
-¿De qué se trata?. - Gulf parecía muy serio el día de hoy, tenía la mirada algo triste y eso le preocupaba pues usualmente solía sonreír todo el día.
-Está mañana mi novia vino a verme a mi facultad, fuimos por un café y me dijo que quería terminar. - el moreno no pudo decir más pues comenzó a sollozar levemente. Mew al verlo acerco más su silla a él para poder posar su mano en la espalda del bajito y darle caricias en señal de apoyo.
-Respira Gulf, calmate un poco para que puedas terminar de contarme que sucedió.- habló Mew en un tono bajo y suave para calmar al chico.
-Ella dijo que ya no siente nada por mi, que soy muy infantil y que no tengo futuro en mi carrera, tiene una semana saliendo a citas con un chico de la facultad de medicina. - cada palabra que decía daña a más su roto corazón y las lágrimas caían más grandes.
-Ven aquí. - Mew abrió sus brazos y Gulf no dudo en acercarse a abrazarlo fuertemente, hundiendo su cabeza en el pecho del más alto. -¿Que tal si mejor volvemos a la habitacion?. - pregunto una vez el menor estaba más tranquilo. En silencio regresaron a su cuarto y tomaron asiento en el sofá.
-No tienes idea de lo mucho que me dolió todo lo que dijo sobre mi, tanto tiempo con ella y no sabía que pensaba esas cosas horribles sobre mi y que este saliendo con otro chico aún estando conmigo me hace sentir tan poca cosa. - las lágrimas volvieron a salir una tras otra, quería desahogar su alma de todo lo triste.
-Gulf no eres poca cosa. - Mew lo tomo gentilmente de la barbilla y volteo su cabeza para que lo viera a los ojos. -Se que solo te conozco desde hace dos semanas, pero estoy seguro de que eres una persona increíble, ella es la que no merece estar con alguien tan increíble como tu. - mientras decía todo aquello limpiaba las lágrimas que derramaba el bajito. -Tal vez no entienda tu dolor, pero haré lo que pueda para demostrarte que eres una maravillosa persona y estar a tu lado debe ser algo fantástico. - Gulf sonrió levemente y abrazo al mayor fuertemente.
-Muchas gracias Mew.- fueron las únicas palabras que el menor pudo articular. Se quedó un buen rato ahí entre sus brazos, se sentía cálido y tranquilo. El mayor le había dicho cosas tan bonitas que sintió su corazón latir rápidamente, no podía creer que pensara esas cosas cuando solo se conocían hace pocos días, pero en estos momentos agradecía eso, por que lo hacía sentir un poco mejor.
-Deberiamos dormir ya, mañana traeré el desayuno para comer aquí, ¿esta bien?. - pregunto alejando un poco al menor de el cuando esté ya estaba relajado y no lloraba.
-No tienes que hacerlo, no quiero molestar. - dijo el menor algo apenado.
-Quiero que te sientas mejor, te lo dije, haré lo que pueda para hacerte sentir bien, así que te traeré el desayuno hasta aquí. -
-Gracias, iré a darme una ducha. - el menor se levanto para irse al cuarto de baño. Mew odiaba sentirse bien al saber que el menor había terminado con su novia, sentía que ahora si podría comenzar a conquistarlo, y el primer paso para eso era hacerlo sentir menos triste por su ruptura.
Temprano se levantó y cambió en silencio para ir a buscar el desayuno, sabía que al menor le gustaba el cerdo crujiente, asi que eso fue lo que compró para ambos. Cuando volvió el menor seguía dormido, por lo que tuvo que ir a despertarlo una vez había acomodado la comida en la mesa.
-Gulf, ya son las diez, vamos a desayunar. - habló en voz algo suave mientras movía el hombro del moreno. Este se romovio hasta quedar boca arriba y lentamente abrió sus ojos. Desayunaron entre platicas casuales, aunque Mew trataba de hacer comentarios divertidos para hacer reír al menor.
Las siguientes semanas se encargo de hacer pequeñas cosas para alegrar a Gulf, le compraba bocadillos, comía o cenaba con el, le dejaba pequeñas notas con chistes tontos y cosas de ese estilo. Además de hacerlo feliz el esperaba estar ganándose su corazón.
A mitad de la noche cuando ya todo estaba en silencio afuera, un chico se despertaba y salía de su cama en busca de la persona más cercana.
