⚠Este es un pequeño especial que hice en base a una foto que esta a mitad del capitulo.⚠

Dos años juntos era suficiente tiempo para que Gulf ya no supiera que regalarle a su novio. Mew siempre había sido cariñoso, demostrándole su amor incluso antes de que formalizaran su relación, aunque los medios no lo sabían.

Al ser ambos personas del medio artísticos, salir como una pareja era muy complicado, mas allá de su privacidad era porque la homosexualidad nunca había sido bien vista en Tailandia.

Aun así ellos disfrutaban de su relación en la privacidad de su condominio. Compartían ese acogedor lugar desde ya hace un año, casi justo después de que terminaron las promociones de la primera temporada de TharnType.

-P'Mild.- dijo el moreno a través del teléfono, llamando a uno de los mejores amigos que había hecho tras grabar la serie.

-¿Que sucede, nong?.- preguntó Mild rodando los ojos pues cuando Gulf usaba ese tono de súplica sólo significaba que le pediría algo.

-¿Que puedo darle a P'Mew de navidad?.- preguntó, pues enserio no tenia ni idea de que mas darle. -Ya le he regalado ropa, joyería, flores, chocolates.-

-Envuélvete en un moño, seguro le encantaría.- dijo el más bajo de forma burlona.

-P'Mild.- se quejó el moreno sonrojándose hasta las orejas.

-Tranquilo, nong, estaba jugando.- dijo Suttinut riendo escandalosamente por la tímida reacción de su amigo. -Solo prepara una cena romántica o una noche de películas con el, seguro amara cualquier cosa que le des.-

-Supongo que sí.- dijo inseguro el menor.

-Ya llegue, tua-eng.- anunció Mew entrando al condominio.

-Bueno esa es mi señal de irme, nos vemos amigo.- Mild cortó la llamada y Gulf finalmente fijó su atención en su novio.

-¿Como te fue, auan?.- preguntó el pelinegro acercándose a su novio para besar sus labios cortamente. (auan=gordito)

-Bien, pero te extrañe.- Mew dejó caer su bolso y rodeó la cintura del menor, pegándolo a su cuerpo, escondiendo su cara en el cuello de su pequeño, aspirando su tierno olor a bebé.

-Yo también te extrañe.- Gulf siempre se sentía feliz cuando su hombre lo sostenía entre sus fuertes brazos.

-Además fui a conseguir tu regalo de navidad.- dijo el mayor para generar curiosidad en su novio.

-¿Enserio?.- preguntó sorprendido el menor, aunque navidad ya estaba a dos días, por lo que obviamente ya debían tener los regalos listos.

-Si, así que lo pondré debajo del árbol.- Mew saco una caja decorada y la situó debajo del árbol que habían decorado días atrás. -No vayas a abrirlo mientras no estoy.- advirtió señalando a su curioso novio.

-Pero phi.- se quejó Gulf haciendo un tierno puchero y el pálido volvió hasta él para abrazarlo y darle un tierno beso, disipando su frustración al no saber el regalo que le tenía.

-Solo son unos días, tua-eng, se paciente.- pidió el castaño sonriendo a su hermoso novio.

-Esta bien.- dijo Gulf rendido, aunque su frustración era más porque él no le tenía un regalo a su hombre y este ya tenía el suyo.

"Supongo que la idea de P'Mild no es tan mala después de todo" pensó el moreno esa noche, mientras seguía intentando encontrar alguna idea en internet.

🎄

Al día siguiente Gulf se dedicó a comprar las cosas que necesitaría para el regalo de Mew. En realidad no era un gran gasto monetario, pero aún era un poco tímido para hacerlo.

-Tu puedes, Gulf, auan amara tu regalo.- se dijo así mismo viendo los materiales que necesitaba en la mesa de la cocina. -Supongo que debería medir el listos y esas cosas.- dijo inseguro el moreno.

Uso papel transparente para envolver su cuerpo por sobre la ropa y usó el enorme listón para amarrarlo en su cintura, haciendo un gran moño al final, a un lado de su cadera.

-Supongo que así se verá bien.- dijo viéndose en el espejo. De repente su celular sonó.

-Hola, tua-eng.- saludó Mew con ternura, como siempre.

-Hola, auan.- saludó de regreso el menor, nervioso al pensar que su novio podría llegar en cualquier momento y él estaba con su regalo casi puesto.

-¿Ya cenaste, lindo?.- preguntó el pálido.

-Aún no, auan.- respondió el menor soltando el moño rojo que lo rodeaba.

-¿Quieres que lleve algo para que cenemos?.- preguntó Mew.

-Eso sería genial.- aceptó Gulf sonriendo porque su novio siempre se preocupaba por él, por mantener su pancita llena.

-Muy bien, en unos minutos llego.- dijo el mayor antes de colgar la llamada.

Gulf se apresuró a quitar el papel transparente que lo rodeaba y guardó todo en una bolsa, la cual escondió debajo de la cama, fuera del alcance de su novio.

Toda la cena fue tranquila, platicando sobre su día y cosas sobre sus futuros proyectos.

