Irresistible

Narra Mew

Irresistible, así se veía Gulf ante mis ojos. Podrá sonar un poco exagerado pero en estos dos años que llevamos de conocernos solo lo adoro más cada día que pasa. No fue difícil caer por los encantos de ese niño adorable y gruñon, el que al comienzo no hablaba con nadie y se alejaba de todos, pero una vez en confianza se transformaba en un bebé tierno y cariñoso.

-¿En que piensas P'Mew?.- preguntó Gulf sacándome de mis pensamientos,  estaba sentado cómodamente entre mis piernas.

-Nada importante. - dije recargarndo mi cabeza en su hombro.

Para todos los del staff era normal vernos tan juntos que parecíamos ser una sola persona, así que ya no tratábamos de ocultar que estábamos cómodos y felices con el otro a nuestro lado de esta forma.

Desde hace unos meses Gulf comenzó a ser el que da inicio al contacto físico, los abrazos y hasta a devolver los coqueteos que yo decía, en algunos eventos actuaba posesivo y celoso de que mostrará piel. Ninguno comentó nada respecto a los obvios cambios que estaba habiendo en nuestra relación y no le dimos importancia, solo nos dejábamos llevar por los sentimientos que poco a poco fueron naciendo.

Fue un día de invierno cuando por fin me di cuenta que podría dar mi vida por ese pequeño que se había apoderado de mi corazón.

Estaba afuera del estudio de baile donde tendríamos una clase para nuestro futuro fan meeting, me senté en la cera a esperarlo cuando lo vi del otro lado de la calle, al verme me sonrió y agitó su mano en forma de saludo, obviamente le devolví el saludo. Lo vi comenzar a cambiar a través de la calle, escuche el ruido de un auto y al voltear pude divisar una camioneta que venía a toda velocidad,  mi corazón se aceleró y sin pensarlo dos veces corrí hasta el empujandolo fuera del camino y pude sentir el fuerte golpe del automóvil contra mi. Lo último que escuché fue los gritos de Gulf pidiendo ayuda.

Cuando desperté estaba en una habitación de hospital, tenía un respirador, una intravenosa y me dolía hasta abrir los ojos, traté de moverme levemente pero solo solté un quejido de dolor.

-Quedate quiero, te lastimaras más.- esa voz cálida y con tono preocupado me hizo obligarme a abrir los ojos y ahí estaba Gulf, con la mirada cansada y los ojos rojos y húmedos, suponía que llevaba tiempo llorando.

-Necesito.... Agua... - dije como pude y el rápidamente tomo una botella con un popote, la acerco a mi una vez quito el respirador de mi cara. - Gracias. - el sonrió triste.

-No me agradezcas nada, es mi culpa que estés aquí. - dijo entre sollozos, tomaba mi mano suavemente y podía sentir como algunas de sus lágrimas caían ahí.

-No es tu culpa, lo volvería a hacer con tal de que estés bien. - dije acariciando su mano con la poca energía que tenía.

-Tendré que compensarte por esto, aun no puedo creer que casi das tu vida por salvarme de mi propia estupidez. - sollozo aún más fuerte después de decir aquello.

-A cualquiera le pudo haber pasado. - dije para tranquilizarlo un poco. La verdad yo también estaba algo aturdido por la situación, había puesto su vida frente a la mía, no sabía hasta que punto llegaba mi amor por el hasta ahora. Lo más importante era que el estaba bien. -Estas bien tu y yo estoy vivo así que deja de sentirte mal. -

-Pero ¿que tal si no hubieras tenido tanta suerte?, maldición no quiero pensar en que te pude haber perdido por lo idiota que soy. - por alguna razón trataba de no verme cuando hablaba como si se sintiera mal de verme así. -¿como podría seguir sin ti a mi lado?, ¿como piensas que iba a vivir sin la persona que amo?. - dijo sollozando aún más fuerte que antes y sus palabras me dejaron en shock. Sabía que el me quería pero nunca habíamos hablado de amor y menos de ser algo más que hermanos que se quieren, no quería ilusionarme pero sentía que su comentario iba más allá de nuestra actual relación.

-Nunca te voy a dejar. - dije tomando su barbilla para poder verlo directo a los ojos. -Pero entiende que no me perdonaría si algo te pasara, no soportaría verte en este estado, estoy dispuesto a sufrir si con eso puedo protegerte a ti. - Gulf dejo de llorar me aun se miraba triste. Se acerco y dejo un suave beso en mis labios, confirmando asi que el también me veía como algo más que su P'.