-Gulf, ¿no puedes dormir?.- pregunto el pálido al sentir el peso del otro chico en su cama. Pero en lugar de obtener una respuesta, sintió como el chico se sentaba a horcajadas sobre el y comenzaba a besar su cuello. -Gulf, ¿que haces?. - pregunto Mew tratando de quitarlo de encima.
-Quiero tener sexo. - respondió el chico simplemente, mientras se mecia sobre el, haciendo movimientos fuertes sobre su pelvis.
-¿Porque haces esto?. - para el pálido era imposible que el moreno estuviera haciendo eso, no creía que su plan de enamorarlo estuviera funcionando y menos que este le pediría tener relaciones aun cuando no eran nada.
-Quiero hacerlo, por favor. - el tono suplicante de Gulf y los movimientos sobre su medio despierto miembro eran demasiado. Pero justo cuando estaba decidido a alejarlo, el menor lo beso con rudeza, metió su lengua y con desesperación busco la del pálido para iniciar una pequeña pelea.
Mew dejó de pensar con claridad y se dejó hacer por ese sensual chico sobre el. Levantó sus manos y acaricio el redondo trasero del chico, le dio un ligero apretón y Gulf soltó un gemido que se perdió en la boca del contrario. Gulf se separo de él para abrir su camisa de pijama y la de Mew, este giro hasta quedar sobre el moreno y atacó directamente sus pezones, los mordió y chupo a su antojo. El moreno bajo su mano y sacó el miembro del otro de su pijama, comenzando un vaivén lento y placentero. Mew bajo sus besos hasta estar frente al miembro del joven deportista y le bajo el pantalón junto con la ropa interior, sin dudar tomo el duro miembro en su boca. Los gemidos de Gulf eran tan placenteros y excitantes que Mew tuvo que tomar su propio miembro, para tocarlo al ritmo de sus lamidas. El moreno se corrió el la boca de su compañero y rápidamente se quedó dormido, el pálido se acomodo mejor después de vestir al otro y se durmió.
A la mañana siguiente Mew despertó sólo en su cama y no había rastro del chico por ningún lado. Después recordó que Gulf tenía clases temprano ese día y sus preocupaciones se calmaron, aunque aún tenía que hablar con el respecto a lo que sucedió esa noche.
-Mew, ¿ya cenaste?. - pregunto el moreno cuando volvió a la habitación por la tarde.
-No, estaba por ir a comprar comida.- respondió el chico que había estado ahí desde ya hace horas.
-Que bien porque traje la cena para los dos. - comentó sonríente Gulf mientras levantaba su mano para mostrarle la bolsa con los alimentos.
Mew se olvidó por completo de hablar con el sobre su encuentro nocturno, pero se sentía feliz de ver que Gulf estaba haciendo cosas por el, eso le daba esperanza. Las dos semanas siguiente fueron así, algunos días Gulf se levantaba a mitad de la noche y le pedía tener sexo, aunque nunca llegaban hasta el final, solo eran masturbaciones o sexo oral lo que hacían, además de besos sucios y caricias descaradas. No hablaron al respecto, pero Mew dio por hecho que eran amigos sexuales o algo parecido, y aunque no era lo que esperaba el estaba bien con eso.
-Mew, ¿A ti no te han picado los mosquitos?. - pregunto el moreno saliendo del baño sin la camiseta puesta.
-No, ninguno, ¿a ti si?. -
-Tengo algunas marcas rojas en el pecho. - el pálido levanto la vista y pudo ver claramente las marcas rojas que el mismo había hecho la noche anterior, pero supuso que el menor estaba siendo sarcástico. -¿Vemos una película esta tarde?. - le preguntó cambiando de tema, pues no le dio mucha importancia.
-Oh, claro, eso me gustaría. - respondió gustoso.
-Bueno, comprare algunos snacks saliendo de clases. - el menor se coloco la camisa y metió varias cosas a su mochila.
-Muy bien, compra algunas bebidas también. - le comentó el mayor antes de que saliera de la habitación.
-Lo haré, nos vemos más tarde. - dijo despidiéndose para finalmente irse a clases.
Mew no tenía clases ese día así que se quedó en la habitación a componer algunas canciones para su banda. No tenía nada a que salir, pues Gulf compraría las botanas para esa tarde. Acomodo su cama, para que ahí pudieran recostarse a ver la película con su laptop.