-¿Qué haremos mañana, tua-eng?.- preguntó Mew curioso, pues aún no habían hablado de cómo celebrarían navidad.

-Que tal si preparo una linda cena para nosotros y después vemos qué hacemos.- dijo el moreno nervioso por no revelar nada de su regalo para el mayor.

-Eso suena perfecto y por la noche te dejaré abrir tu regalo.- agregó el pálido sonriendo. -Puede que llegue como a las 5 de la tarde mañana.-

-Eso está bien, yo estoy libre desde mediodía, así que tendré tiempo de preparar una linda cena para nosotros.- afirmó el menor igualmente feliz de poder pasar otra navidad junto a su amoroso novio.

-Eres el mejor, tua-eng.- Mew se puso de pie y rodeó la cintura de su novio por la espalda, recargando su cabeza en el hombro del menor. -Te amo.-

-También te amo, auan.- Gulf volteo su cabeza y beso los suaves labios del mayor, de forma dulce y lenta.

🎄

Finalmente había llegado navidad, 25 de diciembre. El moreno había cocinado pasta italiana porque sabía que a su novio le encantaba y con el tiempo él le había tomado gusto, por lo que aprendió solo por su auan.

Cuando el reloj marcó las 4 de la tarde, Gulf corrió a la ducha y se lavó con dedicación, depilando cada parte de su cuerpo pues le gustaba sentir su piel suave y sin vellos.

Al salir se secó y arregló su cabello con el secador. Decidió no usar maquillaje pues Mew siempre comentaba que le gustaba ver su cara sin nada, como era naturalmente.

Con pena sacó la bolsa negra de debajo de la cama, sacando el papel transparente y el moño. Se situó frente al espejo y envolvió su cuerpo en el papel, dejándolo en su lugar con el listón enorme, haciendo el gran moño de un lado de su cuerpo.

-Se ve bien.- comentó el moreno inseguro viéndose con detalle. El papel transparente dejaba ver su completa desnudes y eso lo ponía tímido, casi nunca se mostraba de esa forma descarada ante su novio. -El te ama, le gustara.- se dijo así mismo, caminando finalmente hasta la sala.

Se situó junto al árbol y se arrodillo de lado, de costado a la puerta. El reloj marcaba las 4:50 cuando reviso en la pared, lo que significaba que Mew llegaría en cualquier momento.

-Tua-eng, ya lleg...- las palabras del pálido se detuvieron ante la hermosa vista a mitad de la sala de su condominio.

-Feliz navidad, auan.- dijo sonriendo completamente sonrojado.

-¿Qué es esto, tua-eng?.- preguntó el pálido dejando su maleta y su saco colgado en el perchero.

-Es tu regalo de navidad.- respondió Gulf nervioso.

-Eres el regalo más hermoso que he recibido.- suspiró el mayor completamente enamorado de la sensual vista frente a él. -¿Puedo abrir mi regalo?.-

-Adelante, tua-eng, desenvuélveme.- aceptó el moreno reuniendo todo su valor para ver a su novio a los ojos.

-Te amo tanto.- Mew se arrodilló frente a su pequeño y tomó su rostro para besarlo con todo el amor de su corazón.

El beso comenzó dulce y tierno, con sus labios moviéndose en sincronía. Poco a poco la intensidad subió, se mordían y succionaban, sus lenguas se enredaron con gusto y placer.

-Vamos a quitar este hermoso moño.- el castaño soltó el listón y el papel se soltó un poco. -Tu cuerpo es tan hermoso.- jadeó excitado, sintiendo su miembro crecer entre sus pantalones.

Gulf no podía decir nada, se sentía cohibido al estar desnudo frente a su novio, cuando este estaba completamente vestido.

-Recuéstate, tua-eng.- Mew se inclinó sobre él, haciéndolo retroceder hasta que el menor quedó totalmente acostado sobre la alfombra. -Gracias por ser tan valiente y darme este hermoso regalo.- el castaño beso las sonrojadas mejillas del menor, bajando a su cuello, donde besó y mordió la morena piel, dejando marcas rojas.

-Ah auan.- suspiró Gulf rodeando con sus brazos el cuerpo fornido sobre él.

-Te amo.- con besos recorrió el pecho del menor, jugando con los duros pezones en su boca, mordiéndolos de forma juguetona, sintiendo la erección del menor contra su ropa.

-Te amo mucho.- jadeó el pelinegro cuando su miembro fue envuelto en la cálida mano de su hombre, quien comenzó a acariciarlo lentamente.

-¿Te preparaste para mi, bonito?.- preguntó Mew besando la suave pancita frente a él.

-No, quiero que tú lo hagas.- respondió el menor sonrojándose hasta su pecho.

-Con gusto voy a preparar tu lindo cuerpo para mi.- el pálido bajó aún más y dio juguetonas lamidas en la erección del menor.

-Ah Mew.- gimió el moreno arqueando la espalda con placer, pues le encantaba sentir la húmeda lengua de su novio en su cuerpo.

-¿Qué tal si humedezco este estrecho pasaje?.- preguntó con voz ronca el castaño, paseando su lengua por el perineo del moreno.