-Dios... Te amo demasiado, tonto. - dijo riendo levemente. - No puedo creer que hicieras eso por mi, nadie había hecho tantas cosas por mi como tu.- confesó.

-Yo también te amo y porque lo hago es que quiero que estés bien, así sea a costa de mi dolor. - podía ver en sus ojos ese sentimiento de amor y aprecio que demostraba lo conmovido que lo dejó la situación. - Por cierto, ¿cuánto tiempo llevó aquí?. - recordé que ni siquiera sabía cuánto pase así y con Gulf aquí fue lo último que pensé.

-Llevas casi 1 día completo aquí. - me respondió, vaya eso era demasiado y por su estado casi podría decir que el había estado aquí junto a mi todo este tiempo.

-Dime que no has estado aquí todas esas horas. - el se encojio de hombros y sonrió.

-No esperabas que te dejara solo ¿verdad?, no podria estar tranquilo si me iba y quería estar aquí cuando despertaras. - confesó sinceramente y yo sonreí enternecido. -Demonios, no le he dicho a tu familia que ya despertaste, me dejaron quedar aquí dentro con la condición de que les dijera cuando despertaras, en un momento vuelvo. - dijo apresurado y me dio un beso rápido para después salir corriendo de la habitación.

Volvió con mi mamá, mi hermana y un doctor para que revisara como estaba, no volvimos a hablar sobre las confesiones de amor que nos acabábamos de hacer, pero de reojo lo podía ver recargado en la puerta viéndome atentamente y cuando volteaba a verlo el se giraba a otro lado y se sonrojada, era muy lindo.

Cuando me dieron de alta Gulf venía a casa todos los días a ver como estaba, me ayudaba a comer y moverme hasta el baño y cosas por el estilo, dijo que se ocuparía de mi hasta que estuviera mejor porque había sido su culpa, y nunca pude hacerlo entender que no era su culpa así que simplemente me deje cuidar.

En realidad no tenía que hacer mucho, solo llevaba un yeso en el pie y tenia algunos moretones muy feos en el abdomen. Los doctores dijeron que había tenido mucha suerte ya que la camioneta pudo frenar un poco y así el golpe no fue tan duro, los chicos del auto se hicieron responsables de sus actos y tendrían que pagar un pequeño cargo penal.
Por obvias razones nuestros ensayos de baile se dejaron de lado hasta que me recuperará, así que no tenía porque preocuparme por eso.

-Gulf ¿que tal si te quedas aquí conmigo?. - le pregunté el tercer día que vino a mi casa. -Si vas a estar viniendo tan temprano y yendote tan tarde, ¿porque mejor no te quedas aquí?. - propuse, la verdad era que quería pasar más tiempo con el, quería que durmiera a mi lado y ser lo primero que veía al despertar. Pero sobre todo quería tenerlo aquí para poder aclarar la situación del hospital, aún no habíamos tocado ese tema y cada que lo intentaba el me sacaba otra cosa, pero teniéndolo aquí no tendría escapatoria.

-No lo sé p', no quiero molestar, a parte no hay donde dormir. - dijo algo inseguro.

-Estas aquí casi todo el día, no creo que sea un problema que te quedes y perfectamente puedes dormir aquí conmigo, ven. - dije invitándolo a acostarse conmigo. Se levantó dudoso del sofá y se acerco a la cama, se recostó cuidadosamente. - ¿Ves?, cabemos perfectamente aquí. -

-Pero me da miedo lastimar más tu pierna P'. - dijo en tono preocupado y yo lo abrace por la cintura acercandolo a mi, por lo que el se sonrojo.

-¿Que tengo que hacer para que aceptes bii?.- pregunte haciendo un puchero y el se rio.

-No se boo, ¿que me puedes dar?. - contraataco en tono coqueto.

-Para ti bii lo quieras. - respondí acariciando su mejilla.

-Besame. - dijo sin más y me sorprendí por lo directo que fue.

-Wow eso es inesperado. - fue lo único que pude decir, sabía que ya nos habíamos besado el día del hospital pero el nunca era así de directo así que aún estaba en shock.

-Esta bien si no quieres hacerlo boo. - dijo el con un tono algo decepcionado.