-¿Estas listo para una noche de películas?. - pregunto divertido el menor cuando entro a la habitación.
-Claro, ya tengo la laptop preparada, solo para buscar que película ver, acomode mi cama y encendí el aire acondicionado para que la habitación no esté tan calurosa. - comento Mew sorprendiendo al recién llegado por todo lo que había hecho.
-Aquí están los snack y las bebidas.- Gulf le extendió la bolsa del super mercado y este la tomo para comenzar a sacar las cosas. - Pero antes que nada, voy a ponerme ropa más cómoda. - comenzó desabotonandose la camisa bajo la atenta mirada de su rommie.
El moreno sabía que su compañero sentía algo por el, o al menos eso creía, pues si no era eso no entendía porque lo había ayudado tanto después de su ruptura y le había dicho cosas tan lindas, sinceramente a él no le molesta por el contrario se sentía bien de tener a alguien que tuviera tantos detalles con él, que se preocupara por el. Comenzó a darse cuenta de que buscaba la atención del pálido, saber donde estaba y si necesitaba algo, así que el también comenzó a tener pequeños detalles con su rommie.
-¿Que película te gustaría ver?. - pregunto Mew para dejar de concentrarse en el tentador cuerpo de su compañero.
-¿Te gusta Marvel?. - pregunto el menor comenzando a quitarse el pantalón, para quedar finalmente en boxers y buscar un short y una camiseta más cómodos.
-S-si. - titubeo un poco el mayor. Adoraba el cuerpo del moreno, esa piel suave y deliciosa que había saboreado en varias ocasiones le estaba llamando.
-Hay que hacer un maraton, mañana es sábado así que podemos dormir hasta tarde. - dijo Gulf emocionado colocándose finalmente la ropa.
-Buscaré las películas. - Mew se concentró en buscar lo que verían y una vez lo hizo se acomodo en la cama, dejando suficiente espacio para que el otro se acostara. Coloco la laptop entre ellos y los snacks en el mueble de a un lado.
Dos películas pasaron entre risas, comentarios sobre lo que sucedía y comer demasiado. Mew estaba completamente absorto en la película hasta que el peso de algo en su hombro lo hizo girar. Pudo ver la hermosa cabellera de su compañero recargada en el, se había dormido a mitad de su tercer película.
-¿Quién dijo que quería un maraton?.- pregunto divertido en un tono bajo para no despertar al menor.
Mew apago la película y se acomodo de forma que Gulf estaba recostado sobre su brazo, con su aliento chocando en su cuello.
-Eres tan hermoso. - dijo acomodando unos cabellos que tapaban la cara de su rommie. - ¿Estaría mal que ahora sea yo el que comience?. - se preguntó a sí mismo. Hasta ahora Gulf siempre habia iniciado sus calientes encuentros.
Tener tan a su merced a su compañero del que estaba terriblemente enamorado no estaba ayudando a su autocontrol.
Sintiendo el deseo apoderarse de su cuerpo bajo su cabeza hasta encontrar esos labios que tanto le gustaban. Lo beso despacio, queriendo memorizar lo suave de estos, hasta que lentamente comenzó a sentir que era correspondido, el moreno estaba moviendo sus labios al mismo ritmo que el.
En su adormecimiento Gulf atrapó el cuello del más alto y lo acerco más para profundizar el beso, uniendo sus lenguas de forma placentera. Mew se acomodo sobre el sin separarse de sus labios, metió una de sus manos dentro de la camiseta del menor y acaricio todo su torso. Tomando más confianza de que Gulf no estaba alejandolo, bajo sus besos hasta el cuello del menor, pues sabía que ese era su punto débil. El moreno soltó unos bajos gemidos de placer, hasta que Mew mordió su piel algo fuerte haciéndolo despertar por completo. Poco a poco fue reaccionando y dándose cuenta de lo que estaba sucediendo.
-Mew. - aquello que debía sonar como reclamo salio como un gemido pues el mencionado no se apartaba de su cuello. Gulf se asusto un poco al sentir una mano dentro se su camiseta haciendo círculos alrededor de su pezon. - Mew, detente. - dijo en voz algo baja, estaba en shock, no entendía que estaba pasando. Pero el mayor no lo escuchaba. - Mew para ya. - casi grito al ver como este comenzaba a subir su camiseta.