-Sí.- gimió con gusto al sentir la humedad en su entrada.

El pálido paseo su lengua por todo alrededor de la fruncida entrada, para después adentrar su húmedo músculo, tomando a su novio por los muslos, manteniéndolo abierto para él.

-Ah Mew, me encanta.- repetía Gulf una y otra vez, amando la sensación en su parte baja. Añadió al pasaje uno de sus largos dedos. -Si.- la espalda del menor se separó de la alfombra cuando su próstata fue levemente rosada por el dedo de Mew.

-Sigue gimiendo para mí.- pidió el pálido con su voz ronca de la excitación.

Mew adentro otro dedo, abriéndolos para aflojar más el estrecho pasaje que siempre se sentía igual de apretado cuando rodeaba su miembro.

-Mas, por favor.- rogó el menor acariciando el cabello castaño del mayor.

-¿Que quieres, tua-eng?.- preguntó dulcemente el mayor, mordiendo los suaves muslos de su pequeño, dejando posesivas marcas rojas.

-A ti, te necesito a ti.- pidió entre gemidos de puro placer.

-Entonces déjame quitar mi ropa.- Mew dejó una ruda mordida en uno de los muslos del menor.

Gulf se quedó recostado sobre la alfombra, jadeando, admirando como el dios griego que tenía por novio se desvestía frente a él. La camisa blanca cayó al suelo, dejando ver el fornido pecho del mayor, posteriormente pudo ver la dura longitud que quería en el ser liberada, seguido de las largas piernas de su hombre.

-Te ves tan guapo.- no se contuvo de decir el menor, acariciando lentamente su miembro.

-Pues tu te ves espectacular.- el pálido volvió a situarse entre las piernas de su novio y tomó sus labios con pasión, acomodando su miembro para adentrarlo lentamente.

-Mgh.-los gemidos de Gulf se ahogaban entre el sucio beso que compartían. -Más.- pidió cuando Mew comenzó con los empujes lentos.

-Déjame disfrutar de tu cuerpo, de tu estreches.- dijo el castaño moviéndose de forma lenta, marcando más el pecho del menor con sus dientes. -Adoro tu cuerpo.-

-Ah Mew.- gemía cada que el mayor daba en su próstata de una forma lenta pero profunda. -Te amo.- suspiraba con gusto, clavando sus uñas en la amplia espalda del pálido.

-Te amo mucho, tua-eng.- sin detener los lentos empujes, Mew tomó el miembro del moreno y lo tocó al mismo ritmo que se movía.

-Oh auan.- gimió Gulf encantado, rodando los ojos en señal de placer.

A Mew le encantaba volver loco a su novio, por lo que comenzó a besar detrás de la oreja del moreno, el punto más sensible del pequeño, quien se retorció de puro gozo.

-Ah sí, Mew.- gimió el moreno corriéndose, manchando sus pechos, apretando el duro miembro que lo seguía penetrando.

-Gulf.- gimió Mew no resistiendo más la opresión, llenando a su novio con su cálida esencia. -Eres el mejor regalo, tua-eng.- murmuró el mayor saliendo con cuidado de su pequeño, alejándose solo para ver cómo su semen salía del menor.

-Espero te gustara mi regalo.- dijo Gulf sonriendo deliciosamente cansando.

-Vamos al sofá, hace frío y no quiero que enfermes.- Mew tomó a su novio en brazos y lo dejó en el sofá. -Traeré tu regalo.- esas palabras despertaron a Gulf, haciéndolo sentarse emocionado.

Cuando el pelinegro finalmente tuvo la caja en sus manos la abrió como niño pequeño, dejándolo ver un girasol dentro.

-¿Un girasol?.- preguntó el moreno confundido, sintiendo a su novio sentarse detrás de él y taparlos a los dos con una cobijita.

-Mira la nota.- susurró el mayor y Gulf rápidamente buscó el papel en la caja. -Este es el primer girasol que te di aquella noche que te confesé mi amor, pensé que sería lindo que tuvieras este recuerdo para siempre así que pedí que lo metieran en resina, así nunca morirá, como nuestro amor.- leyó la tarjeta el menor, la cual estaba escrita con la letra del mayor.

-¿Qué dices?, ¿te gusta?.- preguntó Mew besando su mejilla.

-Es hermoso, auan, te amo.- Gulf se dio vuelta entre los brazos del pálido y beso sus labios con amor.

-También te amo, mi mejor regalo.- murmuró el pálido feliz de pasar otra navidad junto a su bello novio. -Feliz navidad.-

-Muy feliz navidad.- dijo el moreno completamente enamorado.

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Este es un especial muy cortito, pero vi la foto de una chica y no me resistí. Con mis pocas habilidades de Photoshop le puse la carita de Gulf.

Espero les gustara y lo disfrutaran en comparación con el capitulo algo triste de ayer.

Este es un regalo más para ustedes, porque son lo mejor de mi vida y amo mucho leer sus comentarios.

Feliz navidad a todos. Espero se la pasen de lo mejor. Wuv u💚💚💚💚