-No es eso bii, cada que te veo muero por besarte, solo me tomaste por sorpresa, no se donde dejaste a mi Gulf timido y que se sonroja hasta las orejas pero me encanta que seas directo. - tan pronto termine de decirlo termine la distancia que había y lo bese tiernamente, solo nuestros labios encajando perfectamente, lo tomé del cuello y lo apegue más a mi, hasta que nos separamos por el aire que nos empezaba a faltar.

-Boo, enserio me gustas y se que no volví a tocar el tema del día del hospital pero es que me daba miedo me rechazarás, se que es tonto porque con todo lo que hiciste podría ser obvio, pero ya sabes como soy. - comento enterrando su cabeza en mi cuello para que no pudiera verlo.

-Gulf he estado tratando de sacar el tema estos para decirte que tu también me gustas y que enserio adoro cada parte de ti, para mis ojos eres la persona más irresistible, no tengas ninguna duda de que te amo demasiado como para dar la vida por ti. - escuche sus sollozos perderse contra mi cuello. - ¿Porque lloras?. - dije tratando de alejarlo de mi cuello para poder verlo. Tenía la cara roja y las lágrimas caían por sus mejillas, se veía tan adorable.

-¿Como puedes ser tan perfecto?, eres malditamente hermoso, amable y protector, ¿como rayos no podría amarte si diste casi tu vida por mi?. - dijo llorando más aún.

-¿Entonces si no te hubiera salvado no estarías aquí conmigo así?. - lo vi seriamente.

-Probablemente no, puede que si no tuvieras esa cosa en tu pierna estaríamos haciendo otras cosas. - su tono coqueto me dejo sorprendido, hace un segundo estaba llorando y ahora estaba siento un desvergonzado total.

-Como puedes pasar de estar llorando a decir esas cosas, enserio que me vas a volver loco. - el río por mi comentario y se recostó en mi pecho.

-¿Esto en que deja nuestra relación p'?. - pregunto de repente.

-Me gustaría que seas mi novio. - levantó la cabeza al escuchar lo que dije y me dio una de esas preciosas sonrisas que solo me dedicaba a mi.

-Y a mi me encantaría aceptar ser tu novio. - respondió divertido y me beso, por obvias razones no hizimos nada más que eso, pero al menos el se quedo conmigo todo el tiempo que duró mi recuperación.

Tres semanas después de eso fuimos a que me quitaran el yeso que tenía en la pierna, obviamente Gulf fue conmigo. Íbamos regreso a casa, como siempre yo era el que manejaba y en medio teníamos nuestras manos juntas.

-Bii yo se que te pedí que solo te quedaras conmigo hasta que me quitaran el yeso, pero ahora no se si seré capaz de estar lejos de ti. - dije rompiendo el silencio y de reojo pude ver que volteo algo asombrado.

-Boo enserio disfrute estas tres semanas juntos, pero no crees que podría ser raro que nos vean tanto tiempo juntos, no me gustaría causar escándalos. - me respondió algo triste. Yo también era consciente de eso, pero no quería estar lejos de él y no me importaba si el mundo no lo aceptaba, con que nuestras familias nos apoyarán era más que suficiente.

-Gulf nuestras familias ya saben sobre nosotros y nos aceptan, ya pasaste tres semanas en mi casa, supongo que las fans ya sospechan para este punto.- dije tratando de animarlo pero el no reaccionó. -Bii no te voy a dejar por nada en el mundo, te lo dije hace unas semanas podría dar la vida por ti si es necesario, porque enserio quiero estar contigo. - termine de decir mientras estacionaba el auto afuera de mi casa para recoger las cosas de Gulf.

-Lo se boo, se que estarás para mi todo el tiempo, pero entonces ¿piensas que nos quedemos en casa con tu madre y tu hermana?. - sonreí, eso era una aceptación y no podía ponerme más feliz, aunque sinceramente no sabía donde nos podríamos quedar.

-Vaya en eso no pensé. - comente divertido y el también se río. - Podemos buscar un departamento justo ahora y cuanto antes nos mudamos juntos. - pensé rápidamente y el se estiró hasta acariciar una de mis mejillas con su mano.

-Me parece perfecto, adoro la idea de vivir contigo. - dijo apoyando mi idea, se levantó un poco del asiento hasta estar cerca de mi y me beso, tal y como lo había estado haciendo las tres semanas anteriores.