-¿Que sucede?. - pregunto confundido el mayor, acomodándose mejor para verlo a la cara.
-¿Que crees que estas haciendo?. - pregunto el menor con la voz algo temblorosa. El quería a su compañero, pero no estaba listo para hacer esa clase de cosas con el.
-¿No tienes ganas hoy?. - cuestionó haciendo un puchero.
-¿Como que hoy?, Mew no estoy listo para hacer esas cosas contigo. - Gulf lo aparto y se sentó en la orilla de la cama.
-Prometo que no haré nada más de lo que ya hemos hecho. - justo la primera vez que Mew se había decidido a ser el quien se le insinúa y salía mal.
-¿A que te refieres con lo que hemos hecho?.- pregunto Gulf muy confundido.
-Gulf, no se que sucede hoy contigo, no creí que te molestara si esta vez era yo el que comenzaba, siempre has sido tu el que me besa y todo eso, pero supongo que.... - no puedo terminar de explicar el mayor.
-¿Que rayos estas diciendo?. - grito el menor. Mew comenzaba a creer que todo había sido producto de su imaginación, pero el había visto las marcas en el cuerpo de Gulf esa mañana, estaba casi 100% seguro de que era real.
-Nosotros hemos estado tu sabes, teniendo encuentros sexuales por dos semanas, así que no pensé que te molestaría si lo hacía hoy. - comentó el mayor.
-¿Como es eso posible?, tal vez estas confundió, seguro lo soñaste o algo así, yo no recuerdo haber hecho nada contigo. - dijo Gulf algo alterado por toda la extraña situación.
-Estoy seguro de lo que pasó, además tienes esas marcas rojas en tu pecho y se perfectamente que yo las hice ayer.- explicó. El menor se levantó la camisa y vio las marcas que esa misma mañana había visto, las cuales pensó eran picaduras de mosquito y recién notaba que no eran piquetes si no chupones.
-Eso es imposible, yo no recuerdo nada. - los ojos de Gulf comenzaron a cristalizarse, se sentía tan aturdido. -¿Que es lo que he hecho mientras era sonámbulo?.- pregunto con la voz algo quebrada. El sabía que había tenido episodios de sonambulismo cuando era más joven, pero hacía años que estos no se manifestaban.
-¿Eres sonámbulo?.- pregunto Mew sorprendido y el otro asintió. Ahora todo tenía sentido, el mayor se sintió mal, sentía que se había aprovechado de su compañero y su extraña condición. -Hace dos semanas subiste a mi cama a mitad de la noche, me besaste y me pediste tener sexo. - comenzó a explicar, podía ver la cara de Gulf en shock. - No llegamos lejos, solo te toque y use mi boca, es lo único que hemos hecho. - Gulf estaba soltando pequeñas lágrimas, y Mew no podía sentirse más culpable. -Lamento haberte tocado, yo no sabía que no estabas consiente, perdoname.- se disculpo sinceramente.
-Después hablaremos de esto, iré a casa el fin de semana. - dijo Gulf tratando de sonar tranquilo. El mayor no pudo detenerlo, no se sentía con el derecho de hacerlo.
Mew se quedó tirado sobre su cama, viendo al techo y pensando en los acontecimientos recientes. ¿Era siquiera posible que alguien tuviera sexo sin recordarlo?. De repente recordó que el padre de su mejor amigo era psicólogo, tal vez el podría ayudarlo.
Mew
Kao, necesito tu ayuda.
Kao
¿Que sucede?
Mew
¿Puedo ir a ver a tu padre mañana?
Es urgente.
Kao
Claro, le diré que te haga espacio en su agenda.
Mew
Gracias, nos vemos mañana.
El pálido trato de consiliar el sueño, aunque fue terriblemente difícil pues no dejaba de pensar en lo que le había hecho a Gulf. Si estaba enamorandolo, con eso definitivamente ya no tenía ninguna oportunidad.
Al día siguiente Mew despertó temprano, su cita era a las 12, así que se dio una ducha y se vistió rápidamente para llegar a hablar con su mejor amigo primero.
-Mi padre esta con un paciente, después de el podrás pasar. - comentó Kao cuando lo vio entrar al lugar.
-Está bien. - dijo tomando asiento al lado de su amigo.