Exactamente hoy se cumplía un año de que eramos novios oficialmente y un poco menos de que estábamos viviendo juntos en un bello departamento cerca de las casas de nuestros padres para poder visitarlos seguido.

Para este punto ya no era un secreto que Gulf y yo vivíamos juntos, menos que estábamos en una relación. Nos fue imposible no besarnos en la calle o en algún evento cuando nos pedían vernos a los ojos tan de cerca, no todo fue bonito al principio, pero afortunadamente con el tiempo todo mejoró y ahora teníamos muchas fans que nos apoyaban.

Tenía planeado darle una sorpresa a Gulf por nuestro aniversario, llevaba dos meses escribiendo una canción para el, inspirada en todo lo que me hacía sentir y que quería que el supiera. Aprovechando que el estaba en clases adorne el departamento con muchos globos rojos y blancos, un letrero de luces con la frase "Te amo Bii". Le había preparado una cena romántica, con vino y velas, todo parecía sacado de película y debía agradecerle a mi hermana por la ayuda, si no puede que todo hubiera terminado en desastre.

Me vestí con un pantalón y una camisa negra, bastante elegante y me senté con una guitarra en mano, me sitúe justo en el sofá frente a la puerta y a mis espaldas quedaba el letrero de luces. Gulf llegaría como en 20 minutos, ya que salía hasta las 7 el día de hoy.

Narra Gulf

Tenía tantas ganas de llegar al departamento, no había visto a Mew más que en el desayuno y justo hoy que es nuestro aniversario es cuando más cosas tenía que hacer. Quería verlo y darle el anillo que había comprado.

Antes de salir de casa había alistado una pequeña mochila con ropa más elegante que el uniforme de la facultad; era un pantalón rosa claro y una camisa de botones blanca, también me peine un poco y me puse unos zapatos más formales. Conduci rápidamente y cuando abrí la puerta del departamento casi me tiro en llanto al suelo.

Había un letrero de luces en la pared sobre el sofá en el cual Mew estaba sentado con su guitarra en las mano, se miraba más guapo de lo normal y cuando me vio sonrió y comenzó a tocar la guitarra.

-Yo encuentro tus labios, tan besables
Y tus besos, inolvidables
La punta de tus dedos tan tocables
Y tus ojos, irresistibles- su voz era tan tranquilizante y preciosa, que junto con la letra de la canción me hizo estallar en llanto. Me acerque hasta el y me senté a su lado en el sofa, alargue mi mano hasta tocar tiernamente su mejilla y me sonrió.

-Está en tus labios y tus besos
Está en tu tacto, y la punta de tus dedos
Está en todas las cosas y otras cosas más
Que hace que seas tú
Y tus ojos, irresistibles. - terminó de cantar y aparto la guitarra para finalmente acercarse a mi y abrazarme. - Feliz aniversario bii. - susurro en mi oído.

-Feliz aniversario boo. - respondi de la misma forma, usando esos apodos que habíamos empezado a usar a causa de las fans y que tanto cariño les habíamos tomado. - ¿Que canción fue esa? No la reconocí. - pregunté después de un rato y el se separo para poder verme.

-La escribí especialmente para ti. - dijo para después darme un tierno beso en los labios.

-¿Enserio?, ahora voy a llorar más, ¿como puedes ser tan perfecto?. - el se rio y nos volvimos besar.

-La hice pensando en todas las cosas que amo de ti y para decirte que, aunque tu no lo creas, para mi eres irresistible, simplemente eres todo lo que siempre quise y haría todo por ti.- explicó Mew y yo lloré aún más, el me jalo suavemente hasta dejarme sentado sobre sus piernas y me abrazo. - Te amo demasiado. - dijo en tono dulce.

-Yo también te amo, amo cada parte de ti y adoro saber que todo tu eres mio. - dije comenzando a darle besos en el cuello y lo pude escuchar suspirar.

Me acomode a horcajadas sobre el y coloco sus manos en mis muslos, lo rodee del cuello con mis brazos y lo bese, primero comenzó tierno hasta que su lengua se adentro en mi boca y todo se intensificó más y más. Nos mordíamos y chupabamos demostrando todo ese deseo que el otro despertaba en nosotros.

-Bii, la cena se va a enfriar. - dijo separándose un poco de mi.

-Podemos calentarla más tarde, ahora quiero que me hagas el amor. - le respondí coquetamente y el sonrió, para después volver a besarme tan intensamente como antes.