-¿Puedo saber cual era la urgencia?.- pregunto Kao curioso.
-Recuerdas que te conté que Gulf y yo eramos algo así como amigos sexuales. - el chico que escuchaba atento asintió. - Pues resulta ser que el no recuerda nada, me dijo que era sonámbulo. - explicó.
-Creo saber que es lo que tiene, pero mejor pasemos con mi padre. - Kao se puso de pie al ver que el consultorio estaba libre ya.
-Buenos días Mew. - lo saludo el señor tan pronto lo vio entrar.
-Buenos días.- devolvio el saludo dándole una reverencia.
Por pedido de Mew, su mejor amigo se quedo dentro del consultorio con ellos.
-Bueno la cosa es que quería saber si es posible que alguien tenga sexo mientras es sonámbulo. - dijo directamente Mew.
-¿Te ocurre a ti o a alguien cercano?.- pregunto el señor.
-Es mi compañero de cuarto. -
-Bien, en realidad es posible, más si esa persona ya tiene antecedentes de sonambulismo. - comenzó a explicar el psicólogo. -Este tipo de sonambulismo se denomina "sexsomnia", puede ser ocasionado por estrés, alguna ruptura o que la misma atracción que tiene por una persona despierte su deseo, es muy raro que ocurra. - terminó de decir.
-¿Hay algo que se pueda hacer para que ya no se despierte así por las noches?. - pregunto Mew.
-Puede tomar pastillas para dormir, pero eso no asegura que dormirá toda la noche, realmente su cuerpo no resiente sus desveladas porque en su mente nunca ocurrieron, el cree que durmió toda la noche.- Mew estaba sorprendido, no tenía ni idea de que aquel trastorno o enfermedad existía, era la primera vez que escuchaba de él.
-¿Entonces simplemente seguirá ocurriendo?. - no quería que pasara otra vez, ya se sentía muy mal con lo que había hecho al saber que su compañero no estaba consciente.
-Puede que se detenga cuando su vida esté más estable, menos estrés, una pareja estable, esos factores pueden ayudar.- comentó el señor. - Sería bueno que pudieras traer al chico aquí para hablar con él. -
-Lo intentaré, muchas gracias por hacerme un espacio en su agenda. - agradeció haciendo una reverencia al señor.
-No es nada hijo, otro día pasa a cenar con nosotros, a mi esposa le agradaría verte. - los padres de Kao eran muy lindos con el, pues llevaban años de amistad.
-Uno de estos días los visitare, nos vemos. - dijo para salir finalmente.
-Habla con el Mew, mañana debe volver, explicale la situación y dile tus sentimientos, así el entenderá porque hiciste todo aquello. - dijo su amigo palmeandole el hombro en señal de apoyo.
-Lo intentaré, gracias por todo Kao. - Mew le dio un abrazo a su amigo y se fue de regreso a su habitación.
El resto del día y la mañana siguiente estuvo pensando como hablar con Gulf respecto a su "enfermedad", no quería perder su amistad por ese pequeño error. Pero entenderia si el moreno no quería verlo, pues en el fondo el también sentía que se había aprovechado de su compañero.
El reloj marcaba las 3 de la tarde cuando la puerta de la habitación fue abierta, mostrando la figura tímida del moreno, Mew dejó de respirar por un momento, no lo esperaba tan temprano de regreso.
-Hola. - saludo el moreno viendo hacia el piso.
-Hola Gulf. - devolvió el saludo Mew algo timido.
-Quiero pedirte una disculpa. - dijeron ambos chicos al mismo tiempo y se rieron por lo bajo despues.
-¿Puedo hablar yo primero?.- pregunto el menor tímidamente.
-Claro, ven, sientate.- respondió el mayor palmeando el lugar al lado de donde el estaba sentado sobre su cama.
-Quiero disculparme. - dijo Gulf sentándose al lado de su compañero. - Yo he sido sonámbulo desde que tengo memoria, pero hace dos años ocurrió una situación similar a la que pasó contigo, mi mejor amigo se había quedado a dormir en mi casa y me desperté a mitad de la noche, no recuerdo nada pero el dijo que lo bese, el me empujó y caí de la cama, golpeandome la cabeza con un mueble, por eso tengo una cicatriz aquí. - señaló una pequeña marca en su frente. -El doctor dijo que podía ser que estuviera estresado, otra opción era que me gustara mi amigo y ese deseo de estar con él se manifestaba por las noches. - terminó de explicar.