Comencé a mecerme sobre el y pude sentir como se ponía cada vez más duro y soltaba suaves jadeos. Sus manos se paseaban por mi trasero y de vez en cuando lo apretaba haciéndome soltar bajos gemidos.

-¿Porque eres tan guapo y sexy?. - dije pasando mi mano por su pecho sobre la camisa negra. -Te ves tan bien vestido de negro y con esa camisa que se ajusta tan bien a tus músculos.- con manos hábiles fui soltando cada botón hasta abrirla por completo. -Pero creo que te ves mejor sin ella. - sabía que Mew se excitaba cuando le decía cosas así y esta vez no fue la excepción.

-Y tu te ves mejor desnudo sobre las sábanas rojas de la cama y gimiendo mi nombre. - contrataco el y un gemido de excitacion salió de mi.

Metio sus manos dentro de mi camisa y con una de sus manos comenzó a jugar con mis pezones, apretandolos y tirando de ellos, sacándome más de un gemido.

-Vamos a la habitación. - le pedí entre jadeos.

-Lo que mi pequeño desee. - respondió tomándome fuerte por los muslos y yo enrede mis brazos y piernas en el. Me cargo tan fácil como siempre y entre besos me llevo hasta la cama, me recostó gentilmente y antes de hacerlo el se deshizo de su camisa.

Se posiciono sobre mi con una de sus piernas entre las mías y mientras me besaba desabotonaba mi camisa, una vez lo hizo me levante un poco para poder sacarmela por completo y una vez hecho lo atraje hacia mi para sentir todo su pecho cálido contra el mio.

Mew retiro mis pantalones junto con mi ropa interior rápidamente y se puso de pie para hacer lo mismo con su ropa, yo me dedique a admirar la bella vista que me estaba dando, ver ese cuerpo blanco y lleno de músculos, ese hombre era un dios griego, era el pecado en persona.

-Justo así es cuando te ves mejor. - dijo sacándome de mi ensoñación.

-Ven aquí rápido, quiero sentirte. - rogué y el sonrió ante mi evidente necesidad.

Volvió a colocarse sobre mi y ambos gemimos cuando comenzó a mover sus caderas, haciendo que nuestros miembros se rozaran. Entre besos y mordidas me preparo, lo cual no llevo mucho porque lo habíamos hecho el día anterior y el anterior a ese, en definitiva eramos unos adicto al sexo. Se adentro lentamente en mi y comenzó a dar lentas embestidas.

Nunca tendría suficiente de ese hombre, de sentirlo duro y caliente en mi interior mientras me besa y deja chupones por todo mi cuerpo. Con el tiempo sus embestidas se hicieron más rápidas y todo en la habitación se volvió una nube de gemidos, jadeos, gruñidos y el sonido de nuestros cuerpos chocando.

-Ya casi bebé. - dijo en mi oído para después morderme el lóbulo de la oreja.

-Mas....Mew....- era todo lo que podía decir. Unas embestidas más y me corrí manchando mi abdomen y un poco el de el.

Narra Mew

Gulf se corrió gimiendo mi nombre en alto y la hermosa vista de su cuerpo brillando por el sudor y temblando, más la oprecion de su entrada hizo que inevitablemente me corriera dentro de él, callando mis gemidos en un beso algo desordenado.

Me recoste a su lado tratanto de regular mi respiración al igual que el, frente a frente admirando al otro como si fuera lo más precioso del mundo.

-Oh yo aún no te doy tu regalo. - dijo una vez recuperó un poco su respiración.

-Todo tu eres mi regalo Bii. - dije pasando mis manos y piernas sobre el para atraerlo a un apretado abrazo que el por supuesto correspondió.

-Pero te compre un regalo, ¿a caso no lo quieres?. - pregunto divertido.

-Claro que si. - respondi rápidamente y el se separo de mi para ir en busca de sus pantalones rosados.

Puede que el no lo sepa pero no podía resistirme a él, verlo caminar desnudo por la casa o mientras nos bañamos, simplemente todo el es demasiado irresistible, a mis ojos es la persona más preciosa que he visto.

Una vez encontró sus pantalones lo vi volver con una pequeña caja en su mano y se volvió a recostar a mi lado.

-¿Me vas a pedir matrimonio?. - pregunte en juego.

-¿Te molestaría si lo hiciera?. - preguntó de regreso.