-Sexsomnia. - dijo el mayor, Gulf volteo a verlo con sorpresa.
-¿Como lo sabes?. - pregunto confundido.
-Fui con un psicólogo ayer y le hable de lo sucedido, estaba muy confundido, quería saber que te ocurría y el dijo que era eso, me dio la misma descripción que tu. - respondió algo apenado el castaño.
-Pues si, tengo eso, lamento todo lo que te hice pasar Mew. - dijo Gulf tomando las manos de su compañero. -Se que yo te gusto. - el mayor lo vio asustado.
-¿Desde cuando lo sabes?. - pregunto apartando su vista del menor.
-Cuando me consolaste porque Phoom terminó conmigo, ese día dijiste cosas muy lindas sobre mi, después me trajiste el desayuno, me has dado pequeños obsequios desde entonces, y creo que comencé a sentirme bien con eso, me gusta pasar tiempo contigo, creo que por eso ocurrió esa incomoda situación, enserio lo siento.-comento Gulf rememorando ese día que había llorado entre los cálidos y fuertes brazos de Mew.
-No tienes que disculparte, es algo que no puedes controlar. - dijo el castaño acariciando la mejilla del contrario suavemente. - Soy yo el que debe disculparse, debí hablarlo contigo la primera vez que ocurrió, además tomé ventaja de tu momento de tristeza para acercarme a ti. - la tristeza era notable en la voz de Mew.
-Me agrado que estuvieras ahí para mi cuando estaba triste, me gustaba que me abrazaras cuando estaba decaído y me dieras pequeños regalos. - el peli negro coloco su mano sobre la del mayor que seguía en su mejilla. -Te estabas ganando mi corazón conforme lo ibas sanando de todas las cosas feas que dijo mi ex. - Mew sonrió feliz al escuchar esas palabras. -Lamento haberte dejado sin darte una explicación, entre en panico, nunca había llegado tan lejos con alguien, necesitaba pensar, hable con mamá y ella me recordó la situación de hace un par de años. - terminó de explicar el moreno.
-Lo entiendo, debe ser algo difícil para ti. - Mew lo atrajo a un cálido abrazo que este correspondió gustoso.
-Te quiero. - dijo Gulf de repente escondiendo su cabeza en el cuello del castaño.
-Yo también te quiero Gulf. - correspondió Mew acariciando el suave cabello negro y rebelde del chico entre sus brazos.
-Me gustas Mew, enserio me gustas mucho y me odio por todo lo que te hice pasar, debiste estar muy confundido. - el peli negro se acomodo y lo tomó de las mejillas.
-Deja de disculparte, no es tu culpa cariño. - el apodo romántico salió de sus labios sin siquiera pensarlo y Gulf sonrió al escucharlo. - ¿Quisieras tener una cita conmigo?. - pregunto tímidamente el castaño.
-Creo que podemos saltarnos eso, tal vez no recuerdo todo lo que hemos hecho, pero se que tengo algo especial contigo.- comenzó a decir el moreno. - Así que, ¿porque no eres mi novio? . - dijo en un tono muy tierno.
-¿Estas seguro que eso quieres?. - pregunto inseguro el castaño.
-Se que nuestro comienzo fue algo extraño, pero estoy seguro de que me gustas y yo te gusto a ti, así que si, quiero ser tu novio. - responde Gulf con seguridad.
-Me encantaría ser tu novio, nada me gustaría más que eso. - ambos sonríen felices y es el menor el que se encarga de acercarse hasta tomar los labios ajenos en un dulce beso. Sus labios tocandose suavemente y sus lenguas rozandose tímidamente.
Se podría decir que una extraña enfermedad los había unido, pero en realidad ellos ya estaban enamorados mucho antes, aquello solo fue un pequeño empujón para poder exteriorizar todos esos sentimientos que estaban reprimiendo.
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Hello, capitulo extraño again.
Este está inspirado en un manga coreano que se llama "de habitación a habitación", en el cual hablan de la Sexsomnia y pasan una situación similar a la que escribí, solo que más detallada.
Espero les haya gustado y la apoyen tanto como a las otras historias.
Muchas gracias a todas por sus comentarios y todo su apoyo. Wuv u💙💙💙💙
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