-Bii no hay nada que quisiera más en el mundo que casarme contigo y tenerte para toda la vida, aunque tendríamos que casarnos fuera de Tailandia. - respondo sinceramente y el se río divertido, a lo cual lo mire un poco extrañado.

-Boo yo también quisiera casarme contigo, aunque tuviéramos que ir a otro lugar a hacerlo, pero no te estoy pidiendo matrimonio, solo es un anillo que compre porque me gustó para ti. - comentó sinceramente y yo hice un puchero triste. -Te prometo que algún día te propondre matrimonio. - me consoló y me dio un beso.

-¿Y quien dice que no seré yo el que te lo pida?. - pregunte riendo y el también lo hizo.

-Boo luego te preocupas por eso, abre el regalo. - dijo entregandome una cajita de terciopelo azul. Al abrirla había un anillo de plata con algunas piedras azules. -Dice algo por dentro. - aviso Gulf.

-MewGulf Is Real. - leí la frase y me reí. - ¿Enserio le grabaste eso?. - dije entre risas.

-¿No te gusta?. - preguntó haciendo un puchero triste.

-Me encanta. - respondí acercándome a darle un beso. - Solo me parece algo gracioso por la frase que elegiste, es una frase que nos han dicho mucho las fans y que han hecho tendencia muchas veces desde el comienzo y es bastante especial para mi. - aclare y el me sonrio.

-Creo que deberíamos ir a bañarnos y después ir a cenar, porque me muero de hambre, no he comido nada desde medio día. - dijo Gulf poniéndose de pie.

-Fuiste tu quien quiso dejar la cena para después. - le dije burlandome.

-Tu no te negaste tampoco, y no me arrepiento de eso. - contraataco.

-Nunca dije que me arrepentía, nunca podría arrepentirme de hacerte el amor. - dije poniéndome de pie y tomándolo entre mis brazos.

Nos bañamos con amor y delicadeza, tal y como siempre lo hacíamos, tallando el cuerpo ajeno con suavidad. Los besos nunca faltan cuando estábamos en esa habitación, bajo el chorro de agua.

-¿Me dejas vestirte?. - pregunto Gulf una vez estábamos fuera del baño.

-Si quieres. - respondí. Era algo que hacíamos de vez en cuando, nos parecía algo muy cursi e íntimo, y también había una paz en dejar que el otro nos ayudara a vestir, no lo se, era algo que sin darnos cuenta notamos que nos gustaba hacer y nos hacía sentir más unidos.

Lo vi ir por la ropa que estaba usando cuando llego al departamento.

-¿Quieres volverme a poner eso?. - pregunte cuando ya estaba cerca de mi.

-Si, me gusta verte vestido de negro, te hacer ver más sexy. - dijo mientras me ayudaba a ponerme los boxers.

-¿Con que me veo sexy de negro eh?. - pregunte divertido y el solo negó mientas reía.

-Siempre te ves extremadamente guapo. - respondió terminando de cerrar los pantalones para seguir con la camisa. Fue delicado al pasar mis brazos por la camisa y antes de abotonarla se acerco a besar mi pecho.

-No juegues conmigo. - advertí y el se alejo sonriendo de forma traviesa, después termino de cerrarla, aunque dejó algunos botones de hasta arriba abiertos, dejando a la vista una parte de mi pecho. Se alejo un poco de mi y se quito la toalla que tenía alrededor de la cintura, quedando totalmente expuesto ante mi. - ¿Te divierte jugar así conmigo eh?. - pregunte y el solo sonrio de lado. -Estoy a nada de volver a tirarte a la cama y hacerte mio. - dije cerca de su oído y pude verlo temblar, cuando se dio vuelta para ir en búsqueda de su ropa que aún seguía en el suelo, le di una nalgada y volteo rápidamente.

No dijimos nada más, lo vestí igual de delicadamente como el lo hizo. Una vez vestidos salimos camino a la cocina para finalmente comer.

Y ahí estaba cumpliendo un año de hermosa relación con aquel chico que con sólo verme me robaba el aliento. Ese iresistible chico me había robado el corazón y no dudaría en dar mi vida por el otra vez si fuera necesario, porque lo amo y esperaba algún día poder pedirle que fuera mi esposo.

 
 
 
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Hola, no se si se nota que he estado tratando de hacer las historias más largas, espero les estén gustando.

Me gusto bastante escribir ente capitulo y espero que a ustedes también.

Gracias a los que apoyan y comentan, Wuv u💙💙😂

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top